Esta
vez, el Recoletas Atlético Valladolid se quedó muy lejos de la sorpresa, a
diecisiete goles. El equipo de Xavi Pascual arrasó desde el comienzo e impuso
su superioridad técnica, física y numérica, con un ataque ‘siete’ contra ‘seis’
sin portero. “La verdad es que nos vamos sin saber si podemos defenderlos en un
‘seis’ contra ‘seis’”, ha lamentado Pisonero.
Abel Serdio, con siete goles, fue la mejor baza ofensiva local. Fotos: www.atleticovalladolid.es |
El Recoletas
Atlético Valladolid cayó derrotado ante el poderoso Barça Lassa por diecisiete
goles: 24-41. Lo hizo con una facilidad pasmosa ante un rival plagado de
estrellas, físicamente superior, que no dio opción a los gladiadores azules y
que incluso jugó en ataque durante muchos minutos con superioridad numérica,
sin portero. Esta vez, los de David Pisonero no pudieron frenar a los azulgranas
y el choque apenas tuvo historia dada la desigualdad física y de calidad entre
ambos equipos.
El Barça siempre
dominó el marcador (0-5 de inicio) y también el juego. De inicio salió con un
‘siete’ contra ‘seis’ en sus ataques, sin portero, lo que machacó cualquier
opción de equilibrio. Además, el Recoletas Atlético Valladolid fue incapaz de
encontrar espacios en la defensa 5:1 planteada por Xavi Pascual y, sobre todo,
fue incapaz de frenar los contraataques visitantes, que castigaron una y otra
vez cada error vallisoletano.
A pesar de todo,
tras ese inicio demoledor, el Recoletas Atlético Valladolid mejoró y remontó
(6-8, minuto 14) gracias a usar a sus dos centrales, Diego Camino y Adrián
Fernández, a la vez. Pero fue un espejismo. El Barça, poco a poco pero sin
piedad, aumentó su ventaja y el partido perdió la emoción. El orgullo y las
ganas de los gladiadores azules solo llegaron hasta el minuto cuarenta, que ya
es mucho ante este arrollador Barça. A partir de ahí, el choque se diluyó con
un rival imparable en todos los sentidos.
En la fase en la
que el Recoletas aguantó el tipo, destacaron Adrián Fernández y Diego Camino,
valedores del juego combinativo, audaz y creativo que pudo rascar algo positivo
ante la muralla defensiva del Barça. Encontraron a Abel Serdio (siete goles) en
el pivote, otro de los focos de los gladiadores azules. Los extremos, Jorge
Serrano y Dani Pérez, también brillaron en la primera parte, pero después se
apagaron junto con el resto del equipo.
El Barça Lassa
comenzó como un ciclón y en el minuto seis ya ganaba por 0-5. La defensa 5:1
que planteó para obstaculizar el ataque vallisoletano provocó varios errores
que los catalanes no perdonaron. Sus contraataques, que fueron numerosos, eran
imparables para los gladiadores azules, que además estaban ahogados ante la
muralla defensiva azulgrana. Sin espacio para lanzar y circular, el Barça Lassa
fue un rodillo.
Xavi Pascual volvió
a utilizar la alternativa de jugar en ataque con siete jugadores, sin portero.
A largo plazo, el ataque azulgrana fue sencillamente imposible de parar.
Un tiempo muerto de
David Pisonero frenó un poco la escabechina y el Recoletas Atlético Valladolid
se acercó en el marcador (6-8, minuto 14). Los vallisoletanos apostaron por
jugar con los dos centrales, Diego Camino y Adrián Fernández, y el ataque mejoró.
Los gladiadores azules incluso fallaron dos lanzamientos para acercarse a uno,
pero Gonzalo Pérez de Vargas, brillante, los detuvo.
El Barça Lassa
volvió a escaparse hasta los ocho goles (7-15, minuto 23). Cada error o pérdida
vallisoletana fue castigado con una contra y un gol fácil. Sobresalieron aquí
los extremos Aitor Ariño y Casper Mortensen. Además, en esta batalla desigual
en lo físico, también destacó Dika Mem con tres latigazos desde el exterior,
imparables para Carlos Calle. Al descanso, 13-19 para el Barça Lassa, que
reflejaba el desequilibrio y la diferencia entre ambos equipos.
