sábado, 2 de febrero de 2013

Real Valladolid y Athletic ‘aceptan’ un empate con goles, calidad y mucha intensidad

El equipo de Djukic se adelantó con dos tantos de Guerra y Bueno en un magnífico primer cuarto de hora. El Athletic recortó distancias gracias a De Marcos, igualó el juego e incluso fue superior en varias fases de la primera mitad y del inicio de la segunda, cuando empató Susaeta. Ambos equipos estrellaron un balón en el palo, Omar por parte pucelana y Aduriz por los vizcaínos, y no renunciaron a la victoria en los últimos minutos. La peor noticia, la lesión de Marc Valiente. El central catalán fue sustituido pasada la media hora de juego con un fortísimo golpe en el pómulo izquierdo (doble fractura en el malar y en el arco cigomático izquierdo) tras impactar en su rostro el codo de Aduriz.

Bueno y De Marcos, en el suelo, pugnan por un balón ante Sastre.
Fotos: Ángel Becerra (www.realvalladolid.es)
Bello espectáculo deportivo desplegado sobre el césped del Nuevo Estadio José Zorrilla por el Real Valladolid y el Athletic. Un encuentro lleno de alternativas, juego rápido y atractivo, ocasiones y goles resuelto con un empate a dos, el mismo resultado del último duelo en Primera en tierras castellanas y del Trofeo Ciudad de Valladolid del pasado verano. El Athletic, tras ser arrollado en el primer cuarto de hora, fue ligeramente superior en el cómputo general del partido, si bien habría sido injusto que los hombres de Djukic se fueran de vacío, como ya sucedió hace una semana en Valencia ante el Levante.


El fútbol se abrió de inmediato paso sobre las inclemencias del tiempo. El encuentro arrancó con lluvia intensa, que fue desapareciendo con el transcurso de los minutos, y con un fuerte y molesto viento, que se mantuvo toda la noche. Djukic repitió el bloque del equipo que cayó en el último minuto ante el Levante con dos variaciones: Bueno por Omar Ramos y Sastre por Baraja. El técnico serbio confió, de nuevo, en Larsson como sustituto de Ebert y en Javi Guerra en punta pese a la presencia desde el martes en Valladolid de Manucho, tras la eliminación de Angola en la Copa de África.

La confianza de Djukic en el sueco y el malagueño estuvo más que justificada sobre el campo. Ambos fueron los mejores hombres del equipo y participaron decisivamente en los goles blanquivioletas en un extraordinario cuarto de hora inicial. Tocando el balón con eficacia y rapidez, el Real Valladolid desarboló a un Athletic que estuvo arropado en las gradas por más de un millar de aficionados de los leones. Rugía, sin embargo, más fuerte Javi Guerra, que culminaba con la cabeza a los ocho minutos un medido pase de Rukavina. La jugada la había iniciado Óscar, muy flojo en el resto de la noche, en la banda izquierda. Se apoyó en Guerra, quien abrió a Rukavina. El serbio centró al malagueño, sin marca, para establecer el uno a cero.

Bordaba el fútbol el Real Valladolid. Poco después, Guerra, en una gran acción individual cerca del área lateral izquierda de Iraizoz, templó un gran centro al que no llegó ningún compañero. La superioridad en el juego era clara y Alberto Bueno, en una de sus mejores actuaciones de la presente Liga, la agrandó también en el marcador. Iraizoz rechazó un disparo del madrileño que recogió Larsson. El sueco, perfecto, se la devolvió con fuerza a Bueno para que estirando su pierna derecha lanzándose al suelo batiera al meta del Athletic. La defensa vasca no las vio venir en estos primeros quince minutos.

Con 2-0, el encuentro pintaba muy favorable para el Real Valladolid. Pero enfrente había un equipo intenso, orgulloso y luchador como pocos. El Athletic, segundos antes del gol de Bueno, ya había avisado de su peligro por la banda derecha. Susaeta encontró a Aduriz, que cruzó el balón al palo. En el minuto 22, en una jugada casi calcada, De Marcos no falló. Susaeta era un auténtico puñal por la banda derecha que Carlos Peña no podía frenar. El gol de Óscar De Marcos supuso un auténtico revolcón en el mando del choque. El Real Valladolid se asustó y el equipo del ‘loco’ Bielsa dominó por instantes de forma abrumadora con constantes llegadas, aunque sin acierto. Los leones, eliminados de la Europa League y la Copa del Rey, competiciones en las que disputó las finales en el pasado año, y flojos en la primera vuelta de la Liga, parecen haberse reencontrado con su mejor versión. Hace una semana, pasaron por encima del Atlético (3-0) Este viernes, en Valladolid, confirmaron su reacción. Una mejoría a la que no se sumó un discreto Muniain, que se quedó en el vestuario en el descanso, relevado por Ibai Gómez.


