sábado, 29 de agosto de 2015

Jeffren y el Real Valladolid oficializan un final necesario

Ambas partes acuerdan la rescisión del último año de contrato del extremo hispano-venezolano. El jugador no cuajó en Zorrilla y fue perdiendo, paulatinamente, peso en la plantilla. Ya no se incorporó a los entrenamientos del grupo de Garitano en la pretemporada.

Jeffren, en su debut con el Real Valladolid ante el Elche. Fotos: www.realvalladolid.es
Era cuestión de días. Jeffren Suárez (Ciudad Bolívar-Venezuela, 1988) ya está oficialmente desvinculado del Real Valladolid. Ambas partes, que estaban condenadas a entenderse desde el final de la pasada temporada, han sellado un acuerdo positivo y necesario para el club y el jugador: la rescisión de la última temporada de contrato del extremo hispano-venezolano. La solución se produce apenas dos días antes del cierre del mercado de fichajes.


La salida de Jeffren estaba más que cantada desde que el jugador hispano-venezolano no se reincorporara al equipo con el comienzo de la pretemporada. La misma situación que Marc Valiente, Bergdich, Jesús Rueda y Omar. Y el mismo desenlace, aunque con una diferencia que afecta al futbolista. Jeffren, al que se ha relacionado con el Tenerife, donde se crió, y recientemente con el Antalyaspor turco, se marcha del Real Valladolid sin contar, de momento, con un nuevo equipo.

No había vuelta atrás. El Real Valladolid no incluyó hace una semana a Jeffren en la relación oficial de jugadores de la primera plantilla antes de la primera jornada del campeonato. Sin dorsal y sin haber entrenado con el grupo de Garitano a lo largo de la pretemporada, la situación del extremo hispano-venezolano tenía una única salida: la rescisión del contrato, que concluía el próximo 30 de junio de 2016.

Jeffren se convierte, de esta manera, en la decimoquinta baja del Real Valladolid con respecto a la pasada temporada. El extremo hispano-venezolano, fichaje del mercado de invierno de la temporada 2013/14, en concreto en el comienzo del mes de febrero, se une a un numeroso grupo compuesto por Marc Valiente, Jesús Rueda, Bergdich, Omar, Peña, Javi Varas, Hernán Pérez, Roger, Jonathan Pereira, Sastre, Chus Herrero, Óscar Díaz, Raúl Fernández y Túlio de Melo.

El paso de Jeffren por Valladolid no ha cumplido las expectativas. “Vengo a ayudar al Real Valladolid y a triunfar, claro que sí. Mi etapa en Portugal ha sido mala, pero vivo el presente y, para mí, es maravillloso estar aquí”, valoraba el canterano del Barça tras incorporarse en febrero de 2014 al equipo dirigido entonces por Juan Ignacio Martínez. Jeffren, junto con el serbio Mitrovic, reforzó en el mercado de invierno a un Real Valladolid que empezaba a verle las orejas a la Segunda División.

Las lesiones, la cruz de Jeffren. En la imagen, se retira lesionado en su mismo debut.
Jeffren se duele tras una nueva lesión, esta vez ante el Tenerife en el pasado año.
Jeffren era un fichaje arriesgado. El jugador, una eterna promesa de la Masía que inscribió su nombre como goleador en el famoso 5-0 del Barça de Guardiola al Real Madrid de Mourinho, no había triunfado en el fútbol portugués en el Sporting de Lisboa (2011-2014). Jeffren, al que durante su carrera siempre le ha faltado carácter, no justificó la confianza del club lisboeta, que pagó 3,75 millones por su fichaje. Las lesiones, una constante cruz en su carrera, tampoco le dejaron. 

A Zorrilla llegó un Jeffren con ganas de reivindicarse tras dos temporadas y media más que discretas en el Sporting de Lisboa, con 24 partidos de Liga (cinco goles), tres de Copa, cuatro de la Copa de la Liga y ocho de la Europa League. Pobre balance para un jugador con un buen cartel en la Masía. Jeffren aterrizó en Zorrilla sin haber disputado ni un solo minuto oficial en toda la temporada 2013/14. Toda una incógnita. Jeffren y el Real Valladolid se arriesgaron con un contrato de dos años y medio.

La apuesta, no obstante, arrancó mal desde el principio. Jeffren debutó con la camiseta blanquivioleta el 9 de febrero de 2014. Era el revulsivo esperado. El Real Valladolid perdía en Zorrilla (0-1) ante el Elche en un duelo directo en la lucha por la permanencia. Salió tras el descanso por Víctor Pérez. El extremo hispano-venezolano debutó con ganas, aportando velocidad y verticalidad por la banda. Asistió al colombiano Osorio para que marcara. Zorrilla se ilusionaba con Jeffren hasta que el pesado y mojado césped pasó factura al hispano-venezolano, sin ritmo de competición. 

Primera lesión grave: rotura de grado II en el recto anterior de la pierna derecha. Un mes de baja. Jeffren no fue el revulsivo esperado. El Real Valladolid descendió a Segunda con una aportación escasa del canterano blaugrana: once partidos (cinco como titular) con cero goles. El sueco Larsson, con mayor brega, le mandó al banquillo. Jeffren estaba aún muy lejos de su mejor forma. Pero no había ansiedad. A fin de cuentas, el fichaje de Jeffren buscaba más un rendimiento a medio plazo que inmediato.

Jeffren, en la primera jornada de la Liga 2014/15, ante el Real Mallorca.
Rubi, tras la lesión de Roger, probó a Jeffren como delantero.
El problema fue que tampoco hubo rendimiento en el medio plazo. Jeffren estaba llamado a ser uno de los jugadores claves en el Real Valladolid de Rubi para pelear por el ascenso a Primera. Asumió el reto: “Voy a dar todo de mí y voy a correr como si fuera un juvenil”, prometió en la pretemporada. Un jugador desequilibrante en la categoría de plata. Jeffren cumplió en la primera jornada del campeonato ante el Mallorca. Era el camino. Jeffren se echó el equipo a la espalda en el arranque de la Liga. 

Pero resultó un espejismo. Las dudas (y las lesiones) no tardaron en volver. Jeffren perdió su sitio en el once tras solo cinco jornadas. Otra lesión muscular (una microrrotura de fibras en el aductor izquierdo) y otro mes de baja. Jeffren no encontraba la regularidad necesaria para crecer como jugador. Bergdich le ganó la partida en la banda derecha. Rubi no tiró, en cambio, la toalla con Jeffren. Con la ausencia por lesión de Roger, le probó como delantero. Al hispano-venezolano, le faltó gol para consolidarse en el once.

La participación de Jeffren se redujo drásticamente con el paso de las jornadas, en especial en la segunda vuelta con la aparición en el mercado de invierno del paraguayo Hernán Pérez. Jeffren, que había perdido ya la confianza de la afición, se había convertido en un suplente habitual de Rubi. Era ya un jugador amortizado en Zorrilla. Rubi ni siquiera contó con Jeffren en el playoff de ascenso ante la UD Las Palmas. Cerraba su segunda temporada en el Real Valladolid con 36 partidos (uno de Copa), veinte como titular, cinco en la segunda vuelta. Jeffren anotó tres goles.

Un bagaje insuficiente para prorrogar la estancia de hispano-venezolano en el Real Valladolid. Jeffren, como en el Sporting de Lisboa, no había ofrecido lo que se esperaba de él. El ciclo estaba agotado para ambas partes. Tras un verano marcado por las conversaciones para rescindir el contrato, Jeffren abandona finalmente el Real Valladolid con la carta de libertad a coste cero. En Zorrilla, no funcionó.