martes, 17 de octubre de 2017

Todos contra los Warriors

Dos anillos, con un subcampeonato entre medias, en tres años. Récord histórico en una temporada regular desbancando a los Bulls de Jordan. Precursores de un baloncesto moderno, con un excelso equilibrio defensa-ataque, con dos tiradores de leyenda (Stephen Curry y Klay Thompson), dos jugadores totales (Draymond Green y Andre Iguodala), un MVP a la altura de los más grandes en la historia de la NBA (Kevin Durant) y el entrenador idóneo (Steve Kerr) para explotar todo ese talento. ¿Cómo no va a ser, otra vez, Golden State el gran favorito?

Kevin Durant y Stephen Curry, unos Warriors de leyenda.
Foto: Instagram Golden State Warriors.
Le esperan, como en los últimos tres cursos, los Cavaliers de LeBron y, al menos, otros cuatro candidatos: Boston, como ‘única’ alternativa de peso a Cleveland en la Conferencia Este, y San Antonio, Oklahoma y Houston en el ‘Wild West’. Washington, Milwaukee, Minnesota y New Orleans, candidatos a revelación de la nueva temporada de la NBA. Todos contra los Warriors.

Golden State Warriors ya es una dinastía.

No es nada fácil lo conseguido por el equipo de Steve Kerr en los últimos tres años: dos anillos (2015 y 2017), un subcampeonato (2016) y el récord histórico de la temporada regular (73-9), relevando a los Bulls de Jordan del curso 1995/96.

Éxitos colectivos e individuales: Dos MVP de la temporada regular para Stephen Curry (2015 y 2016), máximo anotador, además, de la temporada regular en 2016; MVP de las Finales 2015 para Andre Iguodala y MVP de las Finales 2017 para Kevin Durant; Mejor Defensor del Año para Draymond Green en 2017; Mejor Entrenador de la NBA para Steve Kerr en 2016 e incluso Mejor Ejecutivo para Bob Myers en 2015 y 2017.

Los títulos y los éxitos son la lógica consecuencia del juego en la pista.

Los Warriors no son una dinastía por casualidad. Golden State ha modernizado la NBA. Un equipo que ha abierto una nueva era, el reino del triple, del ‘small ball’. Y mucho más. Porque los Warriors hacen muchas más cosas que enchufar de tres en tres.

Son los precursores (quien triunfa marca tendencia) del baloncesto moderno, con un excelso equilibrio defensa-ataque, con dos tiradores de leyenda (Stephen Curry y Klay Thompson), dos jugadores totales (Draymond Green y Andre Iguodala), un MVP a la altura de los más grandes en la historia de la NBA (Kevin Durant) y el entrenador idóneo (Steve Kerr) para explotar todo ese talento. ¿Cómo no va a ser, otra vez, Golden State el gran favorito?

A la dinastía de los Warriors ya solo le falta escribir más capítulos, anudarse más anillos, para rivalizar, cara a cara, con los mejores equipos de la historia en la NBA: los Celtics de Red Auberbach y Bill Russell, los Sixers de Wilt Chamberlain, los Celtics de Larry Bird, los Lakers del Showtime de Magic y Kareem, los Bulls de Jordan y los Spurs de Popovich.

Ese es el reto de los Warriors en esta temporada y en las próximas. Un reto histórico.

Para eso, Golden State ha conservado un bloque perfecto, una sinfonía en la pista, en un intenso verano de despachos con las renovaciones de Stephen Curry, con su primer megacontrato de estrella (cinco años, 201 millones), Kevin Durant (dos años, 53 millones), Andre Iguodala (tres años, 48 millones) y Shaun Livingston (tres años, 24 millones). Los Warriors, con las novedades del anotador Nick Young, el israelí Omri Casspi y el rookie Jordan Bell (recomendación directa de Draymond Green), han conservado también a piezas secundarias, pero valiosas, como David West, Zaza Pachulia y JaVale McGee. Ian Clark, Matt Barnes, James McAdoo son las tres bajas del equipo campeón.

Lo que funciona, no se cambia.

Los Warriors están decididos a hacer (aún más) historia. Y sus estrellas, convencidas del reto, han sacrificado dinero, en especial Durant, para no perder a ningún compañero. Durant, que ya tiene su primer anillo, ha perdonado casi diez millones imprescindibles para las renovaciones de Livingston e Iguodala, que estaba casi fuera del equipo de la Bahía.

Kerr ha avisado de que los Warriors 2017/18 no se relajarán. Serán aún mejores. Curry y Durant quieren hacer más historia.