Marc Valiente abandona el césped en camilla y conmocionado.
El claro dominio vasco se apaciguó en los últimos diez minutos debido a un desafortunado lance entre Aduriz y Marc Valiente. En un balón aéreo próximo al medio campo, el delantero del Athletic saltó con los brazos abiertos para controlar la pelota. Su codo derecho impactó con gran violencia en el rostro de Marc Valiente. Estrada Fernández, lamentable en toda la noche y muy protestado por ambos equipos, sancionó a Aduriz con tarjeta amarilla en una acción muy dura que debió ser castigada con roja. El exjugador del Real Valladolid, aunque sin intención de hacer daño, se excedió en la costumbre habitual de algunos delanteros de saltar con los brazos desplegados. Una postura que dificulta que los defensas les arrebaten los balones, pero que facilita peligrosos golpes en la cabeza. Marc Valiente, con el pómulo izquierdo hinchado, abandonó el terreno de juego. Reapareció Rueda, tras dos meses lesionado, en su lugar. El primer diagnóstico confirma la gravedad que indicaban las imágenes: doble fractura en el malar y en el arco cigomático izquierdo. Cuando le baje la hinchazón, Valiente tendrá que pasar por el quirófano y afrontar un periodo de baja de un mes, como mínimo.

La lesión del central del Real Valladolid afectó al juego. El Athletic frenó su ofensiva y el partido gastó los últimos diez minutos de la primera mitad sin sobresaltos. Una tregua que se rompió con el comienzo de los segundos 45 minutos. El primero en romper las hostilidades fue el Real Valladolid en una acción en la que coincidieron Larsson y Javi Guerra. El sueco, rapidísimo, se coló por la banda derecha para encontrar en el área a Guerra que, con la puntera, estrelló el balón en el poste izquierdo de Iraizoz. Un fogonazo de calidad que mereció el gol. Larsson está cumpliendo con nota muy alta a la hora de relevar a Ebert. Rápido y potente, el sueco, además, sabe asociarse con el resto de hombres de ataque del equipo de Djukic. Mientras, Guerra recuerda cada jornada más al sensacional delantero que brilló en sus dos anteriores temporadas en Zorrilla. Ante el Athletic, demostró que sabe proteger el balón tan bien, como mínimo, como Manucho y que tiene mucho más fútbol en sus botas. La confirmación de la mejoría de Javi Guerra, junto con el buen nivel de Larsson, han sido las noticias más positivas del duelo ante el Athletic.

Pero los vizcaínos fueron superiores en casi toda una segunda mitad en la que Dani Hernández sujetó al conjunto de Djukic. El meta venezolano no pudo evitar el empate a dos, en una desafortunada cadena de rechaces en un saque de esquina del Athletic que Susaeta, solo en el segundo palo, culminó en gol. Sin embargo, en el resto de ocasiones vascas, Dani funcionó como un muro impenetrable, en especial sacando dos buenas piernas en disparos de De Marcos y de Ibai Gómez, éste último a falta de seis minutos para concluir el encuentro. Susaeta también malogró el posible 2-3 tras no impactar a centímetros del área pequeña un balón que venía bombeado y Aurtenetxe envió fuera por muy poco un cabezazo en otro córner. En pleno acoso del Athletic, los jugadores de Bielsa reclamaron una mano de Rueda dentro del área, que pareció involuntaria.

El Real Valladolid, a pesar del gran encuentro de los vizcaínos, no le perdió la cara al duelo y buscó sus opciones con Alberto Bueno como referencia ofensiva en una segunda mitad en la que Óscar siguió sin aparecer. Además del palo de Guerra al inicio del segundo acto, gozó de una ocasión clarísima en las botas de Omar Ramos. El canario, que salió por un cansado Larsson, atrapó en la frontal del Athletic una pelota mal despejada por la defensa. Omar disparó con fuerza, pero con la derecha, su pierna menos buena, ante un Iraizoz que se encomendó a la suerte. Por escasos centímetros, el Athletic se salvó. Hubiera sido injusto, visto el buen partido del equipo de Bielsa, igual que hubiera sido injusta una derrota de un digno rival como el Real Valladolid. Unas tablas a dos que saben, quizás, poco a ambos en un encuentro, el mejor que se ha visto esta temporada en Zorrilla, en el que tanto castellanos como vascos hicieron méritos para ganar y en el que ninguno merecía perder.


Alineaciones:

Real Valladolid 2: Dani Hernández; Rukavina, Sereno, Marc Valiente (Rueda 36’), Peña; Álvaro Rubio, Sastre, Larsson (Omar Ramos 68’), Óscar, Bueno; y Javi Guerra (Manucho 84’).

