sábado, 18 de septiembre de 2021

A un favorito no se le pita eso

Tercera derrota consecutiva del Real Valladolid. Los blanquivioletas pierden en Montilivi con un discutible penalti de Queirós en el mejor momento de los de Pacheta. Stuani no perdonó desde los once metros a la hora del encuentro. El internacional ecuatoriano Plata debutó y disputó la última media hora.

Kiko Olivas corta un avance de Ureña. Foto: www.realvalladolid.es
Al Real Valladolid no le respetan.


Cierto es que no se lo ha ganado en este decepcionante inicio de temporada.

El cartel de máximo favorito al ascenso es historia. Tercera derrota consecutiva en Montilivi, aunque injusta por las formas y por el fondo. No mereció perder (tampoco ganar).

El Girona y el Real Valladolid justificaron su mal momento, con tres y dos tropiezos consecutivos, respectivamente, y apostaron con fuerza por el empate sin goles. No ocurrió porque González Esteban indicó los once metros tras una caída light de Valery en el área de Roberto. Queirós tocó al extremo del Girona, aunque no lo suficiente como para decidir un partido con un penalti tan barato. A un favorito no se le pita eso. A ningún grande se le pita eso.

Pero al Real Valladolid de Pacheta le vienen muy grandes, de momento, tales consideraciones. Es un equipo menor con el balón, temeroso. Sin confianza, herencia directa del calamitoso pasado curso que vivió y sufrió una gran parte del vestuario actual. El penalti, que Stuani ejecutó tras salir directo del banquillo, le hundió. Apenas dos intentos de Roque Mesa, que tiró de liderazgo en la parte final, y los fogonazos de Toni Villa y el debutante Plata, que tuvo media hora. Poco para empatar.

El gol del Girona llegó, no obstante, cuando menos se esperaba. Tras una insustancial primera parte, sin ocasiones y sin fútbol, pero con lluvia, el Real Valladolid arrancó mejor tras el descanso. Nacho disparó fuera en el área tras cazar un balón suelto. A continuación, Óscar Plano remataba con mucho peligro desviado desde la frontal. Los blanquivioletas apretaban y atisbaban la posibilidad de llevarse los tres puntos, algo que aún no han conseguido en Montilivi.

Tardó demasiado el Real Valladolid en ir a por el partido. Desperdició el primer periodo, a pesar de salir con cuatro cambios en el once con respecto a la última derrota ante el Tenerife, con las incorporaciones de Joaquín, Nacho, Aguado y Anuar. El andaluz estrenaba titularidad en la Liga con la camiseta blanquivioleta. Mientras, el canterano llevaba casi dos años, desde el 29 de octubre de 2019 en el Camp Nou, sin aparecer en el once del Real Valladolid. Con mucha dinamita en el banquillo (Toni Villa, primera suplencia en esta temporada, el esperado Plata, Sergio León y Cristo). Los cuatro acabaron salieron en la segunda mitad, ya con el marcador en contra.

Lo que no cambió Pacheta fue el sistema. Otra vez los tres centrales. Otra vez dos carrileros largos, aunque con Nacho en el puesto de Olaza. Al menos, ante el Girona la defensa no falló. Tampoco es que el conjunto de Míchel pusiera la misma intensidad que el Burgos y el Tenerife en las pasadas jornadas. El partido era de empate a cero por incomparecencia en las áreas de dos equipos con más dudas que juego.

Roque Mesa, el único insustituible en la medular, estrenó compañeros, Aguado y Anuar, con Óscar Plano como segunda punta, pero el resultado fue similar a los últimos encuentros. El Real Valladolid no llega, ni siquiera con los carrileros como pretende Pacheta para justificar su propuesta. Weissman estuvo desaparecido. Juan Carlos vivió tranquilo, más allá de un disparo lejano de Roque Mesa.

El riguroso penalti de Queirós cortó la mejoría blanquivioleta tras el descanso. Impidió comprobar si el plan había realmente cambiado o, al menos, la actitud. Después, con el partido cuesta arriba, volvieron las dudas, independientemente de los nombres sobre el césped. Plata quiso demostrar demasiadas cosas y acabó restando más que sumando. Toni Villa gestionó mal su suplencia con un exceso de individualismo. A Sergio León y Cristo les fue peor, casi ni se les vio.

No hubo reacción, como en Burgos, como ante el Tenerife. Tendrá que ser, necesariamente, en la próxima jornada en Zorrilla ante el colista, el Alcorcón, que ha despedido a toda una institución, Anquela, tras cinco derrotas en seis jornadas. A Pacheta y al Real Valladolid ya no le quedará otra si quieren realmente ganarse el respeto en la categoría y aspirar al ascenso.

Ficha técnica:

Girona FC 1: Juan Carlos; Jordi Calavera, Juanpe, Bernardo, Jairo; Terrats (Lozano 78’), Aleix García, Borja García (Sarmiento 82’); Valery (Samu Sáiz 81’), Bustos (Stuani 59’) y Ureña (Álex Baena 59’).

Real Valladolid 0: Roberto; Luis Pérez, Joaquín (Sergio León 69’), Kiko Olivas, Javi Sánchez (Queirós 46’), Nacho; Roque Mesa, Anuar (Toni Villa 69’), Aguado; Óscar Plano (Plata 69’) y Weissman (Cristo 81’).

