sábado, 14 de mayo de 2016

El Atlético Valladolid ya está en Asobal

Sella el ascenso en la histórica pista de Artaleku tras derrotar (24-29) al Bidasoa Irún. El equipo de Nacho González impuso su ritmo defensivo en el segundo periodo.

La plantilla celebra, junto con los aficionados desplazados a Irún,
el ascenso. Fotos: www.atleticovalladolid.es
El Atlético Valladolid Recoletas sentenció, por fin, el ascenso de categoría a la Liga Asobal después de imponerse al Bidasoa Irún (24-29) en un partido marcado por la brillante defensa desplegada por los vallisoletanos en la segunda parte. Tras una primera mitad igualada, los de Nacho González cerraron el triunfo y el ascenso con una lección defensiva de primer nivel que sirve para poner un brillante broche de oro a la temporada en un escenario legendario del balonmano nacional.


El conjunto vallisoletano confirma así, una jornada antes del final de la Liga, su primer puesto en la clasificación y el ascenso directo a la Liga Asobal. Un hito histórico para un club muy joven, con solo dos años de vida, y que devuelve el balonmano de máximo nivel a la ciudad de Valladolid.

Los gladiadores azules culminan una temporada excepcional en la que han alcanzado cifras brillantes. En 29 partidos, han sumado 27 victorias, un empate y tan solo una sola derrota. 55 puntos totales que han servido a los de Nacho González para conquistar el título de la División de Honor Plata y sellar su ascenso directo.

Aún falta un partido por disputarse, el próximo sábado en Huerta del Rey ante el Meridiano Antequera. Un encuentro que no tendrá ya transcendencia en la clasificación y que servirá de celebración del ascenso con la afición vallisoletana que esta temporada ha vuelto a entusiasmarse con el balonmano y con un equipo que pasará a la historia.

El partido de Irún se antojaba complicado para el Atlético Valladolid Recoletas, que llegaba a una pista legendaria y siempre muy dura y ante un rival que apuraba sus últimas opciones de ascenso directo o, al menos, asegurar el segundo puesto que otorga la organización del playoff de ascenso.


Fernando Hernández y Alfonso de la Rubia, en el duro choque en Irún.
En los primeros compases del choque, el Atlético Valladolid Recoletas se mostró tranquilo, quitándose el nerviosismo inicial. Los primeros goles de Fernando Hernández, que tiró del carro vallisoletano con su garra y valentía habitual, ofrecieron esa serenidad a los suyos. El 3-6 del minuto 8, con tres goles de Fernando, marcaban el camino.

Las primeras exclusiones, de Viscovich en el minuto 13, comenzaron a romper el ritmo del encuentro. En estos momentos, el Bidasoa Irún se acercó en el marcador (9-9, minuto 17), igualando aún más un partido bronco y muy complicado de arbitrar. Sin embargo, la templanza de los vallisoletanos les permitió recuperar su mínima ventaja y llegar al descanso con una mínima renta (13-15) que daba esperanzas a los visitantes.

Pero en la segunda parte, el huracán del Atlético Valladolid arrasó con las opciones del Bidasoa Irún. La defensa volvió a ser clave. Desde atrás. los de Nacho González fueron poco a poco aumentando su ventaja, secando a los rivales y dejando sin opciones al Bidasoa.

En 15 minutos excepcionales, el partido pasó de un 13-15 a un 15-20 que enseñaba el camino al triunfo. El Bidasoa se estrelló ante los Turrado, Kramarz y un de nuevo brillante Javi Díaz en la portería. Cinco minutos después se alcanzaba la máxima ventaja, seis goles (18-24). Los vallisoletanos seguían golpeando a su rival en defensa. En ataque, destacó entonces David Fernández con sus lanzamientos exteriores y Luisma Lorasque desde el pivote. Ambos fueron el estilete de un equipo que, a diez minutos del final, ya comenzaba a saborear el triunfo y el ascenso.

El Bidasoa fue incapaz de desarbolar el entramado defensivo vallisoletano y poco a poco fue perdiendo fuelle y empuje. Los gladiadores azules recorrieron la fase final del choque de forma plácida, ya con el triunfo en el bolsillo gracias a su ventaja de cuatro, cinco y hasta seis goles. Al final, victoria histórica por 24-29 para el Atlético Valladolid Recoletas.



El Atlético Valladolid asciende a Asobal en su segundo año de vida.
Ficha técnica:

Bidasoa Irún 24 (13+11): Pedja Dejanovic (portero), Cristian Martínez (1), Adrián Crowley (7), Markel Beltza (-), Julián Portero (2), Kauldi Odriozola (6) y Jon Azkue (2) -siete inicial- Iago Muiña (-), Gastón Mouriño (3), Iñaki Cavero (1), Jon Vázquez (-), Didac Villar (-), Veljko Davidovic (2), Nemanja Bezbradica (-) y Asier Zubiria (portero).

Atlético Valladolid Recoletas 29 (15+14): Javi Díaz (portero), Diego Camino (2), Fernando Hernández (9), Gonzalo Viscovich (1), Filip Kallman (2), Luisma Lorasque (4) y David Fernández (6) -siete inicial- Alfonso de la Rubia (3), Roberto Turrado (-), Sebas Kramarz (1), Sergi Grossi (-), Roberto Pérez (-), Daniel Pérez (1), José Ángel Delgado Ávila (-), Joel Gómez (-) y César Pérez (portero).

Parciales cada cinco minutos: 1-3, 5-7, 8-9, 10-11, 12-13, 13-15 -descanso- 14-16, 14-17, 15-20, 17-23, 21-25 y 24-29.

Árbitros: Muñoz Díaz y Posada González (Federación madrileña). Excluyeron a Cristian Martínez (8’, 24’ y 35’), Markel Beltza (14’, 25’ y 49’) y Julián Portero (35’), por el Bidasoa Irún, y a Sergi Grossi (21’ y 23’), Filip Kallman (37’ y 47’) y Gonzalo Viscovich (13’), por el Atlético Valladolid Recoletas.


La fiesta del ascenso del Atlético Valladolid Recoletas,
Incidencias: 29ª jornada de la División de Honor Plata. Pabellón Artaleku. 2.200 espectadores. Se desplazaron hasta Irún unos 180 aficionados vallisoletanos.