domingo, 27 de marzo de 2016

El Mirandés atropella al Real Valladolid

Los blanquivioletas, que con una victoria entraban en zona de playoff, caen rotundamente en Anduva. Galán y Provencio abrieron el marcador con dos goles en apenas nueve minutos en la primera mitad. Álex García y Aridane redondearon la goleada en el segundo periodo. Guzmán, de penalti, maquilló el resultado en el tiempo extra. El equipo de Miguel Ángel Portugal se despeña hasta la decimotercera plaza, el penúltimo en el numeroso grupo de ocho perseguidores del sexto puesto, que ocupa el Córdoba.

Kepa cubre a Ion Vélez en el área pequeña ante Juanpe y Hermoso.
Fotos: @LaLiga (www.realvalladolid.es)
Continuidad y regularidad. Básicas en cualquier deporte. Imprescindibles para alcanzar cualquier objetivo. Más aún si el reto es del calado de un ascenso. El Real Valladolid desperdició por tercera vez en esta temporada la posibilidad de encadenar tres victorias consecutivas. De dos no pasa. Falta continuidad y regularidad. Muy complicado conseguir así el anhelado regreso a Primera.

Falló en Girona, en la primera jornada del año, tras ganar antes de las vacaciones navideñas al Albacete, en el Carlos Belmonte, y el Tenerife, en Zorrilla. Volvió a fallar apenas un mes después en Alcorcón, con un pobre empate sin goles, tras derrotar al Mallorca, en el Iberostar Estadi, y al Córdoba, en casa.

El equipo de Miguel Ángel Portugal ha suspendido por tercera vez el vital examen de la continuidad y la regularidad. Tras golear al Real Oviedo en el Carlos Tartiere y a la Llagostera en Zorrilla ha llegado el ya habitual varapalo. Mazazo en Anduva ante el Mirandés. Mazazo rotundo: 4-1, con goles de Galán y Provencio, en la primera mitad, y Álex García y Aridane, en la segunda. Guzmán, de penalti, maquilló el marcador en el tiempo extra.

El Real Valladolid pierde una ocasión de oro para pisar por primera vez en la temporada zona de playoff. Los rivales no se cansan de darle oportunidades. Y el Real Valladolid de desaprovecharlas. El Córdoba, inmerso en una profunda crisis (con ya seis derrotas en la segunda vuelta), había caído en la jornada matinal en el Arcángel ante el Alavés. Una victoria del Real Valladolid en Anduva aupaba a los castellanos a la sexta plaza.

El atropello de Miranda tiene consecuencias. El equipo de Miguel Ángel Portugal, más por fallos ajenos que por méritos propios, sigue a solo una victoria del playoff, pero la derrota en Anduva ha despeñado al Real Valladolid hasta la decimotercera plaza. Los blanquivioletas ocupan la penúltima posición, solo por delante del Tenerife, en el numeroso grupo de perseguidores de la sexta plaza: Zaragoza (46 puntos), Lugo (46), Alcorcón (45), Elche (45), Girona (44), Mirandés (44), Real Valladolid (44) y Tenerife (42).

Mojica fue el jugador blanquivioleta más activo en ataque, aunque sin fortuna.
Juan Villar apareció mucho menos de lo habitual.
El encuentro de Anduva confirmó la absoluta ausencia de fiabilidad del conjunto vallisoletano. Con todo a favor para entrar en el playoff, encajó la derrota más dura de la temporada. Y con toda justicia. El Mirandés, que adelanta al Real Valladolid en la clasificación, con los mismos puntos pero con el golaverage a favor, fue mucho mejor. Terrazas le gana la partida a Portugal.

Al Mirandés le bastó con ser fiel a su peculiar esquema, con tres líneas de tres coronadas por un delantero centro: Ion Vélez. Los burgaleses justificaron su condición de equipo máximo goleador de la categoría, con 48 dianas, seis más que el Leganés y el Córdoba. Fue el Real Valladolid, a pesar de su positiva racha como visitante (cinco victorias, cuatro empates y una derrota en la era Miguel Ángel Portugal), quien no justificó, sin embargo, sus buenos números a domicilio y quien no castigó los problemas del Mirandés, que solo había ganado cuatro de catorce partidos en Anduva y que, además, sumaba seis jornadas sin conocer el triunfo.

