viernes, 26 de octubre de 2018

Verde alarga la racha

El Real Valladolid no alcanza el sueño del coliderato con el Barça pero encadena su sexto encuentro invicto gracias a un lanzamiento de falta del italiano en el tiempo extra. Un golazo que hizo justicia en el marcador. El Espanyol, que atrapa a los azulgranas en la clasificación, se adelantó a los veinte minutos con un obús de Borja Iglesias, pero el equipo de Sergio González dominó en la segunda mitad y mereció el empate.

Verde recibe la felicitación de Kiko Olivas e Ivi. Fotos: www.realvalladolid.es.
No hubo liderato. El histórico Real Valladolid de la temporada 1950/51, con Juan Antonio Ipiña en el banquillo y Coque, Saso, los hermanos Lesmes, Lasala y Ortega en el campo, sigue siendo el último equipo blanquivioleta que gobernó la clasificación en Primera. Ocurrió entre la segunda y la undécima jornada, entre mediados de septiembre y mediados de noviembre de 1950. Un hito, de momento, irrepetible.

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No hubo liderato, pero la afición de Zorrilla se marchó a casa entregada a su equipo. El golazo de falta del italiano Daniele Verde en el tiempo extra rescató un merecido punto ante el Espanyol, que hasta el domingo, el día del Clásico en el Camp Nou, compartirá el liderato con el Barça. Los pericos se adelantaron a los veinte minutos, con un obús de Borja Iglesias, y fueron mejores en la primera mitad, pero la segunda parte tuvo color blanquivioleta.

El Real Valladolid sigue de dulce: sexta jornada invicto, con dos empates y cuatro victorias. Una racha inédita desde el curso 2003/04. El equipo entonces dirigido por Fernando Vázquez sumó siete encuentros sin perder (tres triunfos y cuatro empates) entre finales de octubre y principios de diciembre. El empate ante el Espanyol permite al Real Valladolid igualar en la tabla con el Sevilla y el Atlético. Solo una victoria del Real Madrid en el Camp Nou sacaría a los blanquivioletas de la zona europea.

El misil de Verde fue una consecuencia tardía, pero lógica, del momento que saborea el Real Valladolid. Zorrilla lleva meses viviendo en una nube: la remontada del final de la pasada Liga desde la llegada de Sergio González al banquillo, el arrollador playoff y ascenso ante el Sporting y el Numancia, la histórica campaña de abonados con lista de espera incluida, la compra de Ronaldo del club y el buen juego y los positivos resultados del equipo en su regreso a Primera. Todo es posible en Zorrilla.

Esa sensación ha calado hondo en el vestuario y la grada. El empate se hizo de rogar, pero nadie dejó de confiar. Ni cuando el reloj apretaba. El Real Valladolid minimizó en la segunda mitad a un buen equipo como el Espanyol, que tuvo que refugiarse atrás. Verde aliviaba, en cierto modo, la injusticia del gol de Jony en el último minuto, que le valió la victoria al Deportivo Alavés en Zorrilla, y la amargura que dejó el VAR tras anular el empate de Keko ante el Barça.

El duelo por el liderato arrancó sin sorpresas en el once del Real Valladolid y con la novedad de Melendo por Granero en el Espanyol. El encuentro discurría con el guion previsto, con el Espanyol con algo más de balón ante un Real Valladolid, como siempre en este inicio de temporada, muy bien ordenado en defensa y con las ideas muy claras en ataque. Y es que las dos primeras ocasiones de gol fueron locales.

Marc Roca persigue a un sensacional Toni Villa.
Toni, a los seis minutos, recibía desmarcado en posición de mediapunta, pero remataba fuera. El canterano firmó otro buen encuentro, pero sigue sin marcar. Al murciano solo le falta el gol para terminar de explotar en Primera. Tres minutos después, Leo Suárez estuvo muy cerca de castigar una indecisión entre David López y Diego López. El Espanyol cuidaba bien el balón, pero el Real Valladolid se mostraba más peligroso.

Y llegó Borja Iglesias. A los veinte minutos, culminó una contra con una potencia digna de Ronaldo, con un obús con la pierna derecha. La acción arrancó con un robo de Melero tras un pase horizontal de Javi Moyano que no llegó a Míchel. Una imprecisión que el Real Valladolid repitió en demasiadas ocasiones en una primera mitad en la que el Espanyol también supo encontrar los espacios a la espalda de la zaga local.

