viernes, 13 de agosto de 2021

Una Liga devaluada e incendiada

Deportiva y económicamente. Sin Messi, ahora sí, tres temporadas después de la salida de Cristiano. Sin nuevas estrellas, con el Real Madrid y el Barça reforzándose a coste cero. Sin músculo financiero, con las cuentas de los clubes seriamente comprometidas con un endeudamiento neto superior a los 1.700 millones de euros. Con los grandes enfrentados a la patronal por el acuerdo con el fondo de capital riesgo CVC y con la elitista propuesta de la Superliga aparcada, que no abandonada. Y con pandemia, aún con pandemia, condicionando cualquier escenario a corto plazo.

Previa Real Valladolid 2021/22: Ronaldo baja al infierno.

Messi, en su presentación como nuevo jugador del PSG.
Foto: es.psg.fr
LaLiga Santander ya no es el mejor campeonato del mundo.

El fútbol español atraviesa un periodo de transición.

No todo son nubarrones, es cierto.

La selección ha regalado un verano de ilusión por partida doble.

Primero, semifinalista en la Eurocopa con un grupo renovado (con Busquets como único superviviente del Mundial 2010), joven (Pedri, Eric García, Ferrán Torres, Dani Olmo, Robert Sánchez, Pau Torres, Rodri, Oyarzabal y Unai Simón no han cumplido ni los 25 años), con calidad, ambición y la decidida batuta de Luis Enrique en el banquillo. Solo la campeona Italia, y en la tanda de penaltis, frenó a España en el mítico templo de Wembley. Hay motivos reales para soñar, con el Mundial de Catar a poco más de un año en el horizonte.

Después, la selección olímpica (con varios integrantes de la hornada joven de la absoluta) rozó el mismo pasado fin de semana la gloria en Tokio. Brasil, en la prórroga, se quedó con el oro.

Pero el panorama del fútbol español de clubes no es tan positivo.

La misma Eurocopa evidenció el declive de LaLiga. La pujante Premier aportó 147 jugadores al torneo. Por detrás, la Bundesliga (92) y el Calcio (75). LaLiga apenas contó con 42 representantes, ni un tercio que la Premier y apenas una decena más que campeonatos de segundo nivel como la Liga rusa (32) y la Ligue 1 de Francia (30). Ni siquiera comandó la nómina en la reciente Copa América. El Calcio, con 27 jugadores, adelantó al torneo español, con 23.

La pérdida de calidad del campeonato es un hecho incontestable. La misma selección española acudió a la Eurocopa con un plantel con mayoría de internacionales (catorce) procedentes de otras ligas (diez de la Premier, dos del Calcio, uno de la Bundesliga y uno más de la Ligue 1). Sin jugadores del Real Madrid, por primera vez en una gran cita de la selección, con el Barça ‘aguantando’ con los veteranos Busquets y Jordi Alba y el juvenil Pedri y con el Manchester City como la principal ‘cantera’ con Ferrán Torres, Eric García, Rodri y el nacionalizado Laporte.

Los resultados en las competiciones europeas tampoco sonríen. El Villarreal estrenó su palmarés conquistando la última Europa League ante el Manchester United en una agónica tanda de penaltis, tras 22 lanzamientos, pero la Champions, que absorbe casi todo, ha lanzado a la Premier, con dos finales íntegramente inglesas en dos de las tres últimas ediciones, con el Chelsea como vigente campeón. El fútbol español ha perdido la hegemonía tras el reinado del Real Madrid (cuatro títulos entre 2014 y 2018), con el Barça ganador en 2015 y el Atlético finalista en 2014 y 2016. En la pasada edición, el Barça, el Atlético y el Sevilla no pasaron de los octavos ante el PSG, el Chelsea y el Borussia Dortmund, respectivamente. El Real Madrid llegó hasta las semifinales, donde cedió con claridad ante el Chelsea. Algo está pasando en el fútbol español.

LaLiga Santander arrancará este viernes, con el Valencia recibiendo al Getafe en Mestalla, con muchas dudas deportivas y económicas, con una inabarcable sensación de orfandad, tras la salida de Messi, y con el Real Madrid y el Barça desmarcados y enfrentados con la patronal por el acuerdo con el fondo de capital riesgo CVC. Una fotografía perfecta del incierto momento del campeonato.

