domingo, 31 de marzo de 2013

El Real Valladolid mira abajo y en caída libre

Justa victoria (1-3) del Osasuna de José Luis Mendilibar, que regresaba a Zorrilla tres años después de su destitución. El equipo navarro remontó en apenas veinte minutos del segundo periodo. Los blanquivioletas, con Ebert de inicio, se adelantaron con un gol en propia puerta de Rubén pero desaprovecharon tres claras opciones de agrandar el marcador antes del descenso y acumulan más de dos meses sin vencer en casa. La permanencia no está cerrada.

Osasuna castigó los graves fallos del Real Valladolid.
Fotos: César Minguela (www.realvalladolid.es)
Los grandes jugadores de tenis se diferencian, entre otros aspectos del juego, del resto a la hora de cerrar las victorias. A ellos no se les encoge la mano a la hora de certificar los triunfos. El Real Valladolid no tiene esa cualidad. Ante Osasuna, ha perdido con toda justicia una buena oportunidad para dejar la permanencia casi perfilada. Si el Mallorca gana esta tarde al colista, el Deportivo, la zona de descenso se acercará a ocho puntos. Un margen notable a falta de nueve jornadas, pero no definitivo.


Los fantasmas de la temporada 2008/09 han aparecido en Zorrilla. Entonces, los blanquivioletas se salvaron ‘in extremis’ con un agónico empate a uno en el Benito Villamarín, que mandó al Real Betis a Segunda. El Real Valladolid sumó cuatro empates en las últimas once jornadas. Los castellanos estuvieron a punto de desperdiciar una ventaja de trece puntos. El colchón, ahora, es menor. No es momento de encender la alerta roja, pero la evolución del equipo de Djukic recuerda al Real Valladolid de Mendilibar de hace cuatro años. Entonces, casi se acabó en Segunda.

Ante Osasuna, los blanquivioletas han certificado que están en caída libre. Con la derrota ante los navarros, acumulan más de dos meses sin ganar en Zorrilla, desde que tumbaron al Real Zaragoza (2-0). Desde entonces, el saldo es malo: una victoria, cuatro empates y cuatro derrotas. En las dos últimas jornadas, la defensa, además, ha hecho agua, con siete goles encajados. Con 35 puntos, la permanencia sería una realidad con un par de triunfos más. Pero, con el nivel mostrado en Anoeta y este domingo en Zorrilla, no parece algo sencillo.

El alemán Patrick Ebert volvió al equipo tras ocho jornadas lesionado.
La incorporación de Ebert, titular tras ocho jornadas lesionado, no es suficiente para revitalizar a un equipo alicaído que ha cerrado la temporada antes de tiempo. La defensa, una de las bazas del equipo, está fallando. Con Sereno en el banquillo tras su periplo con la selección portuguesa en la última semana, Djukic optó por la pareja de centrales del ascenso y del comienzo de campeonato: Jesús Rueda y Marc Valiente, que regresaba al once tras su doble fractura facial contra el Athletic hace casi dos meses. Ni Rueda ni Valiente dieron sensación de seguridad.

A los problemas en el eje de la zaga se suman otros dos importantes contratiempos en el esquema defensivo: la irregularidad de Dani Hernández bajo palos, contra el Osasuna ha fallado en los dos primeros goles, y el bajo nivel de Álvaro Rubio y Lluis Sastre. Sin presencia en ataque, con múltiples errores en la entrega del balón, bajos de tono físico y flojos en defensa, Rubio y Sastre son incapaces de imponerse en el centro del campo. Osasuna, consciente de ello, presionó desde el inicio muy arriba robando numerosos balones.

La suerte, sin embargo, se alió con el Real Valladolid en su primera visita al área de Andrés Fernández. Rubén fue el colaborador necesario. El central gallego cabeceó hacia su portería un centro sin peligro de Balenziaga. Una falta de entendimiento con el portero que significó el uno a cero y que modificó poco a poco el escenario con el que había arrancado el choque. Osasuna, tras recibir el gol, se acercó en dos ocasiones con remates flojos de De las Cuevas y Nino, pero se desfondó claramente a continuación.

El error de Rubén pasó factura al equipo de José Luis Mendilibar, que regresaba al que fue su hogar durante tres temporadas y media hasta su destitución a finales de enero de 2010. Ebert tomó el mando de las operaciones y fabricó un sensacional pase en profundidad desde el medio campo que dejó solo a Óscar ante Andrés Fernández. El salmantino no superó al guardameta de Osasuna en el mano a mano.

