Séptimo
título de Liga del Quesos que, un año después, se la devuelve al SilverStorm El
Salvador. El conjunto de Diego Merino se mostró superior en una final sin ensayos. El acierto de Gareth Griffiths con el pie sumó más puntos que los golpes de Hansie Graaff:
15-6.
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| Los queseros suman cinco Ligas en las últimas seis temporadas. Foto: vracrugby.com |
La corona liguera
vuelve a ser quesera. Fueron ochenta minutos a todo o nada que el VRAC supo
jugar sin perder su identidad y llevando la iniciativa del juego en todo
momento. No hubo ensayos, pero sí buen rugby por parte del Entrepinares que, al
igual que en las semifinales, demostró tener muy trabajado el partido y el
control casi total de las diferentes situaciones que se produjeron durante el
mismo.
El inicio
arrollador señaló el camino al título. El VRAC encerró, literalmente, al
Silverstorm El Salvador en su campo. Sin darle opciones. Sin dejarle respirar.
Demostrando que, en el juego a la mano y en el ritmo, no había rival en esta
División de Honor 2016/17 para el equipo dirigido por Diego Merino, que volvió
a sumar un cetro más a su imponente palmarés personal.
Pese a que Gareth
Griffiths no pudo transformar el primer castigo que se le presentó al
Entrepinares, sí lo hizo en el segundo, alcanzado el minuto diez. Entremedias,
varias opciones de marca que se malograron muy cerca sobre la línea decisiva,
lastrando los méritos que el VRAC hacía para abrir distancias en un marcador
que no se rompió hasta cerca del pitido final, con su consecuente riesgo para
el equipo que mandaba en el juego.
De hecho, El
Salvador estuvo muy cerca de remontar provisionalmente tras una jugada en el
sector derecho de su ataque. Fue uno de los pocos acercamientos en el primer
tiempo por parte de los ‘chamizos’, maniatados por los azulones.
En las estáticas,
especialmente en las melés, el poder era quesero, pese a las continuas
irregularidades sufridas. Por arriba, en las touches, había más igualdad. Cerca
de la media hora de partido, Graaff puso las tablas con una acertada patada y
el encuentro siguió por los mismos derroteros, buscando el VRAC un ensayo que
premiase su buena primera parte. Se tuvo que conformar con una nueva
transformación de Griffiths que dejaba una ligera ventaja en el intermedio
(3-6).
Tras el descanso se
vio más de lo mismo. Se trataba de un momento clave, pues el comienzo de las
segundas partes había sido una debilidad durante todo el curso para el Quesos.
Sin embargo, la final fue una excepción y el VRAC siguió cumpliendo con su
trabajo y su buen hacer, pese a la impotencia de ver que el marcador no hacía
justicia. Hubo cinco minutos de sufrimiento, los únicos en los que El Salvador
intimidó y pisó con solvencia la veintidós quesera. El VRAC apagó el fuego y
todo volvió a la normalidad.
Griffiths pasó otro
castigo y abrió una pequeña brecha de seis puntos (3-9). Dados los antecedentes,
era temerario llegar así a los minutos definitivos. De ahí que el Entrepinares
siguiese insistiendo para demarrar y cerrar la final. Pareció un espejismo el
3-12, también fruto de una transformación de Griffiths, pero, a la siguiente
jugada, Graaff colocaba el 6-12, que dejaba la final a un ensayo transformado
para la victoria rival.
Lejos de ponerse
nervioso o echarse atrás, el VRAC siguió a lo suyo acertadamente. Así logró el
6-15 definitivo ante la inoperancia blanquinegra y la frescura y euforia del
VRAC Quesos Entrepinares, que recupera el trono perdido un año atrás
despidiendo una temporada de mejores sensaciones que resultados, pero con un
balance de dos títulos en dos finales, la Supercopa y la Liga, y el poder del
rugby vallisoletano y español reconquistado.
Ficha técnica:
SilverStorm El Salvador 6: Gabi Fernández (Guillermo Villagrá, min. 60), Dani Marrón
(Matt Smith, min. 58), Leandro Wozniak (Manu Serrano, min. 37), Víctor Sánchez
(Fernando González Altés, min. 67), Michael Walker-Fitton, Matt Foulds, Gonzalo
Núñez (Gerardo de la Llana, min. 51), Joe Mamea, Juan Ramos, Hansie Graaff, Alejandro
Sánchez de la Rosa, Tom Pearce, Raphaël Blanco, Alberto Díaz y Sampie Mastriet
(Jaime Mata, min. 69).
VRAC Quesos Entrepinares 15: Pita Anae-Ah (Pablo César Gutiérrez, min. 75), Pablo
Miejimolle (Steve Barnes, min. 59), Jody Allen (Alberto Blanco, min. 43), Kalo Gavidi,
Jakobus Ferdinand (Daniel Sthör, min. 67), Jose Guillermo Basso (Álvaro Abril,
min. 59), Matthew Axtens, Nathan Paila, Pablo Gil (Iván Espeso, min. 70),
Álvaro Ferrández (Va’a Mailei, min. 54), Guillo Mateu (Álex Gutiérrez Müller,
min. 75), Gareth Griffiths, Alejandro Alonso, Fede Castiglioni y John
Wessel-Bell.
Marcador:
0-3 (min. 10): Golpe de castigo que pasa Gareth Griffiths; 3-3 (min. 28): Golpe
de castigo que transforma Hansie Graaff; 3-6 (min. 42): Golpe de castigo que
pasa Gareth Griffiths; 3-9 (min. 46): Golpe de castigo que convierte Gareth
Griffiths; 3-12 (min. 61): Golpe de castigo que pasa Gareth Griffiths; 6-12 (min.
62): Golpe de castigo que transforma Hansie Graaff y 6-15 (min. 68): Golpe de
castigo que pasa Gareth Griffiths.
Árbitro:
Atorrasagasti (comité vasco). Mostró cartulina amarilla a Kalo Gavidi (min. 74),
del VRAC Quesos Entrepinares.
Incidencias: Partido correspondiente a la final de la División
de Honor de rugby, disputado en los campos de Pepe Rojo ante unos 5.000
espectadores.
Crónica de vracrugby.com