sábado, 18 de mayo de 2019

El Carramimbre tendrá que rematar la faena en Melilla

Todo o nada. La serie se va al quinto y definitivo encuentro: el martes, a las 20:30 horas. El Melilla Baloncesto recupera el factor cancha gracias a su estrella, el escolta nigeriano Agada (27 puntos y 13 rebotes). El conjunto de Paco García pierde una inmejorable oportunidad en Pisuerga para colarse en la Final Four de Bilbao. Álex Reyes (19 puntos) y Sergio de la Fuente (15) mantuvieron vivas las opciones del cuadro carmesí, que nunca bajó los brazos y se puso a tres (71-74) a falta de medio minuto. Mike Torres abandonó la pista lesionado.

Óscar Alvarado bota ante Josep Franch. Foto: www.cbcvalladolid.es
Bola de partido a favor perdida por el Carramimbre.

El Melilla Baloncesto sale vivo de Pisuerga (72-76) y fuerza el quinto y definitivo encuentro de una serie que se decidirá en la ciudad autónoma. Los de Paco García resistieron en un choque muy físico y duro, pero no lograron sobreponerse a un superlativo, de nuevo, Caleb Agada, que firmó 41 puntos de valoración (27 puntos y 13 rebotes).

Con 2-1 en la serie, el Carramimbre solo necesitaba una victoria más para sentenciar la eliminatoria ante el Melilla Baloncesto. Y jugando en casa en el último encuentro de la temporada en Pisuerga, la ocasión no podía ser más propicia.

Los vallisoletanos, conocedores de la oportunidad dorada de la que disponían, salieron muy metidos al parqué, aunque esta vez no sorprendieron tanto a los melillenses. Los de Alejandro Alcoba llegaron a la cita con la lección del jueves bien aprendida e igualaron la intensidad del Ciudad de Valladolid en los compases iniciales.

A Sergio de la Fuente, MVP de la tercera jornada de los playoffs, aún le duraba la confianza del tercer asalto de la serie y capitalizó las primeras posesiones, forzando faltas y anotando desde la línea de personal.

Sin tiempo a que se asentaran las defensas ni el público en las gradas, tanto locales como visitantes contaron sus primeras posesiones por canastas, demostrando que los de la ciudad autónoma no estaban tan aciagos como el jueves. No obstante, un triple del ala-pívot vitoriano (diez puntos y cinco rebotes en el primer cuarto) lideró un pequeño arreón carmesí. Así, el Carramimbre cerró los primeros diez minutos con ventaja (26-20).

El parón, sin embargo, no sentó nada bien al cuadro castellano. La fluidez ofensiva y el acierto del periodo inaugural desaparecieron en el segundo cuarto y los de Paco García encadenaron más de tres minutos sin anotar. El Melilla Baloncesto aprovechó la sequía vallisoletana para revertir las tornas (26-29) y obligó al técnico vallisoletano a solicitar un tiempo muerto. Los problemas se acumulaban para un Carramimbre que, además de entrar en bonus con seis minutos en el crono, veía como Mike Torres se marchaba lesionado al vestuario. Tocaba ceñirse a la épica.

Greg Gantt rompió el parcial en contra con un triple y Álex Reyes hizo lo propio para poner las tablas (32-32) y encender a un aletargado Pisuerga, que arrancó a jugar su papel desde entonces. El Carramimbre, equipo pasional donde los haya, se contagió y comenzó a mostrar una mejor versión, más intensa y agresiva, aunque insuficiente para cerrar la primera mitad por delante en el marcador (40-42).

Tal y como vaticinó Paco García al término del tercer encuentro de la serie, el Melilla Baloncesto y Caleb Agada aún tenían mucho que decir. Así lo ratificaron.

La mejoría de ambos era patente y los 23 tantos de valoración del escolta nigeriano suponían el mejor aval. Los 42 puntos visitantes también evidenciaban el potencial colectivo del Melilla y el bajo nivel defensivo de un Carramimbre que tendría que sudar mucho más para cerrar la serie.