Borja Iglesias le ha tomado la matrícula a los blanquivioletas. Ya le hizo cinco goles, tres desde el punto de penalti, en la pasada temporada con la camiseta del Real Zaragoza. Cerró el curso con 22 dianas y despertó el interés de medio fútbol español, incluido un Real Valladolid que no pudo competir económicamente con el Espanyol, que pagó diez millones de euros por el delantero en nómina del Celta. Los vale. Marca diferencias.

El gol desajustó al Real Valladolid y elevó la figura de Hernán Pérez, lesionado justo antes del descanso. El paraguayo, que ya coincidió con Rubi en sus respectivas etapas a orillas del Pisuerga, desarboló por ambas bandas y pisó con frecuencia el área. Masip (333 minutos imbatido hasta el trallazo de Borja Iglesias) se lució, a cuatro minutos del descanso, tras un clarísimo cabezazo de Hernán Pérez para evitar el 0-2.

No estaba todo dicho. Toni, con un par de peligrosas apariciones en la recta final de la primera parte, se lo avanzó al Espanyol. El Real Valladolid corrigió los errores en la entrega del balón y cerró los espacios a la espalda de la defensa. Pero, sobre todo, subió el nivel de intensidad para ir a por el empate. Nacho se colocó prácticamente como extremo durante toda la segunda parte, con Toni más liberado para desplegar su clase.


Arriba, Hernán Pérez, lesionado al filo del descanso.
Abajo, Míchel vigila al veterano Sergio García.
Sergio recurrió a Óscar Plano, superada su lesión de hombro, y el dominio comenzó a ser acoso con mucho tiempo por delante. Alcaraz se prodigaba en las incorporaciones desde segunda línea y perdonaba el empate al cuarto de hora tras un robo de Óscar Plano. El centrocampista catalán mandaba por encima del larguero un balón franco ante Diego López. El Espanyol respiraba tras detener la primera avalancha.

La insistencia blanquivioleta no amainó, pero faltó remate. El trabajo de Enes Ünal es indiscutible, como el desborde de Toni, pero lo cierto es que al Real Valladolid le cuesta marcar: ocho goles en diez jornadas. Sergio agitó el banquillo con la entrada del impetuoso Verde, que no jugaba desde hacía dos meses en la visita a Getafe, por Javi Moyano. El italiano, fiel a su estilo, desequilibró pero, sobre todo, mantuvo el pulso hasta el final, hasta el empate.

Zorrilla no alcanzó el sueño del liderato, pero tiene un equipo ilusionante que sigue sin perder y que, a día de hoy, se ve capaz de todo en esta Liga. Y la próxima jornada espera, ni más ni menos, que el Real Madrid en el Santiago Bernabéu. ¿Dudas? Ninguna. Antes, oportunidad para los suplentes en la Copa ante el Real Mallorca en Son Moix.

Ficha técnica:

Real Valladolid 1: Masip; Javi Moyano (Verde 74’), Kiko Olivas, Calero, Nacho; Alcaraz, Míchel, Antoñito, Toni (Ivi 87’); Leo Suárez (Óscar Plano 55’) y Enes Ünal.

Espanyol 1: Diego López; Javi López, David López, Hermoso, Dídac; Melendo (Víctor Sánchez 66’), Marc Roca, Darder; Hernán Pérez (Piatti 46’), Borja Iglesias y Sergio García (Duarte 78’).

Goles:

0-1 (min. 20): Borja Iglesias. Pase horizontal de Javi Moyano, desde el lateral derecho, a Míchel, casi en la medular. Melendo se adelanta al valenciano y lanza la contra tras conectar con Borja Iglesias. El delantero gallego progresa y suelta un obús con la diestra desde más de 25 metros que se cuela cerca de la escuadra del arco izquierdo de Masip. Calero dejó espacio a Borja Iglesias para el remate y Alcaraz no llegó a tiempo para cerrar.

1-1 (min. 91): Verde. Golazo de falta del italiano. Verde golpea con la izquierda desde bastante lejos, incluso más que Borja Iglesias en el gol del Espanyol. El balón, aunque centrado, va con mucha potencia y sorprende, con un efecto de arriba abajo, a Diego López.

