Lakers y Clippers. LeBron (y la ‘Ceja’) y
Kawhi (y George). Los dos máximos favoritos al anillo tras el final de la era
dorada de los Warriors, con las salidas de Durant e Iguodala, la grave lesión
de Klay y la retirada de Livingstone. La Conferencia Este, defensora del título
con los Raptors, puja fuerte con los Bucks de Anteto y los Sixers de Embiid.
Houston amenaza con un dúo explosivo (Harden-Westbrook), Denver explora sus
límites (con Jokic y una plantilla completísima), Boston prueba un nuevo plan (con
Walker y Kanter) y Brooklyn (con Irving) prepara el camino para el futuro
regreso de Durant. Sin olvidar a Utah, Portland, Dallas, Sacramento, San
Antonio, Indiana, Orlando, Miami y, por supuesto, New Orleans, con la ‘bestia’
Zion Williamson, si las rodillas se lo permiten. Una temporada para no
perderse. El show está listo.
Previa NBA 2019/20 (España): Tres campeones, tres aspirantes y tres que se van
Previa NBA 2019/20 (España): Tres campeones, tres aspirantes y tres que se van
Los Angeles. No hay
ciudad que rezume más baloncesto de primer nivel en el universo de la NBA, con
el permiso de Boston (y los inalcanzables diecisiete anillos de los Celtics) y
New York (a pesar de los depauperados Knicks).
El show regresa a
L.A., la cuna del ‘showtime’ (Magic, Kareem, Worthy, Scott, Rambis, Green… y
Riley en el banquillo) (campeones en 1980, 1982, 1985, 1987 y 1988) y la meca
de Kobe (con la inestimable ayuda de Shaquille, Gasol y Jackson como ‘head
coach’) (campeones en 2000, 2001, 2002, 2009 y 2010). LeBron James, que fracasó
(como toda la franquicia, plantilla, equipo técnico y despachos) en su primer
año de oro y púrpura, va a por todas, con la incorporación de la ‘Ceja’, Anthony
Davis.
El regreso de L.A.
a la primera línea de la NBA es, además, doble. Los Clippers, el ‘hermano
pobre’ de los Lakers es el gran favorito al anillo. ¿Por qué? Por muchas
razones. Porque ya contaba con buenos jugadores (el superanotador Lou Williams,
el especialista defensivo Patrick Bervely, la revelación Montrezl Harrell…) y
con un gran entrenador (Doc Rivers, campeón con Boston en 2008). Porque ha
incorporado a una megaestrella (Paul George). Y porque ha incorporado a otra
estrella aún más grande, probablemente el jugador referencia, si hablamos
exclusivamente de baloncesto, en la actual NBA (Kawhi Leonard, campeón con San
Antonio en 2014 y con Toronto en 2019, en ambas ocasiones con el MVP en las
Finales).
Kawhi no es un
jugador de muchas palabras. Perfil bajo, una ‘rara avis’ pese a su indudable
cartel de crack de la NBA. Habla donde realmente importa, en la pista. No era
ningún secreto su deseo de volver a casa, a California. Nació en Los Angeles y
se formó en la Universidad de San Diego. El deseo de volver a casa ya quedó
patente cuando se distanció de los Spurs tras un año casi en blanco por una
extraña lesión en el cuádriceps derecho. San Antonio, con la duda sobre su
estado físico, aplazó el regreso una temporada con el traspaso de Leonard a
Toronto. No tenía pinta, sin embargo, de que Kawhi echara raíces en Canadá. Fue
el rey del Norte durante un único curso, lo cual no quiere decir que perdiera
el tiempo.
Leonard recuperó la
forma (Toronto le concedió 22 partidos de descanso en la temporada regular),
con los mejores registros estadísticos de su carrera (26,6 puntos y 7,3
rebotes), y cumplió, de sobra, en su único año de contrato con los Raptors.
Llevó a Toronto a las Finales y al anillo con unos playoffs majestuosos: 30,5
puntos de media. A la altura de los mejores Jordan y LeBron. Así de bueno es
Kawhi. Para el recuerdo, dejó una ya mítica canasta en el último segundo que
sirvió para eliminar a los Sixers en las semifinales de la Conferencia Este.
