domingo, 7 de abril de 2019

A levantarse de la lona

El Real Valladolid, al borde del descenso, ha perdido tres valiosísimos puntos en los últimos minutos de los dos últimos encuentros ante la Real Sociedad y el Leganés. Los blanquivioletas han rebasado ya el cupo de las desgracias. Sergio González cuenta con siete bajas confirmadas para recibir al Sevilla: los lesionados Toni Villa, Stiven Plaza, Duje Cop, Hervías, Luismi y Antoñito y el sancionado Nacho. Anuar, Enes Ünal y, probablemente, Borja vuelven a la lista. Los hispalenses han mejorado con el regreso de Caparrós al banquillo y rozan la zona Champions. En Zorrilla no estarán Jesús Navas y Escudero, por ciclo de tarjetas, más los lesionados Vaclík, Wöber, Nolito y Mercado, pero regresará Banega.


Cuenta atrás.

Tres, dos, uno…

Es el momento de levantarse.

La campana aún no ha sonado.

El Real Valladolid tiene tiempo para ganar la batalla de la permanencia.

De hecho, afronta la 31ª jornada, a ocho para concluir la temporada, en puestos de salvación. Eso sí, con el agua al cuello, con un mínimo colchón de un punto sobre el Celta, que delimita la zona de peligro, y con el penúltimo clasificado, el Rayo, apretando, a una victoria tras derrotar el sábado al Valencia en Vallecas.

La semana de tres partidos no está saliendo bien.

El Real Valladolid ha sumado un único punto, el empate ante la Real Sociedad (1-1) en Zorrilla el pasado domingo, y sobre todo ha perdido tres en la recta final de los dos últimos encuentros. Tres valiosísimos puntos a estas alturas del campeonato con la situación en la tabla de los blanquivioletas. Ante la Real, volaron dos. Ante el Leganés, hace tres días, uno más.

Y de forma dolorosa. La Real niveló el marcador a once minutos del final con un gol de Oyarzabal, con el partido controlado por el equipo de Sergio González. Pero el golpe más duro llegó seis minutos después. El colegio castellano manchego Alberola Rojas, que inicialmente le había dado validez, anuló un gol a Kiko Olivas que significaba la victoria. Una decisión muy discutible, por un ‘puntilloso’ fuera de juego de Óscar Plano, con el VAR como juez.

Ante el Leganés, el mazazo llegó en la última jugada. Carrillo, tras centro de Juanfran, mandó a la lona al Real Valladolid con un cabezazo para romper el empate a cero. Los blanquivioletas, que se echaron muy atrás, se derrumbaron en el peor momento posible.

La semana de tres partidos se cierra este domingo (16:15 horas, beIN Sports), de nuevo en Zorrilla, ante el Sevilla de Caparrós.

No es el momento de rendirse, de sacar la bandera blanca. El Real Valladolid sigue dependiendo de sí mismo para continuar en Primera.

“Esto es una carrera de fondo y hay que resetear (…). Tenemos que encajar el golpe y tener energía para afrontar un partido muy difícil ante un rival muy complicado que está con opciones de clasificarse para Champions. Hemos intentado gestionar bien la derrota ante el Leganés, tanto en lo futbolístico como en lo mental. Coger cosas positivas y encarar el partido con positividad porque no hay tiempo para pensar más”, ha replicado Sergio González, con un abultado parte de bajas para recibir al Sevilla.


El Real Valladolid ha sufrido dos fuertes decepciones consecutivas
ante la Real Sociedad y el Leganés. Fotos: www.realvalladolid.es
Ante los hispalenses, no estarán los lesionados Toni Villa, Stiven Plaza, Duje Cop, Hervías, Luismi y Antoñito. El lateral sevillano se ha sumado a la enfermería. No se ha recuperado a tiempo de las molestias musculares que le obligaron a pedir el cambio en Leganés. Además, Nacho es baja por acumulación de tarjetas. Sergio González recupera, al menos, a Anuar y Enes Ünal, sancionados ante el Leganés, y probablemente también a Borja, que ha entrenado con el grupo tras superar un edema de grado I en la inserción del recto anterior derecho que le ha tenido fuera del equipo durante un mes. De todos modos, el técnico esperará hasta dos horas antes del encuentro para comunicar la lista definitiva, que contará con varios canteranos, con Moi como titular en el lateral izquierdo y Salisu, Apa, Miguel y Waldo, que debutó con buena nota en Butarque, con opciones para ocupar el banquillo.

Sergio González ha reclamado a sus jugadores “más picardía”, ese famoso “otro fútbol” que les está costando puntos muy importantes en los últimos minutos. “Somos muy nobles, vamos con el pecho muy descubierto. En el minuto noventa (en Butarque) no puede pasar lo que nos pasó. Tenemos que decir que no se juega más y no se juega más. Hay que leer el partido y muchas veces lo estamos haciendo de manera errada”, ha instado el técnico a la plantilla.

Ante el Leganés, “teníamos a los jugadores más altos y no fuimos capaces de defender esos centros laterales, pero no solo Masip sino todos. Es evidente que, últimamente, los centros laterales nos están creando situaciones de gol, de duda”, ha admitido.

Además, Sergio González no quiere que el equipo termine tan atrás, como ante el Leganés: Hay que aprender también que no por acularnos mucho vamos a defender mejor, aunque es una forma lícita, pero muchas veces dando tres o cuatro pases puedes salir. Tenemos que hacer despejes más sólidos, más contundentes”. “Hay momentos en los que los propios jugadores deciden dar un paso atrás porque se sienten más cómodos. Ahora mismo, estamos en un momento en el que no solo el fútbol vale, sino la cabeza. El que esté más fuerte de cabeza es el que va a aguantar esta situación en la que estamos. La cabeza muchas veces te tira hacia atrás inconscientemente”, ha justificado.

