sábado, 22 de abril de 2017

Aviso al Lucentum

Contundente victoria (80-59) del Comercial Ulsa en la última jornada de la temporada regular ante el Covirán Granada. Los vallisoletanos firmaron una espectacular segunda parte, con un demoledor parcial (48-18), para plantarse en los playoffs de ascenso a la LEB Oro en el mejor momento del curso. Minutos para los canteranos Eduardo Castaño y David Paniagua, que debutó con el primer equipo.

El equipo de Paco García concluye la fase regular de la LEB Plata en séptima posición,
con diecisiete victorias y trece derrotas. Fotos: www.cbcvalladolid.es
El Comercial Ulsa CBC Valladolid despidió la temporada regular con un auténtico recital ante el Covirán Granada (80-59) gracias a una brillante segunda parte. Los de Paco García brindaron uno de los mejores triunfos del curso a un Pisuerga festivo y llegan a los playoffs en el mejor momento de forma. El rival en la primera ronda de la promoción de ascenso será el Fundación Lucentum Alicante, equipo al que los vallisoletanos han vencido tanto en la ida como en la vuelta.

El fulgurante comienzo de los granadinos fue un claro mensaje para los de Paco García: ‘Vamos a pelear’. ¡Y vaya si lo hicieron, a pesar de no tener nada en juego! Los de Juan Pablo Pin anotaron tres triples en las tres primeras posesiones. Parcial de 0-9 de inicio y, a los pocos minutos, tiempo muerto del equipo vallisoletano, con máxima ventaja (3-13) a favor del Covirán. Desde entonces, se comenzó a fraguar la remontada a base de defender, seña de identidad del Comercial Ulsa.

Los vallisoletanos salieron mejor tras escuchar las palabras de Paco García y empezaron a frenar la ofensiva visitante, temible por todas las armas con las que cuenta la plantilla andaluza para anotar ya que cada hombre supone una amenaza para el aro. Parcial de 8-2 (11-15) y las ardillas se metían, de nuevo, y comenzaba un nuevo partido.

Durante los últimos minutos del cuarto inaugural, el Comercial Ulsa, liderado por Sergio De la Fuente, logró seguir el ritmo anotador de los granadinos y comenzó a defender ataques en varias ocasiones. Un triple de Daniel Astilleros cerró un primer periodo (19-21) en el que las ardillas supieron reponerse al 0-9 de inicio. Sin embargo, el camino de la victoria pasaba por bajar la anotación de ambos conjuntos e irse a cifras bajas.

El Covirán Granada, sin embargo, no estaba muy por la labor de jugar al ritmo que le interesaba al Comercial Ulsa. Los de Juan Pablo Pin sacaron el rifle a pasear y dieron un auténtico ‘clínic’ sobre cómo lanzar triples: anotaron hasta en cinco ocasiones desde la larga distancia. Los vallisoletanos no eran capaces de puntear todos los tiros y cada jugador visitante era una amenaza. Milekovic se convirtió en un auténtico estilete, con diez puntos en el periodo, y los visitantes alcanzaban una máxima de doce puntos: 26-38.

Los jugadores de Paco García respondieron al filo del descanso y redujeron ligeramente las diferencias (32-41), a base de músculo en el poste, con Sergio De la Fuente y Boubacar Sidibe como principales pilares. El tiempo expiró y ambos conjuntos se marcharon a los vestuarios, donde el Comercial Ulsa dio un paso al frente y comenzó la exhibición.

Tras el descanso, el Comercial Ulsa se transformó en un vendaval que arrasó con el Covirán. Los de Paco García firmaron un tercer cuarto excelso y lo remataron con un brillante último asalto. La mejor segunda parte de toda la temporada fue una exhibición total ante un rival de gran entidad y que, todo sea dicho, llegaba a Pisuerga con todo hecho, con el billete para los playoffs en el bolsillo.

Rowell Graham-Bell fue la personificación de lo que lograron las ardillas. El alero británico, que hasta el descanso estaba cuajando un mal partido (-1 de valoración), terminó el periodo como el segundo mejor jugador del equipo en el global, con dieciocho de valoración. El británico salió de vestuarios como una exhalación y, en el primer minuto de la segunda mitad, firmó dos mates tremendos. Paco García decidió adelantar líneas y plantó una presión a toda cancha, que propició un parcial favorable de 11-2 (43-43). Juan Pablo Pin pidió tiempo muerto para ajustar a su equipo, pero nada iba a funcionar contra la máquina del Comercial Ulsa.