Aquel introvertido
(en eso nunca cambiará) ‘manazas’ (28,6 cm del pulgar al meñique) con el número
‘2’ de los Spurs se ha transformado en un jugador total, determinante en ambos
lados de la pista, el mejor ‘two-way’ player de la NBA, una estrella (a su
pesar) capaz de cambiar el desenlace de una temporada, como demostró con los
Raptors y pretender conseguir con los Clippers.
Toronto era una
estación de paso. California esperaba. Los Angeles esperaba. Los Lakers
esperaban… No, los Lakers no fueron los elegidos. Kawhi no se unió finalmente a
LeBron y Davis, lo cual ya habría sido un abuso, un ‘big three’ insuperable.
Eligió a los Clippers de Steve Ballmer, la tercera pata del imperio Microsoft
junto con Bill Gates y Paul Allen. Ballmer se ha tomado muy en serio el reto de
convertir a los Clippers en una franquicia ganadora, con una identidad propia,
lejos de la sombra de los Lakers: los planes de un nuevo pabellón, quizás nuevo
nombre… e incorporaciones de primer nivel. Lo que fuera para espantar el riesgo
de una mudanza a otra ciudad.
“Los dirigentes
fueron muy transparentes conmigo, el objetivo es ganar. Es una gran oportunidad
poder construir una nueva identidad en esta franquicia, hacer historia. Nunca
han estado en unas Finales ni han ganado nada, es un gran reto que queremos
afrontar”, resumía Leonard en su presentación como nueva estrella de los
Clippers.
Pero la clave de la llegada de Kawhi a los Clippers fue otra: Paul George, otra superestrella.
Pero la clave de la llegada de Kawhi a los Clippers fue otra: Paul George, otra superestrella.
El cataclismo se
activó. Kawhi ya tenía lo que buscaba:
“Estuve muy cerca,
muy cerca de los Lakers. Pero cuando los Clippers me presentaron la oportunidad
de jugar con Paul (George), fue fácil. Fue un sí. Dije que lo pusieran en
marcha”.
Oklahoma, en pleno
proceso de reconstrucción, lo puso ‘sencillo’: Gallinari (‘expiring’), el
talento joven canadiense Shai Gilgeous-Alexander, una de las sorpresas de la
pasada temporada, y un irrechazable paquete de rondas del draft: tres primeras
rondas sin protección de los Clippers (2022, 2024 y 2026), dos primeras rondas
de Miami (2021 sin protección y 2023 protegida 1-14) y, además, la posibilidad
de los Thunder de intercambiar con los angelinos las rondas de 2023 y 2025.
A sus 29 años,
George, natural igualmente de Los Angeles y compañero de promoción de Kawhi,
cumplía también con su deseo de regresar a casa. Tampoco fueron los Lakers, los
favoritos en los últimos años. Los Clippers arrasaban en el mercado.
Doc Rivers, con sus dos nuevas estrellas: Kawhi Leonard y Paul George. |
“Cuando estaba en
Indiana y draftearon a Kawhi, estaba nervioso porque jugábamos en la misma
posición y sería una competencia. Ahora, mirando en retrospectiva, me hubiera
gustado habernos quedado con aquel pick. Este es el destino, teníamos que jugar
juntos”, ha resumido George.
Con Kawhi y George,
los Clippers lo tienen todo para luchar por el anillo: veteranía en el
banquillo con Doc Rivers, puntos con Lou Williams y Montrezl Harrell, defensa
con Patrick Beverly, Maurice Harkless, JaMychal Green..., juventud con Landry
Shamet. Son los favoritos, el rival a batir.
Y el gran rival lo
tiene a la vuelta de la esquina, su enemigo histórico: los Lakers.
Ahora sí, los de
oro y púrpura, tras seis años alejados de los playoffs, la peor racha de la
franquicia más mediática de la NBA, están listos para volver a reinar en la
mejor Liga de baloncesto del mundo.
El cambio se llama
Anthony Davis.
Al segundo intento, la ‘Ceja’ jugará al lado de LeBron, con el que comparte agente, el poderoso Rich Paul. Era cuestión de tiempo la unión de intereses.