Goles:

1-0 (min. 60): Stuani, de penalti. Discutible pena máxima de Queirós sobre Valery. Hay contacto, pero muy débil. Stuani salta al campo para ejecutar el lanzamiento tras engañar por completo a Roberto.

Árbitro: González Esteban (colegio vasco). Amonestó a Terrats (54’) y Jordi Calavera (88’), por parte del Girona FC, y a Roque Mesa (29’) y Aguado (94’), por parte del Real Valladolid.

Incidencias: 6ª jornada de LaLiga Smartbank. Montilivi. 3.534 espectadores. Los jugadores del Real Valladolid salieron con camisetas con el lema ‘Ánimo Hugo’ para apoyar a Hugo Vallejo, gravemente lesionado en esta semana. Mientras, el Girona homenajeó a Aday, que ha cerrado su etapa en Montilivi con 199 partidos oficiales en seis temporadas.

Las notas:

Roberto (5): Stuani le engañó por completo en el penalti que decidió el encuentro. No mucho más hizo el Girona en ataque, con un cabezazo cruzado de Bernardo tras una falta lateral en la primera parte y una llegada de Terrats tras una dejada de Stuani en el área ya con el marcador a favor de los catalanes. 

Luis Pérez (5): No brilló por el carril derecho. Mediado el segundo tiempo, la defensa del Girona le cortó un cabezazo blando en el área tras un centro de Nacho.

Joaquín (5): Recuperó la titularidad tras perderse los dos últimos partidos ante el Burgos y el Tenerife por una lesión muscular. La zaga estuvo mejor. Cierto es que el Girona tampoco apretó. Sustituido mediado el segundo periodo por Sergio León.

Kiko Olivas (5): El único de los tres centrales que aguantó los noventa minutos. Sin problemas en el área. Poco exigido.

Javi Sánchez (5): De nuevo, con problemas físicos. El central madrileño fue relevado en el descanso por Queirós.

Nacho (5): Una de las sorpresas del once en Montilivi. Hasta ahora apenas había jugado la segunda parte en Burgos. Tuvo libertad para incorporarse arriba, pero no excesiva claridad. A los cinco minutos de la continuación, cazó un balón suelto en el área, pero se le marchó fuera.

Roque Mesa (6): Acabó siendo el jugador con más presencia ofensiva del Real Valladolid. El canario, frustrado por el marcador, tiró de carácter. Ya firmó el primer disparo del equipo de Pacheta, casi a la media hora, que atrapó Juan Carlos. Lideró el último empujón con un cabezazo fuera en el área en una posición complicada y un segundo lanzamiento lejano que atajó el portero del Girona. Amonestado cerca de la media hora tras cortar una contra de Borja García.

Anuar (5): Titular por primera vez con la camiseta del Real Valladolid desde el 29 de octubre de 2019 en el Camp Nou, casi dos años. Corrió y presionó mucho, aunque aportó poco en el ataque. Sustituido por Toni Villa en el ecuador de la segunda parte.

Aguado (6): La gran novedad del once. El andaluz, que ya había tenido minutos en los cinco anteriores partidos saliendo desde el banquillo, estrenó titularidad en la Liga con el Real Valladolid. Salió con muy buena predisposición, con dos disparos desde la frontal que taponó la defensa del Girona. Vio una cartulina amarilla en el tiempo extra por una falta sobre Samu Sáiz.

Óscar Plano (4): Conservó su puesto de titular, aunque adelantó su posición y jugó más adelantado, cerca de Weissman. Gris actuación del madrileña, con escasa relevancia en los últimos metros. Se marchó al banquillo mediada la segunda parte por Plata.

Weissman (4): Aburrido. Los compañeros no le encuentran. Durante muchos minutos, el israelí fue una isla. Relevado por Cristo a once minutos del final.

Queirós (4): Involuntario protagonista de la derrota. El portugués salió por el lesionado Javi Sánchez tras el descanso y cometió un penalti muy light sobre Valery. Hubo contacto, suficiente para el colegiado.

Toni Villa (5): Suplente por primera vez en esta temporada. Entró por Anuar mediada la primera parte. Participativo, aunque algo individualista.

Plata (5): Debutante. El internacional ecuatoriano jugó algo más de veinte minutos tras relevar a Óscar Plano. Ocupó la banda derecha. Salió con muchas ganas, aunque algo pasado de revoluciones.

Sergio León (4): Relevó a Kiko Olivas en el ecuador del segundo periodo para buscar el empate. Pero el delantero cordobés no apareció.

Cristo (5): Último cambio. Entró por Weissman a nueve minutos del final. Algo mejor que Sergio León.

Pacheta (3): Tercera derrota consecutiva y primeras miradas al banquillo. El técnico burgalés introdujo cuatro novedades en el once con respecto a la pasada jornada ante el Tenerife, con las incorporaciones de Joaquín, Nacho, Anuar y Aguado por Queirós, Olaza, Alcaraz y Toni Villa, respectivamente, pero no tocó el esquema. Siguieron los tres centrales y los dos carrileros. El equipo estuvo mejor en la defensa, aunque el Girona colaboró en esa sensación, pero no fluyó en el ataque. Tiró la primera parte. Cuando mejor estaba, con una mejor cara en el comienzo de la segunda mitad, llegó el penalti que decidió la victoria catalana. Pacheta buscó la reacción con un triple cambio ofensivo, el debutante Plata, Toni Villa y Sergio León, y más tarde con Cristo, pero las ocasiones fueron escasas y no demasiado peligrosas.