El Real Valladolid pierde dos puntos con un gol del portero del Sevilla. En la última jugada, el arquero marroquí iguala en una embarullada segunda acción tras un saque de esquina. Los blanquivioletas, muy sólidos, acariciaban la victoria con un penalti convertido por Orellana justo antes del descanso. De Jong, de cabeza, remató al palo a catorce minutos del final. Los de Sergio González mantienen la buena dinámica, pero desperdician una excelente oportunidad para alejarse del descenso.
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| Janko llevó peligro por la banda derecha. Fotos: www.realvalladolid.es |
No sale (casi) nunca. El último recurso, el balón a la olla con todo el equipo volcado buscando el milagro. Y con el arquero, por un día, convertido en el héroe.
Bono cumplió el sueño de todo portero y, de paso, le fastidió la victoria al Real Valladolid.
El marroquí, cuatro minutos por encima del tiempo reglamentario, culminó una desgraciada acción para la zaga blanquivioleta, hasta entonces muy firme, que no despejó un balón suelto de Óscar Rodríguez tras golpear mansamente en el palo. En-Nesyri, el más listo y el más rápido, se adelantó a todos y desde la línea de fondo activó una imprevista conexión magrebí para empatar el partido.
Bono emuló aquel histórico gol de Palop, también con la zamarra del Sevilla, que salvó in extremis a los hispalenses, posteriores campeones, de la eliminación en la Copa de la UEFA hace ya catorce años ante el Shakhtar Donetsk en tierras ucranias.
Al Real Valladolid le costará olvidar la heroicidad de Bono, de las que quedan para el recuerdo. También por las repercusiones en la clasificación. Los de Sergio González, aunque siguen fuera de la zona de descenso, pierden una magnífica oportunidad para escaparse seis puntos de la quema antes del parón de las selecciones y con el pujante Barça, en el Camp Nou, como el próximo rival cuando vuelva la competición.
Eso sí, el desgraciado empate no puede ensombrecer la actuación de los blanquivioletas, en clara dinámica ascendente, con siete puntos (una victoria ante el Getafe y cuatro tablas ante el Eibar, el Celta, el Osasuna y el Sevilla) en las seis últimas jornadas. Un botín que ha podido ser mayor de no ser por los desafortunados goles de Murillo en Balaídos y Bono en Zorrilla. Solo el Real Madrid, por la mínima, ha doblegado al Real Valladolid en el último mes.
En manos del conjunto de Sergio González está que la heroicidad de Bono se quede en una simple anécdota. Hasta entonces, el Sevilla, superior en la primera media hora, sudó muchísimo para entrar en el entramado defensivo del Real Valladolid, claro aspirante a la permanencia.
Sergio González contó con su once de gala, con la presencia de El Yamiq, duda a lo largo de la semana por el fuerte golpe en un cuádriceps que recibió ante el Osasuna. El Yamiq y Joaquín se impusieron en el área y ataron en corto al goleador En-Nesyri (quince tantos en la Liga).
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| Orellana, infalible desde los once metros, tres de tres en esta temporada. |
El agobio, que no las ocasiones (que casi no hubo), desapareció a la media hora. El Real Valladolid subió la presión y empezó a robar cerca de los dominios del posterior héroe en Zorrilla. Sergi Guardiola no alcanzó un buen pase interior de Óscar Plano. Minutos después, era Óscar Plano quien no cazaba un envío largo. El encuentro caminaba al descanso con el empate.
Antes, llegó, sin embargo, el gol del Real Valladolid, que aprovechó sus mejores minutos. Weissman caía derribado entre Rekik, que le golpeó, y Diego Carlos, que le empujó. Dos en uno. Penalti claro. Orellana, que suma tres de tres en esta temporada, transformó desde los once metros al filo del descanso.
A la vuelta de los vestuarios, el Real Valladolid descubrió un nuevo plan de Lopetegui, con Ocampos y Acuña como carrileros. Pero los de Sergio González, con el marcador a favor, continuaron con la progresión del último cuarto del primer tiempo. Cada vez más sólidos atrás. Sin sufrir, con el Sevilla desconectado. De hecho, las ocasiones eran blanquivioletas, con un remate de Sergi Guardiola demasiado cruzado y un cabezazo de El Yamiq a balón parado.
El Sevilla sí mejoró algo con las apariciones de Rakitic y De Jong. El holandés cabeceó al palo, a catorce minutos del final, un centro de Ocampos que se envenenó tras tocar en Olaza. La volvió a tener, de nuevo con la testa, a tres del final con otro peligroso intento que no encontró portería. Por entonces, el Real Valladolid, que paladeaba la victoria, defendía con todo, con la inclusión de Bruno al lado de Joaquín y El Yamiq.
Parecía más que suficiente, con el crono volando a favor… Hasta que Bono se vistió de héroe para arrebatarle dos puntos de oro al Real Valladolid. El gol que (casi) nunca pasa.
Ficha técnica:
Real Valladolid 1: Roberto; Janko, Joaquín, El Yamiq, Olaza; Roque Mesa (Fede San Emeterio 75’), Alcaraz (Míchel 75’), Óscar Plano (Bruno 84’), Orellana (Kike Pérez 84’); Sergi Guardiola y Weissman (Kodro 84’).
Sevilla FC 1: Bono; Jesús Navas (Ocampos 46’), Koundé, Diego Carlos, Rekik (De Jong 67’); Gudelj (Rakitic 67’), Jordán (Óscar Rodríguez 78’), Óliver Torres (Acuña 46’); Papu Gómez, En-Nesyri y Suso.
