El
técnico catalán defiende su legado en el Real Valladolid: “Mi equipo y yo hemos
conseguido el objetivo que nos habían propuesto, que no era otro que agarrar
este gran toro por los cuernos y asentar las bases de crecimiento y la
estabilidad que se espera de un equipo con dieciocho jugadores nuevos y el
cuarto presupuesto más bajo”.
Herrera abandona el banquillo de Zorrilla. Foto: www.realvalladolid.es |
Paco Herrera se ha despedido
este lunes en la sala de prensa de Zorrilla subrayando que ha sido “muy feliz”
en Valladolid. “Mi decisión estaba tomada al 80% antes del partido ante el
Cádiz. Nos quedamos a nada de lograr el objetivo que yo había marcado porque
soy muy exigente conmigo mismo y creo que lo mejor es que me vaya”.
Herrera ha leído
una carta de despedida:
“Me voy sintiéndome
parte del Real Valladolid y me voy porque creo que es lo correcto.
Me voy orgulloso de
los jugadores, algunos jóvenes y que, si siguen así trabajando, darán muchas
alegrías. Me voy agradecido por el trato del presidente, con el que he tenido
una relación correcta y por momentos perfecta, y de todos los trabajadores del
club, cuyo comportamiento ha sido excepcional. Especialmente a los que, día a
día, han sido nuestros compañeros. Agradezco su profesionalidad.
Hemos tenido
momentos difíciles y, entre todos, los hemos superado. Me voy tranquilo y feliz
porque mi equipo y yo hemos conseguido el objetivo que nos habían propuesto,
que no era otro que agarrar este gran toro por los cuernos y asentar las bases
de crecimiento y la estabilidad que se espera de un equipo con dieciocho
jugadores nuevos y el cuarto presupuesto más bajo, al que le ha faltado nada
para que el objetivo que yo me marqué se cumpliera.
Me voy tranquilo
porque hay base suficiente para que el club consiga el siguiente paso. No me
olvido que el año pasado el equipo se salvó en la penúltima jornada. Ahora hay
una base sólida, joven y ambiciosa que conoce el camino. Deseo al Real
Valladolid todo lo mejor. Mucha suerte y Aúpa Pucela”.