Messi, ahora sí, ya no está.

Tres años después de la salida de Cristiano Ronaldo del Real Madrid, el argentino, el otro gran crack mundial en los últimos quince años, ha abandonado el Barça.

Un jugador de una dimensión histórica. Máximo goleador de LaLiga (474 tantos en 520 partidos). Nueve veces campeón (más cuatro Champions, tres mundiales de clubes, siete Copas del Rey, ocho Supercopas de España y tres Supercopas de Europa). Seis Balones de Oro. Seis Botas de Oro. Premio Laureus. Único. Irrepetible. Irremplazable. Una leyenda.

LaLiga, lógicamente, se devalúa sin Messi, sin su impacto deportivo, económico y social.

España ya no es el epicentro del fútbol mundial. La pelota seguirá ‘girando’, pero mucho más despacio.


Messi, en su despedida del Barça tras más de dos décadas
en el club azulgrana. Fotos: messi.com
La salida de Messi ha sido la (pen)última bomba del verano. No era ‘esperada’. La dimisión de Bartomeu y el regreso de Laporta al palco del Camp Nou habían calmado al argentino, que hace un año sorprendió con su petición frustrada de marcharse del club de toda su vida, en el que debutó el 16 de octubre de 2004 con apenas diecisiete años.

“El curso pasado, cuando se armó el lío del burofax, estaba preparado, sabía lo que tenía que decir. Pero este año, no. Estábamos convencidos de que íbamos a seguir aquí, en casa, era lo que más queríamos”, explicó Messi el pasado domingo en su despedida del Barça. El jugador y el club habían llegado a un acuerdo para renovar su vínculo por cinco años.

El adiós del argentino explica muchos de los problemas de LaLiga.

Se va por dinero, por falta de dinero.

“No se pudo con la Liga, por la deuda del club, porque el club no quería endeudarse más (…). Yo me había bajado el 50% de mi ficha, habíamos cerrado el contrato (…). Hice todo lo posible por quedarme”, insistió Messi tres días antes de incorporarse al multimillonario PSG. El dinero ya no está en LaLiga.

A Laporta, que ganó las elecciones a la presidencia del Barça impulsado por la posible continuidad del argentino, le ha tocado dar explicaciones:

“No estoy dispuesto a hipotecar los derechos del club por nadie (…). Son 122 años de historia que están por encima de cualquier jugador, incluso del mejor jugador del mundo. No hay masa salarial suficiente”.

La continuidad de Messi era inviable:

“Ni sin Leo tenemos margen (…). Sin Messi, los salarios deportivos superan en un 95% los ingresos totales”.

El Barça es un club en quiebra.

La consecuencia de una gestión nefasta, en especial tras la escapada de Neymar al PSG hace cuatro años, con fichajes astronómicos (Coutinho –135 millones–, Dembélé –135–, Griezmann –120–, De Jong –86–, Pjanic –60–, Malcolm –41–, Paulinho –40–, Lenglet –35–, Semedo –35–, Arthur –31–…) y escasamente rentables dentro y fuera del campo. El Barça ha desembolsado más de 900 millones en altas.

Y de unas fichas desorbitadas. Al Barça le costó, por ejemplo, 138 millones el último curso de Messi con la camiseta azulgrana.

La pandemia de la covid-19 ha desnudado a la burbuja del fútbol español, aunque a algunos más que a otros.

El primer año con el virus generó “un endeudamiento neto” extra de 746,2 millones en LaLiga, hasta un total de 1.704,8 millones de euros hasta 2020, según el informe económico-financiero presentado antes del verano por la patronal. Casi un tercio (673 millones) son responsabilidad del Barça, con una deuda bruta de 1.100 millones. Si no fuera un equipo de fútbol, difícilmente podría continuar adelante.

Toda LaLiga tiene serios problemas.

Segundo título de Liga del Atlético de Simeone.
Foto: www.atleticodemadrid.com
La deuda financiera neta del Atlético asciende a 590 millones y la del Valencia a 458 millones. El Real Madrid tendrá que pagar la reforma del Bernabéu, valorada en 575 millones, a partir de 2023.

Números rojos e ingresos a la baja.

El último informe ‘Annual Rewiew of Football’ de Deloitte, una referencia en el mundo del balompié, bajó a LaLiga a la realidad. La Bundesliga ha adelantado al campeonato español en volumen de ingresos, 3.117 millones, con una caída del 8%.

