Con
treinta segundos por jugarse y posesión para los vallisoletanos, los colegiados
señalaron pasivo, quizás demasiado pronto, y segundos después pasos a Víctor
Rodríguez. En una rápida contra, el Quabit empató el encuentro (25-25).
Pisonero ha sorteado la polémica arbitral: “La última jugada es anecdótica,
cualquier jugada a esas alturas de partido siempre va a ser discutible”.
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| Ignacio Moya tropieza con un estelar Carlos Calle, con diecisiete paradas. Fotos: Rafael Martín (www.atleticovalladolid.es) |
El Recoletas
Atlético Valladolid sumó un punto en su visita al Quabit Guadalajara (25-25).
Un punto con sabor agridulce.
El empate fuera de
casa en la Liga Asobal es un resultado muy positivo y les sirve a los
gladiadores azules para acercarse al objetivo de ser octavos. Sin embargo,
los vallisoletanos tuvieron en su mano la victoria, que se les escapó con una discutible
decisión de los árbitros y un gol de contraataque de Jaime Gallardo, que empató
el choque.
Los de David
Pisonero mejoraron en la segunda parte y fueron por delante durante muchos
minutos. No en vano entraron en el minuto final con ventaja (24-25). Con
treinta segundos por jugarse y posesión para los vallisoletanos, parecía
difícil no ganar. Pero los colegiados señalaron pasivo, quizás demasiado pronto,
y segundos después pasos a Víctor Rodríguez. En una rápida contra, el Quabit
Guadalajara empató el encuentro (25-25).
Pero antes de esos
últimos treinta segundos de infarto, el Recoletas Atlético Valladolid firmó una
actuación brillante, de nuevo excepcional fuera de casa, recuperando
sensaciones y mostrando una gran confianza en su juego. El equipo vallisoletano
volvió a competir a domicilio al máximo nivel y disputó el triunfo hasta el
último segundo. La igualdad entre ambos rivales fue la tónica general del partido
y los detalles decidieron el resultado final.
Y en entre esos
detalles estuvo Hombrados. Una vez más, el mejor portero de la Liga Asobal fue
determinante y fulminó las opciones de victoria del Recoletas. Sus paradas,
sobre todo en los penaltis (detuvo cuatro a los gladiadores azules), evitaron
que el Atlético Valladolid llegara al final con una mayor ventaja para no
tener que depender de otros aspectos del juego.
Lo cierto es que
hubo mucha igualdad en el David Santamaría. En la primera parte (14-13), fueron
los locales quienes llevaron la voz cantante en el marcador, pero nunca con más
de dos goles de ventaja, que alcanzaron por primera vez en el minuto dieciséis
(8-6). Pero el Recoletas nunca se desconectó y mantuvo un alto nivel tanto en
defensa, con el portero Carlos Calle como protagonista, como en ataque.
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| Arriba, Abel Serdio prueba a Hombrados. Abajo, Adrián Fernández se emplea en defensa. |
Calle firmó
diez paradas en los primeros treinta minutos (diecisiete en total) y aguantó con firmeza a los gladiadores azules. Los de David Pisonero también estuvieron
fluidos en ataque, con mucha continuidad, de la que se aprovechó el extremo
Dani Pérez, autor de cuatro goles. Abel Serdio, con tres, y Diego Camino y
Víctor Rodríguez ayudaron mucho al equipo con sus goles. Adrián Fernández chocó
varias veces con Hombrados en sus lanzamientos, una situación que se repetiría en la segunda mitad con otros jugadores y que, a la postre, sería determinante.
La segunda parte
comenzó con un Recoletas Atlético Valladolid más intenso, con mejoría atrás y
adelante, y determinado a tomar la iniciativa. En apenas tres minutos, Diego
Camino anotó un siete metros, pero Hombrados le paró el siguiente. Fue Víctor
Rodríguez quien, también de penalti, volvió a poner por delante al equipo
vallisoletano (14-15, minuto 35). Desde ese momento, los gladiadores azules
pasaron a dominar en el marcador.
