A
cuatro jornadas para concluir su primera temporada en la Liga Asobal. El equipo
de Nacho González se llevó el derbi ante el Villa de Aranda ya con la salvación
en el bolsillo tras las derrotas previas del Frigoríficos Morrazo y el DS Auto
Gomas Sinfín. El objetivo en los últimos encuentros será pelear por el quinto
puesto.
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| Víctor Rodríguez se escapa de la defensa burgalesa. Fotos: www.atleticovalladolid.es |
El Recoletas
Atlético Valladolid alcanzó con una victoria ante el BM Villa de Aranda (34-28)
la permanencia, un año más, en la Liga Asobal, el gran objetivo que perseguía
el club en su primera temporada en la máxima categoría del balonmano nacional.
Un éxito que llega gracias al triunfo de los gladiadores azules ante los de
Aranda de Duero y las derrotas de los dos colistas: el Frigoríficos Morrazo y
el DS Auto Gomas Sinfín.
El conjunto de
Nacho González certifica, de este modo, la permanencia gracias a los 24 puntos
conseguidos con doce victorias (once de ellas en Huerta del Rey) en los 26
encuentros disputados hasta ahora, una brillante temporada para un recién
ascendido con apenas tres años de vida. Ahora restan cuatro jornadas de Liga en
las que el Recoletas tiene el reto de mirar hacia arriba e intentar terminar en
la mejor posición posible, con el quinto puesto en el horizonte y como gran
reto.
El Recoletas
Atlético Valladolid lució, de nuevo, en Huerta del Rey su mejor cara, con un
juego colectivo exquisito en ataque, defensa consistente, a pesar de la baja de
Roberto Turrado -volvió Nico López tras su lesión-, y una portería
brillantísima con un Javi Díaz a un nivel altísimo ya que con sus paradas
(dieciséis, 37% de acierto) detuvo la posible remontada del BM Villa de Aranda
en la segunda mitad.
Sin embargo, al
Recoletas le costó entrar en faena ante un BM Villa de Aranda que salió más
enchufado a la pista. La necesidad de puntos hizo que los arandinos comenzaran
con mejor ritmo y que las primeras ventajas fueran para los visitantes: 4-6,
minuto diez. Las paradas de Xoan Ledo también hicieron daño a los locales. Sin
embargo, los goles de Rubén Río, Fernando Hernández y Dani Dujshebaev fueron
devolviendo la confianza a los gladiadores azules, que mejoraron en defensa,
poco a poco, para ir remontando el choque.
Un parcial de 4-0
dio la vuelta al marcador y permitió a los vallisoletanos ponerse por primera vez
por delante: 10-8, minuto dieciocho. La ventaja se mantuvo para los locales en
la recta final de la primera parte, con un BM Villa de Aranda que fue perdiendo
fluidez en ataque, a la vez que aumentaban sus nervios. Al descanso, el Recoletas
Atlético Valladolid conservó un colchón de cuatro goles (16-12). Las
sensaciones ya eran muy positivas para los de Nacho González.
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| Los gladiadores azules se recuperaron rápido de un inicio de dominio visitante. |
La ventaja
vallisoletana se mantuvo en el inicio de la segunda parte, incluso alcanzando
los cinco goles de diferencia: 20-15. El Recoletas superó entonces un periodo
de tres exclusiones consecutivas que mermó la capacidad del equipo. Sin
embargo, los locales aguantaron estoicamente anotando en inferioridad y
defendiendo a buen nivel. Además, fueron minutos de gran brillantez de Javi
Díaz en la portería. De nuevo, firmó un partido increíble.
Así, el encuentro,
tras este periodo de exclusiones, continuó con ventaja local (24-20, minuto 45)
y con un Recoletas que en ataque jugó con mucha inteligencia, buscando los
huecos adecuados con un buen Dujshebaev y también encontrando a los extremos.
El BM Villa de
Aranda intentó, sin éxito, la remontada, con lanzamientos exteriores y
defendiendo al límite, pero se chocó con un Recoletas Atlético Valladolid firme
y sin errores que mantuvo su ventaja hasta el final del partido: 34-28.