LaLiga tiene sobre la mesa la decisiva renovación de los derechos de televisión, el gran maná. Los derechos audiovisuales suponen más del 42% de los ingresos. Para los equipos más pequeños, como el Getafe o el Eibar, hasta casi el 90% en la pasada temporada.

El último contrato, suscrito con Telefónica y Mediapro, se cerró por 1.140 millones de euros anuales, pero el mercado, con la pandemia de la covid-19, está a la baja. En Francia, las negociaciones por los derechos audiovisuales han estado cerca de dinamitar el campeonato tras la espantada de Mediapro y las disputas entre Amazon y Canal+. Mientras, la Bundesliga estrena nuevo ciclo (2021-25) con un contrato por valor de 4.400 millones, con las firmas de Sky, Dazn y la pública ARD, con una rebaja de 240 millones. La Premier cuenta con el Gobierno de Boris Johnson como principal valedor en pleno post-Brexit para seguir gobernando en Europa.

En ningún caso, LaLiga recibirá más dinero por los derechos audiovisuales, que contarán, además, necesariamente con nuevos actores, con Amazon en la sombra. En los últimos años, Vodafone, Euskaltel y Másmovil ya se bajaron del barco. Orange, que sigue, también ha estado cerca en algunos momentos.

Si el dinero no llega de la televisión, ¿de dónde vendrá?

Antes de la bomba de la salida de Messi, la previa de LaLiga 2021/22 se agitó con el acuerdo de la patronal con el fondo de capital riesgo CVC por valor de 2.668 millones a cambio de adquirir el 10,95% de los derechos del campeonato durante los próximos cincuenta años. Liquidez inmediata, con un ventajoso plazo de amortización de cuarenta años.

La asamblea de LaLiga ha dado luz verde a la operación con CVC, ayer mismo, aunque con la oposición del Real Madrid y el Barça, los máximos promotores de la elitista Superliga, un proyecto aparcado, que no olvidado, que tambaleó los cimientos del fútbol europeo en la pasada primavera. La Federación Española, que ha calificado de “ilegal, pésimo y lamentable” el acuerdo, se ha colocado del lado de los dos grandes.

La patronal ha aceptado finalmente que el Real Madrid y el Barça no cedan sus derechos, que consideran infraestimados, para evitar una guerra judicial.

Así lo han sido los últimos días con un cruce de declaraciones nada disimuladas.

Abrió fuego el Real Madrid con un comunicado:

“Este acuerdo, usando una estructura engañosa, expropia a los clubes el 10,95 % de sus derechos audiovisuales durante cincuenta años y en contra de la ley”.

Le secundó el Barça, que considera “inapropiada la firma de un contrato de medio siglo ante las incertidumbres que siempre rodean el mundo del fútbol”.

El presidente de LaLiga, Javier Tebas, entró al trapo a fondo, primero ante el Real Madrid:




“LaLiga no está preocupada por una posible acción legal del Real Madrid ya que era una reacción previsible dada la trayectoria de dicho club de oponerse de manera frontal y demandar cualquier proyecto estratégico que suponga un avance y un impulso de la competición y sus clubes. Concretamente, LaLiga acumula 51 actuaciones jurídicas por parte del Real Madrid, de las cuales la mayoría han sido ganadas por LaLiga”.

Y después para el Barça, con un mensaje en Twitter:

“Hola Laporta, ¿sabes que la operación de CVC no hipoteca los derechos del Barça cincuenta años, que lo que hace es que los mismos tengan más valor para todos los clubes y así tú los puedas hipotecar a tus bancos y resolver la gran deuda. Así lo entendías hace horas”.

La escalada prosiguió.

Movió ficha al Real Madrid, que anunció “acciones legales, tanto civiles como penales” contra Tebas y contra el responsable de CVC, Javier de Jaime Guijarro, y el propio fondo.

Y Tebas reaccionó:

“El método amenazante que desde hace años utiliza FP (Florentino Pérez) en privado lo traslada ahora a lo público. Clubes e instituciones llevamos años soportando sus amenazas. Desde 2015 contra la venta centralizada, las impugnaciones constantes de acuerdos, la Superliga... El Real Madrid merece más”.