Sin embargo, en las
varias ocasiones en las que el Recoletas pudo escaparse y asegurar dos goles de
ventaja, se encontró con un Hombrados excepcional, que rompió las esperanzas de
llegar con mejores opciones al final del encuentro. Pese a todo, el Atlético
Valladolid continuó muy sólido y confiado. Aguantó una inferioridad en el
minuto 51, con 23-23.
Abel Serdio anotó
el 23-24 a tres minutos, pero Víctor Vigo empató (24-24). Rubén Río marcó de
penalti, pese al increíble acierto anterior de Hombrados. No le tembló la
muñeca y colocó por delante al Atlético Valladolid (24-25) para llegar con
ventaja a los últimos segundos. El postrero gol de Gallardo supuso el empate
final (25-25).
David Pisonero ha
valorado el encuentro de la siguiente manera:
“Un partido
precioso de ver para el espectador, trepidante, intenso, competido, con dos
equipos con un mismo estilo, muy conocedores uno del otro. Luchamos casi con
las mismas armas. Todo el año hemos competido bien fuera de casa, salvo en
Benidorm, pero esta es la senda. Con buen juego e intensidad, podemos ganar en
cualquier sitio”.
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| Roberto Turrado y Roberto Pérez salen a parar un lanzamiento. |
“Me voy orgulloso
porque hemos estado en el partido los sesenta minutos e incluso tuvimos posibilidades de llevarnos la victoria. La
segunda parte fue distinta para nosotros, ajustamos algunas acciones en ataque
y cosas en defensa y mejoramos. Los chicos han estado excelsos, brillantes,
porque no es nada fácil jugar así aquí. Todos ayudaron y Carlos Calle también
colaboró en la portería”, ha añadido.
“Lástima los
penaltis. Fue una rémora para nosotros ya que con más acierto podíamos haber llevado la iniciativa en el marcador. La última jugada es anecdótica, cualquier
jugada a esas alturas de partido siempre va a ser discutible”, ha analizado
sobre el final del encuentro.
Ficha técnica:
Quabit Guadalajara 25 (14+11): José Javier Hombrados (portero, 13 paradas),
Chema Márquez (2), Pablo Paredes (3), Pedro Fuentes (-), Sergio Mellado (3),
Ignacio Moya (3, 1p.) y Víctor Vigo (6) –siete inicial– Javier Parra (-), Chema
Celada (-), Antonio Serradilla (2), Alberto Sanz (-), Pawel Niewrzawa (1), Jaime
Gallardo (3), Javier García Rubio (2) y Adrián Eceolaza (portero suplente).
Recoletas Atlético Valladolid 25 (13+12): Carlos Calle (portero, 17 paradas),
Roberto Turrado (-), Víctor Rodríguez (4, 1p.), Rubén Río (3, 1p.), Dani Pérez
(5), Manu García (1) y Abel Serdio (5) –siete inicial– Diego Camino (3, 3p.),
Nico López (-), Héctor González (-), Adrián Fernández (3), Álvaro Martínez (-),
Miguel Martínez (-), Roberto Pérez (1) y César Pérez (portero suplente).
Parciales cada cinco minutos: 1-0, 3-3, 7-6, 10-8, 12-11, 14-13 –descanso– 14-14,
16-16, 19-20, 21-22, 23-23 y 25-25 (final).
Árbitros: García
Serradilla (federación catalana) y Marín Lorente (federación catalana).
Excluyeron a Javier Parra (20’ y 37’), del Quabit Guadalajara, y a Adrián
Fernández (8’), Rubén Río (14’), Roberto Pérez (38’) y Roberto Turrado (51’),
del Recoletas Atlético Valladolid.
Incidencias: 22ª jornada de la Liga Asobal. Pabellón David
Santamaría (Guadalajara). 1.200 espectadores.
Crónica de www.atleticovalladolid.es