No existe un dúo
más poderoso en la Liga. Bueno…, uno: Kawhi y George en los Clippers.
Los Lakers
desmontaron el proyecto de futuro, ya señalado en las negociaciones de febrero
con los Pelicans: Lonzo Ball, Brandon Ingram, Josh Hart y tres primeras rondas
a New Orleans por la ‘Ceja’. Davis lo vale, aunque será agente libre el próximo
verano y todo puede pasar entonces.
El proyecto es
ahora, el proyecto es el presente.
LeBron, que
cumplirá 35 años a finales de diciembre, se perdió sus primeros playoffs desde
2005. El ‘rey’, a estas alturas de su carrera, no está para perder el tiempo en
reconstrucciones sino para ganar más anillos. La ‘Ceja’, condenado a la
mediocridad en los Pelicans, puede ser el socio ideal.
“Obviamente ha sido
una decisión dura dejar New Orleans, pero creo que era el momento y que ha sido
lo mejor para mí. Cuando me enteré de que me traspasaban a los Lakers, sentí
que era una ocasión increíble para unirme a una gran organización y jugar junto
a un jugador como LeBron. Es genial tener la oportunidad de estar en una
franquicia en la que todo lo que importa es ganar y en la que el anillo es el
único objetivo”, sentenciaba Davis en su presentación como nuevo jugador de los
Lakers.
Y LeBron, claro,
encantado:
Unos Lakers de
diseño.
De los jóvenes,
solo ha quedado el más preparado, la tercera arma del equipo, Kyle Kuzma. De la
bisoñez de la plantilla de la pasada temporada se ha pasado a la experiencia, a
los valores seguros, con la renovación de Rondo y las llegadas de Danny Green,
Avery Bradley y un rehabilitado Dwight Howard, que compartirá minutos con
JaVale McGee en su regreso a Hollywood, donde su carrera se despeño hace ya seis
años.
A los Lakers solo
les ha fallado el ‘no’ de Kawhi y la nueva lesión de gravedad de DeMarcus
Cousins, una apuesta arriesgada que merecía la pena.
La duda es otra, el
banquillo.
A Frank Vogel, un
técnico de perfil medio que demostró su valía compitiendo con los Pacers contra
los Heat de LeBron, le ha quitado la bendición y la tragedia de dirigir a los
Lakers, con Jason Kidd como mano derecha. Así de intensa es la franquicia de
oro y púrpura.
Vogel ha ganado
méritos en verano:
“Me he sentido
apoyado por LeBron desde el primer día (…). Los Lakers siempre han estado en
primer plano y cualquier equipo en el que juegue LeBron estará siempre en
primer plano. No creo que haya nada negativo en ello. No es nada que no haya
vivido antes y es parte de nuestro trabajo. Me encanta que se vaya a hablar de
nuestro equipo y que se nos vea como uno de los favoritos”.
Clippers y Lakers, que abrirán la temporada NBA esta próxima temporada junto con el duelo entre Raptors y Pelicans, son los dos grandes favoritos al anillo.
La NBA vuelve a
mirar a L.A. pero, por el sistema de la competición, al menos uno de ellos caerá
antes por el camino. La rivalidad angelina, si llega, será en unas Finales… de
Conferencia (Oeste). ¿Unas Finales anticipadas?
La particularidad
geográfica en la competición NBA y la pujanza del Este abren, no obstante, el
abanico de grandes candidatos al título: Milwaukee Bucks y Philadelphia Sixers,
listos para recoger el testigo de Toronto.
Milwaukee (60-22)
ya fue el mejor equipo de la última temporada regular, con el MVP de la Liga,
el griego Giannis Antetokounmpo: 27,7 puntos, 12,5 rebotes y 5,9 asistencias.
Una bestia que, a sus 24 años, no ha tocado techo.
Antetokounmpo escucha al técnico de los Bucks, Mike Budenholzer. |
Toronto y,
parcialmente, Philadelphia encontraron la manera de ‘desactivar’ a ‘The Greek
Freak’ en los playoffs: alejarle del aro.
En la era del
triple, Antetokounmpo, que en el perímetros tiene un déficit (apenas un 25% de
acierto en el pasado curso), ha conseguido el MVP de la temporada regular e impulsar
a Milwaukee a la élite pero, ¿también le alcanzará para ganar el anillo?
