Como hace un par de temporadas, el brasileño deja al Real Valladolid sin un merecido premio en un partido abierto en juego y ocasiones. Mediado el segundo periodo, aprovechó un error de Bruno en la salida del balón para convertir el único gol del Real Madrid, que estrelló dos balones de Casemiro y Modric en los postes. Los blanquivioletas, con muchas rotaciones, con Weissman como titular y con Hervías como lateral derecho, fueron de menos a más, igualaron a los blancos en disparos a puerta (cinco) y superaron al equipo de Zidane en saques de esquina (siete). El Yamiq debutó en los últimos minutos.
Hervías, que cumplió con creces como lateral derecho, sujeta al goleador Vinícius. Fotos: www.realvalladolid.es |
Al menos ante el Real Valladolid.
El brasileño, que ya desatascó el duelo de hace dos temporadas en el Bernabéu con un remate (que se marchaba camino del saque de banda) que acabó con un autogol de Kiko Olivas, ha vuelto a doblegar a los blanquivioletas tras aprovechar un doble error de Bruno mediado el segundo periodo. Una pérdida en la salida del balón y un posterior involuntario rebote del central canario habilitaron a Vinícius para decidir un pulso parejo en los remates a puerta (cinco), aunque con dos postes del Real Madrid, y por fases también en el juego.
No tiró el encuentro el Real Valladolid, a pesar de que la visita a Valdebebas llegaba en una cargada semana con tres partidos, con el Celta el pasado domingo y el Eibar el próximo sábado, dentro de apenas dos días y medio, en dos duelos directos por la permanencia en Zorrilla.
Sí rotó Sergio González, que reservó a Nacho, que no jugó ningún minuto, Kike Pérez y Sergi Guardiola, que salieron a lo largo de la segunda parte. Lo cual no significó que bajara el rendimiento del equipo. Al Real Valladolid rara vez se le olvida competir, juegue quien juegue en el campo.
Titulares y suplentes son intercambiables, una gran virtud cuando las lesiones se agolpan (Kiko Olivas, Sekou, El Hacen, Alcaraz, Javi Moyano y Joaquín) en la enfermería del vestuario. Weissman, tras celebrar el Yom Kipur, debutó en el once como referencia ofensiva. Míchel y Óscar Plano, suplentes ante el Celta, fueron titulares, al igual que Hervías como improvisado y acertado lateral derecho para cubrir la baja de Moyano y las dudas físicas de Luis Pérez, que se quedó en el banquillo.
Sergio González continuó con dos extremos, aunque con Waldo en la derecha y Óscar Plano en la izquierda, sus perfiles menos habituales, para incrementar las posibilidades de disparo directo, y con Orellana en la mediapunta. El plan era conocido y sobradamente bien ejecutado en las últimas temporadas: orden atrás, ante el previsible empuje inicial del Real Madrid, y transiciones rápidas cuando el partido avanzara. Y así ocurrió.
Roberto metió dos buenas manos para salvar dos goles de Valverde y Jovic y contó con la ayuda de los postes tras dos remates de Casemiro y Modric. |
El Real Valladolid no se inmutó. Los de Sergio González asumieron que las ocasiones en contra llegarían, pero también que el partido no sería siempre igual, de dirección única, con el Real Madrid como único dominador. A los blanquivioletas no les importa esperar su momento. Porque casi siempre llega. Y así ocurrió también.
Weissman, que se hartó de correr, conectó un centro de Hervías en el área, pero su disparo golpeó contra el césped y se marchó alto. El Real Valladolid, de cualquier manera, había encontrado el lugar desde donde crear peligro: la banda de Marcelo, al que todo el mundo conoce sus innegables capacidades ofensivas, pero también sus evidentes carencias tácticas defensivas. Hervías colocó un segundo centro que despertó a Courtois, que entendió que se le presentaba un partido con más trabajo del esperado. El belga atrapaba un disparo fácil de Orellana, mientras que Waldo remataba fuera desde la frontal antes del descanso. Ya la recta final del primer tiempo dibujó un partido parejo.
Roberto salvó por segunda vez al Real Valladolid en el arranque del segundo acto con otra portentosa mano abajo tras un cabezazo de Jovic en un saque de esquina. Casemiro, en el área pequeña, tomó el rechace y lo estrelló en el larguero. Primer poste del Real Madrid. La suerte siempre es necesaria en este tipo de partidos.
