martes, 23 de abril de 2019

La primera final por la permanencia

Depende (aún) de sí mismo. El Real Valladolid, en puestos de descenso, recibe al Girona, a dos puntos. Una victoria blanquivioleta devolvería al equipo de Sergio González a la zona de salvación. El parte de bajas es amplio: los lesionados Keko, Anuar, Verde, Hervías, Luismi, Duje Cop y Stiven Plaza y el sancionado Antoñito. Los catalanes, con el vallisoletano Eusebio Sacristán en el banquillo, están en caída libre, con cinco derrotas consecutivas. Ramalho y Lozano entran en una lista de la que ha salido, por decisión técnica, Aleix García, que acompaña a Mojica, que ha vuelto a los entrenamientos tras superar una ausencia de seis meses por una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, Planas y Soni.


Un partido con mucho más en juego que tres puntos.

Probablemente, el encuentro más importante de la temporada, especialmente para el Real Valladolid, el choque que marcará la continuidad de los blanquivioletas en Primera.

Así lo han reconocido Sergio González y Eusebio Sacristán.

El técnico del Real Valladolid ha admitido la trascendencia del partido:

“Es una auténtica final, un encuentro crucial. En los últimos partidos en casa hemos jugado a un gran nivel. Solo nos ha faltado el resultado. Ojalá podamos dar el salto de calidad ante un rival directo por la permanencia. La puntuación es ‘doble’, por lo que tú sumas y lo que el rival deja de sumar. Es una final con mayúsculas”.

De cara a esa final, Sergio González ha incidido en que “nosotros nos jugamos muchísimo más. Ellos también se juegan mucho, pero nosotros más porque llevamos menos puntos. Tenemos que demostrar que queremos los puntos”.

El vallisoletano Eusebio Sacristán no ha ocultado tampoco la repercusión del encuentro para el Girona: “Es un partido muy importante que va a determinar lo que queda de temporada. Lo que pase será muy importante”.

El Real Valladolid recibirá este martes (20:30 horas, beIN Sports), Día de Castilla y León, al Girona, un rival directo y, aún más importante, un rival al alcance. Los blanquivioletas, que abren la zona de descenso, están a dos únicos puntos de los albirrojos. Una victoria del Real Valladolid sacaría al conjunto de Sergio González del abismo de Segunda. Así de relevante es el encuentro. Sigue dependiendo de sí mismo.

Zorrilla jugará su partido. Sergio González confía en el aliento de los aficionados desde las gradas:

Sergio González no ha confirmado si Yoel, tras sus fallos ante el Getafe y, sobre todo,
el Deportivo Alavés, continuará como titular. Fotos: www.realvalladolid.es
“Creo que no tenemos que decirles nada. Saben la importancia que tienen, de la importancia del partido. Tenemos que pedirles que nos acompañen, que sean uno más de nosotros. Ojalá les podamos devolver todo lo que nos van a dar. Espero que esa comunión sea continua durante los noventa minutos porque eso querrá decir que las cosas están funcionando”.

El Real Valladolid tiene una gran deuda pendiente con Zorrilla en esta temporada.

Sus números como local son muy pobres y explican su posición en el furgón de cola de la tabla: catorce puntos, con tres únicas victorias ante el Levante (2-1), el Huesca (1-0) y el Celta (2-1), cinco empates y ocho derrotas. Solo, curiosamente, el Girona ha sido menos efectivo en su estadio, en Montilivi, con doce puntos (dos solitarios triunfos) en diecisiete encuentros.

Los blanquivioletas no ganan en Zorrilla desde hace casi tres meses, finales de enero, cuando remontaron al Celta con goles de Óscar Plano y Keko. Desde entonces, han sacado tres empates, ante el Villarreal (0-0), la Real Sociedad (1-1) y el Getafe (2-2), y han encajado tres derrotas, ante el Real Betis (0-2), el Real Madrid (1-4) y el Sevilla (0-2). Un balance insuficiente para atar la permanencia.

