“El
fútbol solo usa los pies. El baloncesto y el balonmano solo las manos. El rugby
exalta los pies y las manos: es un deporte completo, luego perfecto”, defendía
el sacerdote francés, que llegó a Valladolid a finales de la década de los
cincuenta para introducir un nuevo deporte y una nueva filosofía deportiva.
El padre Bernés, con una camiseta blanquinegra firmada por los jugadores. Foto: www.rugbyelsalvador.com |
El padre Georges
Bernés, antiguo profesor del colegio El Salvador, en el que fue impulsor de la
introducción del rugby y artífice de la creación del club vallisoletano, ha
fallecido en Toulouse (Francia), a la edad de 96 años.
Bernés llegó a
Valladolid para estudiar el Camino de Santiago y las peregrinaciones en
Compostela en 1959. La familia Enciso le ofreció dar clases en el colegio a
partir del curso siguiente. La asignatura que impartiría sería la conocida
entonces como Gimnasia, algo que supuso un impulso definitivo a lo que acabaría
siendo el germen del club.
Con la existencia
de diversos equipos deportivos en el centro de la plaza de San Pablo, Bernés
tanteó la posibilidad de crear uno de rugby. Es conocida la anécdota con la que
sugirió a Jaime Enciso, por aquel entonces director del colegio, que le
comprase un balón oval, con una frase que ha quedado escrita con letras de oro
en la historia blanquinegra: “Si me compras un balón de rugby, haré un equipo.
Y la armaremos”.
También existe otra
conocida máxima del padre Bernés, que ejemplifica a la perfección su deseo de
crear un equipo de rugby y el sentimiento del club vallisoletano desde sus
inicios:
“El fútbol solo usa
los pies. El baloncesto y el balonmano solo las manos. El rugby exalta los pies
y las manos: es un deporte completo, luego perfecto. Es educación enseñar a los
chicos a no correr a lo loco, sino a pasar la pelota, a ver el lado abierto, a
fintar, a aprovechar al compañero mejor colocado, a combinar, a sacrificarse
para la realización de un ensayo. En una palabra, a hacer del ensayo una obra
colectiva de arte. Es educación enseñar a los chicos a jugar limpiamente con todo
su cuerpo, armoniosamente, según el desarrollo de sus músculos y de su fuerza
física, pero también en fineza, en flexibilidad, en rapidez, en destreza. Es
educación enseñar a los chicos a inventar nuevas tácticas, a jugar con su
inteligencia y no como brutos. Es educación enseñar a los chicos el espíritu de
combatividad, el espíritu de equipo, la lealtad, la caballerosidad”.
Incluso en estos
últimos años de su vida, ya bastante enfermo, seguía interesado en todo momento
por la actualidad del que siempre fue su club, desde que a su llegada al colegio
El Salvador pidiese que le comprasen un balón oval para hacer de sus jugadores
los mejores atletas del colegio.
Noticia de www.rugbyelsalvador.com