Las gallegas, que perdieron en el estreno liguero contra el Bera Bera, tienen a jugadoras de primer nivel como Vanesa Amorós, Estela Doiro, Alesia Kurchankova y Alba y Andrea Dapena. El conjunto vallisoletano, tras su extraordinario triunfo en León ante el Cleba, afronta el choque con tranquilidad ante un rival llamado a ocupar los primeros puestos de la clasificación.
El Aula brilló en León en su estreno en la élite. Foto: @vggaribay (www.cdbalonmanoaula.es) |
Con un equipo muy sólido, el Mecalia se
erigió la temporada pasada en la sorpresa del año y finalizó pisando los
talones a los cuatro grandes de la División de Honor. Este año ha cambiado de
entrenador (Manuel Etayo) y ha fichado nuevas jugadoras. Se ha reforzado mucho
y bien, entrando a formar parte, sobre el papel, de ese repóquer de equipos que
pueden aspirar a todo mirando desde arriba a los restantes.
La primera jornada no fue buena para
ellas. La visita del todopoderoso Bera Bera les dejó sin puntos pero lo peor es
que lo hicieron dando una mala imagen, sobre todo al inicio con mucho nervios y
poca conjunción. Poco importa. Nadie duda de que el conjunto de Manuel Etayo
sabe a lo que juega y que, más pronto que tarde, activará a este grupo de
jugadoras ilustres: Vanesa Amorós, Estela Doiro, Alesia Kurchankova, Alba y
Andrea Dapena... Tampoco hay duda de que el Atlético Guardés llegará a
Valladolid presionado por los resultados que se esperan de él. Espoleado por
esta primera derrota, vendrá obligado a ganar y dispuesto a que el jovencísimo
y descarado Aula Cultural pague los platos rotos.
Las vallisoletanas por su parte, tras un
extraordinario triunfo en León, afrontan con tranquilidad, poco que perder y
mucho que “pescar”, esta jornada y la siguiente. La fortuna les enfrenta a
sendos rivales “de otra liga” (Guardés y el canario Rocasa) y, seguro, lo harán
dispuestas a dar su mejor imagen. También toda la guerra que puedan.
El equipo gallego suele viajar bien
arropado por una hinchada tan numerosa como fiel y ruidosa. Unida a la no menos
numerosa, fiel y ruidosa del Aula Cultural, amenaza con dejar pequeño el Miriam
Blasco. Se espera una gran fiesta en la grada y un buen partido en la cancha,
escenificando de la mejor manera el soñado regreso de la División de Honor del
Balonmano Femenino a Valladolid.
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