Plácida victoria del Barça en un Nuevo Estadio José Zorrilla abarrotado.
El Real Valladolid, ordenado en defensa, no inquietó en ataque salvo en los
últimos minutos con el estreno goleador en Primera de Javi Guerra. El Barça se
adelantó al filo del descenso y estrelló, además, dos balones en los postes.
Messi participó en los dos primeros goles del Barça. Fotos: Ángel Becerra (www.realvalladolid.es) |
El Barça, dirigido por Jordi Roura, segundo de Vilanova, dejó en el banquillo a Iniesta, ocupando su lugar Thiago, y siguió confiando en Mascherano por delante de Puyol. La maquinaria culé no tardó en arrancar y ya a los cuatro minutos el marcador se pudo mover. Alexis desaprovechó un pase de gol de Pedro desde la derecha. El chileno, solo dentro del área de Dani Hernández, no conectó el balón. Messi, principal protagonista del partido, había iniciado la jugada.
El líder de la Liga BBVA, que se ha dejado apenas un empate en diecisiete jornadas, se adueñó de inmediato del balón ante un Real Valladolid que dispuso dos líneas de cuatro, muy juntas, con Manucho y Óscar arriba. Djukic alineó a Sastre debido a los problemas físicos que ha tenido en esta semana Álvaro Rubio, que no disputó ningún minuto. Los blanquivioletas se estiraron muy de vez en cuando y, casi siempre, de la mano de Omar Ramos y de un destacado Balenziaga. La banda derecha, con un indolente Alberto Bueno, no existió. Un centro de Balenziaga rematado por Manucho y que Jordi Alba desvió con el pecho fue la única aparición ofensiva del Real Valladolid en el área de Víctor Valdés. Los castellanos reclamaron penalti en la acción más polémica de la tarde.
Xavi bate a Dani Hernández. |
La segunda mitad arrancó con un monólogo culé que no tenía más final posible que el cero a dos. Pedro cabeceó al palo tras una arrancada de Alves, que se plantó delante de Dani Hernández, que obligó al brasileño a centrar tras perder la verticalidad de la portería. Messi mandó fuera un disparo con la derecha tras un erro garrafal de Sereno. El argentino no perdonó a la siguiente. Recogió un pase con el tacón de Xavi, se marchó en velocidad de Xavi y buscó a Sereno al que ‘humilló’ con un túnel para dejarse franco un disparo raso ante la meta de Dani Hernández que entró tras acariciar el poste izquierdo. En un cuarto de hora, el Barça había sentenciado ante un Real Valladolid inofensivo en ataque, que echaba mucho de menos la garra y velocidad de Ebert y que empezaba a flojear en defensa, en especial en la parcela de un desajustado Sereno.
Con cero a dos, el Barça metió el partido en el congelador dejando pasar los minutos. Djukic sustituyó a unos inoperantes Manucho y Bueno por Javi Guerra y Rubén Peña para intentar, al menos, pisar los dominios de un Víctor Valdés que durante muchos minutos fue un simple espectador en Zorrilla. Con el encuentro medio anestesiado, salvo con las ovaciones del público a David Villa y Andrés Iniesta cuando ingresaron en el campo y en una buena internada de Balenziaga que no encontró rematador, la emoción apareció cuando menos se esperaba y con un protagonista deseado en Valladolid.
Javi Guerra, tras un doble remate, primero con la cabeza tras un centro de Rukavina y luego con el pie derecho tras cazar el rechace de Valdés, acortó distancias en el minuto 88. Es el quincuagésimo gol de Guerra como jugador del Real Valladolid y su estreno como realizador en Primera. Sin duda, la mejor noticia para el equipo en todo el encuentro: recuperar a su killer en las dos anteriores temporadas. La peor se reparte entre la amarilla que recibió Óscar en un claro pisotón a Busquets, que le impedirá jugar en Balaídos el día de Reyes, y las pobrísimas actuaciones de Alberto Bueno y Henrique Sereno. El portugués, como colofón a su partido, regaló el definitivo 1-3 al recién salido Cristian Tello tras dejarle campo abierto para encarar a Dani.
