sábado, 12 de enero de 2013

Con Ebert, es más fácil

Extraordinaria actuación del extremo alemán que adelantó al Real Valladolid con un potentísimo derechazo desde fuera del área, asistió a Óscar para que marcara el 2-1 a tres minutos del final y sentenció en el tiempo de prolongación con una obra de arte tras sentar a Aouate y Bigas. El Mallorca, con un Giovani peligroso en toda la tarde, fue mejor en la segunda parte, pero inquietó poco a Dani Hernández.

Ebert destroza a Aouate y a la defensa del Real Mallorca.
Fotos: Ángel Becerra (www.realvalladolid.es)
Por si a algún aficionado blanquivioleta le quedaba alguna duda, el Real Valladolid tiene esta temporada a su propio Leo Messi, Cristiano Ronaldo o Radamel Falcao. Es alemán, juega con el número 20 en la banda derecha y se llama Patrick Ebert. El germano, que se lesionó a la media hora del partido contra el Real Madrid y se perdió los encuentros contra el Deportivo, el Barça y el Celta, no pudo tener un mejor regreso a la alineación titular de Miroslav Djukic: dos goles y una asistencia a Óscar para que el salmantino rompiera a tres minutos del final el empate a uno.

Todo lo bueno que pasó en las filas del Real Valladolid en el césped del estadio José Zorrilla tuvo como protagonista al extremo alemán. Con él, el equipo es otro bien distinto. Ebert insufla la velocidad, profundidad y ambición que tanto se echan de menos cuando está ausente. El alemán se ha adaptado a las mil maravillas al fútbol español y partido tras partido está adquiriendo, con la complacencia de Óscar, los galones de líder de los blanquivioletas. Los tres puntos conquistados ante el Real Mallorca son casi exclusiva responsabilidad suya.

Cuatro partidos, desde la victoria ante el Sevilla (1-2) en el Sánchez Pizjuán, llevaba el Real Valladolid sin conocer el sabor de la victoria. Una mala racha que coincidía con lesiones de jugadores importantes en el esquema de Djukic como Jesús Rueda, Víctor Pérez y el propio Patrick Ebert. El técnico serbio, que en esta semana ha pedido la llegada de un mediocentro y un hombre de banda, recuperaba contra el Mallorca a Óscar, sancionado en la pasada jornada, y a Ebert. La imagen del equipo fue muy distinta a la que se observó en Balaídos ante el Celta . Y también el resultado, 3-1 en Balaídos.

De esta manera, el Real Valladolid gana mucha tranquilidad para cerrar la primera vuelta con 25 puntos, siete victorias, cuatro empates y ocho derrotas. 27 goles a favor, y 25 en contra. Números más que respetables para un recién ascendido que tiene un precario estado económico y que no puede pujar en el mercado futbolístico para fichar jugadores. Todo lo que llega es a coste cero. Y uno de ellos ha sido este sensacional Patrick Ebert. Mejor acierto, imposible.

El alemán avisó muy pronto de sus intenciones. El Real Valladolid salió mejor al campo, con el Mallorca, donde debutaba el exsevillista Luna, esperando atrás para cazar una contra con la velocidad de Arizmendi y, en especial, Giovani. El mexicano ha sido un incordio para la defensa pucelana en todo el encuentro. No obstante, fue Ebert el primero en acercarse al gol. Lo hizo en en el minuto 7 con una de sus especialidades, los lanzamientos directos de falta, con un tiro duro que rechazó al área Aouate. El balón llegó a Marc Valiente que remató, solo, de cabeza por encima de la portería del meta israelí.

Dominaba con claridad el Real Valladolid ante un agazapado Mallorca. Djukic había reclamado paciencia a sus jugadores para superar a los bermellones, y los blanquivioletas seguían al dedillo el consejo de su técnico. Solo Giovani inquietaba en el área de Dani Hernández. Aunque, es cierto, con una ocasión muy clara. El mexicano se aprovechó de una pérdida castellana en el medio campo para meter la moto y pisar zona de peligro. Allí, asistió al centro para que Víctor Casadesús, que dejó en el banquillo a Tomer Hemed, rematara a gol. Sereno, con un leve empujón, lo evitó. El colegiado canario Hernández Hernández no señaló penalti.
Ebert comienza su show ante el Real Mallorca.
Superado ese susto, el Real Valladolid continuó tocando y buscando los espacios en la defensa balear. Y allí estaba de nuevo Ebert. El alemán probó en el minuto 19 a Aouate con un centro que se envenenó y que obligó al portero del Mallorca a desviar a saque de esquina. Ebert no se detuvo. Dos minutos después, exhibió su portentoso disparo lejano. Cogió el balón en la banda izquierdo, ganó unos metros y chutó con potencia con su pierna derecha a la esquadra diestra de Aouate. Un soberbio misil a la altura de los mejores lanzamientos de Cristiano Ronaldo o Leo Messi. El gol de Ebert premiaba, de paso, a un equipo vallisoletano que llevaba casi por completo el peso del partido.