“Mucha gente dijo:
‘Si Giannis no agrega el triple a su juego, no será uno de los mejores de la Liga’.
¿Acabo de ganar el MVP y no un concurso de triples, verdad? Puedo ganar el
campeonato sin los triples, pero quiero tirar esos triples. Este año he
mejorado un poco. El curso pasado, conforme fue avanzando, mejoré. Lanzar esos
triples hará el juego mucho más sencillo tanto para mis compañeros como para
mí, así que es algo que debo sumar a mi juego”, ha replicado el griego.
Milwaukee ha
apostado por la continuidad en el ‘roster’.
En marzo ya
renovaron a Bledsoe por cuatro años (70 millones). En verano les llegó a turno
a Middleton (cinco años y casi el máximo, 178 millones), Brook Lopez (cuatro
años y 52 millones) y el veterano George Hill (tres años y 29 millones). Por el
camino, con tan generoso dispendio, los Bucks han perdido a una pieza gran
valor, Brogdon, que ha saltado a Indiana (cuatro años y 85 millones).
Budenholzer,
vigente entrenador del año, reconocimiento que ya consiguió con Atlanta en
2015, ha mejorado la segunda unidad con veteranos: el triplista Kyle Korver, el
otro Lopez (Robin) y el anotador Wesley Matthews. La otra novedad es el croata
Dragan Bender, aún por explotar en la NBA. Milwaukee se ha quedado sin
españoles, con la salida de Mirotic al Barça y de Pau Gasol a Portland.
Ya no es un equipo
de ‘tanking’. No lo es desde que cuenta con dos estrellas de primerísimo nivel:
el pívot camerunés Joel Embiid (vieja y nueva escuela al mismo tiempo) y el
base australiano Ben Simmons (con sus 208 centímetros y sin triple, como
Anteto, con mucho menos tiro incluso que el griego). El ‘aussie’ ha extendido
su contrato cinco años por el máximo (170 millones).
Embiid ha
recuperado la gloria de los pivots en la NBA.
Prácticamente sano
(se perdió dieciocho encuentros en la fase regular), firmó una temporada
regular monstruosa: 27,5 puntos, 13,6 rebotes, 3,7 asistencias y 1,9 tapones
por partido. La salud sí le falló en los playoffs, pero con problemas
pasajeros.
El camerunés, junto
con la ‘Ceja’, aunque Davis prefiere actuar como ‘cuatro’, es el pívot
dominador de la NBA. Nadie como él influye tanto en el juego.
“El año pasado fue
el que más partidos jugué. Este curso me veo jugando más de setenta encuentros.
Eso será realmente positivo para nosotros ya que intentaremos conseguir el
primer lugar del Este y ganar más de sesenta partidos”, ha adelantado Embiid,
que quiere pelear por el MVP y el premio al Mejor Defensor.
Embiid (25 años) y
Simmons (23) son el futuro y el presente de la NBA. El anillo es cuestión de
tiempo.
Los Sixers, como
los Bucks, han conservado a casi todo el bloque, con la firme apuesta por
Tobias Harris (cinco años y 180 millones), pero ha perdido a dos jugadores muy
importantes: el francotirador JJ Reddick y, sobre todo, Jimmy Butler, que
aportó mucho en los playoffs. Butler ha optado por liderar el proyecto de
Miami.
Brett Brown ha recibido
con los brazos abiertos a Al Horford, que a sus 33 años mantiene intacta su
inteligencia en la pista, y Josh Richardson, al que le tocará abrir el juego de
los Sixers desde el triple.
El cambio en la
NBA, con el resurgir de L.A. y las candidaturas de Milwaukee y Philadelphia, es
posible por el final de una gran historia: Golden State Warriors.
La franquicia
californiana, que se ha mudado del Oracle Arena de Oakland al nuevo y
ultramoderno Chase Center de San Francisco, comienza una nueva etapa tras
dominar la Liga en los últimos cinco años (tres anillos –2015, 2017 y 2018– y
dos subcampeonatos –2016 y 2019–) e innovar el baloncesto. Porque no solo ha
sido cuestión de triples, con dos tiradores históricos (Curry y Thompson).
