lunes, 16 de septiembre de 2013

Mariño aplaca a un animoso Elche que no gana en Primera desde hace 25 años

El guardameta gallego salva un punto en el estadio Martínez Valero. El Real Valladolid, que perdió a Valiente por lesión, jugó un partido muy ramplón sin casi ocasiones de gol.

Mariño despeja un balón de puños. Fotos: www.realvalladolid.es
Diego Mariño ha dejado con las ganas a la afición ilicitana de festejar su primera victoria en la máxima categoría del fútbol español desde el 19 de febrero de 1989. Entonces, el Elche venció por tres a cero al Murcia. Un triunfo insuficiente para lograr la permanencia. El Elche se fue a Segunda como claro colista con apenas cuatro victorias. El Real Valladolid ha estado muy cerca de aportar su granito de arena para romper esta racha de 24 años y siete meses. Solo Mariño ha permitido salir vivo al equipo de Juan Ignacio Martínez del estadio Martínez Valero, escenario de la dolorosa eliminación en la semifinal del playoff de ascenso de hace dos temporadas.

A la gran actuación del portero gallego no le faltado ni siquiera un ‘revival’ de aquel duelo. Edu Albacar, que fusiló las esperanzas del Real Valladolid de Abel Resino con dos goles de falta directa, miró a portería desde su parcela predilecta: la frontal. Su zurda se relamía. Una falta de Peña a Ñíguez en la media luna amenazaba con romper el empate a cero a apenas cuatro minutos del final del partido. Mariño no cometió los errores de Javi Jiménez, portero blanquivioleta en aquella eliminatoria. Albacar hizo su trabajo y superó la barrera. Su potente zurdazo, aunque centrado, iba directo a las redes. Mariño, a una mano, despejó a saque de esquina. El Real Valladolid salvaba un punto gracias a su portero.
No fue la única ocasión en la que el Elche, hipermotivado para regalar un primer triunfo a su afición en su temporada de regreso a la élite, rondó el gol. El equipo de Fran Escribá, que había sumado dos empates en las tres primeras jornadas, salió del vestuario directo a por Mariño. Con las notables diferencias técnicas entre ambos conjuntos, el Elche imitó el planteamiento del Athletic en Zorrilla en la primera jornada de Liga: una fuerte y adelantada presión al Real Valladolid. Ni Rubio ni Sastre supieron sacar el balón. El equipo de Juan Ignacio Martínez, que repitió la alineación de la victoria ante el Getafe, se encomendó ya de salida a su portero.
Mariño desbarató las primeras incursiones de un Elche decidido a ganar, casi 25 años después, en Primera. Fidel, un incordio para Rukavina, se marchó por la banda izquierda para dejar a Coro, en el área pequeña, ante el portero del Real Valladolid. Mariño mostró su categoría de guardameta internacional en las categorías inferiores de la selección y se sacó de encima un remate a bocajarro. El Elche empezaba a conocer al responsable del futuro empate. Rubén Pérez, con un ajustado chut a la escuadra derecha desde la misma línea del mediocampo, se topó con otra mano del portero gallego que frenaba a un conjunto local que salió muy enchufado.