“Stephen Curry es el jugador que más impacto ofensivo, por lo que hace con los defensas rivales, ha tenido en la historia. Lo que hace pone el miedo en los ojos de sus rivales. Y ahora está en su mejor momento tanto físico como emocional. Creo que ahora es mejor que nunca”, ha subrayado Kerr sobre el base de los Warriors, una figura tan importante como para ‘tambalear’ al mismo presidente de los Estados Unidos. Los Warriors, con Curry al frente, plantarán, cuando viajen a Washington, a Trump por sus políticas racistas. ¿Alguien da más?

Kerr también ha tenido palabras para Durant, “un jugador diferente con respecto al año pasado. Hace un año, estuvo intentando averiguar qué demonios hacíamos en Golden State y este curso está totalmente metido en ello. Entiende los conceptos. Está cómodo en su entorno y no solamente cuando está en cancha”.

¿Alguien puede ganar a estos Warriors?

Por muy difícil que parezca, sí.

Ya ha pasado. Cleveland derrotó a los Warriors de la temporada regular perfecta con una histórica remontada en las Finales, de 3-1 a 3-4.

Claro que entonces no estaba Durant. Aún había algunas debilidades.

Wade-LeBron, reencuentro en Cleveland tras dos anillos en cuatro finales con Miami.
Foto: David Liam Kyle / NBAE vía Getty Images.
Las últimas Finales dejaron a los Cavs una sensación de impotencia. Cleveland evitó la barrida (4-1), pero no la percepción de una importante inferioridad ante Golden State.

Un peligro con LeBron a un año de saltar al mercado, con Lakers y otras franquicias a los pies de ‘King’ James.

Cleveland no ha tirado la temporada para agradar a LeBron (tres anillos y ocho finales, siete consecutivas). Y eso que el verano ha sido inesperadamente complicado, con dos salidas extrañas: el general manager Dave Griffin y el base Kyrie Irving, cansado de vivir a la sombra de James.

Los Cavs, a diferencia de los Warriors, sí han cambiado. LeBron mantiene solo a seis compañeros: Kevin Love, que jugará como ‘center’, Tristan Thompson, que saldrá en la segunda unidad, JR Smith, que cederá su puesto de titular, Kyle Korver, Iman Shumpert y Channing Frye.

Cleveland se ha reinventado tras la salida de Irving, en un traspaso (de los que solo pasan en la NBA) a su principal rival en la Conferencia Este: Boston. Un buen acuerdo para los Cavs de LeBron: un base All Star, Isaiah Thomas (baja hasta, en principio, la segunda mitad de la temporada por una lesión de cadera), el polivalente Jae Crowder (que será titular), el ‘rookie’ croata Ante Zizic, la primera ronda (que se espera alta) de Brooklyn en el draft 2018 y una segunda ronda en 2020.

Mientras Isaiah Thomas se recupera, LeBron se reencontrará en Cleveland con su amigo Dwyane Wade (cuatro años juntos en los Heat, con cuatro finales y dos anillos) e impulsará la carrera de todo un MVP machacado por las lesiones, Derrick Rose. Jeff Green, José Manuel Calderón y Cedi Osman completan las novedades de los Cavs, que en los últimos días han cortado al veterano Richard Jefferson para no dispararse el impuesto de lujo.

¿Cuartas Finales consecutivas entre Golden State y Cleveland?

Sería histórico (en una NBA histórica).

Las terceras ya lo fueron.

James Harden estrena socio en Houston: Chris Paul.
Foto: www.nba.com
La temporada 2017/18 insinúa, no obstante, una mayor competencia para Warriors y Cavs. Oklahoma, Houston y San Antonio retan a Golden State en el ‘Wild West’. Mientras, Boston está preparado para medirse de tú a tú con Cleveland.

El listón de Warriors ha obligado a los candidatos al anillo a reforzarse a lo grande.

Así lo ha hecho Oklahoma, con un proyecto a un año tan arriesgado como cautivador. Sam Presti, general manager de los Thunder, ha forjado un relumbrante big three para Westbrook, MVP de la pasada temporada promediando un triple doble por noche (31,6 puntos, 10,7 rebotes y 10,4 asistencias), pero eliminado en la primera ronda de los playoffs ante Houston. A Oklahoma, sin entrar en los pronósticos, han llegado dos de las piezas más codiciadas y mediáticas del mercado: Paul George, que había anunciado que no renovaría con Indiana, y Carmelo Anthony, fuera de los planes de los Knicks desde hace tiempo. Ambos volverán al mercado en el próximo verano con o sin anillo con los Thunder.