Goles:
1-0 (min. 44): Orellana, de penalti. Weissman cae derribado entre Rekik, que le suelta una clara patada, y Diego Carlos, que le empuja por detrás. Orellana, con mucha seguridad, transforma el penalti con un potente derechazo que engaña a Bono.
1-1 (min. 94): Bono. Jugada extrañísima. Córner del Sevilla, que sube con todo, Bono incluido. De Jong cabecea en el segundo palo. El balón vuelve al primer palo, junto a la línea de fondo, donde Óscar Rodríguez remata en semifallo. El esférico pega mansamente en el poste. Janko y El Yamiq, incomprensiblemente, dejan pasar la pelota. En-Nesyri se adelanta a todos en el rechace y cede atrás para Bono, que inesperadamente empata.
Árbitro: Estrada Fernández (colegio catalán). Amonestó a Roque Mesa (52’), Olaza (52’) y Orellana (64’), por parte del Real Valladolid, y a Lopetegui (59’) y Bono (95’), por parte del Sevilla.
Incidencias: 28ª jornada de LaLiga Santander. Zorrilla, a puerta cerrada por el protocolo sanitario por la pandemia de la covid-19.
Las notas:
Roberto (6): Le faltaron unos segundos para dejar su portería a cero. Lo impidió... ¡el guardameta rival! Bono igualó en la última jugada con un remate a bocajarro y con Roberto muy tapado. El Sevilla disparó otras tres veces entre los tres palos. Roberto desvió, a los once minutos, un peligroso lanzamiento del ‘Papu’ Gómez y atajó poco después un cabezazo blando de En-Nesyri. Ya en la segunda parte, atrapó un chut de Rakitic. Antes del empate de Bono, De Jong, de cabeza, avisó con un primer intento al poste y un segundo testarazo fuera por poco.
Janko (7): Vertical. Cuando se suelta en el ataque, la sensación siempre es de peligro, incluso ante un rival Champions como el Sevilla. Arranca con mucha velocidad y potencia. En la defensa, es un jugador menos fiable. En los primeros minutos, tuvo algunos problemas con el ‘Papu’ Gómez. No se mostró nada contundente en el empate de Bono y dejó pasar un balón manso de Óscar Rodríguez.
Joaquín (7): Firme hasta casi el final. Ha vuelto a su mejor nivel en el eje de la zaga, rápido, bien colocado y solvente en el juego aéreo incluso ante un enchufado En-Nesyri. De Jong sí le ganó la espalda para impactar en el palo. Como todo el equipo, no impidió el empate en una jugada muy confusa.
El Yamiq (7): Duda a lo largo de toda la semana por el fuerte golpe en un cuádriceps en el último partido ante el Osasuna, el marroquí salió de inicio y aguantó el encuentro completo. No se le apreció ningún problema físico. Le ganó el duelo a su compatriota En-Nesyri. No obstante, falló en la acción del gol de Bono. El Yamiq no despejó un balón innecesariamente peligroso. Cabeceó a los guantes de Bono un saque de esquina cumplido el primer cuarto del segundo tiempo.
Olaza (6): Serio en las labores defensivas. Jesús Navas no le generó problemas en el primer periodo. Tampoco Ocampos en el segundo. El uruguayo, como en las últimas semanas, tuvo menos protagonismo ofensivo que Janko. Amonestado tras cortar una contra de Jordán con una falta táctica.
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| Roque Mesa, intenso ante su exequipo. |
Alcaraz (6): No acaba de despuntar. Cumple con su rol de pivote destructor y trabajador en el mediocampo, pero está muy lejos del jugador de sus dos primeros años en el Real Valladolid, cuando pisaba el área rival con frecuencia y acierto. Relevado por Míchel a un cuarto del final.
Óscar Plano (6): Trabajo, trabajo y más trabajo. Cometió hasta seis faltas. Además de correr y presionar, metió un peligroso pase en profundidad que Sergi Guardiola no aprovechó. Poco después, en el último cuarto de la primera parte, no controló un interesante servicio largo. Al banquillo a seis minutos del final.
Orellana (6): Entró mucho menos en contacto con el balón que en jornadas anteriores, lo que no beneficia a su fútbol. Ante el Sevilla le tocó más defender que atacar. No obstante, estuvo cerca de firmar el gol de la victoria, de no ser por el empate de Bono. Orellana, justo antes del descanso, transformó un penalti cometido sobre Weissman. Es su cuarto tanto de la temporada, tres desde los once metros con un cien por cien de efectividad. Sustituido a seis minutos del final.
Sergi Guardiola (6): Mientras Marcos André, casi recuperado, no diga lo contrario, sigue en el once. Ante el Sevilla apareció poco en el área rival. No aprovechó un buen pase en profundidad de Óscar Plano en la primera parte. En el arranque del segundo periodo, cruzó en exceso tras una recuperación del Real Valladolid.
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| Weissman sufrió un claro penalti antes del descanso. |
Fede San Emeterio (5): Salió a quince minutos del final por Roque Mesa.
Míchel (5): Jugó el último cuarto de hora tras entrar por Alcaraz.
Kodro (-): Relevó a Weissman a seis del final.
Kike Pérez (-): Sustituyó a Orellana a seis minutos del final.
Bruno (-): Entró por Óscar Plano a seis del final para jugar en una defensa de cinco.
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| Sergio González mantiene el equipo titular. |