El
equipo vallisoletano, con cinco victorias y dos únicas derrotas, mereció mejor
suerte. El arbitraje no ayudó en el decisivo choque ante Milano, con un gol
anulado y un polémico empate de los italianos. Los franceses del Garges, que se
proclamaron subcampeones, cerraron el pase a las semifinales.
La plantilla del CPLV en la Copa de Europa. Foto: www.web.cplv.org |
La aventura europea
del CPLV acabó con un séptimo puesto que no hace honor al rendimiento ofrecido,
ni a la imagen dada en Francia.
El CPLV acudía a
Europa con dos bajas muy significativas. En primer lugar, la del defensa
Guillermo Ordax y, en segundo, la del finlandés Vili Palola. La expedición
partió el martes con un viaje en bus cercano a las veinte horas por delante.
Los vallisoletanos
estaban enclavados en un grupo con seis equipos (frente a los cinco del grupo
A). Y viendo el nivel de los oponentes sería clave vencer al Milano o al Garges
para entrar en semifinales.
El jueves se firmó
un buen partido ante los suizos del HC Laupersdorf, que sirvió para calentar
motores a los chicos capitaneados por Andrés Portero. Victoria por 6-1 con
goles de Dani Collantes (3), Guille Jiménez, Jack Telford y Olmo Ercilla.
Por la tarde,
brilló la joven plantilla del Pisuerga. Remontó un parcial de 3-0 frente a los
italianos del HC Milano Quanta, llegando al ecuador de la segunda mitad
venciendo por 5 a 3. Marcaron David Pérez, Dani Collantes, Mario Díez, Adel
Saber y Matt Fischer. Pero el colegiado decidió anular un gol decisivo a favor
del CPLV, de Collantes, por portería movida.
A falta de cinco
segundos, los italianos empataron (5-5) el encuentro en una jugada bastante
polémica. Habían quitado a su portero y decidieron meter dos jugadores enfrente
de Jerry Kaukinen (dentro del área de portero). La tanda de penaltis llevó la
alegría al equipo vallisoletano, aunque no los tres puntos, factor que a la
postre sería decisivo para dejar fuera las ilusiones del CPLV.
Los partidos del viernes
sirvieron para sumar seis puntos más con dos victorias holgadas ante Mannheim (11-1),
con goles de Dani Collantes (3), Guille Jiménez (2), Olmo Ercilla (2), Matt
Fischer, David Pérez, Andrés Portero y Jack Telford, y Charleroi (6-0), con
goles de Álvaro Lobo, Jack Telford, Mario Díez, David Pérez, Guille Jiménez y
Dani Collantes. Los amplios triunfos permitieron dar descanso a algunos
jugadores.
Solo quedaba, ya el
viernes, Garges. El problema es que los franceses habían perdido ante los italianos
del Milano en un encuentro donde los galos fueron expulsados en exceso. Milano aprovechó
para sumar los dos puntos que necesitaba. Garges jugó un gran partido ante el
CPLV, que aguantó el empate (2-2), con goles de Guille Jiménez y Jack Telford, hasta
casi el final del partido. Un error sirvió para que los franceses subieran el
tercero al marcador. El CPLV intentó la machada sin portero pero no hubo suerte,
perdió 2-4 y, ganando cuatro de sus cinco enfrentamientos, debía decir adiós a
las semifinales.
Las vallisoletanos completaron un buen torneo. Fotos: Instagram Cerilh (Carola Fabrizia Semino). |
Para seguir con el
nefasto sábado, el encuentro de la tarde ante el Linth suizo fue un desastre
con un conjunto descentrado que se enteró en la misma pista que no podía contar
para dicho encuentro con Telford. Linth venció por 1-3.
Ya el domingo, los
chicos del CPLV doblegaron, esta vez por 6-2, al HC Laupersdorf por segunda vez
sin muchos problemas antes de iniciar el agotador viaje de vuelta. Jack
Telford, Olmo Ercilla, Matt Fischer, Adel Saber, Dani Collantes y Mario Díaz
firmaron los goles.
Teniendo en cuenta
todo lo ocurrido, el CPLV dejó una gran imagen en Bethel, con la sensación de
merecer mucho más.
Ahora, a pasar
página y pensar en la Liga y la Copa.
Crónica de www.web.cplv.org