sábado, 5 de enero de 2019

Tres meses sin ganar en Zorrilla

El Real Valladolid arranca el año con cinco puntos sobre el descenso pero con unos números discretos como local, con dos empates y dos derrotas consecutivas en los cuatro últimos encuentros. Los blanquivioletas, con las bajas de Luismi, Joaquín e Ivi, reciben al Rayo Vallecano, penúltimo en la tabla, en un choque clave para alejarse de la zona baja. Míchel recupera a Kakuta y Medrán, pero tiene dos bajas: Elustondo y, sobre todo, Imbula.


2018 fue un año histórico para el Real Valladolid.

Por muchos motivos:

-El regreso a Primera, con un espectacular final de temporada y un aplastante playoff de ascenso.

-El relevo en la presidencia, con todo un icono mundial del fútbol como el brasileño Ronaldo Nazário como nuevo máximo accionista del club.

-El impulso del banquillo, con Sergio González, con contrato hasta junio de 2020, como principal artífice de los éxitos deportivos.

-El compromiso y el rendimiento de la plantilla, con tres canteranos (Calero, Toni y Anuar) y un grupo inexperto en Primera pero con nivel suficiente para competir con garantías en la élite.

-La ilusión de la afición, con una recuperada conexión con el equipo que se ha reflejado en las gradas de Zorrilla con un récord de abonados, incluida una lista de espera.

Tras un histórico 2018, el Real Valladolid arrancará este sábado (13 horas, beIN Sports) el nuevo año deportivo en Zorrilla ante el Rayo Vallecano. Con el listón muy alto y con importantes expectativas, pero también con la necesidad de dar continuidad a todo lo conseguido en los últimos meses.

“Lo que estamos viviendo es algo mágico. El trabajo de los futbolistas es bárbaro. Eso ha llamado la atención de la ciudad y la gente está volcada con nosotros. Queremos conservar esta alegría y para eso tenemos que seguir haciendo las cosas bien. Nuestra afición es un refuerzo muy importante”, ha agradecido Sergio González.

El regreso a los entrenamientos tras el parón navideño ha desbordado las gradas de los Anexos, con la presencia de más de dos mil aficionados en los días de mayor afluencia de público. Una imagen inédita. Una imagen de club grande. Así de colosal es la ilusión que levanta este Real Valladolid en la afición blanquivioleta en el inicio de este año 2019.

El motor de la ilusión está en el césped, las piernas de los jugadores del Real Valladolid y el objetivo de la permanencia en Primera.

El Huesca ha sido el último equipo en caer en Zorrilla,
el pasado 7 de octubre. Foto: www.realvalladolid.es
La salvación no está hecha. Falta aún mucha Liga, casi media vuelta. El Real Valladolid no ha completado el trabajo. Arranca el año en medio de la tabla, duodécimo clasificado con 21 puntos, con cinco de margen sobre la zona de descenso, que abre el Athletic, precisamente el último rival blanquivioleta en 2018 con un empate de Óscar Plano en el último minuto en San Mamés. “Confiamos en que el buen ambiente no propicie la relajación. Los jugadores saben que no se pueden confiar”, ha garantizado Sergio González.

Zorrilla está siendo la gran asignatura pendiente en la primera vuelta. El Real Valladolid tiene mejores números a domicilio (trece puntos, con valiosas victorias ante el Villarreal, el Real Betis y la Real Sociedad y empates ante el Girona, el Getafe, el Celta y el Athletic) que en casa (ocho puntos). En ocho partidos, los blanquivioletas han sumado dos triunfos, dos empates y cuatro derrotas ante su público.

Un desfase acuciado en los cuatro últimos encuentros en Zorrilla. El Real Valladolid no gana en casa desde hace casi tres meses, el 7 de octubre, cuando derrotó al colista Huesca (1-0). Desde entonces, el equipo de Sergio González ha conseguido dos únicos puntos en cuatro partidos. Empató en el último minuto, con un gol de falta de Verde, ante el Espanyol e igualó a cero ante el Eibar, que jugó con diez los últimos veinte minutos por una expulsión a Arbilla. Ante el Leganés, el Real Valladolid firmó su peor encuentro del curso y cayó (2-4). En el último partido como local en 2018, el Atlético se llevó una generosa victoria (2-3) a orillas del Pisuerga.

Las exigencias del deporte de élite obligan a no relajarse desde el primer día del año. El Real Valladolid arrancará 2019 con un encuentro clave en la lucha por la permanencia y con la necesidad de mejorar su rendimiento en Zorrilla. El Rayo, penúltimo clasificado, está a ocho puntos. Una victoria blanquivioleta alejaría a los vallecanos a once. Casi un mundo. Una derrota, sin embargo, acercaría a los madrileños a cinco.

Sergio González cuenta con las bajas de Luismi, que volverá al quirófano para solucionar los problemas en el tobillo izquierdo que le tienen sin jugar desde finales de abril, Joaquín, con molestias musculares, e Ivi, recién recuperado de una lesión muscular. Cotán y Moi no han entrado en la convocatoria ante el Rayo por decisión técnica.

