Un descomunal De la Fuente sitúa al Carramimbre a un paso de la Final Four

El ala-pívot lidera a los vallisoletanos con 28 puntos, con un sensacional acierto de seis de ocho en los triples. El conjunto carmesí, con un gran apoyo de la grada, desborda al Melilla Baloncesto (85-64) y tendrá la oportunidad de cerrar la serie en Pisuerga dentro de dos días. Paco García celebra con una importante victoria su partido número mil como técnico profesional.

Kazadi y De la Fuente festejan una canasta del vitoriano.
Fotos: www.cbcvalladolid y Twitter Carramimbre CBCV.

Noche para el recuerdo en Pisuerga.

Exhibición del Carramimbre, victoria trascendental y aniversario redondo para Paco García. 

No le faltó nada al triunfo de los vallisoletanos ante el Melilla Baloncesto (85-64), que supone el 2-1 en la eliminatoria o, lo que es lo mismo, que al Ciudad de Valladolid solo le separa un partido de la Final Four por el ascenso a la Liga ACB.

Dicha victoria, además, puede llegar el próximo sábado, a las 19 horas, de nuevo ante la parroquia vallisoletana, que respondió a la llamada y fue un factor diferencial para imponerse a los visitantes.

El día en el que Paco García cumplía mil partidos como entrenador profesional, el Carramimbre disputaba un compromiso vital para decidir la eliminatoria. Y, como no podía ser de otra manera, el ansia de victoria del técnico y de los suyos quedó patente desde el principio.

Por si fuera poco, Pisuerga había respondido a la llamada de las ardillas y, a la par que se poblaban las gradas, se crecían los jugadores vallisoletanos. Sobraban los motivos para brindar una noche para el recuerdo.

Lo cierto es que el Carramimbre comenzó con un ligero atasco de cara al aro rival, aunque fue un espejismo de un minuto que precedió a un inicio fulgurante.

Los de Alejandro Alcoba anotaron los primeros puntos del partido, pero un parcial de 12-0 de los locales (12-2) obligó al técnico del Melilla a solicitar un tiempo muerto para detener el frenesí de los hombres de Paco García. Con una intensa defensa y rápidas transiciones, el CBC dejó claro desde el primer momento que era el día para sumar un nuevo triunfo. El ímpetu carmesí marcó las diferencias desde que se puso el balón en juego.

Mejoraron los melillenses tras más de cinco minutos sin anotar, pero los vallisoletanos no soltaron el mando. Donde no llegaban los centímetros de los locales, llegaban las ganas, y el sino del rebote marcaba las diferencias a favor de un Carramimbre CBCV cuya mejor baza para imponerse en el primer periodo (19-11) estuvo en el acierto exterior.

Paco García, con una camiseta conmemorativa por su partido número mil.

Con un triple, como no podía ser de otra forma, comenzó un segundo cuarto en el que los vallisoletanos iban a gozar de la máxima a su favor, que se mantuvo hasta el descanso. La mayor intensidad de los locales permitió colocar el más trece (29-16), que imperó durante el resto del periodo a pesar de los conatos del Melilla para revertir el guion. La fuerza interior melillense no lograba sobreponerse al ímpetu de un Ciudad de Valladolid, empujado por la grada, que despidió los primeros veinte minutos con una buena renta (40-29).

Así, diecinueve minutos de buen juego permitieron al Carramimbre imponer su mando, aunque con un regusto agridulce porque la ventaja pudo ser mayor. Los quince puntos de valoración de Sergio de la Fuente (diez tantos y cuatro rebotes) eran lo más destacado de un partido definido por la mejor defensa y la mayor intensidad del cuadro carmesí.

Los 28 puntos del Melilla Baloncesto hablaban por sí solos. Paco García y los suyos habían conseguido anular a las principales amenazas visitantes y eso se traducía en una buena ventaja para dirimir la contienda.

El guion, que estaba transcurriendo por los cauces idóneos, no se reescribió tampoco en el tercer cuarto. El Carramimbre CBCV continuó defendiendo y desquiciando a un Melilla Baloncesto incapaz de sobreponerse a la intensidad vallisoletana. Las ardillas mantuvieron la concentración para resistir a las acometidas foráneas para llegar con margen de error a los últimos diez minutos (58-47).

A pesar del único borrón que supuso el último minuto del tercer periodo, el Ciudad de Valladolid afrontaba la recta final con todo de cara para anotarse la victoria. Y más aún después de que Sergio de la Fuente enchufase dos triples consecutivos. El capitán, que ya estaba en 23 puntos y 28 de valoración, disparaba al Carramimbre a falta de ocho minutos (64-47).

Jugadores y cuerpo técnico del Real Valladolid animaron al Carramimbre.

Y el vendaval no quedó ahí. Ni siquiera dos tiempos muertos casi consecutivos de Alejandro Alcoba enfriaron la inercia ganadora de un Carramimbre que rozaba los veinte puntos de ventaja (71-52) con siete por disputarse.

El tiempo corría en contra de los de la ciudad autónoma y la ansiedad por querer remontar mucho en muy poco hizo el resto para que los locales mantuvieran las distancias. El Ciudad de Valladolid, impulsado por su gente y su confianza, voló hasta el final del partido y selló con comodidad un punto vital para la eliminatoria (85-64). 

Paco García, a un paso de la Final Four el día en el que cumplió mil partidos como entrenador profesional. 

Aniversario redondo.

Ficha técnica:

Carramimbre CBC Valladolid 85 (19+21+18+27): Óscar Alvarado (3), Greg Gantt (9), Álex Reyes (5), Sergio de la Fuente (28) y Jubril Adekoya (12) -quinteto titular-. También jugaron: Carlos Novas (7), Jonathan Kazadi (6), Mike Torres (13) y Seydou Aboubacar (2).

Club Melilla Baloncesto 64 (11+18+18+17): Josep Franch (3), Caleb Agada (6), Juan Rubio (5), Vasilije Vucetic (3) y Felipe Dos Anjos (9) -quinteto titular-. También jugaron: Txemi Urtasun (10), Stojan Gjuroski (6), Jonathan Gilling (13), Javi Marín (3) y Darko Balaban (6).

Árbitros: Sacristán Barazón, Lizana Moreno y Albacete Chamón. Sin eliminados.

Las plantillas del Aula Alimentos de Valladolid y el Recoletas Atlético Valladolid
acudieron a la llamada de Pisuerga.

Incidencias: Tercer partido de los playoffs 2018/19 de la LEB Oro. Pisuerga.

Crónica de www.cbcvalladolid.es