Encomendado a Sergio de la Fuente y Álex Reyes, con quince y once puntos, respectivamente, al equipo carmesí le tocaba dar un paso adelante en la segunda parte para no dejar escapar una oportunidad histórica.

Aun así, lo cierto es que el inicio de la segunda mitad no invitó al optimista. Cuatro pérdidas consecutivas provocaron un parcial de 0-13, con 42-53 en el luminoso de Pisuerga, que solo cesó tras una técnica contra Vasilije Vucetic. Una falta antideportiva de Sergio de la Fuente sobre el interior serbio se saldó con una renta importante para los visitantes (43-58), pero a la vez fue el detonante que necesitaba un Carramimbre noqueado por momentos.

Un triple de Carlos Novas pudo cambiar radicalmente el sino del partido pero, a pesar de que el lanzamiento del austriaco se quedó corto, el conato de remontada dio alas a un Pisuerga que sostuvo a las ardillas en sus peores minutos de la serie (49-58). Los locales, impulsados por el aliento de la afición, redujeron parte de la renta visitante, aunque los de Alejandro Alcoba respiraron con un triple sobre la bocina de Txemi Urtasun, que estableció el 54-63 con el que comenzó el último periodo.

Todo se iba a decidir en diez minutos. El Carramimbre se puso manos a la obra para continuar con el sueño de la Final Four, aunque Caleb Agada estaba empeñado en truncarlo todo. Cinco puntos consecutivos de la estrella visitante (23 tantos y 34 de valoración por entonces) castigaron los primeros intentos de un CBC entregado y encomendado a su acierto desde el perímetro. Desde la larga distancia, como no podía ser de otra manera, Álex Reyes y Greg Gantt tensaron aún más la cuerda a falta de cinco minutos (63-70).

El Ciudad de Valladolid, con los foráneos a tiro después de muchos minutos, desperdició tres posesiones consecutivas, pero el héroe Caleb Agada (41 de valoración) no pudo dar la puntilla desde el tiro libre y dio vida al Carramimbre.

Las ardillas se mantuvieron a rebufo con cuatro puntos consecutivos de Óscar Alvarado y llegaron a los últimos treinta segundos con opciones (71-74), pero sin margen de error.

Los castellanos, nuevamente, a pesar de intentarlo y de disponer de ocasiones, fueron incapaces de dar la vuelta al resultado y el Melilla Baloncesto continuó castigando en las posesiones críticas. Con todo y con eso, una pérdida del escolta nigeriano Agada llevó el partido a un carrusel de tiros libres, en el que finalmente terminó muriendo el conjunto carmesí, que se lo jugará al todo o nada en el Javier Imbroda. El recuerdo de Alicante, hace dos años en los playoffs de la LEB Plata, marca el camino.

Ficha técnica:

Carramimbre CBC Valladolid 72 (26+14+14+18): Óscar Alvarado (6), Greg Gantt (9), Álex Reyes (19), Sergio de la Fuente (15) y Jubril Adekoya (10) -quinteto titular-. También jugaron: Daniel Astilleros (6), Seydou Aboubacar (-), Jonathan Kazadi (7), Carlos Novas (-) y Mike Torres (-).

Club Melilla Baloncesto 76 (20+22+21+13): Javi Marín (9), Caleb Agada (27), Txemi Urtasun (5), Stojan Gjuroski (11) y Vasilije Vucetic (10) -quinteto titular-. También jugaron: Jonathan Gilling (5), Darko Balaban (7), Josep Branch (-), Juan Rubio (-) y Felipe Dos Anjos (2).

Árbitros: Quintas Álvarez, García González y Lema Parga. Eliminaron a Vasilije Vucetic y Jonathan Gilling, por cinco faltas personales, del Melilla Baloncesto.

Incidencias: Cuarto partido de los playoffs de ascenso de la Liga LEB Oro 2018/19. Polideportivo Pisuerga.