Con las novedades de Alain Oyarzun por Álex García en el Mirandés y Samuel por Marcelo Silva, convaleciente de una lesión en esta semana, en el Real Valladolid, el encuentro arrancó con un intercambio de golpes sin consecuencias en el marcador. Alain Oyarzun, toda una joya de la cantera de la Real Sociedad prestada al Mirandés, desbordaba a Chica y Sangalli se comía a Hermoso, de nuevo muy endeble en defensa. Pero Mojica, con algún que otro adorno innecesario, también creaba peligro.

Juan Villar, que apareció muy poco en el derbi, protagonizó la ocasión más clara antes de que se inaugurara el marcador. A los cinco minutos, a pase de Rennella, remataba a puerta. Raúl Fernández, que se pasó la segunda parte de la pasada temporada en el banquillo del Real Valladolid, evitaba el gol. Pero el equipo de Miguel Ángel Portugal no supo interpretar el atípico esquema de Terrazas, con apenas tres centrales y mucho espacio libre en las bandas, lo que deja al Mirandés también como uno de los equipos más goleados de Segunda.

El choque se inclinó de lado burgalés. Galán acariciaba un peligrosísimo lanzamiento de falta de Alain Oyarzun, tras derribo previo de Hermoso a Sangalli. Nueve minutos después, Provencio cabeceaba un centro de Eguaras. El Mirandés, con un fútbol directo, pasaba por encima del Real Valladolid. Chica y Hermoso no podían con sus pares, pero tampoco Borja y Pedro Tiba, que naufragaron en Anduva.

El Real Valladolid no controló, entre otros, a Sangalli.
El colegiado asturiano González Fuertes amonesta a un jugador del Mirandés.
La batalla del mediocampo tuvo solo color local. La acumulación de hombres que plantea Terrazas no tuvo respuesta en el banquillo de Portugal. Los cuatro de arriba (Sangalli, Aridane, Alain Oyarzun, más Ion Vélez) y la segunda línea de tres (Eguares, Rúper y Provencio) asfixiaban al Real Valladolid, que estaba muy incómodo. Las carencias ofensivas de Borja brotaban y las carencias defensivas de Pedro Tiba afloraban con toda intensidad. Solo la llegada del descanso impidió la sentencia del Mirandés.

Sin cambios, el Real Valladolid intentó meterse en el partido con un remate de Roger, a los cinco minutos de la continuación, que salvó Raúl Fernández. El Mirandés, siempre manejando cada fase del encuentro, había retrasado la presión y aguardaba la llegada de más goles. No estaba equivocado. Un rabioso Álex García, por su suplencia, firmaba el tercero y regalaba el cuarto a Aridane. Kepa, con la cara, evitó el quinto de Sangalli. Un desastre.

Un atropello en toda regla que deja muy tocado al Real Valladolid. Y con un calendario de vértigo, con la visita del peligrosísimo Almería, que se está jugando la permanencia cuando estaba llamado a los puestos altos, dentro de una semana y los posteriores enfrentamientos ante cinco rivales directos en la pelea por el ascenso: Legañes (en Butarque), Real Zaragoza, Osasuna (en El Sadar), Lugo y Alavés (en Mendizorroza). Muy difícil si se sigue suspendiendo el examen de la continuidad y la regularidad. El Real Valladolid no sabe encadenar tres victorias y, menos aún, encontrar el camino del playoff.

Alineaciones:

Mirandés 4: Raúl Fernández; Moreno, Galán, Kijera; Eguaras, Rúper (Carlos Lázaro 73’), Provencio (Álex García 63’); Sangalli, Aridane, Alain Oyarzun (Javi Cantero 58’); y Ion Vélez.