La segunda mitad no
varió nada y los gladiadores azules lucharon para mantener el tipo sin
demasiado resultado. El Recoletas aguantó diez minutos más (18-26, minuto 40),
pero a partir de ahí los errores en ataque aumentaron y las veloces contras del
Barça se multiplicaron. En apenas seis minutos, el Barça dinamitó cualquier
atisbo de igualdad en el juego, que no en el marcador que ya era insalvable
(18-31, minuto 47).
Suspensión de Adrián Fernández tras burlar a la defensa catalana. |
Después de eso, el
partido se convirtió en un correcalles y perdió la tensión competitiva. El
Recoletas se desinfló y el Barça fue aumentando su renta hasta los diecisiete
goles del final (24-41).
El entrenador del
Recoletas Atlético Valladolid, David Pisonero, analizó así el encuentro: “Muy
complicado. Hemos tenido momentos en los que nos enganchamos, pero con nuestro
último recurso: con los pequeños en el campo. Pero a la larga eso nos fatigó.
Aguantamos dos embestidas más y parecía que íbamos a dar guerra, pero el partido
se nos hizo largo. Cuando no tenemos aportación global, es difícil aguantar. A
situaciones de gol hemos llegado, pero las pérdidas nos han castigado. Luego ya
con diez abajo, mentalmente no es lo mismo”.
“El Barça no me ha
sorprendido. Con cualquier error en ataque, en cada imprecisión, nos caía un
contraataque. Además, su rotación es grande y siempre contó con jugadores
frescos. Nosotros tenemos que aguantar con la gente más tiempo”, añadió
Pisonero.
“No hemos podido
defender en ningún momento. Sabíamos que nos iban a atacar con ‘siete’ porque
ya les salió bien en los partidos anteriores de Liga y Copa, pero no que lo
iban a usar desde el principio al final. Es superdesigual y, cuando además hay
desigualdad de calidad, no hay manera. El siete contra seis no te deja variar
nada. La verdad es que nos vamos sin saber si podemos defenderlos en un ‘seis’
contra ‘seis’. Es una regla más del juego, pero al final no te diviertes, el
partido es monótono. A mí, me gusta ver situaciones de ataque, igualdad… Es mi
opinión personal, pero no creo que esto sea mejor para el espectáculo. Esto es
otro juego, parecido al balonmano, y legal”, ha lamentado el técnico del
Recoletas Atlético Valladolid.
Ficha técnica:
Recoletas Atlético Valladolid 24 (13+11): Carlos Calle (portero, 10 paradas), Diego
Camino (1), Abel Serdio (7), Roberto Pérez (1), Jorge Serrano (3), Miguel
Camino (1) y Víctor Rodríguez (-) –siete inicial– Adrián Fernández (3), Nico
López (-), Héctor González (-), Dani Pérez (5), Rubén Río (-), Miguel Martínez
(1), Gastón Mouriño (2) y César Pérez (portero suplente).
FC Barcelona Lassa 41 (19+22): Gonzalo Pérez de Vargas (portero, 14
paradas), Victor Tomàs (4), Aitor Ariño (6), Timothey N’Guessan (1), Jure
Dolenec (1), Aron Palmarsson (2) y Ludovic Fábregas (7, 1p.) –siete inicial– Aleix
Gómez (3), Dika Mem (4), Cedric Sorhaindo (-), Thiagus Petrus (2), Casper
Mortensen (8), Lasse Andersson (1), Kamil Syprzak (2), Gilberto Brito (-) y Kevin
Möller (portero suplente).
Parciales cada cinco minutos: 0-4, 2-6, 6-8, 6-12, 9-16, 13-19 –descanso– 14-23,
17-26, 18-31, 20-34, 21-38 y 24-41.
Árbitros: Rosendo
López (colegio gallego) y Rodríguez Estévez (colegio gallego). Excluyeron a
Víctor Rodríguez (4’) y Héctor González (50’), por el Recoletas Atlético
Valladolid, y a Jure Dolenec (50’ y 55’), Lasse Andersson (28’), Ludovic Fabregas
(34’) y Kamil Syprzak (40’), por el FC Barcelona Lassa.
Incidencias: 3ª jornada de la Liga Asobal. Pabellón Huerta del
Rey (Valladolid). 2.451 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por los
fallecimientos de Martí Batallé, jugador del BM Granollers júnior, y Xavier
Pocurull, exjugador del club.
Crónica de www.atleticovalladolid.es