Rubio y Sastre, que siguen sin formar una pareja de garantías en la medular, se hinchaban a perder balones y, cuando llegaban a los dominios de Manu Herrera, sufrían un gran apagón de ideas. No encontraban a nadie con quien combinar. Omar no ha repetido en Elche su gran partido contra el Getafe. Guerra ha estado perdido en la delantera. Y Óscar no ha mejorado su bajo estado de forma. Con este triste panorama, el caudal ofensivo del Real Valladolid en el estadio de un recién ascendido y un claro candidato a la lucha por la permanencia se ha limitado a las imprevisibles acciones del anárquico Bergdich. En este arranque del campeonato, con Ebert y Víctor Pérez lesionados y con Óscar con las luces fundidas, el equipo de Juan Ignacio no encuentra más argumentos para crear peligro al rival.
Hasta que al Elche le aguantaron los pulmones, los aficionados ilicitanos olieron el gol. El Real Valladolid sobrevivía gracias a Mariño y a providenciales cruces de Valiente, que se retiró lesionado en el primer cuarto de hora del segundo acto, y Rubio ante el ghanés Boakye. El delantero del Elche era el vivo reflejo de su equipo: mucha intensidad y poca calidad. Así, cuando el cansancio afloró, a la media hora, los blanquivioletas respiraron y se estiraron tímidamente en una jugada individual de Bergdich, que ganó la línea de fondo y no encontró rematador en el punto de penalti, y en dos acciones de Javi Guerra. El malagueño estuvo lento tras recibir un pase largo de Rueda que le dejaba con opciones de remate. Albacar impidió el disparo. Poco después, remató una volea a las manos de Manu Herrera.
Guerra y Omar presionan a Edu Albacar.
Si el entusiasmo local fue lo único que salvó una mediocre primera mitad, la segunda fue prácticamente un querer y no poder de ambos conjuntos que han dejado una mala imagen sobre el césped. Al Elche ya no le respondían las piernas como en la primera media hora y se apreciaba con saña sus carencias técnicas. Apenas dos disparos de Fidel y Márquez obligaron a Mariño a emplearse sin demasiada dificultad. Los ilicitanos ya no llegaban con tanta alegría ante un Real Valladolid que tampoco inquietaba hasta la salida de Valdet Rama por Marc Valiente, que pidió el cambio por un pinchazo en los isquiotibiales izquierdos. Rama se colocó en la banda izquierda desplazando a Bergdich a su posición natural en el lateral y a Peña al eje de la zaga con Rueda.
El albano-kosovar buscó el uno contra uno con los defensores del Elche a los que sacó dos cartulinas amarillas: Botía y Rubén Pérez. Cada vez que el balón se acercaba a sus pies, probaba la misma jugada, regate con la derecha para ensayar el disparo. Y, en un partido casi huérfano de ocasiones del Real Valladolid, firmó la única clara con un potente lanzamiento cruzado que Manu Herrera desvió a córner con una gran intervención. Las incorporaciones de Fausto Rossi, que debutó con la camiseta blanquivioleta en un partido oficial, y Manucho no conllevaron novedades en el área local pese al cansancio del conjunto de Fran Escribá. Faltó decisión, mucha decisión. Solo Rama lo intentó.
Elche y Real Valladolid no sumaban precisamente muchos méritos para romper el empate a cero. La incapacidad reinaba en el campo. La ilusión local estuvo, no obstante, cerca de recibir premio en dos acciones aisladas del segundo periodo: el lanzamiento de falta de Albacar y un fallido despeje de Álvaro Rubio en el área pequeña contra su portería que Mariño solucionó con unos portentosos reflejos. El gallego sumaba un punto en un Martínez Valero que tendrá que esperar a una nueva ocasión, el miércoles día 25 ante todo un Real Madrid, para romper una racha de casi 25 años sin ganar en Primera.