Houston, vigente semifinalista de Conferencia, también ha agitado la NBA para crecer y acercarse a Golden State. Los Rockets de James Harden serán, además, los Rockets de Chris Paul. Una dupla que, de funcionar (la mezcla de Harden y Paul es una gran incógnita), colocaría a Houston de lleno en la lucha por el anillo. Es otra jugada arriesgada. Paul acaba contrato y todo puede pasar en Houston, donde continúan Trevor Ariza, Eric Gordon, Ryan Anderson y el ‘run & gun’ de Mike D’Antoni.

San Antonio ha sido más conservador. Los Spurs son un prodigio de regularidad en el deporte de élite en Estados Unidos: dos décadas en playoffs, con cinco anillos (1999, 2003, 2005, 2007 y 2014), siete campeonatos de Conferencia y trece de División. Siempre quedará la duda de hasta dónde habría llegado San Antonio, que dominaba por más de veinte puntos en el partido inaugural de la serie, en las finales de Conferencia ante Golden State si el tobillo izquierdo de Kawhi Leonard hubiera eludido a Pachulia. Sin Parker en los primeros partidos, casi recuperado de la lesión que le sacó de los últimos playoffs, Popovich conserva el bloque de los últimos años, con las incorporaciones de Rudy Gay y Joffrey Lauvergne.

Gordon Hayward y Kyrie Irving, los nuevos líderes del Garden.
Foto: Brian Babineau / NBAE vía Getty Images.
Boston, en principio, es el único ‘outsider’ a Cleveland en la Conferencia Este. Los Celtics ya se plantaron en las últimas Finales del Este, pero los Cavs no tuvieron piedad (4-1), con un par de revolcones de 44 y 33 puntos. Danny Ainge ha acelerado el proceso del regreso a la élite de Boston. Punto final a la prudencia. Marcus Smart, Terry Rozier, Jaylen Brown y Al Horford son los cuatro únicos ‘verdes’ que siguen en el Garden. Ainge ha revolucionado el vestuario de Brad Stevens para soñar con el anillo: Kyrie Irving, Gordon Hayward, Marcus Morris y el novato Jayson Tatum, entre otros.

Washington, Milwaukee, Minnesota y New Orleans forman el grupo de candidatos a revelación de la temporada.

El anillo, a priori, es un objetivo lejano. A priori.

Washington confía en su proyecto (John Wall, Bradley Beal, Markieff Morris, Marcin Gortat y el renovado Otto Porter, con 170 millones en cuatro años). Los Wizards, que llevaron a los Celtics hasta el séptimo partido en las semifinales de la Conferencia Este, dependerán del rendimiento de su banquillo (Satoransky, Meeks, Oubre, Scott, Mahinmi…), uno de los más cortos de la Liga, para subir un peldaño más.

Milwaukee es un proyecto de presente y, sobre todo, futuro. El que quiera Giannis Antetokounmpo (22 años). Un jugador total en fase aún de progresión. El griego, de sangre nigeriana, se convirtió en la pasada temporada en el primer jugador en la historia de la NBA en el top 20 en las cinco principales categorías estadísticas: puntos (14º, con 22,9), rebotes (15º, con 8,7), asistencias (18º, con 5,4), robos (9º, con 1,6) y tapones (5º, con 1,9). Incluso con la ausencia, por lesión, de Jabari Parker hasta entrado 2018, los Bucks, con Anteto, son un equipo a vigilar desde ya.

Minnesota, trece años después, apunta a los playoffs con refuerzos como Jimmy Butler.
Foto: Instagram Minnesota Timberwolves.
Minnesota lleva trece años fuera de los playoffs, desde que Kevin Garnett (MVP de la temporada regular) liderara a los ‘lobos’ a las Finales de la Conferencia Oeste ante los Lakers de Kobe, Shaquille, Payton y Malone. Una larga espera, la mayor en la actual NBA. Se acabó la paciencia. El segundo año de Thibodeau en Minnesota devolverá, sí o sí, a la franquicia a la élite. Los jóvenes Wiggins y Towns ya tienen maestros: Butler, Teague, Crawford, Gibson y Brooks.

New Orleans contrarrestará la tendencia, casi absoluta, del ‘small ball’ con la mejor pareja de interiores de la NBA: Anthony Davis – DeMarcus Cousins. La mezcla fracasó en la pasada temporada tras la llegada de Cousins después del All Star. El pívot saldrá al mercado en el próximo verano. Un año para triunfar. Un año para que los ‘hombres grandes’ vuelvan a dominar en la NBA. Davis y Cousins cuentan con una plantilla corta, pero con ingredientes importantes: Rajon Rondo, Jrue Holiday e incluso Tony Allen.