Zorrilla disfrutó de las estrellas del Barça, que no perdieron la oportunidad para dedicar el triunfo a Tito Vilanova, y del esfuerzo defensivo del Real Valladolid, y se prepara ya para la lucha por la permanencia, el único y gran objetivo del club.
Real Valladolid 1: Dani Hernández; Rukavina, Sereno, Marc Valiente, Balenziaga; Sastre (Baraja 81’), Víctor Pérez, Omar Ramos, Óscar, Bueno (Rubén Peña 64’); y Manucho (Javi Guerra 74’).
Barcelona 3: Víctor Valdés; Dani Alves, Piqué, Mascherano, Jordi Alba; Busquets, Xavi, Thiago (Iniesta 83'); Pedro (Tello 92'), Messi y Alexis (Villa 76').
Goles:
0-1. Minuto 43. Messi espera la llegada de Jordi Alba, cede el balón al lateral que entra en velocidad en zona de peligro, centra y Xavi, que llega en segunda línea, marca dentro del área.
0-2. Minuto 58. Gran jugada individual de Messi. El argentino recoge un balón en la frontal que le deja Xavi de tacón, se marcha por velocidad de Sastre y de Sereno tras lanzarle un túnel y marca de disparo raso ajustado al poste izquierdo de Dani Hernández.
1-2. Minuto 88. Javi Guerra se estrena como goleador en Primera. El malagueño remata de cabeza un centro de Rukavina, Valdés despeja y el balón vuelve al delantero blanquivioleta que marca con el pie derecho.
1-3. Minuto 93. Grave error de Sereno que deja vía libre a Tello para que entre por el medio de la defensa vallisoletana hasta el área de Dani para sentenciar el partido.
Árbitro: Clos Gómez (colegio aragonés) Tarjetas amarillas para Bueno (25’), Sereno (34’) y Sastre (51’), por parte del Real Valladolid, y Thiago (39’), por el Barcelona. Irritó a la afición del Real Valladolid señalando falta en cada contacto leve sobre un jugador del Barça. Se le reclamó penalti en un despeje de Jordi Alba dentro del área. El lateral del Barça tocó el balón con el pecho, aunque muy cerca de la mano, según algunas tomas de televisión.
Lleno en Zorrilla con la visita del Barça. |
Las notas:
Dani Hernández (6): Nada pudo hacer en los tres goles del Barça. No tuvo errores de bulto, si bien volvió a demostrar que lo suyo no son los pies con varios despejes defectuosos.
Rukavina (6): El tándem con
Omar Ramos minimiza su aportación ofensiva. Se entiende mejor con Ebert. Bien
en defensa y testimonial en ataque.
Marc Valiente (7): Formado en la cantera culé, ha vuelto a firmar un buen partido defensivo. Sin duda, uno de los mejores centrales de la Liga.
Sereno (3): De más a menos.
Regular en la primera parte, en la que regaló una peligrosa falta, por la que fue
amonestado, en la frontal que no aprovechó Messi. En los segundos 45 minutos,
estuvo calamitoso. Muy inseguro, Messi le hizo un caño en el segundo gol y dejó
vía libre a Tello en el tercero. Se echa mucho de menos a Jesús Rueda viendo el
actual nivel de Sereno.
Balenziaga (7): Pundoroso. Buen partido defensivo del vasco que, además, subió en un par de ocasiones con peligro por la banda, en la primera de ellas el remate de Manucho estuvo a punto de ser mano de Jordi Alba.
Sastre (7): Titular debido a los problemas físicos que ha sufrido en toda la semana Álvaro Rubio. Bien en el robo de balones y en tareas defensivas, en ataque se le vio menos.
Víctor Pérez (6): Trabajador oscuro. Corrió como el que más en el planteamiento de contención diseñado por Djukic buscando las sombras de los jugadores del Barça.