Alineaciones:
Elche 0: Manu Herrera; Damián, Botía, Lombán, Edu Albacar; Javi Márquez (Carlos Sánchez 80’), Rubén Pérez, Carles Gil, Coro, Fidel (Manu del Moral 64’); y Boakye (Aarón Ñíguez 68’).
Real Valladolid 0: Mariño; Rukavina, Jesús Rueda, Marc Valiente (Valdet Rama 55’), Peña; Álvaro Rubio, Sastre, Omar (Fausto Rossi 70’), Óscar, Bergdich; y Javi Guerra (Manucho 80’).
Árbitro: Fernández Borbalán (colegio andaluz). Mostró cartulinas amarillas a Coro (40’), Botía (71’), Aarón Ñíguez (74’) y Rubén Pérez (79’), por el Elche, y a Álvaro Rubio (34’), por el Real Valladolid.
Incidencias: Cuarta jornada de la Liga BBVA. Estadio Martínez Valero. 23.570 espectadores. Elche y Real Valladolid se enfrentaron por primera vez en casi 25 años en un partido de Primera División.


LAS NOTAS:
Mariño (9): El punto obtenido en Elche lleva su firma. El portero gallego ha justificado la confianza de Juan Ignacio con un partido soberbio con cuatro paradas de mérito con grandes reflejos a disparos de Coro (a bocajarro), Rubén Pérez (desde la medular directo a la escuadra), Álvaro Rubio (en un despeje erróneo) y Edu Albacar (de falta directa).
Rukavina (6): Ha arrancado con menor presencia ofensiva que en la temporada pasada. Forzó una amarilla a Ñíguez en una de sus contadas subidas.
Jesús Rueda (7): Fidel le ganó la espalda para rematar a bocajarro ante Mariño. Fue su único despiste. Estuvo bien en la anticipación cortando una peligrosa jugada de Boakye en la recta final del primer periodo. Además, sirvió un gran pase en profundidad a Guerra que el malagueño no supo rematar. En el segundo periodo, pidió lanzar una falta en la frontal. Se vio con confianza pero estrelló el balón en la barrera.
Marc Valiente no completó el encuentro
por un pinchazo en los isquiotibiales izquierdos.
Marc Valiente (8): Pidió el cambio a los diez minutos del segundo periodo por un pinchazo en los isquiotibiales izquierdos. Hasta entonces estaba siendo el mejor del Real Valladolid junto con Mariño. Excelente en el corte en dos jugadas de Boakye y Albacar.
Peña (6): Comenzó de lateral y acabó de central tras el cambio de Valiente. Se incorporó poco en ataque si bien siempre que lo hizo llegó con peligro.
Álvaro Rubio (3): Mal. Sin profundidad en la circulación del balón, no encontró a Óscar, Omar y Guerra. Además, perdió muchos balones. Despejó mal un centro de Fidel. Mariño evitó el gol.
Sastre (2): Peor todavía que Rubio. Despistado como demostró con un pase de Mariño para iniciar una contra que el balear no vio. La categoría le sigue viniendo grande.
Omar (4): No corroboró su excelente partido ante el Getafe. Apenas si brilló en una acción individual en el primer cuarto de hora que abortó Damián, que se cruzó ante el canario. Dejó su lugar a Rossi en los últimos veinte minutos. Le faltó frescura tras un par de semanas en las que ha estado tocado en el tobillo derecho.
Óscar (3): La peor noticia del Real Valladolid en este comienzo de temporada. El parón liguero de dos semanas no ha servido para mejorar su estado de forma. Apenas interviene en el juego y el equipo lo nota muchísimo.
Bergdich (6): Su revolucionado juego fue de lo más decente de medio campo para arriba en el Real Valladolid. Dejó un gran detalle técnico en el área del Elche pisando el balón para marcharse de la defensa ilicitana. Pasó al lateral izquierdo tras el cambio del lesionado Valiente.
Javi Guerra (4): Muy perdido. No le encuentran ni los mediocentros ni los extremos ni Óscar. Estuvo lento a la hora de armar el disparo tras un buen pase en profundidad de Rueda. Albacar abortó la ocasión.
Valdet Rama llama a la titularidad.
Valdet Rama (7): Salió por Valiente. El jugador más destacado del equipo en la faceta ofensiva. Está en un buen momento de forma. Probó constantemente el uno contra uno y el disparo con su pierna derecha. Jugó a pierna cambiada en la banda izquierda. Herrera, poco después de salir, mandó a saque de esquina un gran lanzamiento cruzado que iba directo a gol.
Fausto Rossi (3): Debut del italiano en Primera División. Salió por Omar para jugar en la banda derecha, que no es su posición natural. Rueda no le dejó tirar una falta directa desde la frontal y en los últimos minutos puso muy mal una falta lateral.
Manucho (6): Salió por Guerra a diez minutos del final. Con mejor actitud que ante el Getafe. Peleó los balones aéreos.
Juan Ignacio Martínez (6): Repitió la alineación de la victoria ante el Getafe. No encuentra con la tecla exacta para que al combinativo juego del Real Valladolid le acompañe profundidad en los últimos metros. Acertó con el cambio de Rama pero ubicó a Rossi en una posición muy extraña, en la banda derecha.