LaLiga comenzará con una tregua tras la asamblea de los clubes.

Luz verde al acuerdo con CVC, con 38 clubes a favor y solo cuatro en contra, pero vía libre también para el Real Madrid y el Barça.

De cualquier manera, la paz en el fútbol español está lejos de ser una realidad, con el fantasma de la Superliga, desactivada por la presión de los aficionados en Inglaterra, en los despachos del Bernabéu y el Camp Nou esperando otra oportunidad.

Con todo esto, el balón volverá a rodar desde este viernes, aún en tiempos de pandemia, pero con el regreso parcial de los espectadores a las gradas, con las correspondientes medidas de seguridad anti-covid (mascarillas, distancia de seguridad, sin consumo de alimentos y bebidas...). El Gobierno permitirá un aforo máximo del 40% en los estadios. Un límite que algunos gobiernos autonómicos han recortado: 33% (Navarra), 30% (Cataluña), 20% (Euskadi) y 15.000 espectadores (Comunidad Valenciana).

Todo en un contexto optimista con la evolución de la pandemia, con casi el 70% de la población española vacunada con las dos dosis. Y con las variantes ‘bajo control’.

¿Y el fútbol?

La temporada 2020/21 pasará a la historia por los estadios vacíos por la crisis de salud pública por el SARS-CoV-2, el virus que provoca la covid-19.

Pero no pasará a la historia por el fútbol. Hubo emoción hasta el final, pero escasa calidad. El título no se decidió hasta la última jornada por la irregularidad de los tres grandes. El Atlético fue el campeón con menos puntos desde 2008.

El argentino De Paul (35 millones) es el principal fichaje
de esta temporada en LaLiga. Foto: www.atleticodemadrid.com
¿Es el favorito en la temporada 2021/22?

El verano ha cambiado poco la confección de las plantillas. El Real Madrid y el Barça se han reforzado poco y a coste cero. El Atlético ha tocado lo justo, con la incorporación del mediocentro argentino De Paul (35 millones), procedente del Udinese. Es el fichaje más caro del mercado de LaLiga, a años luz de los movimientos más importantes en la Premier: Grealish (117,5 millones, Manchester City), Lukaku (115, Chelsea) y Sancho (85, Manchester United).

Sí, el Atleti es el favorito, al menos por su cartel de vigente campeón.

Simeone ya tiene dos títulos en el banquillo colchonero. El equipo está hecho (Oblak, Llorente, Koke, Luis Suárez…) y la filosofía, clara e inamovible. Sabe a lo que juega mejor que nadie. No es espectacular, pero es fiable. Y falta la explosión de Joao Félix.

El Atleti no fallará, eso seguro. Serán otros los que tendrán que acertar.

El Real Madrid ha vuelto a mirar a su exitoso pasado más cercano tras un año en blanco (y no por el color de la zamarra). Ancelotti, campeón de la Champions en 2014, ha tomado el testigo de Zidane en un club que añora a Cristiano Ronaldo y que sueña con Mbappé y/o Haaland para volver a dominar en el fútbol europeo. No será, de momento, en este curso. El francés y el noruego, las nuevas grandes estrellas, seguirán, salvo sorpresa, en el PSG y el Borussia Dortmund, respectivamente.

Un año de transición, con la única novedad del polivalente defensa austriaco Alaba (a coste cero), pero con salidas importantes como Varane, por 41 millones al Manchester United, y el capitán Sergio Ramos, gratis al PSG. El sevillano, tras dieciséis temporadas en el Bernabéu, no acabará su carrera en el Real Madrid. Mismo o parecido triste final que otros emblemas merengues como Raúl, Casillas o Cristiano.

El Real Madrid necesita una revolución, pero tocará esperar sin el deseado Mbappé y con Ancelotti en el banquillo. Al menos, estrenará el renovado Bernabéu y será competitivo a poco que funcione el bloque de los veteranos: Modric (35 años), Benzema (33), Marcelo (33), Kroos (31), Casemiro (29) y Courtois (29), más la progresión de Vinícius (21) y Rodrygo (20). Ya si Ancelotti recupera a Asensio, Isco y Hazard, el Real Madrid volverá a contar como el que más. Aunque sea con Bale, sin dorsal, en la grada en su último año de contrato.