También a domicilio, la racha reciente es negativa, con un escaso botín, con la remontada en el tiempo extra en Ipurua ante el Eibar (1-2) y el empate en Mestalla ante el Valencia (1-1), a ocho minutos del final, en las ocho últimas salidas. Con apenas once puntos, el Real Valladolid es el peor equipo de LaLiga Santander en este año 2019, a uno del Girona y el Levante, con doce.

Pero el equipo blanquivioleta no ha entregado la cuchara, ni siquiera con los varapalos que ha recibido en las últimas jornadas con derrotas en las últimas jugadas, como en Butarque ante el Leganés; puntos que vuelan en la recta final, como en Zorrilla ante el Getafe y la Real Sociedad; y malos comienzos, como en Mendizorroza ante el Deportivo Alavés, que costó dos goles rápidos.

“Estos días nos han servido, sobre todo, para limpiarnos la cabeza. Ya tenemos la idea clara, tenemos que recuperarnos, quitarnos el polvillo que nos quedara del partido del Alavés. Somos conscientes de lo que pasó. Lo que ha pasado no nos va a sumar, sino lo que viene, y la cabeza es muy importante”, ha apuntado Sergio González.

Eso sí, el técnico del Real Valladolid ha reconocido que “cometemos errores de Alevín B, pero no solo los futbolistasSi borramos eso, tenemos que estar tranquilos porque nos vamos a salvar”, ha garantizado. Para evitar esos fallos inocentes, “hay que convencer al futbolista de que tiene que estar activo y atento. Hay que apoyarles, estar a su lado, darles las herramientas y pedirles más tensión”.


El Real Valladolid arrancó la temporada con un empate sin goles en Montilivi.
En Mendizorroza, el señalado fue Yoel, la gran apuesta de Sergio González en las dos últimas jornadas. Una apuesta claramente fallida. El portero gallego ya no estuvo bien ante el Getafe. No vio un gran disparo, pero muy lejano, de Arambarri, que inauguró el marcador. Ante el Deportivo Alavés, los fallos fueron más evidentes, más graves, y costaron dos goles: un despeje contra Guidetti en el área pequeña y una falta lateral directa que no tocó nadie.

Sergio González no ha confirmado que devolverá la titularidad a Masip, pero sería sorprendente que no fuera así.

El técnico catalán sí se ha referido al abultado parte de bajas. Ante el Girona, no estarán Antoñito, por sanción, y los lesionados Hervías, Luismi, Stiven Plaza, Duje Cop y los tres últimos en caer: Anuar, Verde y, en los últimos tres días, Keko, titular en Vitoria, con una sobrecarga muscular en los isquiotibiales derechos que ya le obligó a pedir el cambio:

“La lista de lesionados en un momento determinante es amplia, pero tenemos el potencial suficiente para compensar esas ausencias. Somos de los equipos que menos lesiones musculares ha tenido. Han coincidido en el mismo periodo de tiempo”.

Sobre el Girona, Sergio González ha recordado que el equipo catalán, a lo largo de la temporada, “ha manejado las dos estructuras defensivas: la línea de cinco y la de cuatro. Cuando ha sacado la cabeza, ha pasado a línea de cuatro y, cuando ha buscado seguridad, ha pasado a cinco y es lo que creemos que hará en Zorrilla”.

“Tenemos claro cómo atacarles. Va a ser importante la actitud. Tenemos que seguir fuertes en el balón parado, ya que anotan el cuarenta por ciento de sus goles así, y jugar sin miedo a nada”, ha reclamado Sergio González, que ha alabado al uruguayo Stuani (dieciocho goles en esta temporada, más 21 en la pasada): “Lo conocemos muy bien, sabemos de sus condiciones. Su capacidad de competir es brutal, su juego aéreo es sensacional y luego con los pies también maneja la situación”.

El Real Valladolid se encontrará con un Girona que, hace cinco jornadas, estaba casi salvado, con 34 puntos, nueve sobre el descenso. Vivía un momento dulce, con una única derrota en cinco encuentros y tres victorias consecutivas a domicilio ante el Real Madrid (1-2), el Rayo Vallecano (0-2) y el Leganés (0-2).