Omar Ramos (7): Durante muchos minutos fue la única referencia ofensiva del Real Valladolid. Le faltaron compañeros con quien asociarse.
Óscar (5): No fue su partido. Apareció en cuentagotas y, para colmo de males, vio la quinta amarilla de la Liga tras un claro pisotón a Busquets. El salmantino no jugará en Balaídos el día 6 de enero.
Bueno (2): De mal en peor. La lesión de Ebert ha permitido al madrileño jugar casi todo el partido contra el Real Madrid y ser titular contra Deportivo y Barça. Desde luego, no ha aprovechado la oportunidad. Desapercibido, no tocó balón y tampoco estuvo intenso en defensa. Con esa actitud, clama banquillo para toda la temporada.
Manucho (5): El juego del Barça no se acomoda a sus características. Falto de velocidad, no supo desmarcarse ni tampoco aprovechar su mayor altura ante Mascherano.
Rubén Peña (7): El canterano no es que hiciera nada espectacular pero, a diferencia de Bueno, al menos quiso jugar. Partido tras partido gana opciones para adelantar al madrileño como recambio en las bandas.
Javi Guerra (8): Su gol, más
que por el resultado, representa una gran noticia de cara al futuro del jugador
y del equipo. Se estrenó como goleador en Primera. Suma ya cincuenta tantos
como blanquivioleta.
Baraja (6): Relevo de Sastre, al que el paso de los minutos desgastó. No tuvo tiempo de casi nada.
Djukic (7): Continuismo en un partido sin nada que perder. No forzó a Álvaro Rubio y supo mandar al banquillo a los inoperantes Bueno y Manucho.
Marc Valiente (7): Formado en la cantera culé, ha vuelto a firmar un buen partido defensivo. Sin duda, uno de los mejores centrales de la Liga.
Tello aprovechó un error de Sereno para marcar el tercer gol del Barça. |
Balenziaga (7): Pundoroso. Buen partido defensivo del vasco que, además, subió en un par de ocasiones con peligro por la banda, en la primera de ellas el remate de Manucho estuvo a punto de ser mano de Jordi Alba.
Sastre (7): Titular debido a los problemas físicos que ha sufrido en toda la semana Álvaro Rubio. Bien en el robo de balones y en tareas defensivas, en ataque se le vio menos.
Víctor Pérez (6): Trabajador oscuro. Corrió como el que más en el planteamiento de contención diseñado por Djukic buscando las sombras de los jugadores del Barça.
Omar Ramos (7): Durante muchos minutos fue la única referencia ofensiva del Real Valladolid. Le faltaron compañeros con quien asociarse.
Óscar (5): No fue su partido. Apareció en cuentagotas y, para colmo de males, vio la quinta amarilla de la Liga tras un claro pisotón a Busquets. El salmantino no jugará en Balaídos el día 6 de enero.
Bueno (2): De mal en peor. La lesión de Ebert ha permitido al madrileño jugar casi todo el partido contra el Real Madrid y ser titular contra Deportivo y Barça. Desde luego, no ha aprovechado la oportunidad. Desapercibido, no tocó balón y tampoco estuvo intenso en defensa. Con esa actitud, clama banquillo para toda la temporada.
Manucho (5): El juego del Barça no se acomoda a sus características. Falto de velocidad, no supo desmarcarse ni tampoco aprovechar su mayor altura ante Mascherano.
Rubén Peña (7): El canterano no es que hiciera nada espectacular pero, a diferencia de Bueno, al menos quiso jugar. Partido tras partido gana opciones para adelantar al madrileño como recambio en las bandas.
Guerra se estrena como goleador en Primera. |
Baraja (6): Relevo de Sastre, al que el paso de los minutos desgastó. No tuvo tiempo de casi nada.
Djukic (7): Continuismo en un partido sin nada que perder. No forzó a Álvaro Rubio y supo mandar al banquillo a los inoperantes Bueno y Manucho.