Al Real Valladolid le espera un Sevilla ‘made in’ Caparrós, con todo lo que eso conlleva. “Espero un Sevilla poderoso por el tema de Caparrós, es un míster muy del club. Yo lo tuve como entrenador (en el Deportivo entre 2005 y 2007) y transmite muchísimo. Amén de lo táctico, su fuerte es lo que transmite. Hace que te enchufes y maneja muy bien el otro fútbol. Ellos saben jugar con balón y sin balón”.

Caparrós arrancó hace tres semanas una tercera etapa (2000-05, 2018 y 2019) en el banquillo del club de su corazón: el Sevilla. Pablo Machín no había cumplido los objetivos marcados al comienzo de la temporada, con los hispalenses fuera de la zona de la Liga de Campeones y eliminados en los cuartos de final de la Copa, tras un escandaloso 6-1 del Barça, y los octavos de final de la Europa League, con un 4-3 en la vuelta ante el Slavia de Praga que le costó el puesto al entrenador soriano.


El Real Valladolid cayó en la primera vuelta en el Pizjuán con un gol de André
Silva y una polémica actuación del árbitro, con dos tantos anulados por el VAR.
El regreso de Caparrós ha funcionado…, a domicilio. Debutó con una victoria ante el Espanyol (0-1), con un gol de penalti de Ben Yedder. El Sevilla arrastraba una pobre racha en la Liga: dos triunfos, tres empates y seis derrotas. De pelear por la Liga, acabó el año tercero a cinco puntos del líder, el Barça, a salir de los puestos europeos, séptimo clasificado tras caer ante el colista, el Huesca (2-1), en El Alcoraz.

La victoria ante el Espanyol no tuvo continuidad en el Sánchez Pizjuán ante un pujante Valencia (0-1), que se llevó los tres puntos con un penalti de Parejo, pero sí ante el Deportivo Alavés (2-0), con goles de Roque Mesa y Sarabia. Tras visitar Zorrilla, al Sevilla le espera, el próximo sábado (20:45 horas), el derbi ante el Real Betis. Los hispalenses son quintos, igualados con el Valencia, a un punto del Getafe, cuarto clasificado y con el último billete de Champions.

“El Sevilla es un equipo que tiene muy claros los objetivos y que afronta todos los partidos con la mentalidad de ganar. Sabemos que va a ser un encuentro exigente porque somos conscientes de lo que el Real Valladolid se está jugando. Vamos con la idea de hacer un buen partido y traernos algo positivo”, ha adelantado Caparrós, que estuvo cerca de relevar a Luis César Sampedro en el banquillo blanquivioleta en la pasada temporada. El club y el técnico de Utrera no llegaron a un acuerdo económico.

Caparrós también tiene numerosas bajas para visitar al Real Valladolid. El portero checo Vaclík, con un golpe en el costado derecho; el defensa austriaco Wöber, con una rotura del menisco de la rodilla derecha; el extremo gaditano Nolito, con una fractura del peroné izquierdo; y el defensa argentino Mercado, con un golpe en el tendón rotuliano izquierdo, están lesionados. Además, Jesús Navas y el vallisoletano Escudero, los dos laterales titulares, son baja por sanción. El centrocampista canario Roque Mesa, con una contusión en la pierna derecha que sufrió en la última jornada ante el Deportivo Alavés, está tocado, pero ha entrado en la convocatoria de Caparrós.

Y a pesar de las bajas, el Sevilla se presentará con un equipo de primer nivel, con el delantero franco-tunecino Ben Yedder, cuarto máximo artillero del campeonato con dieciséis goles, acompañado por Pablo Sarabia (once tantos en su mejor temporada como profesional), pero no por el portugués André Silva (nueve), que tumbó al Real Valladolid en un polémico choque en Nervión, con dos goles de Enes Ünal anulados por el VAR. Uno de ellos, por un fuera de juego de Toni Villa, más que interpretable. Caparrós ha dejado fuera de la lista a André Silva, apercibido de sanción, pensando en el derbi ante el Real Betis.

Quien sí ha viajado a Valladolid es Banega. El argentino, la manija del Sevilla, estuvo ausente en la última jornada ante el Deportivo Alavés por sanción. Banega compartirá mediocampo con el francés Gonalons, que atraviesa un gran momento de forma.


Alineaciones:

Real Valladolid: Masip; Javi Moyano, Kiko Olivas, Calero, Moi; Míchel, Alcaraz, Anuar; Keko, Sergi Guardiola y Óscar Plano.

Suplentes: Yoel, Apa, Joaquín, Salisu, Borja, Waldo, Verde, Miguel y Enes Ünal.

Sevilla: Juan Soriano; Mercado, Kjaer, Carriço, Arana; Gonalons, Banega, Sarabia, Promes; Ben Yedder y Munir.

Suplentes: Javi Díaz, Amadou, Sergi Gómez, Roque Mesa, Marko Rog, Bryan Gil y Franco Vázquez.

Árbitro: Sánchez Martínez (colegio murciano).

Incidencias: 31ª jornada de LaLiga Santander. Nuevo Estadio José Zorrilla. Muchas nubes, aunque no se espera lluvia a lo largo del encuentro. Ambiente fresco, con diez grados.