Real Valladolid 1: Kepa; Chica, Samuel, Juanpe, Hermoso (Guzmán 58’); Borja, Pedro Tiba, Juan Villar (José 76’), Mojica; Rennella y Roger (Rodri 71’).

Goles:

1-0 (min. 25): Galán. Falta de Hermoso a Sangalli en la banda derecha. Libre directo de Alain Oyarzun, que lanza a pierna cambiada. El balón, muy peligroso, va al área pequeña y bota ante Kepa. Galán lo cabeceó ligeramente antes.

2-0 (min. 34): Provencio. Rúper, en posición de interior derecho, cede atrás a Eguaras, que está absolutamente solo. Eguaras centra al área y Provencio, en paralelo al punto de penalti, suelta un gran cabezazo ante Samuel que bate a Kepa.

3-0 (min. 68): Álex García. Centro de Eguaras desde la banda derecha. Ion Vélez no llega en boca de gol, pero sí Álex García, que ha ganado la espalda de Chica.

4-0 (min. 85): Aridane. Pase en profundidad de Kijera a Álex García, que se marcha por la banda izquierda de Chica. Aridane remacha en el área el centro de Álex García.

4-1 (min. 92): Guzmán, de penalti. Carlos Lázaro se resbala y derriba a Mojica. Guzmán marca el correspondiente penalti con la pierna derecha engañando a Raúl Fernández.

Árbitro: González Fuertes (colegio asturiano). Amonestó a Provencio (14’), Kijera (79’), Eguaras (79’) y Carlos Lázaro (91’), por el Mirandés, y a Hermoso (24’) y Mojica (59’), por el Real Valladolid.

Aficionados blanquivioletas en uno de los fondos de Anduva.
Incidencias: 31ª jornada de la Liga Adelante. Anduva. 3.576 espectadores. Unos trescientos aficionados del Real Valladolid en las gradas. 

Las notas:

Kepa (4): Encajó por primera vez cuatro goles defendiendo la portería del Real Valladolid. Un castigo inédito en su aún corta carrera profesional. El cancerbero vasco cerró en Anduva una semana para olvidar. Hace tres días, con la selección sub-21, recibió tres goles, el último tras un error individual con un recorte con mal resultado, en un encuentro ante Croacia de clasificación para el próximo Europeo de la categoría. El Mirandés amplió la cuenta. Kepa poco pudo hacer en el segundo, el tercer y el cuarto gol de los burgaleses. En el primero, tras una falta directa de Alain Oyarzun que tocó Galán, estuvo algo indeciso. Se quedó en la portería y no atajó el balón, que botó muy cerca del vizcaíno. En la recta final, salvó con el rostro el quinto del Mirandés de Sangalli.

Chica (2): Muy mal. Absolutamente sobrepasado por Alain Oyarzun, primero, y Álex García, después. Chica fue un juguete en manos de dos jugadores más rápidos e intensos. Álex García le ganó la espalda en el tercer gol del Mirandés y le rompió en el cuarto por velocidad y técnica, con una pequeña parada que dejó tirado al lateral catalán. En el comienzo de la segunda mitad, asistió muy bien en profundidad a Roger, que estuvo cerca de marcar.

Portugal alineó a Samuel dejando a un renqueante Marcelo Silva en el banquillo.
Samuel (3): Inesperado titular a pesar de que Marcelo Silva no jugó ante la Llagostera, por un golpe en la cresta ilíaca, y fue duda a lo largo de la semana. Mal rival el Mirandés, un equipo muy dinámico de mediocampo para arriba, para un jugador lento como Samuel. Provencio, de cabeza, le ganó la acción en el segundo gol del conjunto de Terrazas.

Juanpe (3): Sin la presencia de Marcelo Silva, le tocó liderar a la defensa vallisoletana. Fracasó, aunque los mayores problemas llegaron desde las bandas. En el cuarto gol del Mirandés, dejó suelto a Aridane para que remachara un centro de Álex García.

