jueves, 4 de abril de 2019

La primera, como mínimo, de tres

Las cuentas de la salvación: al menos tres victorias. A nueve jornadas del final del campeonato, el Real Valladolid conserva un punto de colchón sobre el descenso. Pase lo que pase en Leganés, los blanquivioletas seguirán fuera de los tres últimos puestos de la clasificación tras los espectaculares empates del Villarreal ante el Barça (4-4) y del Huesca con el Celta (3-3) en un duelo directo por la permanencia. Sergio González tiene ocho bajas: los lesionados Toni Villa, Stiven Plaza, Duje Cop, Borja, Luismi y Hervías más los sancionados Enes Ünal y Anuar. Calero, además, es duda. Los canteranos Salisu, Moi, Waldo y Miguel han entrado en la lista. Los madrileños, con seis puntos más, están muy cerca de confirmar su continuidad en Primera. Pellegrino no cuenta con Szymanowski, con molestias físicas, En-Nesyri, con una fuerte contusión en la rodilla derecha, y Braithwaite, por acumulación de tarjetas.


Trigésima jornada de LaLiga Santander.

Ya queda menos para el final de la temporada.

El Real Valladolid visitará este jueves (20:30 horas, beIN Sports) al Leganés con relativa ‘tranquilidad’. Pase lo que pase en Butarque, los blanquivioletas cerrarán la jornada fuera de los puestos de descenso.

Los rivales por la salvación ya han jugado y han ayudado. Ninguno ha sumado los tres puntos. Al Villarreal se le escapó la victoria ante el Barça (4-4) con dos goles de Messi y Luis Suárez en el tiempo extra. El Huesca y el Celta se repartieron un punto en El Alcoraz (3-3) en un partido dramático y con alternativas, con ventaja inicial celeste (0-2), remontada oscense (3-2) y tablas gallegas a nueve minutos del final. Por último, al Rayo se le agotó en Ipurua el efecto Paco Jémez. El Eibar remontó (2-1) en la segunda mitad.

A falta del encuentro del Real Valladolid en Butarque, la clasificación en la parte baja condena al Celta (29 puntos), el Rayo (24) y el Huesca (23) al descenso. El Villarreal y el Real Valladolid, ambos con treinta puntos, están salvados, pero al filo del pozo. El Levante (32 puntos) sigue sin confirmar la permanencia, al igual que el Espanyol (35) y el Girona (34).

Con este panorama, para el Real Valladolid, bienvenido será todo lo que sume en Butarque, donde jugará por primera vez en la máxima categoría del fútbol español. Sí ha visitado al Leganés en tres ocasiones anteriores, dos en Segunda y una en la Copa, con tres derrotas, con seis goles en contra y ninguno a favor.

A estas alturas del campeonato, todos los equipos tiran de calculadora. Es el momento de echar números para alcanzar los respectivos objetivos de la temporada.

Las cuentas de Sergio González indican que “debemos sumar, como mínimo, tres victorias, aunque cada semana irá cambiando. Queremos depender de nosotros mismos”. Al Real Valladolid le quedan nueve partidos: cinco en Zorrilla, ante el Sevilla, el Getafe, el Girona, el Athletic y el Valencia, y cuatro a domicilio, ante el Leganés, el Deportivo Alavés, el Atlético de Madrid y el Rayo Vallecano.

Hasta ahora, los blanquivioletas se han mostrado más fiables como visitantes: con diecisiete de los treinta puntos que atesoran en su casillero. A domicilio, el Real Valladolid es equipo de mitad de tabla (décimo), con cuatro victorias y cinco empates en quince encuentros. El drama llega en Zorrilla. En casa, el Real Valladolid, con apenas tres triunfos y cuatro empates en catorce partidos, solo tiene mejores números que el Girona en Montilivi.

Antoñito corre la banda ante Jonathan Silva en el último enfrentamiento ante el Leganés.
Fotos: www.realvalladolid.es
El pasado domingo, volaron dos puntos muy importantes de Zorrilla ante la Real Sociedad (1-1) por un gol de Oyarzabal y una discutible intermediación del VAR, con un gol anulado a Kiko Olivas. Sergio González optó ya en la sala de prensa, tras el encuentro ante el equipo txuri-urdin, por un mensaje prudente: “Nos vamos a mantener neutros con el VAR, pero las jugadas claves nos han venido más en contra que a favor”.

Lo importante, ahora, es el encuentro de Butarque, con ocho bajas en las filas del Real Valladolid, y el siguiente partido ante el Sevilla, a la vuelta de la esquina (domingo, 16:15 horas, beIN Sports), en Zorrilla.

