sábado, 12 de febrero de 2022

Imbatido e invencible en Zorrilla

El Real Valladolid, con más de seiscientos minutos sin encajar un gol (registro histórico del club) y con ocho victorias consecutivas en Zorrilla, recibe a un Girona en fase ascendente. Pacheta recupera a Aguado, sancionado ante el Fuenlabrada en la pasada jornada, pero pierde a Monchu, baja de última hora por covid-19. Mientras, Míchel, también ausente por covid-19, vuelve a contar con Aleix García tras superar una lesión. El uruguayo Stuani, con quince dianas, es el máximo goleador de la categoría junto con Rubén Castro.


Ya no es cosa de dos o tres.

Ni siquiera de cuatro.

La batalla por el ascenso directo gana pretendientes cuando se acerca el último y decisivo tercio del curso.

El Girona visitará este sábado (18:15 horas, Movistar LaLiga y Movistar Vamos) al Real Valladolid en Zorrilla con el propósito de engancharse a la pelea.

El Eibar es líder con 52 puntos, a tres del Almería (49), a cuatro del Real Valladolid (48) y a seis del Tenerife (46). El Girona, quinto con 41, igualado con la Ponferradina, no se conforma con un puesto de playoffs.

“Hace tres meses, un equipo (el Almería) estaba disparado y ahora estamos todos amontonados en la clasificación. El que se ponga nervioso no sale en la foto”, ha avisado Pacheta. “No nos alborotemos”, ha insistido el técnico blanquivioleta. “Yo no lo voy a hacer, esto es muy largo. Hagamos lo que hagamos, los demás van a ir empujando pero, mientras ganemos, los demás que hagan lo que quieran”, ha añadido.

Los dos últimos empates a domicilio ante el Real Zaragoza y el Fuenlabrada, ambos sin goles, han aminorado la velocidad de crucero del Real Valladolid, aunque el técnico burgalés no ha cambiado su discurso:

“¡Ay si nos dicen hace tres semanas que íbamos a estar aquí ahora! Estoy encantado de la situación en la que estamos, con el equipo con las ideas claras, competitivo, armado (…). Hay días en los que vamos a empatar y otros en los que vamos a perder, pero el equipo está con confianza y alegre y eso nos hace un mejor equipo que hace cuatro meses”.

Masip ha encajado un único gol en siete partidos
en este curso. Fotos: www.realvalladolid.es
No existe ninguna preocupación tras los recientes empates lejos de Zorrilla:

“Fuera de casa estamos haciendo partidos como para ganar, haciendo muchas cosas bien. Yo me quedo con todo lo bueno que veo, con la verticalidad, lo valientes que somos, la confianza, que llegamos al área de todas las formas posibles...”.

Pero, además, el Real Valladolid vuelve a Zorrilla, un escenario donde acumula ocho victorias consecutivas (Eibar, Mirandés, Fuenlabrada, Cartagena, Real Oviedo, Leganés, Burgos y Sporting) y once partidos invicto, sumando el triunfo ante el Alcorcón y las tablas ante el Málaga y el Ibiza.

Y los de Pacheta suman 601 minutos imbatidos, récord histórico del club: casi una hora ante el Real Oviedo y los encuentros completos ante la Real Sociedad B, el Leganés, el Burgos, el Real Zaragoza, el Sporting y el Fuenlabrada. El Real Valladolid no ha encajado todavía ningún gol en este año en la Liga, solo en la Copa ante el Real Betis.

“Es probable que dejar la portería a cero no dé campeonatos, pero da confianza”, ha subrayado Pacheta. “Un mérito de todo el equipo, desde los delanteros, que presionan mejor y no dejan que los rivales crezcan a través del balón, a los centrocampistas, que tienen mucho mejor retorno y paran mejor las transiciones, y los defensas, que están acertados. Le ha tocado a Masip, es un gran portero. Pero Roberto, también. Lo achaco al trabajo grupal y a que cada vez corremos más y mejor”, ha analizado.

Imbatido y casi invencible en Zorrilla (una derrota en toda la temporada ante el Tenerife hace justo cinco meses), el Real Valladolid afrontará ante el Girona “un gran partido de fútbol entre dos equipos que vamos a querer jugar prácticamente todo. Probablemente se llevará el encuentro el que mejor trate el balón y el que mejor ajuste la presión. Va a ser muy atractivo para el espectador, muy duro para los dos. Tenemos dos modelos muy parecidos de juego”, ha señalado Pacheta.

El técnico burgalés recupera a Aguado, sancionado ante el Fuenlabrada en la pasada jornada, y sigue con las bajas de los lesionados Hugo Vallejo, Raúl Carnero e Iván Sánchez. Monchu se ha caído a última hora de la lista por un positivo por covid-19. Mientras, Hervías, inédito en este curso, se estrena en una convocatoria tras una larga baja por una lesión de rodilla.

