lunes, 27 de octubre de 2014

Nuevos retos para los NBA españoles

Pau Gasol, tras cuatro deprimentes últimas temporadas con los Lakers, de más a menos, vuelve a soñar con el anillo gracias a Chicago. A su lado, un debutante de primer nivel: el hispano-montenegrino Nikola Mirotic. Calderón, tras su paso por Dallas, se viste de Knick en la Gran Manzana. Marc Gasol y Ricky Rubio afrontan su último año de contrato. Ibaka continuará con su progresión en Oklahoma pensando en el título. Claver necesita demostrar que tiene sitio en la mejor Liga del mundo.



Pau Gasol recupera la ilusión con su fichaje por Chicago Bulls.
Seis. San Antonio persigue su sexto anillo y LeBron su sexta final. Durant estará lesionado durante seis semanas. Seis ‘contenders’ (Cleveland, Chicago, Oklahoma, Clippers, Warriors y Dallas) son las principales amenazas de los Spurs. Seis cracks (Durant, Rondo, Beal, Nash, Embiid y George) estarán de baja en el arranque de la temporada. Pero siete son los españoles que competirán en el nuevo curso de la NBA: Pau Gasol, Marc Gasol, José Manuel Calderón, Serge Ibaka, Ricky Rubio, Víctor Claver y el debutante Nikola Mirotic.

Nuevos retos para dos clásicos de la mejor Liga de baloncesto del mundo. Pau Gasol (34 años y decimocuarta temporada) y José Manuel Calderón (33 años y décima campaña) aún encuentran nuevos objetivos para seguir luchando. Un cambio de aires abre una etapa diferente en las carreras de Gasol y Calderón. Gasol ha abandonado Los Angeles Lakers (campeón en 2009 y 2010) tras cuatro deprimentes últimas temporadas. De más a menos. Los Lakers se quedaron incluso fuera de los playoffs en el pasado campeonato.

Pau, que sonó para Oklahoma y San Antonio, necesitaba un cambio, una nueva ilusión. Los Lakers, en pleno proceso de travesía del desierto, ahora no lo son. Gasol, pieza codiciada en el mercado por todas las franquicias, ansiaba regresar a la élite, a una franquicia que le permitiera lucha por el anillo. Chicago Bulls sí lo es. “No ha sido fácil. Después de meditarlo mucho, he decidido jugar en los Chicago Bulls. Muy ilusionado de vivir esta nueva etapa”, valoró Gasol en su cuenta de Twitter tras conocerse su fichaje por los Bulls.

Gasol ha sido citado como el segundo fichaje más importante del mercado.
“Estoy muy contento de tener la oportunidad de ser parte de una franquicia con tanta tradición y de jugar en un equipo con muchas aspiraciones (…). Aunque veo un futuro muy prometedor para mí en Chicago, dejar Los Angeles ha sido una de las decisiones más difíciles que he tenido que tomar. Aun así, me doy cuenta de que los Lakers están en fase de reconstrucción. No dudo de que en el futuro vuelvan a ser aspirantes al anillo, pero desafortunadamente las necesidades inmediatas de los Lakers no coinciden con las mías. Ahora doy un nuevo paso en mi carrera en la NBA”, justificó sobre su salida.

Pau Gasol, el único español que ha ganado un anillo en la NBA, vuelve a primera línea. La relevancia de su fichaje por Chicago es máxima. Según una reciente encuesta, los general managers de las treinta franquicias han calificado la incorporación de Gasol a los Bulls como el segundo movimiento más importante del mercado, solo por detrás del regreso de LeBron James a Cleveland. Con Derrick Rose sano y el refuerzo del español, Chicago ha saltado de ‘outsider’  a ‘contender’.

Mirotic afrontará su primera temporada en la NBA.
En Chicago, Gasol comparte vestuario con el hispano-montenegrino Nikola Mirotic, formado en las categorías inferiores del Real Madrid desde los catorce años. Mirotic se estrena en Estados Unidos. Es el decimocuarto jugador con pasaporte español en pisar la NBA tras Fernando Martín, Johnny Rogers, Pau Gasol, Raúl López, José Manuel Calderón, Jorge Garbajosa, Sergio Rodríguez, Juan Carlos Navarro, Rudy Fernández, Marc Gasol, Serge Ibaka, Ricky Rubio y Víctor Claver. 

No es un ‘rookie’ más. Chicago confía en Mirotic: “Es un jugador enormemente inteligente y que sabe lo que hacer en cada momento. Si está abierto, lanza. Si le están defendiendo bien, hará una jugada. Si le están cerrando con dureza, la meterá hacia abajo. No fuerza las situaciones, hecho que valoro mucho, ya que favorece la fluidez del juego del equipo. Además, Nikola tiene una gran predisposición para el trabajo, mucho orgullo y un gran talento. Será un gran jugador”, ha apostado su nuevo técnico, Tom Thibodeau.

Por su parte, José Manuel Calderón es el segundo NBA español que ha cambiado de equipo. La carrera del base extremeño se engalana con cada traspaso. Raptor durante siete temporadas y media, aunque con solo dos presencias en los playoffs, saltó a los Pistons para jugar la segunda parte del curso 2012/13. Un paréntesis hasta estrenarse en la Conferencia Oeste con los Dallas Mavericks en la pasada campaña. Ahora toca todo un mito: el Madison Square Garden, los Knicks, Nueva York.