El Rayo, a tres puntos de la salvación, no está condenado. “Es un partido muy complicado contra un equipo que está haciendo muy bien las cosas y que tiene menos puntos de los que merece”, ha avisado Sergio González. Al Rayo, con un estilo siempre muy atrevido, le está sobrando bisoñez en la defensa: 32 goles en contra. Solo el Huesca ha recibido más. A domicilio, el Rayo ha ganado en El Alcoraz y ha puntuado en Anoeta. El resto han sido seis derrotas.

Los franjirrojos conservan a buena parte del plantel con el que ascendieron, salvo a Fran Beltrán (Celta) y Unai López (Athletic): el exblanquivioleta Raúl de Tomás (24 goles en la pasada campaña y cinco en este curso), el argentino Trejo (12 goles en el regreso a Primera), el canterano Embarba y, sobre todo, Míchel en el banquillo, toda una institución en el club (425 partidos y diecisiete temporadas como jugador en Vallecas).

El exblanquivioleta Raúl de Tomás es la referencia ofensiva del Rayo,
con cinco goles en esta temporada. Foto: Instagram Rayo Vallecano.
“El Rayo es peligroso. Tiene, entre otras cosas, a un delantero (Raúl de Tomás) por el que estuvimos peleando siete equipos. Tiene una banda derecha con Álvaro, que ha sido pretendido por grandes equipos como el Nápoles. En definitiva, cuenta con buenos futbolistas y un entrenador que les conoce bien y les ha sacado un gran rendimiento”, ha destacado Sergio González.

A pesar del puesto en la tabla, el Rayo mantiene la confianza en Míchel. Los vallecanos cerraron ya el año con mejores sensaciones y resultados. El Rayo solventó con dos victorias sus dos últimos encuentros como local en la Liga ante el Eibar (1-0) y el Levante (2-1). A domicilio, el VAR le frenó ante el Real Betis (2-0) y Courtois ante el Real Madrid (1-0). El Rayo mereció más.

Míchel ha subrayado la línea ascendente del equipo madrileño antes de viajar a Valladolid: “Estamos en fase de mejora, lo noto. Somos un equipo que tiene que ir a más y que lo que ha hecho bien en casa tiene que llevarlo fuera. Tenemos que ser capaces de ganar dos o tres partidos seguidos para no tener ese agobio de finales cada domingo”. “El equipo está muy convencido de lo que hacemos y de que vamos a salir de ahí. Estoy convencido de que así será porque lo veo en ellos”, ha sentenciado Míchel.

El Rayo será valiente en Zorrilla. “La idea es tomar la iniciativa y ser el equipo que se adelante. Si el Real Valladolid tiene el marcador a favor, es muy difícil hacerle daño”, ha incidido Míchel. “Tenemos jugadores para jugar de varias formas. Nosotros nos fijamos en nosotros mismos y en cómo podemos afrontar cada partido para que los jugadores estén en su mejor rendimiento. La idea es ser protagonistas, querer el balón, presión tras perdida y dominar el juego”.

Míchel recupera a Kakuta y Medrán. El delantero francés llevaba dos meses lesionado por problemas en la cadera. Míchel le espera con los brazos abiertos: “Para mí, Kakuta es importantísimo. Tiene que alcanzar su mejor nivel porque viene de una lesión y necesitamos al mejor Gaël, su mejor rendimiento. Tenemos que ayudarle para que sea así porque es muy necesario”. De momento, Kakuta ha ofrecido mucho menos, un gol en nueve encuentros, de lo que se esperaba en Vallecas.

En Zorrilla, no estará, sin embargo, Imbula, sancionado por acumulación de tarjetas. El belga, de origen congoleño y pasaporte francés, está siendo uno de los referentes del Rayo en esta complicada primera vuelta del campeonato. Elustondo, lesionado, y Álex Alegría, que está ultimando su salida de Vallecas, son las otras bajas más destacadas del Rayo. Míchel ha descartado a Akieme, Dorado, Sergio León, Sergio Moreno, Lass y el exblanquivioleta Javi Guerra. A sus 36 años, el malagueño apenas ha disputado media hora en esta temporada.

El Rayo mantiene la confianza en Míchel en el banquillo.
Foto: www.laliga.es
ENFRENTAMIENTOS HISTÓRICOS

Alineaciones:

Real Valladolid: Masip; Javi Moyano, Kiko Olivas, Calero, Nacho; Míchel, Alcaraz, Keko, Toni; Óscar Plano y Enes Ünal.

Suplentes: Yoel, Antoñito, Borja, Anuar, Verde, Leo Suárez y Duje Cop.

Rayo Vallecano: Dimitrievski; Advíncula, Jordi Amat, Velázquez, Àlex Moreno; Medrán, Comesaña, Embarba, Álvaro; Trejo y Raúl de Tomás.

Suplentes: Alberto García, Tito, Ba, Gálvez, Pozo, Bebé y Kakuta.

Árbitro: Cordero Vega (colegio cántabro).

Incidencias: 18ª jornada de LaLiga Santander. Nuevo Estadio José Zorrilla. Cielos despejados, con entre ocho y diez grados.