miércoles, 19 de septiembre de 2018

Muchísimo Barça en Huerta del Rey

Esta vez, el Recoletas Atlético Valladolid se quedó muy lejos de la sorpresa, a diecisiete goles. El equipo de Xavi Pascual arrasó desde el comienzo e impuso su superioridad técnica, física y numérica, con un ataque ‘siete’ contra ‘seis’ sin portero. “La verdad es que nos vamos sin saber si podemos defenderlos en un ‘seis’ contra ‘seis’”, ha lamentado Pisonero.

Abel Serdio, con siete goles, fue la mejor baza ofensiva local.
Fotos: www.atleticovalladolid.es
El Recoletas Atlético Valladolid cayó derrotado ante el poderoso Barça Lassa por diecisiete goles: 24-41. Lo hizo con una facilidad pasmosa ante un rival plagado de estrellas, físicamente superior, que no dio opción a los gladiadores azules y que incluso jugó en ataque durante muchos minutos con superioridad numérica, sin portero. Esta vez, los de David Pisonero no pudieron frenar a los azulgranas y el choque apenas tuvo historia dada la desigualdad física y de calidad entre ambos equipos.

El Barça siempre dominó el marcador (0-5 de inicio) y también el juego. De inicio salió con un ‘siete’ contra ‘seis’ en sus ataques, sin portero, lo que machacó cualquier opción de equilibrio. Además, el Recoletas Atlético Valladolid fue incapaz de encontrar espacios en la defensa 5:1 planteada por Xavi Pascual y, sobre todo, fue incapaz de frenar los contraataques visitantes, que castigaron una y otra vez cada error vallisoletano.

A pesar de todo, tras ese inicio demoledor, el Recoletas Atlético Valladolid mejoró y remontó (6-8, minuto 14) gracias a usar a sus dos centrales, Diego Camino y Adrián Fernández, a la vez. Pero fue un espejismo. El Barça, poco a poco pero sin piedad, aumentó su ventaja y el partido perdió la emoción. El orgullo y las ganas de los gladiadores azules solo llegaron hasta el minuto cuarenta, que ya es mucho ante este arrollador Barça. A partir de ahí, el choque se diluyó con un rival imparable en todos los sentidos.

En la fase en la que el Recoletas aguantó el tipo, destacaron Adrián Fernández y Diego Camino, valedores del juego combinativo, audaz y creativo que pudo rascar algo positivo ante la muralla defensiva del Barça. Encontraron a Abel Serdio (siete goles) en el pivote, otro de los focos de los gladiadores azules. Los extremos, Jorge Serrano y Dani Pérez, también brillaron en la primera parte, pero después se apagaron junto con el resto del equipo.

El Barça Lassa comenzó como un ciclón y en el minuto seis ya ganaba por 0-5. La defensa 5:1 que planteó para obstaculizar el ataque vallisoletano provocó varios errores que los catalanes no perdonaron. Sus contraataques, que fueron numerosos, eran imparables para los gladiadores azules, que además estaban ahogados ante la muralla defensiva azulgrana. Sin espacio para lanzar y circular, el Barça Lassa fue un rodillo.

Xavi Pascual volvió a utilizar la alternativa de jugar en ataque con siete jugadores, sin portero. A largo plazo, el ataque azulgrana fue sencillamente imposible de parar.

Un tiempo muerto de David Pisonero frenó un poco la escabechina y el Recoletas Atlético Valladolid se acercó en el marcador (6-8, minuto 14). Los vallisoletanos apostaron por jugar con los dos centrales, Diego Camino y Adrián Fernández, y el ataque mejoró. Los gladiadores azules incluso fallaron dos lanzamientos para acercarse a uno, pero Gonzalo Pérez de Vargas, brillante, los detuvo.

El Barça Lassa volvió a escaparse hasta los ocho goles (7-15, minuto 23). Cada error o pérdida vallisoletana fue castigado con una contra y un gol fácil. Sobresalieron aquí los extremos Aitor Ariño y Casper Mortensen. Además, en esta batalla desigual en lo físico, también destacó Dika Mem con tres latigazos desde el exterior, imparables para Carlos Calle. Al descanso, 13-19 para el Barça Lassa, que reflejaba el desequilibrio y la diferencia entre ambos equipos.