Y, por si fueran pocos los alicientes, unos Knicks renovados con un emblema de la franquicia, con dos anillos como jugador (1970, aunque no participó directamente por lesión, y 1973), y un emblema de la NBA, con once anillos como entrenador, seis con Chicago Bulls (1991-1993 y 1996-1998) y cinco con Los Angeles Lakers (2000-2002 y 2009-2010). ¿Necesitan más pistas? Phil Jackson ha asumido la presidencia de los Knicks con el reto de devolver a la franquicia más universal de la NBA, con el respeto de Lakers y Celtics, al primer plano.

“José es un base respetado y con un gran control del balón. Es un muy buen tirador de tres puntos con capacidad para organizar bastante bien al equipo. Encajará en lo que estamos intentando hacer”, ha vaticinado Jackson, el inventor del ‘Triángulo Ofensivo’, fórmula explotado con éxito en los Bulls de Jordan y los Lakers de Kobe y Shaquille. Con Carmelo Anthony renovado hasta 2019, Calderón supondrá una pieza imprescindible en este Triángulo de Jackson que Derek Fisher trasladará en su primera experiencia como técnico.

Calderón, en la Gran Manzana con los mediáticos Knicks.
Marc Gasol concluye contrato con los Grizzlies.
Ricky Rubio necesita, de una vez, mejorar su tiro.
Los otros cuatro españoles en la NBA (Marc Gasol, Ricky Rubio, Serge Ibaka y Víctor Claver) no se han movido. Para Marc Gasol y Ricky Rubio, esta próxima temporada es muy importante. Gasol concluye su segundo contrato con Memphis. Será uno de los próximos agentes libres más deseado. Pretendientes no le faltarán. Memphis confía en que siga. Ha hecho hueco con la renovación a la baja de Randolph. El éxito o fracaso de esta temporada marcará el futuro de Marc en la NBA.

“En la Conferencia Oeste, los playoffs son carísimos, pero hay que estar ahí. Ese es nuestro interés siempre y lo es porque sabemos que luego competimos con cualquiera. El objetivo sería estar entre los cuatro primeros y, cuanto más arriba, mejor”, ha analizado Gasol sobre la que podría ser su última campaña en Memphis. “Bueno, tanto como un año especial, no lo creo, y más en la NBA, porque en una Liga tan competitiva cada temporada es especial, sobre todo porque nunca sabes si la vas a terminar, ni de qué manera, ni cuándo se va a acabar este sueño”.

Ricky finaliza también contrato, su contrato ‘rookie’. Su caso es distinto al de Gasol. Ricky, más tras la salida de Love, quiere prorrogar su estancia en Minnesota, ser un referente en los Timberwolves. El proyecto futuro pinta muy bien: Wiggins, Bennett, LaVine, Dieng, Muhammad, Young, Pekovic e incluso Kevin Martin. Ricky quiere dirigir en la pista a una franquicia con sueños reales de grandeza. Minnesota está dispuesta al acuerdo, pero no a cualquier precio. El agente de Rubio ha pedido el máximo (cinco años por 85 millones de dólares). El acuerdo está, ahora mismo, muy lejos.

Tendrá que sudarlo en la cancha. Rubio necesita, de una vez, mejorar en ataque. Es el jugador con peor porcentaje de tiro en la NBA en los últimos cuarenta años con, al menos, 1.500 lanzamientos: un tristísimo 36%. Minnesota ha llegado a contratar a un entrenador de tiro, el exjugador de los Lakers Mike Penberthy, para pulir a Ricky: “He entrenado mucho mi tiro, no voy a mentir, pero también he trabajado mi musculatura y atletismo. Tienes que encontrar equilibrio. Si te musculas demasiado, puedes perder velocidad o tus puntos fuertes. He buscado ese equilibrio”.

Ibaka y la trascendencia en Oklahoma.
Claver y la irrelevancia en Portland.
Serge Ibaka tiene sus propios deberes en Oklahoma. Sus números no han parado de crecer desde que llegó a la NBA hace cinco años. Se elevó a los 15,1 puntos por partido en la fase regular, tope máximo en su carrera, en un equipo con dos francotiradores como Durant y Westbrook que aglutinan el juego ofensivo. Ibaka siempre está ahí. En ataque, con un tiro adquirido de cuatro-seis metros muy eficaz, y, por supuesto, en defensa. Es el rival que nadie quiere tener enfrente dispuesto siempre a saltar y taponar.

“Está preparado para mejorar y dar un paso más, y creo que lo ha hecho. Creo que debería mejorar su lanzamiento desde el perímetro, es algo que quería mejorar y esperaremos para ver si lo ha logrado”, ha expuesto el técnico de los Thunder, Scott Brooks, en la pretemporada. Con Durant lesionado hasta avanzado diciembre, Ibaka tendrá responsabilidades de líder junto con Westbrook. Y cuando vuelva Durant, también.

Víctor Claver cierra la participación española en la NBA. Jugador, guste o no, de relleno. El valenciano, que puede convertirse en agente libre al final del campeonato, no se ha acoplado al baloncesto americano. Sus números son muy pobres: 3,8 puntos de media en 49 encuentros en su primer año y aún menos, 2,2 puntos de media en solo 21 partidos, en su segunda experiencia con los Blazers. Carne de banquillo, de fondo de ropero que no tiene pinta de cambiar. Todo un reto.