A
nueve segundos del final, Sergio De la Fuente falló un triple que enviaba
el partido a la prórroga. El conjunto sevillano, con una defensa en zona y con
la aparición de Mansour Kasse, jugó mejor el último cuarto.
Nadie dijo que
fuera a ser fácil. El CBC Valladolid no pudo superar la experiencia del
Aceitunas Fragata Morón. Las ardillas pierden el tan importante factor Pisuerga
y tendrán que conseguir una victoria el próximo domingo que no obligue al
equipo de Paco García a ir a Sevilla prácticamente sin opciones. El Comercial
Ulsa CBC Valladolid fue a remolque durante casi toda la segunda mitad. Cada vez
que amagaron con dar la vuelta al marcador, los vallisoletanos fueron castigados
con grandes acciones de los sevillanos, que demostraron que la eliminación al
Xuven Cambados no fue de casualidad.
Semifinales de
ascenso a la Liga LEB Oro con un cruce entre dos equipos que, si les hubieran
preguntado hace unos meses, posiblemente solo barajaran esa opción como un
sueño y no como una realidad. Pero es un hecho. El CB Ciudad de Valladolid y el
CB Morón se disputarán un puesto en la final, donde se encontrarán con el Covirán
Granada o el Zornotza, una eliminatoria que dominan los granadinos por 1-0 tras
la disputa del primer asalto. Los nazaríes se impusieron a los vascos alentados
por su público y colocaron la primera piedra para el pase a la final, todo lo
contrario que las ardillas.
Leo Cizmic arrancó
el encuentro avisando de su potencial y presumiendo de buena mano. El
prometedor jugador croata anotó los siete primeros puntos del Aceitunas Fragata
Morón con sendas suspensiones, una desde más allá del 6,75, y mandaba un aviso
a los de Paco García. Tocaba apretar en defensa y comenzar a anotar en cada una
de las posesiones. Fue Boubacar Sidibe el encargado de martillear el aro rival
una y otra vez e intimidar atrás como acostumbra.
Las ardillas
buscaron constantemente atacar el aro de los moronenses y metieron en bonus a
los sevillanos, con la segunda falta personal de Tyler Gaffaney incluida para
sacarle del partido. Así, tiro libre a tiro libre, el Comercial Ulsa empezó a
remontar las desventajas iniciales. Un triple a tabla de Wade-Chatman sobre la
bocina significó el 22-22 con el que se despedía un loco primer cuarto,
contrario a los intereses de los locales, pero que dejó palpable la mejoría del
equipo vallisoletano con el paso de los minutos.
Los visitantes,
lejos de relajarse y dejar al CBC Valladolid cómodo, plantaron una presión a
toda cancha desde el comienzo del segundo cuarto y empezaron a arañar segundos
de posesión a los pupilos de Paco García, quienes se atragantaban a la hora de
encontrar el aro rival. Pero Boubacar Sidibe seguía con su buen nivel en estos
playoffs y los interiores del CB Morón no paraban las embestidas del pívot de
Mali.
Todo lo contrario
que los de Rafa Rufián, que optaban por lanzamientos desde la larga distancia o
de cinco metros para hacer trizas la canasta del Comercial Ulsa. Un auténtico
choque de estilos que cerró la primera mitad (35-37) después de que las
ardillas anotasen solo dos puntos en los últimos cuatro minutos del cuarto,
estableciendo un parcial de 2-7 a favor del CB Morón para marcharse a
vestuarios.
El duelo se reanudó
y fueron los jugadores de Rafa Rufián los que salieron mejor al parqué de un
Pisuerga que presentó una buena entrada, pero sin el ambiente infernal de otras
grandes citas. Parcial de 0-6 y máxima renta para el Aceitunas Fragata Morón.
Brecha que rápidamente enmendó Wade-Chatman, que comenzó el cuarto con siete
puntos y lo cerró con diecisiete, además de sumar un total de trece de
valoración en estos diez minutos, con un auténtico recital de cómo desarbolar
una defensa y lucir repertorio anotador. El americano estaba de vuelta tras una
mala primera serie ante el Fundación Lucentum Alicante y estaba llamado a ser
el líder en el primer envite ante los sevillanos.
Así, el Comercial
Ulsa comenzó el último asalto con una ventaja mínima (53-52), que no supo
defender. Rafa Rufián, cuyo ‘scouting’ sobre las ardillas ha funcionado a la
perfección, optó por defender en zona en el tramo decisivo del encuentro y los
hombres de Paco García se bloquearon, tratando de conseguir puntos desde la
larga distancia. Craso error. El muro de los moronenses fue infranqueable
durante buena parte de este último periodo y los andaluces mandaban 56-60 a
falta de cinco minutos para el final.
Y emergió la figura
de Mansour Kasse, uno de esos fichajes que valen para cumplir objetivos y dar
un salto de calidad. ¡Y qué salto! El africano anotó cinco puntos decisivos,
además de conseguir varios rebotes ofensivos, a falta de tres minutos y puso
muy complicadas las cosas a los de Paco García, que no imposibles.
Fue Sergio de la
Fuente el encargado de mandar el partido a la prórroga con nueve segundos en el
crono, pero el capitán del Comercial Ulsa, al que no le tiembla la muñeca
cuando hay que dar un paso adelante, erró el lanzamiento triple y el Aceitunas Fragata
Morón se adjudicó el primer punto de la serie (63-66) y recupera el factor
cancha que, en este primer envite, no fue tan decisivo como debería. Pisuerga
debe ser un fortín el domingo a las 19:00 horas.
Ficha técnica:
Comercial Ulsa CBC Valladolid 63 (22+13+18+10): Wade-Chatman (17), González (-),
Astilleros (7), De la Fuente (10) y Sidibe (14) –cinco inicial– Graham-Bell
(10), Esteban (-), Jota (5), Morales (-) y Mukendi (-).
Aceitunas Fragata Morón 66 (22+15+15+14): Javier Marín (4), Alejandro Marín
(14), Keshinro (7), Cizmic (10) y Kasse (9) –cinco inicial– Jiménez (10),
Gaffaney (6), Chagoyen (6), Gutiérrez (-) y Rodríguez (-).
Árbitros:
Uruñuela Uruñuela y Quintas Álvarez.
Incidencias: Primer partido de las semifinales de los playoffs
de ascenso de la LEB Plata. Polideportivo Pisuerga.
Crónica de www.cbcvalladolid.es