El equipo vasco no
continuará en la próxima temporada ante la ausencia de un segundo patrocinador
imprescindible para la viabilidad de un proyecto por el que han desfilado
grandes estrellas como Samuel Sánchez, Iban Mayo, Roberto Laiseka, Haimar
Zubeldia, Mikel Nieve, Igor Antón, Joseba Beloki, Igor González de Galdeano, Ion
Izaguirre y David Etxebarria, entre otros. Dos décadas de gran ciclismo con un
desbordante apoyo de los aficionados. La Vuelta a España 2013 será su última gran competición.
Una vuelta extraordinariamente abierta y con empacho de montaña.
Nibali y Valverde quieren la segunda.
Una vuelta extraordinariamente abierta y con empacho de montaña.
Nibali y Valverde quieren la segunda.
La Vuelta a España 2013 será la última gran competición del Euskaltel-Euskadi. |
“Hoy (por el martes 20 de agosto) es un día triste para Euskaltel, para
el equipo, para los patrocinadores actuales, para la afición y para todos los
que han apoyado este proyecto. Lamentamos que ninguna empresa o entidad haya
decidido apostar por este equipo, decano del ciclismo de élite mundial”. La
empresa de telecomunicaciones Euskaltel confirmaba un secreto a voces: el
equipo desaparecerá cuando concluya esta temporada. Euskaltel-Euskadi correrá
en esta Vuelta a España su última gran ronda como epílogo a una densa y emotiva historia de dos
décadas. Un sueño que toca a su fin.
Madariaga, junto con el
entonces diputado general de Bizkaia, José Alberto Pradera, prendieron la mecha
mientras comían en una ‘brasserie’ cerca de Lourdes tras asistir a una etapa
del Tour de Francia de 1992. Entonces, Madariaga era chófer de la Diputación de
Bizkaia, un trabajo que compaginaba con su afición al ciclismo como director y
masajista del equipo aficionado Beyena. Pradera le preguntó si creía viable construir
una estructura profesional con corredores vascos y navarros, acompañados por
ciclistas de otras provincias formados en Euskadi. Madariaga aceptó el reto.
Samuel Sánchez había tomado
el testigo de Laiseka y Mayo. En 2007, ganaba tres etapas en la Vuelta y
acababa tercero tras Menchov y Sastre. Era el primer podio del
Euskaltel-Euskadi en una gran ronda. El corredor asturiano repetiría en 2009,
segundo a escasos 55 segundos de la gloria, de Alejandro Valverde. Una gloria
que sí llegó, aunque con otro maillot, el de la selección olímpica española, en
los Juegos de Pekín. Samuel Sánchez ganó el oro. Campeón olímpico. El mayor
logro individual de un corredor de un Euskaltel-Euskadi que había cumplido de
sobra sus sueños fundacionales.
Euskaltel no ha encontrado un segundo e imprescindible patrocinador para
continuar con el proyecto. El equipo ‘naranja’ ya no recorrerá las carreteras.
Hace un año, ya vivió un primer aviso. La retirada del patrocinio del Gobierno
Vasco y de las Diputaciones de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa obligó a la empresa
telefónica a incrementar su inversión. Euskaltel pasó de aportar 3,5 millones anuales a
siete sobre un presupuesto total de nueve. Un esfuerzo complicado de repetir en tiempos de estrecheces económicas. “Durante todos estos
años, Euskaltel ha apoyado al equipo, junto a las instituciones vascas, para
que Euskadi tuviera un equipo ciclista de élite. Una unión natural que se ha
mantenido hasta este momento, en el que la crisis ha impedido la continuidad
del proyecto”, ha justificado la compañía.
Samuel Sánchez, Igor Antón, Mikel Nieve, Mikel Landa, Egoi Martínez, Gorka Verdugo, Jorge Azanza, Juanjo Oroz y Pablo
Urtasun conforman el último ‘nueve’ del Euskaltel-Euskadi en una gran ronda. El
ciclismo español se queda con un único equipo de categoría Pro-Tour, el
Movistar, y pierde su estructura más veterana (veinte años) y la segunda del
pelotón internacional tras el Lotto belga (26 años). Ya no hay vuelto atrás. “Es
un duro golpe para mí y para todo el ciclismo vasco, español e internacional.
Es como si te raptan un hijo y te lo entregan muerto a los ocho meses”, ha
valorado Miguel Madariaga, el alma mater del proyecto.
La afición naranja en el Tour. |
Con un espíritu ingenuo, pero
decidido, crearon la Fundación Euskadi en junio de 1993, el germen del equipo
Euskadi, que se presentó 1994 con, entre otros, Peio Ruiz Cabestany, Rubén
Gorospe, Iñigo Cuesta y Roberto Laiseka. Todo un histórico como Txomin Perurena
haría las labores de director deportivo. El equipo, que vestía un culotte negro
y un maillot con los colores de la ikurriña (rojo, verde y blanco), tuvo unos
comienzos muy complicados. Su primer año se saldó con dos únicos triunfos: la
histórica primera victoria de Agustín Sagasti, tras culminar una larga escapada
de ochenta kilómetros en el sector matinal de la quinta etapa de la Vuelta al País Vasco
con final en el Santuario de Loyola, y un triunfo del velocista Juan Carlos
González Salvador en la Vuelta a Castilla y León. La formación se estrenó en la
Vuelta a España con Iñigo Cuesta como destacado (decimoquinto en la general).