El último cuarto de hora de la primera mitad fue casi por completo del Real Valladolid. Eran los mejores minutos del equipo de Djukic, que se apropió de una posesión que había sido al inicio del Osasuna. Andrés Fernández evitó el gol de Manucho, tras un gran control y disparo con la izquierda del angoleño desde la frontal. Bueno, con la cabeza, marró un remate en un saque de esquina tras picar en exceso. Mientras, Arribas, en propia puerta, estuvo a punto de sorprender a Andrés Fernández.

Osasuna no existía, salvo en una aproximación de De las Cuevas, que tiró desviado desde la frontal tras un error de Rueda. No obstante, los navarros pudieron marcharse al descanso con un empate a uno. Un desajuste en la defensa blanquivioleta regaló una ocasión franca a Nino. El delantero de Osasuna, solo ante Dani cerca del punto de penalti, estrelló el balón en el cuerpo del venezolano.

El susto, lejos de estimular al Real Valladolid, lo adormeció. La segunda mitad castellana fue desastrosa. Bueno, a pase de Ebert, tuvo el dos a cero en sus botas nada más reanudarse el partido. Y, hasta el tiempo de prolongación, con  un disparo de Javi Guerra que se marchó a saque de esquina, no volvió a existir.

Mendilibar se llevó los tres puntos
en su regreso a Zorrilla.
Mendilibar movió el banquillo. Oier sustituyó en el descanso a Damiá. Puñal hizo lo mismo con Arribas, que había sufrido un golpe en la cabeza en el primer periodo. Lolo pasó a jugar de central. Los navarros se fueron a por el partido. Y tuvieron todas las ventajas del mundo en las manos de Dani Hernández. El portero venezolano dejó muerto en el área pequeña un despeje a remate de De las Cuevas. Kike Sola, con la cabeza, no desaprovechó tanta gentileza. El ariete navarro tuvo un segundo regalo. Otra vez de cabeza, Sola superó a Dani. El venezolano golpeó de puños un saque de esquina. El uruguayo Silva reintegró con la cabeza el balón al área, directo a la testa de Sola que, con un remate en parábola, superó a un estático Dani Hernández.

A los errores del portero, se unieron los cometidos por el resto de jugadores. Omar, que había sustituido a Alberto Bueno, falló clamorosamente en una arriesgada entrega horizontal en la medular a Jesús Rueda, que no llegó al balón. Sí lo hizo De las Cuevas, que recorrió medio campo sin oposición para marcar el definitivo 1-3. En apenas veinte minutos, los rojillos, un histórico incómodo rival en Zorrilla, habían remontado y sentenciado ante un Real Valladolid sin fútbol y con errores impropios de un equipo de Primera. Y aún pudo ser peor. Armenteros rozó el 1-4, primero en un lanzamiento directo de córner y después con un disparo lejano que se marchó desviado.

El público de Zorrilla enfocó su enfado hacia Dani Hernández, que recibió silbidos, y se marchó a casa con los fantasmas de la temporada 2008/09 revoleteando en su cabeza. Con y sin Ebert, con y sin Dani Hernández, este Real Valladolid mira peligrosamente hacia abajo y necesita, cuanto antes, una victoria para no sumergirse por completo en la lucha por la permanencia.


Alineaciones:

Real Valladolid 1: Dani Hernández; Rukavina, Jesús Rueda, Marc Valiente, Balenziaga; Álvaro Rubio, Sastre, Ebert (Rama 71’), Óscar, Bueno (Omar 59’); y Manucho (Javi Guerra 74’).

Osasuna 3: Andrés Fernández; Marc Beltrán, Rubén, Arribas (Puñal 47’), Damiá (Oier 46’); Lolo, Silva, Armenteros, Nino, De las Cuevas (Cejudo 80’); y Kike Sola.

Árbitro: Pérez Lasa (colegio vasco). Amarilla a Jesús Rueda (45’), por el Real Valladolid, y De las Cuevas (57’), por Osasuna.

Goles:

1-0 (Min. 11). Rubén, en propia puerta. Error garrafal del central del Osasuna. Centro de Balenziaga sin peligro, con Manucho lejos del balón. Rubén cabecea hacia su portería, pisando la línea del área pequeña, cuando Andrés Fernández había salido para atajar el esférico.

1-1 (Min. 49). Sola, de cabeza. Disparo de De las Cuevas desde la banda izquierda. Despeja mal Dani Hernández y Sola, en el área pequeña, remata con la cabeza.