El Mallorca, sin embargo, igualó en una acción aislada. Djukic había advertido en esta semana del peligro de los delanteros del equipo de Caparrós en las contras. Y tenía razón. Arizmendi robó un balón en el medio campo, se internó por la banda de Balenziaga y templó un gran centro directo a la cabeza de Víctor Casadesús. Una asistencia de libro directa al área pequeña de un Dani Hernández que no salió a por un balón que superó, igualmente, a Sereno. El Mallorca, con un chispazo, reponía las tablas en el marcador.

El juego decayó en la segunda mitad con un Real Valladolid que acusó el cansancio de Ebert. El alemán, con el paso de los minutos, notó la inactividad de un mes sin jugar. No obstante, su espíritu ganador y su ambición no desaparecieron y tiró del equipo en momentos en los que el Mallorca controlaba más el partido. Los baleares pecaron, en cambio, de conservadores. En ningún momento fueron a por los tres puntos y apenas si acariciaron la victoria con un sorprendente lanzamiento lejano de falta de Giovani que besó el larguero y en una veloz contra de Arizmendi que taponó Sereno. Dani Hernández, en otro disparo directo del mexicano, abortó una tercera ocasión del Mallorca.

El encuentro, que durante muchos minutos fue un duelo entre Ebert y Giovani, caminaba sin grandes sobresaltos hacia un empate que podía considerarse justo. En la segunda mitad, la presión blanquivioleta fue menor. Rukavina era el único que creaba peligro, junto con Ebert. Omar, que fue sustituido por Bueno, y Óscar no aparecían. Larsson, apuesta de Djukic por delante de un Javi Guerra que ha vivido una semana llena de rumores sobre su inminente futuro fuera del club, tampoco rondaba el gol. Guerra relevó al sueco en el minuto 80. Y el Mallorca se conformaba, a priori, con sacar un punto de Zorrilla.

Ebert, sin embargo, no estaba conforme. Cansado, el alemán optó por los disparos lejanos como arma ofensiva. Aouate no podía relajarse. A tres minutos del final, tras recibir un pase de Bueno, mostró otra faceta de su juego: la visión, con un pase a la espalda de la defensa del Mallorca que Óscar, gris hasta entonces, se estiró para tocar con la puntera. Octava diana de la temporada del salmantino, y 2-1. Zorrilla, en una tarde de tiempo desapacible, con lluvia intermitente y viento, vibraba. El Real Valladolid se acercaba a una victoria muy importante para el objetivo de la permanencia. Y aún quedaba un postrero regalo.

Al más puro estilo Messi, Cristiano Ronaldo o Falcao, Ebert maravilló a la afición con una auténtica obra de arte en el tiempo de prolongación. Un doble recorte a Bigas y Aouate que sentó al lateral izquierdo y al portero del Mallorca para cerrar el marcador (3-1) Quinto gol del extremo, que suma también cinco asistencias, en la Liga. Un campeonato que ha encontrado en Patrick Ebert a un jugador de primerísimo nivel. Un tesoro que el Real Valladolid sueña con retener para seguir disfrutando de su juego y alcanzar la ansiada permanencia en Primera. Con Ebert, es más fácil que se pueda.

Alineaciones:

Real Valladolid 3: Dani Hernández; Rukavina, Sereno, Marc Valiente, Balenziaga; Sastre, Álvaro Rubio, Ebert, Óscar (Baraja 90’), Omar Ramos (Bueno 71’); y Larsson (Javi Guerra 80’).

Real Mallorca 1: Aouate; Nsue, Nunes, Geromel (Tomer Hemed 88’), Bigas; Martí (Fontás 85’), Pina, Arizmendi, Giovani, Luna (Pereira 55’); y Víctor Casadesús.

Goles:

1-0 (Min 21.) Extraordinario latigazo de Ebert. El alemán coge el balón en la banda izquierda, se acerca al área grande y dispara con potencia. La pelota entra como un obús en la esquadra derecha de Aouate.

1-1 (Min 37) Arizmendi roba un balón en el medio campo, inicia una rápida contra y centra a la perfección desde la banda derecha directo a la testa de Víctor Casadesús. Dani Hernández se queda bajo los palos y el esférico sobrepasa a Sereno.

Óscar rompe el empate a tres minutos de los noventa reglamentarios.
2-1 (Min 87) Bueno abre a Ebert. El alemán sirve un espectacular pase a Óscar. El salmantino se estira y anota con la puntera derecha.

3-1 (Min 92) Obra de arte de Ebert, que encara al lateral izquierdo del Mallorca, Bigas, al que rompe con un primer regate. El alemán dribla posteriormente también a Aouate y marca.