Árbitro: Cordero Vega (colegio cántabro). Amonestó a Kiko Olivas (45+2’), Alcaraz (61’), Míchel (63’) y Óscar Plano (93’), por el Real Valladolid, y a Javi López (73’) y Dídac (75’), por el Espanyol.

Incidencias: 10ª jornada de LaLiga Santander. Nuevo Estadio José Zorrilla. Gran entrada, con 18.231 espectadores.

Las notas:

Masip (9): Borja Iglesias, con un zapatazo con la derecha, rompió la imbatibilidad del portero catalán. Masip ha estado un total de 333 minutos sin recibir un gol. El cancerbero del Real Valladolid nada pudo hacer ante el misil de Borja Iglesias. Antes del descanso, Masip realizó la parada del encuentro con una estirada para desviar un potente cabezazo de Hernán Pérez en el área pequeña. Una acción decisiva en el devenir del choque. El Espanyol rozó el 0-2. Los pericos dispararon otras dos veces entre los tres palos, pero con mucho menos peligro. Tres minutos después del gol de Borja Iglesias, Masip se resbaló a la hora de comenzar una jugada, pero consiguió sacar el esférico del área. Hernán Pérez cerró la acción con un disparo desviado.

Javi Moyano (5): Telegrafió un pase horizontal a Míchel, desde el lateral derecho a la medular, que originó el gol de Borja Iglesias. Melendo detectó las intenciones del capitán del Real Valladolid y cortó el envío, al que le faltó fuerza, para lanzar una contra que significó el 0-1. Moyano, sustituido a falta de un cuarto de hora por Verde, estuvo providencial a la media hora tras lanzarse al suelo para frustrar un claro remate de Sergio García en el área local.

Kiko Olivas (7): Titular tras una semana con un esguince en el tobillo izquierdo. El central malagueño jugó a pleno rendimiento. La zaga blanquivioleta sufrió en la primera mitad desde el gol de Borja Iglesias al descanso, pero estuvo fenomenal en la segunda parte. Amonestado en el tiempo extra del primer periodo por juego peligroso ante Hernán Pérez.

Calero (7): El vallisoletano lleva semanas rodeado de rumores por su gran rendimiento en su debut en Primera. Unos rumores que han crecido en los últimos días tras el seguimiento del exinternacional Marchena, en la secretaría técnica del Sevilla, en el último encuentro en el Villamarín. Calero no ha perdido la concentración. Volvió a firmar otra buena actuación ante el Espanyol.

Nacho (8): De cuestionado en Segunda a imparable en Primera. Las cosas del fútbol. Nacho metió al Espanyol atrás. El lateral madrileño se convirtió casi en un extremo en la banda izquierda en la segunda parte, con Toni tirado al centro. Abrió mucho el campo. El impulso del Real Valladolid se centró en su banda. A los once minutos de la segunda parte, templó un muy buen centro al que no llegó Óscar Plano por muy poco.

Alcaraz disputa un balón con el goleador Borja Iglesias.
Alcaraz (8): El gol in extremis de Verde redimió al centrocampista catalán. Con 0-1, a los 62 minutos, falló una ocasión clarísima con un disparo en el área de Diego López que, con todo a favor, se marchó por encima del larguero de la portería del Espanyol. Alcaraz está encontrando opciones de gol en todos los encuentros. No solo guarda bien su parcela, con múltiples robos de balón, sino que también se complementa muy bien con Míchel en la creación de juego y, además, se incorpora con mucho peligro desde segunda línea. Pasada la media hora, ya estuvo cerca del gol tras cazar un despeje de Diego López y disparar desviado desde la frontal. Amonestado a los 61 minutos por una dura falta a Marc Roca.

Míchel (8): Ha dado un paso adelante en Primera y está ofreciendo su mejor versión. Es la extensión en el campo de las ideas de Sergio González. Técnicamente, fue el mejor jugador de ambos equipos en la medular. Marcó el ritmo de la reacción del Real Valladolid tras el descanso. Probó el disparo en dos ocasiones, ambas desde lejos, aunque sin fortuna. Participó, involuntariamente, en el gol de Borja Iglesias. El valenciano no alcanzó a tiempo un pase de Javi Moyano. Melendo se adelantó. Recibió una cartulina amarilla, en el minuto 63, tras una falta a Darder.