Sergio González no cuenta con los lesionados Hervías (descartado ya esta temporada), Toni Villa, Stiven Plaza, Luismi, Borja y Duje Cop, el último en caer por molestias musculares. La enfermería se encuentra llena, aunque Calero se ha recuperado a tiempo tras unos días entre algodones. Anuar y el turco Enes Ünal están sancionados por acumulación de tarjetas. La convocatoria para Butarque incluye a cuatro canteranos: Salisu, Moi, Waldo y Miguel, en principio todos arrancarán en el banquillo.

El Real Valladolid ya sabe cómo se las gasta el Leganés de Pellegrino. Los pepineros asaltaron Zorrilla en la primera vuelta, con una goleada (2-4). El conjunto de Sergio González se mostró muy vulnerable en defensa, en especial en el balón parado con dos tantos en contra.

“El Leganés va a intentar conseguir los puntos para certificar la salvación, al igual que el Eibar cuando fuimos a Ipurua. Tenemos ánimo de revancha por el partido de ida. Sabemos cuáles son sus puntos fuertes: sus carrileros, el balón parado, Óscar, que aporta llegada al área... Vamos a intentar contrarrestar sus armas y potenciar las nuestras”, ha explicado el técnico catalán.

Al Leganés, efectivamente, le falta un último empujón para garantizarse la continuidad en Primera por tercera temporada consecutiva, primera con el argentino Mauricio Pellegrino en el banquillo de Butarque.

El conjunto madrileño arregló rápido un mal arranque de curso. Era colista en la séptima jornada, pero ya abandonó la zona de descenso en la decimotercera, una semana antes de visitar Zorrilla. Desde entonces, ha mirado hacia arriba. Ocupa la duodécima posición, con 36 puntos, seis más que el Real Valladolid, siete por encima del descenso.

Pellegrino también ha echado sus cuentas para confirmar la salvación: “Cada partido es un pequeño gran paso. La situación ideal sería ganar dos encuentros más en cadena, pero eso es mucho pedir. Tenemos que pensar en el Real Valladolid. Obviamente, es un partido importante para nosotros”. El técnico argentino cuenta con las bajas del delantero danés Braithwaite, sancionado, y otros dos puntas: el marroquí En-Nesyri, máximo realizador del equipo madrileño con ocho goles, y el argentino Szymanowski, ambos lesionados.

El valenciano Míchel protege el balón ante Vesga.
Sin Braithwaite y En-Nesyri, los dos arietes titulares de Pellegrino en las últimas semanas, el Leganés jugará en ataque con el argentino Carrillo y el uruguayo Santos. Carrillo le marcó dos goles al Real Valladolid en Zorrilla. El talaverano Jose Arnaiz (apenas una hora de juego en la Liga en toda la temporada), formado en la cantera de Zorrilla, estará en el banquillo. 

Pellegrino no ha escatimado elogios a los blanquivioletas: “El Real Valladolid es un equipo al que es difícil echarle mano y crearle situaciones porque se agrupa muy bien. Se siente muy cómodo cuando están juntos y tiene jugadores de calidad. A pesar de que es su primer año en Primera, trabaja con el mismo entrenador y eso le da agilidad en sus automatismos y en la manera de jugar los partidos y afrontarlos”.

Butarque es un estadio complicado. El Leganés, a diferencia del Real Valladolid, basa su fortaleza en sus resultados como local. En catorce encuentros, apenas ha cedido dos derrotas: ante el Villarreal (0-1), a mediados de septiembre, y el Girona (0-2), en la penúltima jornada. En Butarque han caído, por ejemplo, el Barça (2-1) y, en la Copa, el Real Madrid (1-0).


Alineaciones:

CD Leganés: Cuéllar; Nyom, Bustinza, Rodrigo Tarín, Siovas, Jonathan Silva; Rubén Pérez, Vesga, Óscar Rodríguez; Carrillo y Santos.

Suplentes: Lunin, Juanfran, Diego Reyes, Recio, Sabin Merino, Jose Arnaiz y El Zhar.

Real Valladolid: Masip; Antoñito, Kiko Olivas, Calero, Nacho; Míchel, Alcaraz, Keko, Óscar Plano; Verde y Sergi Guardiola.

Suplentes: Yoel, Javi Moyano, Joaquín, Salisu, Moi, Waldo y Miguel.

Árbitro: Cuadra Fernández (colegio balear).

Incidencias: 30ª jornada de LaLiga Santander. Butarque. Cielos cubiertos. Diez grados de temperatura.