Una vez superada la presión a todo campo, al Covirán Granada le esperaba una zona 2-3 que no desarboló. Anotó solamente dos puntos en ocho minutos del tercer cuarto. En el otro lado de la cancha, todo lo contrario. El CBC Valladolid estaba desatado y el incombustible Sergio De la Fuente, camino del MVP de la temporada regular, y Rowell Graham-Bell martilleaban una y otra vez el aro granadino. Los vallisoletanos dieron la vuelta al marcador y pasaron a tomar la iniciativa del encuentro. Un triple de Ivan Milekovic, el mejor de los nazaríes, maquilló un poco el tanteo tras un cuarto perfecto del Comercial Ulsa (22-5).

55-46 lucía el electrónico cuando la bola se volvió a poner en juego para disputar el último periodo. A pesar de que las diferencias eran solo de nueve puntos favorables a los vallisoletanos, las sensaciones eran totalmente opuestas. El tiempo muerto propio del cambio de cuarto no frenó a las ardillas y tampoco resolvió los problemas en las filas del cuadro de Juan Pablo Pin. La fiesta del playoff iba a tener un final feliz en Pisuerga.


El encuentro llegó al descanso con ventaja del Covirán por nueve puntos,
pero cambió por completo en los dos últimos cuartos.
Milekovic, de nuevo desde la larga distancia, anotaba la primera canasta del cuarto y el Covirán se acercaba en el marcador (55-49). Fue un espejismo. Las ardillas siguieron con su exhibición para deleite del público que vibró con la mejor versión del CBC Valladolid de toda la temporada. Juan Pablo Pin, de nuevo, optó por pedir un tiempo muerto y seguir buscando la tecla. Pero ni una defensa zonal ni una presión a toda cancha lograron parar el vendaval de los de Paco García.

Los minutos fueron avanzando y las diferencias iban en aumento. Los vallisoletanos estaban tocados por una varita y todo les salía. La fiesta del playoff estaba cumpliendo con todas las expectativas, pero aún faltaba el colofón:

Cuando restaban dos minutos de partido, Paco García hizo debutar oficialmente al canterano David Paniagua y también dio entrada a Eduardo Castaño, que ya había disfrutado de minutos con el primer equipo meses atrás. La afición aceptó entusiasmada el regalo y brindó una espectacular ovación a ambos, que quisieron devolverle el cariño a la grada. Así, cuando el crono iba muriendo, sobre la bocina, Eduardo Castaño sumó sus primeros puntos con el Comercial Ulsa anotando un triple frontal que puso punto y final a una tarde mágica en Pisuerga.

Al término del encuentro, el Comercial Ulsa CBC Valladolid ya sabía quién será el rival en la primera eliminatoria de los playoffs: el Fundación Lucentum Alicante, equipo al que las ardillas han vencido tanto en la ida como en la vuelta. Los primeros duelos se disputarán el viernes 28 y el domingo 30, en suelo alicantino, y en Pisuerga el día 5 de mayo y, si fuera necesario, el domingo 7.

Ficha técnica:

Comercial Ulsa CBC Valladolid 80 (19+13+23+25): Wade-Chatman (16), González (3), Graham-Bell (14), De la Fuente (22) y Sidibe (8) –cinco inicial– Astilleros (5), Mukendi (4), Morales (3), Jota (2), Esteban (-), Castaño (3) y Paniagua (-).

Fundación Lucentum Alicante 59 (21+20+5+13): Corts (3), Freitas (7), Iván Martínez (8), Bortolussi (10) y Uta (4) –cinco inicial– Milekovic (15), De Lattibeaudiere (3), Cobos (3), Bowie (2), García (-), Germán Martínez (4) y Vigo (-).

Árbitros: Quintas Álvarez y Planells Caicedo.

Incidencias: 30ª jornada, última de la temporada regular, de la LEB Plata. Polideportivo Pisuerga.

Crónica de www.cbcvalladolid.es