jueves, 11 de mayo de 2017

El CBC, a una serie de la final

Tras deshacerse, a domicilio, del Lucentum, las ardillas arrancarán las semifinales con dos encuentros consecutivos en Pisuerga ante el CB Morón. El equipo de Paco García ha perdido sus dos enfrentamientos ante los andaluces en esta temporada. El pívot senegalés Mansour Kasse, principal amenaza del cuadro de Rafa Rufián.

Celebración del CBC Valladolid tras superar al Lucentum en Alicante.
Foto: Twitter Comercial Ulsa CBCV.
El Comercial Ulsa CB Ciudad de Valladolid buscará este viernes (20:45 horas) y este domingo (19 horas) seguir haciendo historia en su debut en las semifinales de los playoffs de ascenso de la LEB Plata frente al CB Morón.

Tras sufrir hasta el último segundo ante el Lucentum Alicante, las ardillas, justas de fuerzas a estas alturas de la temporada, afrontarán una serie muy igualada ante un club hispalense que ha renovado mucho su plantilla y al que no ha logrado vencer en sus dos precedentes en este curso.

Mínimo, dos partidos en Pisuerga. La mejor clasificación en la fase regular del CBC Valladolid (séptimo) sobre el Aceitunas Fragata Morón (octavo) conlleva que el factor cancha sea, en esta ocasión, positivo para las ardillas. Los pupilos de Paco García deberán hacerse fuertes en Pisuerga si no quieren sufrir en su visita (mínimo un encuentro) a la Alameda.

Pase lo que pase, un hipotético quinto partido para definir la serie se disputaría en el pabellón vallisoletano, lo cual no es siempre sinónimo de éxito. No al menos en estos playoffs de ascenso de la LEB Plata.

A pesar del reciente cambio de formato (se ha pasado de eliminatorias al mejor de tres por rondas de cinco partidos), en tres de las cuatro series se ha impuesto el equipo que tenía el factor cancha en contra (Zornotza, CBC Valladolid y CB Morón). Tan solo el Covirán Granada, principal favorito al ascenso, ha logrado cerrar su ronda con un contundente 3-0. Además, los precedentes van en contra de un CBC Valladolid que ha perdido sus dos encuentros con los sevillanos: 53-72 y 91-78.

Las opciones para llegar a la final pasan, por tanto, por hacer de Pisuerga un fortín. En un feudo donde solo cuatro equipos se han llevado la victoria durante la fase regular, para un 73% de victorias locales, el CB Morón tendrá que demostrar su valía ante los cerca de 3.000 espectadores que llenarán el pabellón para la ocasión.

Para que los aficionados puedan hacer mucho ruido, los patrocinadores Comercial Ulsa y Carramimbre ofrecerán unos stick hinchables con los que poder aplaudir los mates de Graham-Bell, los tapones de Sidibe o los triples de Sergio De la Fuente, Wade-Chatman o Pablo Esteban. Con unidades limitadas, los más madrugadores en acudir al polideportivo carmesí serán quienes reciban este obsequio para que, poco a poco, se vaya creando un adecuado ambiente de playoffs en la madriguera de las ardillas.

El equipo de Paco García se medirá a un CB Morón muy cambiado. Jugadores diferentes y entrenador nuevo. Un conjunto con muchos cambios con respecto al que salió líder de Pisuerga en la quinta jornada tras avasallar al CBC en una de sus derrotas más abultadas de la temporada: 53-72. Los más destacados aquella fatídica tarde de viernes, Tylor Gaffaney y Leo Cizmic, continúan en el vestuario hispalense, si bien su entrenador por aquel entonces, Javier Fijo, ya no sigue en el banquillo por discrepancias con la directiva. El sustituto ha sido un Rafa Rufián que ha metido al Aceitunas Fragata Morón en playoffs y ha logrado batir en primera ronda a todo un Xuven Cambados por 1-3.

Pero no solo ha cambiado el inquilino de los banquillos en Alameda, también la plantilla ha sufrido varias modificaciones de calado. Julio de Assis y Okoroba dejaron el CB Morón antes de acabar la primera vuelta y sus sustitutos fueron Placide Nakidjim, que duró nueve jornadas tras subir desde la Liga EBA, y un senegalés de 2,06 llamado Mansour Kasse, que está aterrorizando las zonas rivales.

En siete partidos de Liga regular con el CB Morón, Kasse promedió 7,1 puntos, 5,4 rebotes y 1,1 tapones, pero su producción en playoffs se ha disparado hasta 12,3 puntos, 7,8 rebotes y 16 de valoración, siendo MVP en la segunda jornada con quince puntos (tres de tres en tiros libres y seis de diez en canastas de dos), nueve rebotes, dos asistencia, cuatro recuperaciones, dos tapones y tres faltas recibidas. Para frenarle, Boubacar Sidibe, Graham-Bell, Sergio De la Fuente y Gullit Mukendi tendrán que ir rotando como hicieron contra Guillermo Rejón en la serie ante el Lucentum.

En la zona, otro hombre peligroso del CB Morón es Leo Cizmic, un alero de 2,05 cedido por un Betis Energía Plus en el que debutó con diecisiete años, el más joven de la historia en hacerlo en ACB. Otro pívot rocoso, Olajide Keshinro; una joven promesa hispalense, Alejandro Rodríguez, y el eterno Jesús Chagoyen, que disputa su vigésima temporada en el baloncesto profesional camino de los cuarenta años, conforman el resto de interiores de los amarillos.

Por fuera, destaca sobremanera la figura de Tyler Gaffaney, un escolta americano con mucha facilidad para anotar desde cualquier posición y que será un peligro constante para Miguel González, Astilleros y compañía. José Alberto Jiménez y los hermanos Marín (Alejandro y Javier) completan la nómina de jugadores exteriores de una plantilla compensada, equilibrada y muy trabajada.

El CB Morón es un equipo que distribuye muy bien la pelota, superando siempre las diez asistencias por partido. Anota con facilidad (más de 75 puntos por encuentro), pero sufre en la lucha bajo tableros, perdiendo los rebotes y cediendo ocho capturas ofensivas de media en su serie contra el Xuven Cambados. Rufián cuenta con una plantilla de mucha profundidad con recambios de garantías en cada posición y que puede decantar la balanza a favor del Aceitunas Fragata Morón cuando entren en juego las segundas unidades de cada equipo.

El Comercial Ulsa CB Ciudad de Valladolid mantiene los mismos precios por entrada de los dos partidos contra el Lucentum Alicante: cinco euros por encuentro para los socios y diez para los no abonados. Todo ello incluyendo a menores de doce años, con entradas gratis. Los puntos de venta son los habituales: Pisuerga, en horario de 12 a 14 y de 19 a 21 horas, y Justo Muñoz, en horario comercial.