Desde entonces, el Girona, con el que los blanquivioletas inauguraron el curso en Montilivi con un empate sin goles, está en caída libre, con cinco derrotas consecutivas ante el Athletic (1-2), el Atlético (2-0), el Espanyol (1-2), el Villarreal (0-1) y el Celta (2-1). Un hundimiento en toda regla. El Girona ha dilapidado su amplio colchón con la zona de descenso y se ha metido, de lleno, en el barro. Si pierde en Zorrilla y el Levante puntúa, en el Ciutat de València, ante el Real Betis, caerá a zona de descenso. Pero, si vence en Zorrilla, alejará a los blanquivioletas a cinco puntos.

Eusebio Sacristán se abraza con Sergio González antes del choque en Montilivi.
“Nos está tocando vivir una situación que hace no mucho no nos esperábamos. Ante esta circunstancia, tenemos que demostrar personalidad y que queremos estar en Primera en la temporada que viene”, ha valorado Eusebio Sacristán.

El técnico del Girona ha buscado una explicación para el mal momento de su equipo: “Es cierto que en determinadas circunstancias tácticas quizás no hemos estado todo lo bien que hubieran requerido, pero mirar para atrás tampoco sirve de mucho. Hemos analizado los partidos, pero es un momento para dejar eso de lado y centrarnos en el aspecto anímico y psicológico (...). Mi intención es conseguir la victoria en Zorrilla. Esa es la mentalidad con la que afrontamos el partido. Luego veremos las circunstancias, pero trabajaremos para merecer la victoria”.

Eusebio Sacristán devolverá la titularidad a Borja García, suplente en Balaídos en la última jornada, y recupera a Ramalho y el ‘Choco’ Lozano, ausentes ante el Celta por lesión. Aleix García se ha caído de la lista por decisión técnica, mientras que el exblanquivioleta Mojica, Planas y Soni son baja por lesión. El colombiano, que ha regresado recientemente a los entrenamientos, se lesionó de gravedad a mediados de octubre, con una fractura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda.

Los caprichos del fútbol han querido que el Real Valladolid juegue la primera gran final por la permanencia contra un icono blanquivioleta. Eusebio Sacristán (55 años) es un top-tres en partidos disputados en Primera, con 543, solo por detrás de Andoni Zubizarreta (622) y Raúl González (550). Arrancó, con diecinueve años el 1 de enero de 1984, y concluyó, con 38 años el 5 de mayo de 2002, su carrera en Zorrilla. El de La Seca ha vestido la camiseta blanquivioleta en 277 encuentros oficiales, 246 en Primera, doce en la Copa, dieciséis en la extinta Copa de la Liga (campeón en 1984) y tres en la Copa de la UEFA, con un total de 21 goles.

“Tengo familia y amigos allí. Mucha gente de la que conozco tiene mucho cariño al Real Valladolid, pero también me tienen cariño a mí. Estoy tratando de abstraerme de ello. No desearíamos vivir este momento, ojalá fuese distinta la situación para los dos. Me centro cien por cien en mi equipo, preparar el partido y dejar de lado el estado sentimental”, ha respondido Eusebio sobre sus orígenes en Zorrilla, donde se vivirá este martes, Día de Castilla y León, un encuentro dramático y trascendental en la batalla por la permanencia.


Alineaciones:

Real Valladolid: Masip; Javi Moyano, Kiko Olivas, Calero, Nacho; Míchel, Alcaraz, Óscar Plano, Waldo; Enes Ünal y Sergi Guardiola.

Suplentes: Yoel, Joaquín, Moi, Borja, El Hacen, Toni Villa y Miguel.

Girona FC: Bono; Pedro Porro, Alcalá, Bernardo, Juanpe, Raúl Carnero; Pere Pons, Granell, Borja García; Portu y Stuani.

Suplentes: Iraizoz, Ramalho, Muniesa, Douglas Luiz, Doumbia, Valery, Roberts y Lozano.

Árbitro: Martínez Munuera (colegio murciano).

Incidencias: 34ª jornada de LaLiga Santander. Nuevo Estadio José Zorrilla. Algunas nubes. A lo largo de la tarde, lloverá de forma intermitente. Ambiente fresco, con ocho grados y una sensación térmica menor: cinco grados.