Nacho González,
entrenador del Recoletas Atlético Valladolid, subrayó tras el partido que eran “dos
puntos importantes porque cumplimos el primer objetivo del equipo: la
permanencia. Queríamos asentar al club y, poco a poco, va creciendo. Hoy hemos
conseguido la permanencia en Asobal de forma matemática. El segundo motivo era
por el homenaje a Toño Garnacho, una figura importante para la plantilla y el
club. Queríamos dedicarle la victoria. Y luego para volver a la senda de las
victorias en casa y con buenas sensaciones”.
“Ha sido un partido
completo. Nos costó entrar porque su portería estuvo bien en ocasiones claras
de gol. Pero poco a poco asentamos la defensa y pudimos hacer contraataques, una
de nuestras mejores armas junto con el juego colectivo. Hemos ido abriendo
brecha en el marcador que, en la segunda parte, aguantamos a pesar de las
inferioridades seguidas que sufrimos. Al final, cuando se ha abierto la defensa
rival, hemos anotado bien desde el extremo”, ha analizado el técnico.
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| Los vallisoletanos, con un gran Javi Díaz, sustentaron la victoria en la defensa y las contras. |
“Estoy muy
contento. Ahora toca seguir trabajando ya que quedan cuatro jornadas y el
objetivo es intentar conseguir el máximo número de victorias. Nuestra prioridad
es competir en todos los partidos”, concluyó el técnico del Recoletas Atlético
Valladolid.
Álvaro Senovilla,
entrenador del BM Villa de Aranda, admitió en rueda de prensa que “es difícil
ganar si fallas muchos lanzamientos. Das muchas opciones al contrario. El
Atlético Valladolid está fuerte y seguro en casa y te acaba doblegando. Además,
la actuación de Javi Díaz en la portería ha sido muy destacable. Hemos
intentado trabajar muy duro a pesar de sus paradas, no han podido correr bien”.
“Esa pequeña renta
que cogieron al final de la primera parte nos ha lastrado en la segunda y, al
final, acabas doblando la rodilla ya que hay que trabajar mucho en defensa con
un rival con buenos pasadores y penetradores. Sacamos muchos contraataques, es
algo meritorio, pero con tantos lanzamientos fallados es difícil llevarte el
partido”, incidió Senovilla.
Ficha técnica:
Recoletas Atlético Valladolid 34 (16+18): Javi Díaz (portero), Fernando Hernández
(3), Rubén Río (7), Miguel Camino (4), Abel Serdio (3), Daniel Dujshebaev (7,
2p.) y Víctor Rodríguez (3) -siete inicial- Diego Camino (4, 2p.), Nico López
(1), Sergi Grossi (-), Alfonso de la Rubia (-), Roberto Pérez (-), Gonzalo
Viscovich (-), Jorge Serrano (1), Luisma Lorasque (1) y César Pérez (portero
suplente).
BM Villa de Aranda 28 (12+16): Xoan Ledo (portero) (1), Nemanja Bojicic
(-), Adrián Fernández (3), Víctor Megías (2), André Amorim (3), Raul Nantes (8,
5p.) y Manuel García (2) -siete inicial- Juanlu Moyano (1), Henrrique Petter
(-), Roberto Sánchez ‘Bicho’ (-), Lucas Moscariello (6), Mathias Bonaventure
Ortega (-), Lluís Montserrat (-), Álvaro Torres (-), Iker Antonio Marcos (2) y
Ricardo Amérigo (portero suplente).
Parciales cada cinco minutos: 1-2, 4-5, 6-8, 11-9, 13-10, 16-12 -descanso- 20-15,
22-18, 23-20, 27-21, 30-25, 34-28.
Árbitros: García
Mosquera (colegio andaluz) y Muro San José (colegio madrileño). Excluyeron a Dani
Dujshebaev (37’ y 52’), Rubén Río (8’), Alfonso de la Rubia (24’), Víctor
Rodríguez (40’) y Jorge Serrano (43’), por el Recoletas Atlético Valladolid, y
a Lucas Moscariello (10’ y 19’) y Andre Amorim (48’), por el BM Villa de
Aranda.
Incidencias: 26ª jornada de la Liga Loterías Asobal. Pabellón Huerta
del Rey (Valladolid). 2.935 espectadores.
Crónica de www.atleticovalladolid.es