domingo, 31 de marzo de 2013

Paso de gigante hacia la permanencia en ACB

Blancos de Rueda ha vuelto a dar una lección de pundonor y profesionalidad y ha maniatado a un UCAM Murcia CB que no ha tenido opción (91-57). Éxito colectivo de un equipo que sigue caminando con paso firme hacia la permanencia. El capitán Martín, Grimau y O´Leary tiraron de un carro al que se subió toda la plantilla para alcanzar un espectacular 113 de valoración.


Hoy  (por este sábado)fue el día del Blancos de Rueda. Felicidad para la afición y también para Roberto González y sus ayudantes y para una plantilla que se sobrepuso una jornada más a los problemas extradeportivos que han asolado al club este año. El UCAM Murcia no fue rival y se llevó un carro. Fuera del partido y superado por el vendaval de los locales que le echaron los arrestos adecuados a la trascendencia del choque.


El resultado fue que el conjunto vallisoletano logró su victoria más abultada de la temporada y la mayor desde que hace trece años ganara de 37 al Manresa. Una actuación de equipo para enmarcar y fulminar registros presentes, llegando a los 113 de valoración con diez de sus jugadores anotando, y lo que es más importante, para sumar una undécima victoria que le acerca de lleno al objetivo de la permanencia, liderado una vez más por el capitán Nacho Martín, que apunta a MVP de la jornada y que él solito casi valoró lo que todo Murcia, 34 del pucelano por 37 de la escuadra levantina.

El comienzo del partido sentó las bases del triunfo. Lejos de especular a ver qué sucedía con el acierto rival, el Blancos de Rueda metió la directa. Demostrando su necesidad, los pucelanos ya habían igualado el average en contra con el 6-0 de salida. Los murcianos habían ganado 87-81 en la primera vuelta y, poco después, ya lo habían superado con creces (23-6 minuto 8).

A partir de ahí, coser y cantar para el Blancos de Rueda que tiró de repertorio, rotaciones y defensa para dejar sin argumentos a un UCAM que necesitó nueve minutos y ocho intentos para anotar su primer triple. Demasiadas dificultades en el perímetro para un equipo sobrepasado en el juego interior por el capitán Nacho Martín y los 2.22 del center hispano-bosnio Nedzad Sinanovic.

El 28-12 disipaba todas las dudas y dejó bien a las claras que el cuadro local se haría con el encuentro, a pesar de que quedaban treinta minutos por delante. Pero es que el conjunto morado estaba de dulce y su oponente fue incapaz de inquietarle en ningún momento. 

En el segundo cuarto el Blancos de Rueda mantuvo su dominio. Negados los mejores artilleros pimentoneros, Ragland y Gatens e incluso el polivalente Barlow se quedaron en unos sorprendentes cero puntos, al recital del capitán Nacho Martín, que se fue a los 22 de valoración en este primer periodo, se unieron el jugador cedido por el UCAM, Jordi Grimau, e Ian O´Leary. Los centímetros de Sinanovic hicieron el resto ante un Murcia sin capacidad de respuesta en el juego interior donde Lewis se encontraba demasiado solo. Aunque, a pesar de ello, el cuadro de Quintana impidió que la desventaja creciera en demasía para irse diecisiete abajo al intermedio (44-27).

Pero la tónica no cambió en el tercer cuarto. El Blancos de Rueda estaba cuajando un partido redondo. Dominando en el juego estático y en el cinco contra cinco, aplicando la velocidad cuando era necesario y moviendo el balón a las mil maravillas ante una zona murciana inoperante, que fue superada una y otra vez por la garra de los pupilos de González.

En el plano individual fue Grimau el que guió a los morados en el tercer cuarto. Reivindicándose ante su club propietario, el catalán cuajó un choque excelente y paulatinamente la renta local aumentó gracias a su acierto. Así, Blancos de Rueda superó los veinte puntos de diferencia a favor, esta vez gracias a sendas canastas de Sinanovic y Martín (55-32 minuto 24). Nuevo tiempo muerto de Quintana, a pesar de lo cual el cuadro del Pisuerga no dio su festival por cerrado y siguió metiéndole intensidad y ganas a cada acción para firmar una distancia abismal con su oponente.

Con 67-39, comenzó un último acto en el que nada cambió. En el minuto 32 una canasta de Grimau puso al Blancos de Rueda por encima de la treintena, 71-40, diferencia que siguió en ascenso para los castellanos hasta lograr una máxima de 37, (86-49 minuto 37).

Con el compromiso resuelto, Roberto González dio minutos a los menos habituales. Retornó Edu Ruiz a pista y también saltaron Antonio Izquierdo y Jonathan Arranz. Los tres consiguieron anotar y celebraron el triunfo con sus compañeros y los seguidores que una vez más poblaron en gran número y tiñeron la grada de Pisuerga de morado. Además en el caso del joven Arranz, se estrenó desde los 6.75.

En medio de la celebración y el “que vote Pucela”, se cerró la cita con los 34 tantos de diferencia a favor del final del encuentro, para alegría de los fans del Blancos de Rueda que ven a un paso la ansiada permanencia.

Ficha técnica:

Blancos de Rueda 91 (28+16+23+24): Cizauskas (2), Montañez (9), Grimau (21), Martín (19), Sinanovic (9) -5 inicial- Porta (8), Navarro (-), O'Leary (16), Ruiz (2), Izquierdo (2) y Arranz (3).

UCAM Murcia 57 (12+15+12+18): Ragland (-), Gatens (-), Miso (8), Barlow (-), Lewis (16) -5 inicial- Tillie (13), Franch (5), Rodríguez (8), Jasen (3) y Servera (4).

Árbitros: García González, Sánchez Monserrat y Pérez Niz. Eliminaron por cinco faltas a Sinanovic (minuto 37) del Blancos de Rueda. Encuentro correspondiente a la 27ª jornada de Liga Endesa, disputado en el Polideportivo Pisuerga ante 5.900 espectadores.

Crónica de www.cbvalladolid.es