El canterano ha
repartido su trayectoria profesional en España entre el Real Valladolid y el
Real Zaragoza con un total de nueve temporadas en la máxima categoría.
Óscar, en el partido ante el Espanyol. Foto: www.realvalladolid.es |
Óscar, ya totalmente
recuperado de su lesión, volvió al once inicial en Cornellá-El Prat. No pudo
disfrutar de la mejor celebración posible, pero el salmantino superó en el
feudo perico una barrera que está al alcance de pocos jugadores profesionales. Alcanzó los 250 partidos en Primera División,
con un total de 121 en las filas del Real Valladolid y de 129 en el Real
Zaragoza.
El talentoso mediapunta
debutó en el primer equipo
blanquivioleta de la mano de Pepe Moré en la temporada 2001/02, cuando
acababa de alcanzar la mayoría de edad. Se convirtió así en el primer canterano
que llegaba a la elite tras formarse en la Residencia de Jóvenes Jugadores, un
espejo para todos los integrantes de las categorías inferiores.
Tras tres temporadas y 81 encuentros, Óscar hizo las maletas y se marchó a Zaragoza, donde estuvo cuatro campañas
y disputó 129 partidos. En la temporada 2008/09, emigró a Grecia y firmó por
Olimpiacos. Allí ganó títulos, participó en competición europea y maduró aún
más como futbolista.
En verano de 2010, volvió a casa, a Valladolid, con el objetivo de ayudar
a su equipo a regresar a la máxima categoría del fútbol nacional, algo que
cumplió con creces hasta el punto de
convertirse en el indiscutible referente del juego ofensivo del equipo.
Óscar, pichichi
blanquivioleta la pasada temporada con 12 dianas, su récord como profesional, ha marcado por el momento un total de 39
goles, 25 en el Real Valladolid y 14 en el Real Zaragoza.
Noticia
de www.realvalladolid.es