Antoñito (6): Comenzó como interior derecho y terminó como lateral tras la incorporación de Verde por Javi Moyano. Tras su estreno goleador en Primera en el Benito Villamarín, se mostró algo conservador frente al Espanyol. A pesar de sus notables cualidades ofensivas, al Real Valladolid le faltó profundidad por su banda.

Toni (8): Laureano Antonio Villa es un extraordinario futbolista que no corrige (está a tiempo) una notable carencia: el gol. Toni realizó un encuentro muy completo, pero sigue sin ver portería tras diez jornadas. El canterano partió como interior zurdo pero a menudo, en especial tras el descanso, se metió por el centro para facilitar las subidas de Nacho por la banda. A los seis minutos, tras recibir un pase de Javi Moyano en la posición de mediapunta, disparó fuera sin ningún defensa del Espanyol en las inmediaciones. Antes del descanso, lideró una reacción local en los peores momentos del Real Valladolid. Así, esta vez como interior zurdo, obligó a Diego López a estrenar sus guantes para repeler un buen lanzamiento. Poco después, el murciano ganó la línea de fondo tras romper a Marc Roca, pero su centro no encontró rematador. El caudal ofensivo de Toni no se detuvo en la segunda mitad. Asistió a Alcaraz en la clarísima ocasión que el catalán no concretó y no encontró la portería de Diego López en un remate a siete minutos del final. Poco después fue sustituido por Ivi.

Leo Suárez inicia un regate anta la defensa del Espanyol.
Leo Suárez (6): Con Duje Cop lesionado, acompañó a Enes Ünal en punta, algo más retrasado que el turco. El argentino es la opción de Sergio González cuando faltan Cop o Ünal. Ante el Espanyol no se mostró tan activo como ante el Real Betis en la pasada jornada. Su acción más destacada ocurrió a los nueve minutos cuando desaprovechó un fallo de entendimiento entre David López y Diego López. El argentino cazó el balón en el área, pero no ejecutó un buen disparo. Fue el primer cambio de Sergio González. Se fue al banquillo a los diez minutos de la segunda mitad.

Enes Ünal (6): No marca desde hace un mes en la victoria ante el Levante. El turco no ha encontrado en los últimos partidos opciones especialmente claras de gol. A cambio ofrece un notable trabajo de desgaste con los centrales que facilita la tarea de sus compañeros que llegan desde la segunda línea.

Óscar Plano (8): Primer cambio de Sergio González. Entró por Leo Suárez, a los diez minutos de la segunda parte, para potenciar la delantera del Real Valladolid. El madrileño no notó la inactividad de un mes tras su lesión en el hombro derecho. La entrada de Óscar Plano, la profundidad de Nacho, la constancia de Toni, la organización de Michel y las incorporaciones de Alcaraz protagonizaron la reacción del Real Valladolid en la segunda parte. Nada más entrar, no llegó por poco a un buen balón de Nacho. Originó, con un robo, la jugada que concluyó con una clarísima ocasión de Alcaraz. Vio una amarilla en el tiempo extra.

Verde (9): La sensación. El italiano no había tenido mucha suerte en sus primeros meses en Zorrilla. Suplente en las tres primeras jornadas, ante el Girona, el Barça y el Getafe, con apenas 47 minutos entre los tres encuentros. Su progresión se cortó con una lesión muscular que le dejó fuera del equipo durante cinco jornadas. Ya estuvo en el banquillo en Sevilla, pero no jugó. Sergio González buscó meter una marcha más con el eléctrico internacional sub21 italiano, que relevó a Javi Moyano a falta de dieciséis minutos. Le falta pausa a su juego, pero lo compensa con su intensidad. Se movió mucho hasta que encontró su opción: una lejana falta directa en el minuto 91. A Verde no le importó la distancia y soltó un potente zurdazo, de arriba abajo, que sorprendió a Diego López. Un golazo que levantó al mismo Ronaldo del palco.

Ivi (-): Sustituyó a Toni en el minuto 87. De momento, a Ivi le está costando mucho entrar en el equipo.

Sergio González (9): Repitió el once que ganó a domicilio al Real Betis, con Kiko Olivas recuperado de su esguince de tobillo. Mejoró al equipo tras el descanso con los cambios, una mayor intensidad y una mayor atención en los pases. Óscar Plano y Verde fueron decisivos en la segunda parte.