Toni Villa se ha asentado en la banda izquierda
en las últimas jornadas.
Con Weissman, que arrastra una sequía de cuatro partidos, fijo en la delantera porque “vive por y para el gol. Está trabajando para el equipo como dios, haciendo un esfuerzo mejor que antes. Esto va por rachas. Yo estoy encantado con su rendimiento”. Con Cristo, el elegido en las últimas semanas, Sergio León e incluso Óscar Plano pugnando por un puesto en el once para acompañar al israelí.

Y con la polémica zanjada del lanzador de penaltis tras la innecesaria discusión en el césped en Fuenlabrada entre Roque Mesa y Weissman. Un penalti que el VAR y el árbitro acabaron anulando.

“Tenemos que pedir perdón. Llevamos demasiadas veces teniendo que hacerlo. Hay que aprender. Los jugadores conocen los límites y la disciplina del club y la consecuencia de estos actos. La discusión es muy buena porque tenemos a muchos jugadores con empaque como para tirar un penalti y meterlo y los dos son especialistas. No obstante, es muy mala la imagen que dieron, que no debe suceder. La discusión puede pasar, aunque hayas dicho quién lo tira. Le doy la importancia justa porque la semana ha sido cojonuda. El jugador está ahí para decidir y no le doy más vueltas. Que lo tire el que más confianza tenga”, ha resumido Pacheta antes de recibir al Girona.

Un rival peligroso, con una tendencia claramente ascendente. Solo el Eibar (trece puntos) y el mismo Real Valladolid (once) han sumado más que el Girona en este comienzo de la segunda vuelta.

Tras un decepcionante comienzo de temporada, antepenúltimos tras diez jornadas, los de Míchel son, desde entonces, el segundo mejor equipo de la categoría con diez victorias, tres empates y tres derrotas. Un total de 33 puntos, uno menos que el Eibar e igualados con el Real Valladolid.

Al Girona le penaliza el mal arranque de curso para pelear ahora mismo por el ascenso directo. Algo que puede cambiar en las dos próximas jornadas con dos duelos directos ante el Real Valladolid, en Zorrilla, y el Eibar, en Montilivi.

“Los dos próximos partidos nos darán información sobre nuestro objetivo. Queremos llegar al último tercio de la competición con posibilidades de aspirar a todo. Los dos próximos encuentros queremos ganarlos para estar en disposición de luchar por todo”, ha enfatizado Míchel, que ya ha ascendidos dos veces a Primera, con el Rayo en 2018 y con el Huesca en 2020.

El Girona doblegó al Real Valladolid en la primera vuelta
con un gol de penalti de Stuani.
El Girona le planteará un partido diferente al Real Valladolid a los habituales en esta campaña. No le saldrá a esperar. No va en el ADN del estilo de Míchel, baja de última hora por covid-19.

“El Real Valladolid lleva el peso de los partidos, tiene mucha posesión. Eso significa que sin el balón no está acostumbrado. Pasa por ahí. Pacheta va a venir a por nosotros y nosotros a por ellos. Quien tenga más el balón y esté más conjuntado tendrá mucho ganado. Queremos tener la pelota en el campo rival”, ha apuntado Míchel. “Queremos darle la vuelta a la tortilla, que se vean atacados, comprometidos en la defensa”, ha adelantado.

No le faltan piezas para plantarle cara al Real Valladolid, con un goleador letal y eterno como Stuani (quince tantos en este curso para liderar la tabla de artilleros junto con Rubén Castro) y mucha calidad en el mediocampo con nombres como Borja García, Aleix García, que vuelve tras una lesión, y unos metros más arriba Borja Sáiz. Valery y Ureña son las únicas bajas ante un imbatido e invencible Real Valladolid en Zorrilla.

Alineaciones:

Real Valladolid: Masip; Luis Pérez, Joaquín, El Yamiq, Nacho; Aguado, Roque Mesa, Plata, Toni Villa; Sergio León y Weissman.

Suplentes: Roberto, Janko, Kiko Olivas, Javi Sánchez, Josema, Anuar, Hervías, Óscar Plano, Morcillo y Cristo.

Girona FC: Juan Carlos; Arnau, Bueno, Bernardo, Juanpe, Jairo; Lozano, Baena, Borja García; Samu Sáiz y Stuani.

Suplentes: Ortolá, Juncà, Terrats, Víctor Sánchez, Kebe, Aleix García, Iván Martín, Bustos, Moreno y Sarmiento.

Árbitro: Pulido Santana (colegio canario).

Incidencias: 27ª jornada de LaLiga Smartbank. Zorrilla. Cielos nubosos, pero sin precipitaciones. Trece grados.