Árbitro: Hernández Hernández (colegio canario) Mostró cartulinas amarillas a Sastre (47’) y Sereno (58’), por parte del Real Valladolid, y a Luna (22’), Geromel (30’), Giovani (60’) y Bigas (60’), por el Real Mallorca. Le reclamaron dos penaltis, uno en cada área. El primero, por un empujón de Sereno de Víctor Casadesús, que impidió llegar al delantero a rematar una asistencia de Giovani que era medio gol, y el segundo, con un desplazamiento de Geromel a Larsson. Ambas jugadas muy justas para señalarse un penalti.

Incidencias: Estadio José Zorrilla. Partido correspondiente a la decimonovena jornada de la Liga BBVA con la presencia, en una tarde desapacible, de 12.949 espectadores. Los jugadores del Real Valladolid saltaron al campo con camisetas donde se leía “Ánimo Víctor” para apoyar al jugador manchego, lesionado de gravedad en el peroné de su pierna derecha.

Las notas:

Dani Hernández (5): Los delanteros del Mallorca no le forzaron demasiado. Se complicó él solo con su habitual debilidad en los balones aéreos. En el gol del Mallorca no debió quedarse bajo los palos.

Rukavina (7): La banda derecha blanquivioleta fue la mejor baza ofensiva. Subió con peligro desdoblando a Ebert. En defensa, no sufrió. El debutante Luna y Pereira perdieron el duelo con el lateral serbio.

Sereno (6): No fue uno de sus peores encuentros, aunque sigue sin transmitir demasiada seguridad. Se tragó el centro de Arizmendi en el gol de Víctor Casadesús. En la segunda parte, cortó un peligroso contragolpe del mismo Arizmendi cuando el jugador del Mallorca se disponía a disparar en el área pequeña de Dani Hernández.

Marc Valiente (6): Sin grandes fallos, si bien sufrió con las arrancadas en velocidad de Giovani.
Balenziaga se lamenta del gol del Real Mallorca.
Balenziaga (6): Correcto en defensa, aunque no pudo parar a Arizmendi en el centro del gol del Mallorca. En ataque, subió poco.
Álvaro Rubio (6): Por momentos, jugó muy cerca de los centrales. No destacó en la distribución del juego.
Sastre (6): De más a menos. Muy activo en la primera mitad en la recuperación de balones. En la segunda, se difuminó. Hasta ahora cumple con su trabajo de sustituto del lesionado Víctor Pérez.

Ebert (10): Exhibición del extremo derecho alemán. Regresaba al once titular tras casi un mes lesionado. Una vuelta por la puerta grande: dos goles y una asistencia. Sin duda, el mejor del partido. Marcó con un potentísimo lanzamiento desde fuera del área y tras una acción individual en el tiempo de prolongación sentando a un defensa y al portero del Mallorca. Entre medias, asistió a Óscar para que el salmantino marcara el 2-1 y probó en varias ocasiones a Aouate con disparos lejanos. Ambicioso en todo momento, en la segunda parte acusó la inactividad. Fue inteligente y no se desgastó en las carreras para llegar ‘fresco’ a los últimos minutos.

Óscar (7): Un gol lo vale todo. El salmantino, ausente en Vigo por sanción, completó un partido gris. Participó poco en la creación de juego. No obstante, su olfato goleador mejoró con creces su nota. Se lanzó como un jabato al suelo para estirarse y tocar con la puntera un medido servicio de Ebert. Un gol, el octavo del año, que valía la victoria. En el comienzo de la segunda parte, mandó arriba con la cabeza un saque de esquina del omnipresente Ebert.

Floja actuación del tinerfeño Omar
Omar Ramos (5): El canario estuvo desafortunado. Realizó uno de sus encuentros más flojos como blanquivioleta. Mediada la segunda parte, Djukic le sustituyó por Bueno.
Larsson (5): Titular por segunda semana consecutiva, esta vez como delantero centro. Batallador, aunque no pudo con Nunes y Geromel. Aún es muy pronto para analizar su juego.
Bueno (7): Decisivo en los dos últimos goles del Real Valladolid lanzando sendos contragolpes. No se le vio abúlico, como en partidos cercanos.
Javi Guerra (5): Tras una semana complicada, con rumores sobre su salida del club, comenzó el partido en el banquillo. Jugó diez minutos sin ocasiones relevantes. El público de Zorrilla recibió con aplausos al delantero malagueño.
Baraja (-): Saltó al campo en el minuto 90 por Óscar para ganar tiempo.
Djukic (7): Arrancó con Larsson en punta. Guerra volvió al banquillo tras ser titular en Balaídos. Acertó con la paciencia como clave para vencer a un Mallorca ordenado atrás y relevando a un desacertado Omar Ramos.