El Barça comenzará a vivir sin Messi. Nada fácil para Koeman, que salvó la pasada temporada conquistando la Copa e ilusionando con los más jóvenes: Pedro (18 años), Dest (20), Araújo (22) y Mingueza (22). Y con Ansu Fati (18) lesionado desde noviembre.

Al Camp Nou han llegado piezas de segundo nivel, todas libres: un veterano como el argentino Agüero (33 años), una promesa como Eric García (20) y un talento irregular como el holandés Memphis Depay (27). Además, los azulgranas han recuperado al brasileño Emerson (22).

Poco para un Barça sin Messi, aunque con Griezmann, Dembélé, Busquets, Ter Stegen, De Jong y el incansable Pedri para hacer menos dura la depresión.

¿Sería posible otro campeón?

Parece difícil, el último fue el Valencia en 2004. Pero las actuales versiones del Atlético, el Real Madrid y el Barça asustan menos que antes.

Oportunidad para el Sevilla, eterno candidato a la sorpresa, y el Villarreal, fortalecido por sus éxitos europeos. Esta misma semana llevó al Chelsea hasta los penaltis en la Supercopa. Ambos se probarán ante los grandes en la Champions.

En LaLiga, pelearán por quedar lo más arriba posible. El Sevilla, con un bloque continuista, salvo el argentino Lamela, procedente del Tottenham a coste cero. El Villarreal, buscando un paso más con la incorporación del delantero senegalés Boulaye Dia (doce millones) y el centrocampista Manu Morlanes (cuatro). El central argentino Foyth, tras un año cedido por el Tottenham, se queda ya en el ‘submarino amarillo’ a cambio de quince millones.

El Villarreal, campeón de la Europa League 2021.
Foto: www.villarrealcf.es
El siguiente escalón de LaLiga incluye a los teóricos aspirantes a competición europea: la Real Sociedad, el Real Betis, el Athletic, el Valencia, el Celta y el Granada.

Los ‘txuri-urdin’ y los verdiblancos ya pasearán su nombre por la Europa League en esta temporada. La Real, campeona de la aplazada Copa 2020 por la pandemia y con el filial ascendido a Segunda, mantiene la fórmula, con numerosos canteranos de Zubieta, con la única novedad del lateral izquierdo Diego Rico. Tampoco cambiará el rumbo el Real Betis, bien encauzado por Pellegrini en su primer año en el Villamarín.

El Athletic de Marcelino olvidará la doble decepción copera ante la Real y el Barça y buscará nuevas ilusiones con un equipo que ya fue capaz de ganar la última Supercopa. El Valencia, por obligación, mirará arriba tras dos años decepcionantes (noveno y decimotercero) con un ‘tipo duro’ en el banquillo: Bordalás. El Celta de Coudet, que convenció en su primer curso en Balaídos, intentará confirmarse con el argentino Cervi (cuatro millones) como principal alta. El Granada, por su parte, estrenará un nuevo ciclo con el exseleccionador interino Robert Moreno tras tres buenos años con Diego Martínez.

Para el resto, el Osasuna, el Cádiz, el Levante, el Getafe, el Deportivo Alavés, el Elche y los ascendidos Espanyol, Mallorca y Rayo, el objetivo será la permanencia.

El Osasuna, tras un año cedido, ha cerrado el fichaje más caro de su historia: el delantero croata Budimir (ocho millones). El Cádiz de Álvaro Cervera, una de las revelaciones de la última campaña, peleará por no pasar apuros con refuerzos como el defensa paraguayo Arzamendia (2,1 millones) y el centrocampista chileno Alarcón (2). El Levante de Paco López seguirá siendo valiente, con el añadido del veterano Soldado (36 años).

Míchel volverá al Getafe, al que ya entrenó entre 2009 y 2011, para alejarse de la zona baja con el exazulgrana Aleñà (cinco millones) como gran apuesta. Calleja asumirá el banquillo del Deportivo Alavés, al que salvó del descenso tras relevar a Abelardo en la recta final del pasado curso. El mismo premio que tendrá Escribá en el Elche, ya con los argentinos Marcone (cuatro millones) y Boyé (dos) en propiedad.