La primera gran victoria
llegó en los campeonatos de España contra el reloj de 1996. Euskadi firmó un
doblete con Iñigo González de Heredia (primero) y Álvaro González de Galdeano
(segundo). Euskadi progresaba muy lentamente y el dinero empezaba a escasear
para mantener a un equipo que ilusionaba a la afición vasca, que llenaba las
carreteras como nunca, pero que tenía números rojos. La empresa de telecomunicaciones
Euskaltel fue la salvadora en junio de 1997. El equipo, con Julián Gorospe como
nuevo director, pasó a llamarse Euskaltel-Euskadi. Entre las aportaciones de la
Fundación Euskadi, con las instituciones vascas, y Euskaltel, la viabilidad fue
un hecho. El reto pasó a ser mejorar los resultados, algo que tardó un poco más
en llegar.
Roberto Laiseka. |
Roberto Laiseka fue el
primer gran nombre del Euskaltel-Euskadi. El enjuto escalador de Gernika firmó
la primera victoria importante: etapa en Abantos en la Vuelta a España
1999. Un éxito que contagió a todo el equipo con posteriores gestas: Euskal Bizikleta (Haimar Zubeldia), Tour del Porvenir (Iker
Flores) y victoria en Ordino-Arcalís en la Vuelta (de nuevo Laiseka) en el año 2000. Mayo tomó el relevo en 2001 con las victorias en las generales de la Midi
Libre y la Clásica de los Alpes. Pero el
gran reto era el Tour, el sueño que alumbró el proyecto a las puertas de Lourdes.
Los buenos resultados del equipo y la gran afición vasca al ciclismo obraron el
milagro. Euskaltel-Euskadi debutó en la ronda gala en el año 2001 como equipo
invitado. Y llegó el éxtasis. Laiseka, de nuevo, pasó a la historia del equipo con un
triunfo en los Pirineos, rodeado de una ya famosa marea naranja y de ikurriñas,
en Luz Ardiden.
Asentado ya en la élite,
Euskaltel-Euskadi continuó creciendo de la mano de sus seguidores y sus ciclistas. Los grandes
éxitos se sucedían: Vuelta al País Vasco (Iban Mayo), victoria en el mítico Alpe
D’Huez en el Tour de Francia (Mayo), quinto (Zubeldia) y sexto puesto (Mayo) en
el Tour, general del Tour del Porvenir (Egoi Martínez), etapa en la Vuelta (Unai Etxebarria) en 2003; Dauphiné Libéré (Mayo) en
2004; Vuelta a Suiza (Aitor González), Dauphiné Libéré (Iñigo Landaluce) y victorias de etapa en la Vuelta de
Laiseka y Samuel Sánchez en 2005; Vuelta a Burgos y Subida a Urkioka (Mayo),
victorias de etapa de Samuel Sánchez e Igor Antón en la Vuelta y Campeonato de
Zurich del asturiano en 2006.
Samuel Sánchez, campeón olímpico. |
Poco quedaba por convertirse
en realidad. Igor Antón, el nuevo héroe naranja, venció en dos etapas de la
Vuelta a España 2010. Mikel Nieve ganó otra. Antón iba camino de la victoria
final. A una semana del final de la Vuelta, vestido de líder, se cayó a seis
kilómetros de la meta de Peña Cabarga. En 2011, se cumplieron otros dos retos
pendientes. Euskaltel-Euskadi, que había debutado seis años antes en el Giro,
se estrenó por partida en la corsa rosa con victorias de etapa de Antón, que
repetiría en la Vuelta, y Nieve. Ion Izaguirre venció en otra jornada del Giro 2012. Mientras, en
el Tour, Samuel Sánchez ganaba en Luz Ardiden emulando a Laiseka. El asturiano,
que había sido cuarto un año antes, subía al podio de la edición de 2010 tras
la posterior sanción por dopaje por clembuterol de Alberto Contador.
Y comenzó la cuesta abajo.
2012 supuso el último año de la Fundación Euskadi como patrocinador. El inicio
del fin. Euskaltel, sin colaboración de ninguna empresa, solo ha aguantado un
año. La crisis pesa más que las ilusiones. La Vuelta verá las últimas pedaladas
de un equipo que nació en Lourdes como un milagro y que ha conseguido durante
dos décadas brillar en la carretera con triunfos de sus corredores y con un
espectacular apoyo de su afición. Betira arte eta eskerrik asko, Euskaltel-Euskadi.
Hasta siempre y muchas gracias.