Los playoffs serán el objetivo máximo para los veinte restantes equipos de la Liga. Algunos ni eso, como Atlanta, Chicago, Brooklyn, Orlando, Indiana y Knicks, en el Este, y Phoenix, Dallas, Sacramento y los Lakers, en el Oeste.

Atlanta, con el alemán Schröder, ha entrado de lleno en la fase de reconstrucción. Ni rastro de los Spurs del Este de Budenholzer, con Teague, Korver, Carroll, Millsap y Horford. Chicago, tras el traspaso de Butler y la salida de Wade, mirará al futuro, a largo plazo, con LaVine, Dunn y el finlandés Markanne. Brooklyn, ya sin Brook Lopez, seguirá penando el atronador desembarco de Prokhorov con el fallido asalto al anillo con Garnett, Pierce y Deron Williams. Orlando, cinco años sin playoffs, concederá un margen de crecimiento a Vogel. Indiana comenzará una nueva etapa sin su gran estrella: Paul George. Los Knicks, por último, ya sin Phil Jackson en la gerencia, primarán la evolución de sus promesas (Ntilikina) y realidades (Porzingis).

En el Oeste, Phoenix esperará el crecimiento de sus jóvenes: Booker, Bender, Chriss y el novato Josh Jackson. Dallas, con Nowitzki aún en el vestuario, se centrará en la progresión de su ‘rookie’: Dennis Smith. Sacramento, once años sin playoffs, iniciará un nuevo camino sin Cousins y con muchos novatos, entre ellos el serbio Bogdanovic. Los Lakers tampoco contarán en la batalla por los playoffs a pesar del enorme ‘hype’ de Lonzo Ball, número dos del draft.

Lonzo Ball, ¿nacido para jugar y triunfar en los Lakers?
Foto: Andrew D. Bernstein / NBAE vía Getty Images.
Los playoffs sí son el objetivo de Toronto, que renovó a Ibaka y Lowry; Miami, que se quedó a un partido de pelear por el anillo tras una soberbia segunda mitad de temporada; Charlotte, con una nueva oportunidad para Dwight Howard; Detroit, con Avery Bradley reforzando un estancado proyecto de Van Gundy; y (ahora sí) Philadelphia.

A los Sixers, si les respeta la salud, se les puede exigir, como mínimo, que opten a los playoffs. Así debería ser con un ‘roster’ con los dos últimos números uno del draft, aunque aún no hayan debutado en la NBA: el australiano Ben Simmons y Markelle Fultz. Y en un equipo con una de las grandes sensaciones de los últimos años en el baloncesto mundial: Joel Embiid. 31 partidos, tras dos años en blanco, han bastado para desatar las más altas expectativas con el pívot camerunés.

En el Oeste, con Golden State, Oklahoma, Houston, San Antonio, Minnesota y New Orleans como favoritos, las dos teóricas últimas plazas para los playoffs depararán una pelea entre cinco franquicias de gran nivel: Clippers, Portland, Denver, Memphis y Utah. Cuatro equipos de playoffs en las últimas temporadas, más Denver, que se quedó cerca en el pasado año.

El ‘big three’ Paul-Griffin-DeAndre no rompió el gafe en los Clippers. Las lesiones hicieron lo suyo. Con la marcha de Paul a Houston, los Clippers de Doc Rivers han perdido protagonismo, aunque cuentan con una plantilla más equilibrada con las importantes altas de Teodosic (debutante en la NBA a sus treinta años), Beverly y Gallinari. Portland, con el dúo Lillard-McCollum, competirá en una NBA en la que los equipos con dos grandes estrellas se quedan algo cortos, en especial en el Oeste. Denver, con el fichaje de Millsap y la progresión de Jokic, llamará a las puertas de los playoffs, el escenario habitual en los siete últimos años de Memphis, que ha perdido a Randolph, Carter y Allen pero conserva a Marc Gasol y Conley. Utah, tras la importante baja de Hayward, apelará a la fuerza de un bloque ya construido y al sistema de Snyder, con Gobert y Ricky Rubio como referentes.


PALMARÉS:


2017: Golden State Warriors 4-1 Cleveland Cavaliers. 2016: Cleveland Cavaliers 4-3 Golden State Warriors. 2015: Golden State Warriors 4-2 Cleveland Cavaliers. 2014: San Antonio Spurs 4-1 Miami Heat. 2013: Miami Heat 4-3 San Antonio Spurs. 2012: Miami Heat 4-1 Oklahoma City Thunder. 2011: Dallas Mavericks 4-2 Miami Heat. 2010: Los Angeles Lakers 4-3 Boston Celtics. 