Al Espanyol el drama de Segunda le duró un año, con Vicente Moreno como arquitecto y con Raúl de Tomás (23 goles) como líder. El Real Mallorca, con Luis García, imitó a los periquitos para volver a Primera al primer intento. Los bermellones han cerrado la continuidad de Amath (cuatro millones) tras un año cedido. Por último, el Rayo subió en los playoffs desde la sexta plaza tras superar al Leganés y al Girona. Iraola, seis años después de abandonar LaLiga tras jugar doce temporadas en el Athletic, se estrenará en el élite como entrenador en Vallecas.

PARTICIPANTES DE LALIGA SANTANDER 2021/22:

(Orden siguiendo la clasificación en la última campaña)

-Atlético (85ª temporada).

-Real Madrid (91ª temporada).

-FC Barcelona (91ª temporada).

-Sevilla FC (78ª temporada).

-Real Sociedad (75ª temporada).

-Real Betis (56ª temporada).

-Villarreal CF (22ª temporada).

-Real Celta de Vigo (56ª temporada).

-Granada CF (26ª temporada).

-Athletic Club (91ª temporada).

-CA Osasuna (40ª temporada).

-Cádiz CF (14ª temporada).

-Valencia CF (87ª temporada).

-Levante UD (16ª temporada).

-Getafe CF (17ª temporada).

-Deportivo Alavés (17ª temporada).

-Elche CF (23ª temporada).

Ascendidos:

-RCD Espanyol (86ª temporada).

-RCD Mallorca (29ª temporada).

-Rayo Vallecano (19ª temporada).


CAMPEONES DE LA LIGA:


2021:
Atlético de Madrid. 2020: Real Madrid. 2019: FC Barcelona. 2018: FC Barcelona. 
2017: Real Madrid. 2016: FC Barcelona. 2015: FC Barcelona. 2014: Atlético de Madrid. 2013: FC Barcelona. 2012: Real Madrid. 2011: FC Barcelona. 

2010: FC Barcelona. 2009: FC Barcelona. 2008: Real Madrid. 2007: Real Madrid. 2006: FC Barcelona. 2005: FC Barcelona. 2004: Valencia. 2003: Real Madrid. 2002: Valencia. 2001: Real Madrid.

2000: Deportivo de La Coruña. 1999: FC Barcelona. 1998: FC Barcelona.1997: Real Madrid. 1996: Atlético de Madrid. 1995: Real Madrid. 1994: FC Barcelona. 1993: FC Barcelona. 1992: FC Barcelona. 1991: FC Barcelona

1990: Real Madrid. 1989: Real Madrid. 1988: Real Madrid. 1987: Real Madrid. 1986: Real Madrid. 1985: FC Barcelona. 1984: Athletic. 1983: Athletic. 1982: Real Sociedad. 1981: Real Sociedad.

1980: Real Madrid. 1979: Real Madrid. 1978: Real Madrid. 1977: Atlético de Madrid. 1976: Real Madrid. 1975: Real Madrid. 1974: FC Barcelona. 1973: Atlético de Madrid. 1972: Real Madrid. 1971: Valencia.

1970: Atlético de Madrid. 1969: Real Madrid. 1968: Real Madrid. 1967: Real Madrid. 1966: Atlético de Madrid. 1965: Real Madrid. 1964: Real Madrid. 1963: Real Madrid. 1962: Real Madrid. 1961: Real Madrid.

1960: FC Barcelona. 1959: FC Barcelona. 1958: Real Madrid. 1957: Real Madrid. 1956: Athletic. 1955: Real Madrid. 1954: Real Madrid. 1953: FC Barcelona. 1952: FC Barcelona. 1951: Atlético de Madrid.

1950: Atlético de Madrid. 1949: FC Barcelona. 1948: FC Barcelona. 1947: Valencia. 1946: Sevilla. 1945: FC Barcelona. 1944: Valencia. 1943: Athletic. 1942: Valencia. 1941: Atlético de Madrid.

1940: Atlético de Madrid. 1936: Athletic. 1935: Real Betis. 1934: Athletic. 1933: Real Madrid. 1932: Real Madrid. 1931: Athletic. 1930: Athletic. 1929: FC Barcelona.


PALMARÉS DE LA LIGA:

-Real Madrid: 34.

-FC Barcelona: 26.

-Atlético de Madrid: 11.

-Athletic: 8.

-Valencia: 6.

-Real Sociedad: 2.

-Real Betis: 1.

-Sevilla: 1.

-Deportivo de La Coruña: 1.