Pero el Real Valladolid no solo tenía suerte. Estaba cada vez mejor situado en el campo, sin perder el orden en la defensa, que es la primera consigna, y estirándose poco a poco en el ataque. Waldo, pródigo a la hora de chutar, cruzaba con peligro una asistencia de Hervías, que mejoró claramente las prestaciones ofensivas de Moyano y Luis Pérez como lateral derecho en un momento en el que el club está buscando a otro ‘dos’ antes del inminente cierre del mercado de fichajes, en cinco días.
Arriba, Óscar Plano controla ante la presencia de Modric. Abajo, Weissman, que se estrenó como titular con buenas sensaciones. |
Y a Zidane le salió bien la jugada porque a Vinícius le sonríe la suerte ante los blanquivioletas.
El brasileño abrió el marcador tras el doble error de Bruno. Aunque el partido estaba aún muy vivo, con un Real Valladolid que contaba entonces con dos delanteros, Weissman y Marcos André, y con un mediocampo más creativo, con Kike Pérez acompañando a Míchel tras la salida de Fede San Emeterio. Todo podía pasar. Y todo casi pasó en el área de Courtois, que aguantó al Real Madrid.
Raúl Carnero rompía en el área, con Weissman en boca de gol, y Courtois se estiraba para desviar el trallazo del gallego. Waldo, desde la frontal, largaba otro latigazo que el cancerbero belga despejaba a córner. Los blanquivioletas atacaban más e incluso acabaron el encuentro con más saques de esquina (siete) que el Real Madrid (cuatro). Los de Zidane estaban en el alambre.
Bruno no acertaba con la dirección en un clarísimo cabezazo en otra acción a balón parado. Quedaba tiempo y el Real Valladolid apretaba con más artillería, con Sergi Guardiola, Marcos André, Toni Villa y Óscar Plano. La derrota por la mínima no le valía ante un Real Madrid al alcance, a pesar de una peligrosa contra de Vinícius, que neutralizó Raúl Carnero, y un lanzamiento de Modric al poste tras un fallo de Roberto.
No llegó a volcarse por completo el Real Valladolid porque el Real Madrid quiso y supo enfriar el partido.
Pero no dejó de intentarlo porque era el día para puntuar en Valdebebas… De no ser por el afortunado Vinícius.
Ficha
técnica:
Real Madrid 1: Courtois; Odriozola (Carvajal 57’), Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Casemiro, Modric, Valverde, Isco (Marco Asensio 57’); Benzema (Mayoral 87’) y Jovic (Vinícius 57’).
Real Valladolid 0: Roberto; Hervías, Bruno, Javi Sánchez, Raúl Carnero; Fede San Emeterio (Marcos André 63’), Míchel (El Yamiq 87’), Waldo (Sergi Guardiola 74’), Orellana (Kike Pérez 63’), Óscar Plano; y Weissman (Toni Villa 74’).
Goles:
1-0 (min. 65): Vinícius. Error de Bruno en zona de salida del balón. El central canario no despeja y pierde la posesión ante Vinícius, que combina con Valverde. El uruguayo abre arriba para Benzema en el área del Real Valladolid. Raúl Carnero corta el envío, que toca en Bruno para habilitar a Vinícius, que recoge el rechace y supera a Roberto.
Árbitro: Soto Grado (colegio castellano manchego). Amonestó a Casemiro (78’) y Marcelo (93’), por el Real Madrid, y a Bruno (71’), por el Real Valladolid.
Incidencias: 4ª jornada de LaLiga Santander. Estadio Alfredo Di Stéfano, a puerta cerrada por la pandemia del covid-19.
Las notas:
Roberto (8): Vendido en el gol de Vinícius, que llegó tras un doble fallo de Bruno. Metió dos soberbias manos abajo. La primera, a los nueve minutos, para rechazar un disparo a bocajarro de Valverde. La segunda, a los dos minutos del segundo periodo, para despejar un cabezazo de Jovic. Roberto tuvo también la ayuda de los postes. El larguero escupió un remate de Casemiro, tras recoger el rechace del portero al cabezazo de Jovic. Mientras, el palo frenó un lanzamiento de Modric tras el único fallo de Roberto, que combinó mal con Míchel para iniciar una jugada.