1-2 (Min. 59). Sola, otra vez de cabeza. Dani Hernández despeja de puños hasta la frontal un saque de esquina. Silva, con la testa, bombea el esférico al área y Sola, también con la cabeza y de espaldas al marco del Real Valladolid, eleva el balón ante la mirada del venezolano.

1-3 (Min. 68). De las Cuevas. Gravísimo error en la circulación del balón del Real Valladolid. Rueda, en la medular, no llega a un mal pase en horizontal de Omar. De las Cuevas se queda con el balón y se planta en velocidad ante Dani, al que supera.

Incidencias: Nuevo Estadio José Zorrilla, 29ª jornada de la Liga BBVA. Floja entrada: 12.624 espectadores. Medio millar de aficionados navarros en las gradas.

LAS NOTAS:

Dani Hernández (2): Dos graves errores suyos supusieron los goles de Kike Sola. Despejó al área pequeña un tiro de De las Cuevas para que el delantero de Osasuna marcara con la cabeza. Posteriormente, Sola le volvió a superar con la testa en un remate en parábola tras quedarse estático a media salida.

Rukavina (4): Mejor en la primera mitad que en la segunda, donde no subió ni defendió bien. No frenó a De las Cuevas.

Jesús Rueda (3): Mal. Sigue sin recuperar su gran nivel anterior a la lesión. Le falta confianza. No llegó a un pase de Omar, que supuso el inicio de la jugada del tercer gol rojillo.

Dos meses después, Marc Valiente regresó al once de Djukic.
Marc Valiente (3): Regresó a la titularidad casi dos meses después de su lesión facial contra el Athletic. Al igual que Rueda, estuvo impreciso.

Balenziaga (5): Sin fallos notables, el mejor en tareas defensivas. Un centro suyo acabó en el gol en propia puerta de Rubén.

Álvaro Rubio (3): El riojano atraviesa un preocupante bajo estado de forma. No participa en la elaboración del juego del Real Valladolid. Tampoco frena a los rivales.

Sastre (3): No se le ve. Deambula por el campo. Sigue tímido en ataque, tras una testimonial mejoría, en especial ante el Rayo, y mal en defensa. La categoría se le está comiendo.

Ebert (7): Tras dos meses ausente por una lesión en los isquiotibiales derechos y tras una semana convulsa por su posible futuro fichaje por el Atlético, el alemán ha sido de lo poco que se ha salvado de la quema en el Real Valladolid. Un gran pase suyo dejó a Óscar solo ante Andrés Fernández. El salmantino falló. Habría sido el 2-0. Jugó más de setenta minutos a un buen nivel, en especial en los desplazamientos de balón. No obstante, corrió menos la banda que en partidos anteriores a la lesión. El público, en su mayoría, le despidió con aplausos y esporádicos pitidos por su negociación secreta con el Atlético.

Óscar corta un pase de Silva.
Óscar (4): De más a menos. No apareció en la segunda mitad. Falló un mano a mano clarísimo ante Andrés Fernández.

Bueno (4): Titular. Gris, como casi siempre que juega en banda. Tuvo el 2-0 al final del primer periodo, con un remate de cabeza que se marchó alto tras picar en exceso, y también al inicio de la segunda mitad en un mano a mano con Andrés Fernández casi sin ángulo. Al cuarto de hora, Omar ocupó su lugar.

Manucho (6): De lo mejor en ataque. Obligó a Andrés Fernández a realizar una gran estirada tras un sensacional control y disparo con la zurda desde la frontal.

Omar (3): Suplente ante Bueno. No se notó su posterior presencia en el campo salvo para efectuar una errónea entrega de balón a Rueda que propició el gol de De las Cuevas.

Rama (4): Recambio de Ebert. Salió con el partido ya resuelto.  

Javi Guerra (6): Al menos, lo intentó. Dispuso de algo más de un cuarto de hora. Una acción personal acabó en saque de esquina en el tiempo de prolongación. Antes, provocó una falta en la frontal que Pérez Lasa no señaló.

Djukic (3): Confió en Ebert, Bueno y Valiente como titulares. Se equivocó en el planteamiento del partido. Osasuna sorprendió al Real Valladolid con su presión adelantada y su intensidad de juego. No se atrevió a juntar a Manucho y Guerra, lo que le valió la desaprobación de las gradas. En la posterior rueda de prensa, realizó unas inoportunas declaraciones sobre Ebert: “Si juega como ha jugado hoy, no le va a fichar nadie”.