Athletic 2: Iraizoz; Iraola, Gurpegui, Laporte, Aurtenetxe; San José, Ander Herrera, Susaeta, De Marcos, Muniain (Ibai Gómez 46’); y Aduriz.

Goles:

1-0 (Min 8.) Javi Guerra. Óscar sale con el balón jugado desde la banda izquierda y se apoya en Guerra, que abre a Rukavina. El serbio centra y el malagueño, de cabeza, bate a Iraizoz.

2-0 (Min. 15) Alberto Bueno. Iraizoz rechaza un primer lanzamiento de Bueno. Larsson caza el balón y pasa al madrileño que estira con fuerza su pierna derecha para marcar.

2-1 (Min 22) De Marcos. Susaeta centra por la derecha y De Marcos, dentro del área, cruza el balón fuera del alcance de Dani Hernández.

2-2 (Min 49) Susaeta. Desafortunada jugada del Real Valladolid. Saque de esquina del Athletic, Rueda despeja con la cabeza, pero el balón tropieza en el pecho de Aduriz y llega hasta Susaeta que, solo, junto al palo izquierdo de Dani Hernández, y en posición correcta, empata el partido a dos.

Árbitro: Estrada Fernández (colegio catalán) Mostró cartulina amarilla a Peña (minuto 80), por parte del Real Valladolid, y a Susaeta (minuto 76), por el Athletic. Muy protestado por ambos equipos. Debió expulsar a Aduriz por la acción fortuita, pero muy dura, con Marc Valiente. El Athletic reclamó dos penalties, en un forcejeo de Sereno con Aduriz y en una mano involuntaria de Rueda.


Zorrilla se vuelca en la lucha contra el cáncer.
Incidencias: Nuevo Estadio José Zorrilla. 16.500 espectadores, con más de un millar de aficionados procedentes de Bilbao. Desplegada una pancarta, con el lema ‘Unidos contra el cáncer’, en la preferencia B.

Las notas:

Dani Hernández (8): Gran partido del venezolano, que no pudo hacer nada en los dos goles del Athletic. Salvó dos buenos disparos de Óscar De Marcos e Ibai Gómez.

Rukavina (7): Asistió a Guerra en el primer gol blanquivioleta. En defensa, no tuvo problemas con Muniain y tampoco demasiados con Ibai Gómez.

Sereno (7): Buen partido del portugués, contundente en la marca. Intentó con muy poca fortuna dos disparos lejanos.

Marc Valiente (6): Toda la desgracia del mundo para el central. Acabó en el Río Hortega con una doble fractura en el malar y en el arco cigomático izquierdo tras golpear el codo izquierdo de Aduriz con su rostro. Como poco, un mes de baja.

Peña (5): Mejor en ataque, en especial en la segunda mitad, que en defensa, donde se vio superado por Susaeta e Iraola.

Álvaro Rubio (6): Se fue difuminando con el paso de los minutos. Muy bien al inicio, moviendo con sentido la pelota. Lleva varias jornadas perdiendo demasiados innecesarios balones en zonas de peligro.

Sastre (5): Volvió a la titularidad. Partido gris del balear, poco activo en ataque y en defensa.

Larsson (8): De lo mejor del Real Valladolid. Muy rápido y potente y con una notable capacidad para combinar con sus compañeros. Asistió a Bueno en el dos a cero y llevó mucho peligro en la banda protegida por Aurtenetxe.


Óscar y Ander Herrera, con un balón dividido.
Óscar (3): Mal. Participó muy poco en la elaboración del juego, apenas en el inicio de la jugada del uno a cero, y sin presencia en esta ocasión en la definición. No atraviesa un buen momento de forma.

Bueno (7): Djukic apostó por él en lugar de Omar Ramos. El madrileño completó una buena actuación, marcó un gol y enlazó bien con Larsson y Guerra. Realizó un espectacular control junto a la banda, al más puro estilo karateca.

Javi Guerra (9): Todo lo que hizo fue con mucho sentido. El Real Valladolid ha recuperado a Guerra. Marcó el uno a cero y estrelló un balón en el poste que habría sido el 3-1. Aguantó muy bien el balón ante los centrales del Athletic y se entendió a la perfección con Larsson y Bueno.

Rueda (7): Buen regreso del extremeño, algo falto de ritmo, al eje de la zaga. Salió por Marc Valiente. El Athletic reclamó un penalti por mano de Rueda en la segunda mitad.

Omar Ramos (7): Suplente por segunda vez en toda la temporada. En sus botas, estuvo el 3-2. Su disparo se marchó fuera por muy poco.

Manucho (5): Salió por Guerra en la recta final.

Djukic (8): Acertó apostando por Javi Guerra en vez de Manucho. Su mayor error fue cambiar a Larsson, que estaba siendo de los mejores, si bien el sueco se retiró con ligeras molestias físicas.