sábado, 4 de julio de 2015

Nacho Gutiérrez Müller se despide del VRAC

“Se ha sufrido mucho y se han ganado más, fruto del trabajo y sacrificio de todos... Sin duda mi balance es totalmente positivo y me voy feliz de que hayamos logrado cosas que se recordarán a través de los años”.

El hispano-argentino Nacho Gutiérrez Müller. Foto: www.valladolidrac.com
Ignacio Gutiérrez Müller deja el VRAC para iniciar un nuevo futuro profesional. El club quesero agradece su compromiso durante todos estos años y le desea la mejor de las suertes.


Por la puerta grande pero con un sabor agridulce. Le hubiese gustado despedirse sobre el césped, donde ha brillado y aportado como el que más durante las últimas temporadas. Una inoportuna lesión le cortó la progresión en plena temporada y, cuando demostraba el gran nivel que ofreció en Valladolid.

Ignacio Gutiérrez Müller, Nacho Müller, dice adiós al VRAC. O hasta luego, que nunca se sabe. Las puertas de su casa siempre estarán abiertas. El hispano-argentino ha dejado estas palabras de despedida:

“Gracias de verdad.

Siempre es duro, pero ha llegado el momento de decir adiós. Emprender nuevos proyectos personales son los que me sitúan lejos del VRAC, de Valladolid y de Pepe Rojo. Muchos seguramente lo sabían y era algo que venía meditando desde hace tiempo.

Se me hace verdaderamente difícil despedirme después de haber vivido tanto en esta maravillosa ciudad. Esta es mi casa y es así como siento al VRAC. Es aquí donde he terminado mis estudios, he crecido como persona y me he desarrollado como jugador. Sin duda grandes años que jamás olvidaré.

Parece que fue ayer cuando llegué al club, ya hace unos cuantos años de esto, y puedo asegurarles que han sido de los mejores de mi vida. Grandes amistades y maravillosos momentos de rugby que me llevo para toda la vida.

Deportivamente, qué les voy a contar... Se ha sufrido mucho y se han ganado más, fruto del trabajo y sacrificio de todos... Sin duda mi balance es totalmente positivo y me voy feliz de que hayamos logrado cosas que se recordarán a través de los años.

Cómo no, agradecer a aquellas personas y amigos que confiaron desde un primer momento en mí para venir al club, de formar parte de él y de vivir con esta gran familia, el VRAC. Aquí están mis amigos, mis hermanos, con los que he compartido tantas batallas, viajes, llantos y alegrías. Vivencias inolvidables que nunca se borrarán del recuerdo. Sin ellos esto no hubiera sido lo mismo.

No me puedo olvidar de esta gran afición quesera que siempre está: haga frío, viento, perdamos o ganemos; a la cantera de niños y a todos los entrenadores, directivos... En definitiva, a todos vosotros que hacéis que esto sea una familia. Creo que no hay palabras suficientes para agradecer a este club todo lo que me ha dado.

Me siento honrado y orgulloso de haber podido defender estos colores.

Gracias familia, gracias VRAC”.