Hermoso (2): Afloraron todas sus carencias, que son bastantes, en defensa. Sangalli hizo lo que quiso con Hermoso. Cometió la falta, sancionada con tarjeta amarilla, que originó el primer gol del partido. Acabó en el banquillo casi a la hora de juego, sustituido por Guzmán.

Borja (3): No fue su mejor partido tras su regreso al Real Valladolid. La superioridad numérica del Mirandés en el mediocampo tampoco ayudó. Borja estuvo absolutamente sobrepasado.

El portugués Pedro Tiba falló en su tercer partido consecutivo como titular.
Pedro Tiba (2): Naufragó en Anduva. Tras dos buenas actuaciones en Oviedo, en especial, y ante la Llagostera, Pedro Tiba estuvo muy mal ante el Mirandés. No encontró su sitio. Sin presencia ofensiva, porque apenas tuvo el balón, se le vieron las costuras en labores defensivas ante un rival que corre y presiona con mucha intensidad como el Mirandés.

Juan Villar (3): Gris. No encontró el espacio a la espalda de Kijera. Solo lo hizo a los cinco minutos, tras un pase de Rennella. Raúl Fernández le sacó el disparo. Durante muchos minutos estuvo desaparecido.

Mojica (5): El colombiano fue casi el único que lo intentó con determinación. No tuvo suerte con los centros. Abusó de los adornos en los regates para desesperación de los aficionados blanquivioletas en las gradas, incluido el presidente Carlos Suárez, que se lo recriminó en público tras el descanso. Se enredó, como le pasa muy a menudo, pidiendo faltas, a menudo inexistentes. Protesta demasiado. En el segundo periodo, tras la salida de Hermoso, bajó hasta el lateral, con gran proyección ofensiva, aunque sin trascendencia en el juego. Sufrió un penalti, que sirvió para maquillar el resultado, en el tiempo extra.

Rennella no encontró posibilidades para brillar en Anduva.
Rennella (4): Aguantó los noventa minutos, aunque no tuvo el día. Muy desapercibido durante demasiado tiempo. A los cinco minutos, encontró a Juan Villar, que se tropezó con Raúl Fernández.

Roger (5): Pudo acortar distancias a los cinco minutos del segundo periodo. Raúl Fernández desvió el disparo del valenciano. Fue su única ocasión en Anduva. Ya con tres a cero se marchó al banquillo.

Guzmán (5): Primer cambio del Real Valladolid. Relevó a Hermoso para jugar como extremo izquierdo con Mojica detrás. Tras la salida de Juan Villar, ocupó la banda derecha en el último cuarto de hora. Estuvo activo, aunque sin colaboración de los compañeros. Marcó de penalti, el segundo de la temporada (ya lo hizo en Lugo), en el tiempo extra.

Rodri (5): Sustituyó a Roger en el minuto 71. Con el partido ya muy decantado, poco pudo hacer.

José (5): El canterano, que ya debutó ante el Leganés en la primera vuelta, tuvo catorce minutos tras relevar a Juan Villar.

Rubén Albés y Miguel Ángel Portugal, en el banquillo de Anduva.
Portugal (2): Fracaso. Terrazas le ganó claramente la partida. El Mirandés es el equipo más goleador de la categoría, pero también uno de los más goleados. El Real Valladolid ni supo parar a los burgaleses, ni crear peligro en el área de Raúl Fernández. Y eso ante un Mirandés que, con sus tres centrales, deja espacios libres en las bandas, donde Mojica y Juan Villar debieron desnivelar. Los blanquivioletas tienen serios problemas en la defensa, y más con la lesión de Nikos en el lateral izquierdo. Hermoso no ofrece garantías. Tampoco la pareja Borja-Pedro Tiba, que naufragó en Anduva, en el mediocampo. En partidos importantes ante rivales intensos, afloran las carencias. Probó, como ya ha pasado en más de una ocasión en esta temporada como solución de emergencia, con Mojica como lateral de largo recorrido en la última media hora del encuentro.