Hervías (8): El riojano ocupó el lateral derecho, con Javi Moyano lesionado y Luis Pérez tocado. Una posición inédita en su carrera. No lo pareció. Hervías, en su primera titularidad en esta temporada, cumplió. El Real Valladolid mejoró mucho su capacidad ofensiva por la banda derecha, con el riojano sorprendiendo tras incorporarse desde la segunda línea. Ya en la primera mitad, colocó una buena asistencia en el corazón del área para Weissman, que impactó mal el balón. Poco después, obligó a Courtois a despejar un centro. En la segunda mitad, encontró desde la banda a Waldo, que cruzó con peligro.
Bruno facilitó el gol de Vinícius tras un error en la salida del balón. |
Javi Sánchez (7): El canterano madridista, ya jugador en propiedad del Real Valladolid, estuvo siempre muy bien colocado. A los nueve minutos, taponó una peligrosa incorporación de Marcelo. Acabó el encuentro en la medular tras la entrada de El Yamiq por Míchel.
Raúl Carnero (8): Repitió como titular, pero esta vez jugó en su posición natural, como lateral izquierdo. El Real Madrid no le puso en aprietos en su banda. El gallego se soltó con bastante peligro en el ataque. Mediado el segundo periodo obligó a Courtois a una plástica estirada. Minutos después cortó una peligrosa contra de Vinícius. Participó involuntariamente en el gol del Real Madrid tras interceptar un pase de Valverde a Benzema. El balón pegó en Bruno y Vinícius superó a Roberto.
Fede San Emeterio (6): El que nunca rota, al menos en este inicio del campeonato. Ha sido titular en las cuatro jornadas. En parte por la confianza de Sergio González y en parte también por las lesiones de Alcaraz y Joaquín. No se intimidó ante el mediocampo del Real Madrid. Sustituido por Marcos André con casi media hora por jugarse.
Míchel recuperó la titularidad y llevó la manija del equipo. |
Orellana (6): Siguió como titular. Jugó como mediapunta, con Waldo y Óscar Plano en las bandas. El centro, por detrás del ariete, Weissman en este caso, es por donde mejor se mueve. A nueve minutos del descanso disparó blando a los guantes de Courtois. Relevado por Kike Pérez a casi media hora del final.
Óscar Plano (6): Volvió al once tras quedarse en el banquillo ante el Celta. Ocupó la banda izquierda junto con Raúl Carnero. Con buena actitud, aunque de momento sin brillantez en la parcela ofensiva. No obstante, jugó todo el partido.
Weissman (7): Titular por primera vez con la camiseta del Real Valladolid. El delantero israelí, tras cumplir con el Yom Kipur, jugó como referencia ofensiva en Valdebebas. Muy generoso en el esfuerzo físico y, como en los anteriores partidos, con buenas maneras. En el arranque del segundo periodo dirigió un claro contragolpe al que supo meter pausa para disparar después de que Marcelo se tirara al suelo. Courtois desvió el balón a córner. No fue la única ocasión de Weissman. En la primera parte golpeó contra el césped, en el centro del área, un centro de Hervías.
Kike Pérez comenzó en el banquillo en Valdebebas. |
Marcos André (6): Salió a media hora del final. Acompañó a Weissman, primero, y a Sergi Guardiola, después, en una doble punta.
Sergi Guardiola (5): Suplente por primera vez en esta temporada. Jugó el último cuarto de hora con Marcos André como pareja de ataque.
Toni Villa (5): Salió a un cuarto de hora del final para ocupar el extremo izquierdo.
El Yamiq (-): Debutante. Entró por Míchel a tres minutos del final.
Sergio González (8): Una gran gestión de los recursos del equipo. Pensó en Valdebebas, sin tirar ni mucho menos el partido, y pensó también en el próximo choque en Zorrilla ante el Eibar dentro de apenas dos días y medio. Así, Nacho, que no jugó ningún minuto, Kike Pérez, Sergi Guardiola y Toni Villa comenzaron en el banquillo. Weissman estrenó titularidad y El Yamiq disputó sus primeros minutos. Eligió y acertó con Hervías en el lateral derecho para cubrir la baja de Javi Moyano y la duda de Luis Pérez.
El equipo se mostró muy competitivo ante el vigente campeón de Liga, muy ordenado atrás y con buenas transiciones ofensivas. De hecho, el Real Valladolid disparó a puerta las mismas veces que el Real Madrid, un total de cinco, y forzó más saques de esquina, siete. Fue ambicioso en el segundo periodo, con un doble pivote de calidad, Míchel y Kike Pérez, y una doble delantera, primero con Weissman y Marcos André y después con Marcos André y Sergi Guardiola.