2009: Los Angeles Lakers 4-1 Orlando Magic. 2008: Boston Celtics 4-2 Los Angeles Lakers. 2007: San Antonio Spurs 4-0 Cleveland Cavaliers. 2006: Miami Heat 4-2 Dallas Mavericks. 2005: San Antonio Spurs 4-3 Detroit Pistons. 2004: Detroit Pistons 4-1 Los Angeles Lakers. 2003: San Antonio Spurs 4-2 New Jersey Nets. 2002: Los Angeles Lakers 4-0 New Jersey Nets. 2001: Los Angeles Lakers 4-1 Philadelphia 76ers. 2000: Los Angeles Lakers 4-2 Indiana Pacers.

1999: San Antonio Spurs 4-1 New York Knicks. 1998: Chicago Bulls 4-2 Utah Jazz. 1997: Chicago Bulls 4-2 Utah Jazz. 1996: Chicago Bulls 4-2 Seattle Supersonics. 1995: Houston Rockets 4-0 Orlando Magic. 1994: Houston Rockets 4-3 New York Knicks. 1993: Chicago Bulls 4-2 Phoenix Suns. 1992: Chicago Bulls 4-2 Portland Trail Blazers. 1991: Chicago Bulls 4-1 Los Angeles Lakers. 1990: Detroit Pistons 4-1 Portland Trail Blazers.


1989: Detroit Pistons 4-0 Los Angeles Lakers. 1988: Los Angeles Lakers 4-3 Detroit Pistons. 1987: Los Angeles Lakers 4-2 Boston Celtics. 1986: Boston Celtics 4-2 Houston Rockets. 1985: Los Angeles Lakers 4-2 Boston Celtics. 1984: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1983: Philadelphia 76ers 4-0 Los Angeles Lakers. 1982: Los Angeles Lakers 4-2 Philadelphia 76ers. 1981: Boston Celtics 4-2 Houston Rockets. 1980: Los Angeles Lakers 4-2 Philadelphia 76ers.

1979: Seattle SuperSonics 4-1 Washington Bullets. 1978: Washington Bullets 4-3 Seattle SuperSonics. 1977: Portland Trail Blazers 4-2 Philadelphia 76ers. 1976: Boston Celtics 4-2 Phoenix Suns. 1975: Golden State Warriors 4-0 Washington Bullets. 1974: Boston Celtics 4-3 Milwaukee Bucks. 1973: New York Knicks 4-1 Los Angeles Lakers. 1972: Los Angeles Lakers 4-1 New York Knicks. 1971: Milwaukee Bucks 4-0 Baltimore Bullets. 1970: New York Knicks 4-3 Los Angeles Lakers.


1969: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1968: Boston Celtics 4-2 Los Angeles Lakers. 1967: Philadelphia 76ers 4-2 San Francisco Warriors. 1966: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1965: Boston Celtics 4-1 Los Angeles Lakers. 1964: Boston Celtics 4-1 San Francisco Warriors. 1963: Boston Celtics 4-2 Los Angeles Lakers. 1962: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1961: Boston Celtics 4-1 Saint Louis Hawks. 1960: Boston Celtics 4-3 Saint Louis Hawks.

1959: Boston Celtics 4-0 Minneapolis Lakers. 1958: Saint Louis Hawks 4-2 Boston Celtics. 1957: Boston Celtics 4-3 Saint Louis Hawks. 1956: Philadelphia Warriors 4-1 Fort Wayne Pistons. 1955: Syracuse Nationals 4-3 Fort Wayne Pistons. 1954: Minneapolis Lakers 4-3 Syracuse Nationals. 1953: Minneapolis Lakers 4-1 New York Knicks. 1952: Minneapolis Lakers 4-3 New York Knicks. 1951: Rochester Royals 4-3 New York Knicks. 1950: Minneapolis Lakers 4-2 Syracuse Nationals. 1949: Minneapolis Lakers 4-2 Washington Capitols. 1948: Baltimore Bullets 4-2 Philadelphia Warrios. 1947: Philadelphia Warriors 4-1 Chicago Stags.


CAMPEONES (con sus actuales denominaciones):

Boston Celtics: 17.

Los Angeles Lakers: 16.

Chicago Bulls: 6.

San Antonio Spurs y Golden State Warriors: 5.

Philadelphia 76ers, Detroit Pistons y Miami Heat: 3.

New York Knicks y Houston Rockets: 2.

Baltimore Bullets, Sacramento Kings, Atlanta Hawks, Milwaukee Bucks, Portland Trail Blazers, Washington Wizards, Seattle SuperSonics, Dallas Mavericks y Cleveland Cavaliers: 1.