Las blanquiazules, que perdieron por cinco goles en la ida, remontan tras doblegar por ocho (30-22) al Balonmano Porriño. El encuentro llegó igualado al descanso (12-11). Teresa Álvarez cambió el ritmo en la segunda parte para decantar la eliminatoria.
Danila So Delgado, ausente en el primer partido por unas molestias en una rodilla, encabezó la ofensiva blanquiazul con siete tantos. Foto: www.bmaula.es |
Lo hizo en el año pasado y lo ha vuelto a hacer.
Con sufrimiento, con menos goles al contraataque de lo esperado y con muchísimo trabajo. De esta manera, el equipo de Miguel Ángel Peñas consiguió el pasaporte para la fase final de la Copa de la Reina.
Las vallisoletanas se impusieron a un rocoso Balonmano Porriño, que aguantó vivo durante 45 minutos en la eliminatoria y que puso en muchos problemas a las blanquiazules. Al final, ocho goles de diferencia (30-22) que mandan directos a las de Miguel Ángel Peñas a pelear por el título.
El Caja Rural Aula Valladolid encontró rápidamente el ritmo que le gusta, pero no lo tradujo en una ventaja clara en el marcador ya que le faltó acierto y, además, se chocó ante Fátima Rosales, que cerró la portería gallega. El Balonmano Porriño sabía que no podía dejar que las vallisoletanas corrieran y por eso presionaba a Teresa Álvarez para evitar que las blanquiazules se sintieran cómodas. Pero el verdadero problema del Aula era la falta de acierto en las acciones claras, que le impedía lanzarse en el electrónico.
El 6:0 de Miguel Ángel Peñas funcionaba bien y cortocircuitaba el juego de las gallegas. El Balonmano Porriño tenía que serenar el partido, tratar de jugar ataques largos para desconectar a las vallisoletanas. Pero las pérdidas lastraban su idea inicial. El encuentro no acababa de decantarse para ninguno de los dos equipos y se llegó al ecuador de la primera mitad con una mínima renta para las blanquiazules (6-5).
En el ataque, Danila So Delgado regresaba tras unas molestias en una rodilla con el claro propósito de establecer la diferencia en la eliminatoria. Así que cogió las riendas y destrozó a la defensa gallega tanto con lanzamientos como con penetraciones. El Caja Rural Aula Valladolid quería correr tanto que se precipitaba en algunas ocasiones, lo que provocaba alguna inoportuna pérdida. Las exclusiones, dos de Elena Cuadrado y otra de Elba Álvarez, pasaron factura a las blanquiazules, que se atascaron antes del descanso.
Ni siquiera la impresionante actuación de Lulu Guerra, que sumó nueve paradas en la primera mitad, resultó suficiente como para que el Caja Rural Aula Valladolid se pudiera ir a los vestuarios con un margen importante (12-11). Las vallisoletanas ya sabían que iban a sufrir y que tenían que cerrar la conexión en los seis metros con la pivote.
Las cosas no cambiaron mucho en la segunda mitad, con las dos porteras muy metidas y con el Balonmano Porriño frenando el ritmo del duelo. Teresa Álvarez era consciente de que necesitaba imprimir velocidad al encuentro y protagonizó una jugada clave. No solo anotó a la carrera sino que forzó la exclusión de Haridian Rodríguez e impulsó al equipo hacia arriba. Porque en esa superioridad cimentó el Caja Rural Aula Valladolid su primera ventaja significativa (18-14, minuto 41).
El partido llegó al punto que deseaban las vallisoletanas. Solo quedaba por ver si eran capaces de rematarlo o si el Balonmano Porriño respondía. Y las gallegas lo hicieron con una gran conexión entre Tavares y Haridian, que detuvo el despegue blanquiazul. Aunque fue algo momentáneo.
El Caja Rural Aula Valladolid sabía que había llegado el momento de apretar para alcanzar esa ansiada ventaja de cinco goles. Y ocurrió a la carrera de la mano de la conexión Teresa Álvarez-Cristina Cifuentes: 21-16. Al fin, esos cinco tantos que permitían soñar a las vallisoletanas.
Las gallegas quisieron reaccionar, pero se habían encendido todas las alarmas. Ismael Martínez tuvo que parar el partido con un tiempo muerto para intentar que el Caja Rural Aula Valladolid no terminara por romperlo definitivamente. El técnico del Porriño decidió vaciar la portería y jugar con siete de campo para buscar una mejoría en el juego ofensivo.
A diez minutos del final, las vallisoletanas veían cerca la fase final de la Copa de la Reina (24-18). Solo les quedaba saber manejar con inteligencia los últimos minutos. Y lo hicieron a la perfección. Sobre todo porque una exclusión de Sandra Fernández le dio aire al ataque blanquiazul.
La eliminatoria ya tenía un ganador. El Caja Rural Aula Valladolid vuelve a la fase final de su competición favorita.
Ficha
técnica:
Caja Rural Aula Valladolid 30 (12+18): Lulu Guerra (portera, 13 paradas), Teresa Álvarez (3), Danila So Delgado (7, 2p.), Lorena Téllez (5), Amaia González de Garibay (1), Rafi Bergara (-) y Cristina Cifuentes (4) –siete inicial– Elba Álvarez (4), Inoa Lucio (4), Elena Cuadrado (2), Sara Molés (-), Jimena Laguna (-), Savina Bergara (-), Malena Valles (-) y Carmen Sanz (portera suplente).
Conservas
Orbe Rubensa Balonmano Porriño 22 (11+11): Fátima
Rosales (portera, 9 paradas), Anthia Espiñeira (1), Micaela Casasola (4, 1p.), Aitana
Santomé (1), Maider Barros (-), Thais Fermo (3) y Haridian Rodríguez (8, 2p.) –siete
inicial– Erica Tavares (5), Arima López (-), Inés Hernández (-), Sarai Samartín
(-), Sandra Fernández (-), Carmen Castro (-), Carolina Bono (-) y Estela
Carrera (portera suplente).
Parciales
cada cinco minutos: 3-3, 4-3, 6-5, 8-6, 9-8,
12-11 (descanso) 15-13, 17-14, 21-16, 24-18, 27-19 y 30-22.
Árbitros: Arcos Adeva (federación madrileña) y Luque Cabrejas (federación
catalana). Excluyeron a Elena Cuadrado (18’ y 26’) y Elba Álvarez (22’), por parte
del Caja Rural Aula Valladolid, y a Aitana Santomé (7’), Inés Hernández (27’), Haridian
Rodríguez (38’) y Sandra Fernández (53’), por parte del Conservas Orbe Rubensa Balonmano
Porriño.
Incidencias: Partido de vuelta de la segunda ronda de la Copa de la Reina 2021/22. Huerta del Rey, con más de 500 espectadores.
Crónica de www.bmaula.es