domingo, 23 de abril de 2017

Fallece el último histórico del Real Valladolid: Isidoro Lasala

Jugó con Saso, Lesmes I, Lesmes II, Babot, Busquet, Coque, Vaquero, Aldecoa y Revuelta. Consiguió el primer ascenso blanquivioleta a la máxima categoría del fútbol español en 1948 y disputó la final de Copa de 1950. Formó, junto con Juan Antonio Ortega, una gran pareja en el mediocampo. El riojano era el pulmón del Viejo Zorrilla.

Lasala llegó a Valladolid en 1943 y, tras dos años cedido, jugó nueve temporadas
consecutivas como blanquivioleta. Foto: www.realvalladolid.es
Isidoro Lasala Casajús (Tauste-Zaragoza, 2-4-1923 / Logroño, 22-4-2017) ha muerto. El último jugador legendario del gran Real Valladolid de finales de los años cuarenta y los años cincuenta falleció este sábado a los 94 años de edad en Logroño, ciudad en la que vivía desde que allí colgara las botas en la temporada 1955/56. Jugó durante nueve campañas consecutivas en el Real Valladolid, desde la campaña 1946/47 hasta la 1954/55, en las que disputó 253 partidos oficiales con la blanquivioleta.


Lasala llegó al Real Valladolid en la campaña 1943/44 procedente del Logroñés. Solo jugó tres partidos y estuvo dos años cedido hasta que volvió para formar, junto con Juan Antonio Ortega, un mediocentro sensacional del equipo castellano.

“Fueron indiscutibles y proporcionaron muchas tardes de gloria que los viejos aficionados no olvidarán nunca. Ortega tenía un toque mágico, un guante en la bota que le permitía colocar el balón en el sitio justo y en el momento apropiado. Lasala, que tampoco estaba huérfano de técnica, era un pulmón providencial cuando el equipo acusaba el esfuerzo. Lasala parecía estar en todas partes y Ortega solo donde hacía falta. ¡Menuda pareja…!”, señala el periodista José Miguel Ortega en el libro ‘Historia del Real Valladolid’.

Junto con otros jugadores míticos como Saso, Lesmes I, Lesmes II, Babot, Busquet, Coque, Vaquero, Aldecoa y Revuelta, por citar algunos, Lasala fue artífice fundamental del ascenso del Real Valladolid de Tercera a Primera División en dos temporadas (1946/47 y 1947/48), subcampeón de la Copa del Rey en 1950 y semifinalista en 1952.

Enfermo de Alzheimer al final de su vida, su familia recuerda que Lasala se sintió blanquivioleta hasta el último día. Cada victoria del Real Valladolid le arrancaba una sonrisa y recordaba viejas historias del Real Valladolid de “la década prodigiosa”.

La familia del Real Valladolid está de luto. D.E.P. Don Isidoro Lasala.