La segunda mitad no varió nada y los gladiadores azules lucharon para mantener el tipo sin demasiado resultado. El Recoletas aguantó diez minutos más (18-26, minuto 40), pero a partir de ahí los errores en ataque aumentaron y las veloces contras del Barça se multiplicaron. En apenas seis minutos, el Barça dinamitó cualquier atisbo de igualdad en el juego, que no en el marcador que ya era insalvable (18-31, minuto 47).

Suspensión de Adrián Fernández tras burlar a la defensa catalana.
Después de eso, el partido se convirtió en un correcalles y perdió la tensión competitiva. El Recoletas se desinfló y el Barça fue aumentando su renta hasta los diecisiete goles del final (24-41).

El entrenador del Recoletas Atlético Valladolid, David Pisonero, analizó así el encuentro: “Muy complicado. Hemos tenido momentos en los que nos enganchamos, pero con nuestro último recurso: con los pequeños en el campo. Pero a la larga eso nos fatigó. Aguantamos dos embestidas más y parecía que íbamos a dar guerra, pero el partido se nos hizo largo. Cuando no tenemos aportación global, es difícil aguantar. A situaciones de gol hemos llegado, pero las pérdidas nos han castigado. Luego ya con diez abajo, mentalmente no es lo mismo”.

“El Barça no me ha sorprendido. Con cualquier error en ataque, en cada imprecisión, nos caía un contraataque. Además, su rotación es grande y siempre contó con jugadores frescos. Nosotros tenemos que aguantar con la gente más tiempo”, añadió Pisonero.

“No hemos podido defender en ningún momento. Sabíamos que nos iban a atacar con ‘siete’ porque ya les salió bien en los partidos anteriores de Liga y Copa, pero no que lo iban a usar desde el principio al final. Es superdesigual y, cuando además hay desigualdad de calidad, no hay manera. El siete contra seis no te deja variar nada. La verdad es que nos vamos sin saber si podemos defenderlos en un ‘seis’ contra ‘seis’. Es una regla más del juego, pero al final no te diviertes, el partido es monótono. A mí, me gusta ver situaciones de ataque, igualdad… Es mi opinión personal, pero no creo que esto sea mejor para el espectáculo. Esto es otro juego, parecido al balonmano, y legal”, ha lamentado el técnico del Recoletas Atlético Valladolid.

Ficha técnica:

Recoletas Atlético Valladolid 24 (13+11): Carlos Calle (portero, 10 paradas), Diego Camino (1), Abel Serdio (7), Roberto Pérez (1), Jorge Serrano (3), Miguel Camino (1) y Víctor Rodríguez (-) –siete inicial– Adrián Fernández (3), Nico López (-), Héctor González (-), Dani Pérez (5), Rubén Río (-), Miguel Martínez (1), Gastón Mouriño (2) y César Pérez (portero suplente).

FC Barcelona Lassa 41 (19+22): Gonzalo Pérez de Vargas (portero, 14 paradas), Victor Tomàs (4), Aitor Ariño (6), Timothey N’Guessan (1), Jure Dolenec (1), Aron Palmarsson (2) y Ludovic Fábregas (7, 1p.) –siete inicial– Aleix Gómez (3), Dika Mem (4), Cedric Sorhaindo (-), Thiagus Petrus (2), Casper Mortensen (8), Lasse Andersson (1), Kamil Syprzak (2), Gilberto Brito (-) y Kevin Möller (portero suplente).

Parciales cada cinco minutos: 0-4, 2-6, 6-8, 6-12, 9-16, 13-19 –descanso– 14-23, 17-26, 18-31, 20-34, 21-38 y 24-41.

Árbitros: Rosendo López (colegio gallego) y Rodríguez Estévez (colegio gallego). Excluyeron a Víctor Rodríguez (4’) y Héctor González (50’), por el Recoletas Atlético Valladolid, y a Jure Dolenec (50’ y 55’), Lasse Andersson (28’), Ludovic Fabregas (34’) y Kamil Syprzak (40’), por el FC Barcelona Lassa.

Incidencias: 3ª jornada de la Liga Asobal. Pabellón Huerta del Rey (Valladolid). 2.451 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por los fallecimientos de Martí Batallé, jugador del BM Granollers júnior, y Xavier Pocurull, exjugador del club.