Nadie ha jugador mejor que los Warriors en los últimos años, en ataque y en
defensa. Una dinastía que, con las lesiones de Durant y Thompson, cerró una
etapa, con toda la dignidad del mundo, en Toronto en las últimas Finales de la
NBA.
No se trata de
subestimar el corazón herido de un campeón, aquella mítica frase de Rudy
Tomjanovich con los Rockets de Olajuwon, simplemente los Warriors son ya otro
equipo: sin Durant, que se ha unido a Irving en Brooklyn; sin Iguodala,
momentáneamente en Memphis a la espera de un ‘contender’; sin Livingstone,
retirado; y sin Thompson, lesionado de gravedad hasta, al menos, el All Star.
Menos ataque y muchas menos defensa.
Pero con Curry,
Green, D’Angelo Russell (el gran movimiento de los Warriors) y…, cuando se
recupere, Thompson, al que la franquicia no dudó en renovar: cinco años y 190
millones.
Curry asumirá el mando:
Curry asumirá el mando:
“Está en su mejor
momento tanto a nivel físico como mental. Está listo para tener un gran año”,
ha avisado Steve Kerr.
Curry ha ironizado
sobre el fin de ciclo de los Warriors:
No conviene
subestimar a los Warriors, pero parecen, al menos, un escalón por debajo de las
dos franquicias angelinas en el Oeste y de Milwaukee y Philadelphia en el Este.
¿Un año de
transición? ¿Un año de pruebas?
La incorporación de
Russell lo parece. Si sale bien, más madera. Si sale mal, una cotizada pieza
para canjear en el mercado.
Lo único intocable
es la base del equipo campeón: Curry-Klay-Draymond-Looney.
Además de Thompson,
los Warriors han renovado a Green (cuatro años y cien millones) y Looney (tres
años y quince millones).
D’Angelo Russell,
que explotó su mejor baloncesto en Brooklyn hasta estrenarse en un All Star, es
la principal novedad, pero no la única. Los Warriors han buscado a gente que
busca una reivindicación: Willie Cauley-Stein, Marquese Chriss y Glenn Robinson
y Alec Burks.
Lakers, Clippers,
Bucks y Sixers son los favoritos.
¿Y los aspirantes?
Además de los Warriors, la lista es amplia en una temporada que se presenta con
muchos focos de atracción: Houston, Denver, Boston, Utah y Portland.
¿Pueden jugar
juntos Harden y Westbrook?
Cualquier cosa
puede pasar, desde el éxito al más absoluto fracaso.
“Sé cómo jugar con ‘Russ’
y él sabe cómo jugar conmigo”, ha zanjado la ‘Barba’.
“Va a dar miedo,
eso es todo lo que puedo decirte. Va a dar miedo… y no a nosotros”, ha
corroborado un generoso Westbrook, dispuesto a modificar su juego. “Mi objetivo
es ganar un campeonato, y estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario para
conseguirlo. No es necesario que tenga el balón para tener impacto en el juego.
No tengo que anotar ni hacer nada. Puedo defender, puedo rebotear, puedo pasar,
puedo liderar al equipo… Nuestro objetivo principal es ganar. Puedo quedarme
sin anotar y, si ganamos, será lo mejor que me haya pasado. Es lo único que me
importa”.
Denver es un equipo
muy distinto, muy alejado de los focos de ‘glamour’ de Houston. Los Nuggets
(54-28), segundos en el Oeste en la pasada temporada, no son flor de un día.
Nada de eso. Es la franquicia con una plantilla más completa (Nikola Jokic,
Jamal Murray –renovado cinco años por 170 millones–, Gary Harris, Paul Millsap,
Will Barton, Malik Beasley, Torrey Craig, Monte Morris, Juancho Hernangómez, el
casi recuperado Michael Porter y el fichaje de Jerami Grant). Un equipazo a las
órdenes de Mike Malone.
Boston cambia de
rumbo. La pasada temporada fue decepción: discreta fase regular (49-33) y
pobres playoffs (barridos por Milwaukee en semifinales, con un 4-1).
Irónicamente, los Celtics fueron menos con los regresos de Irving y Hayward, en
teoría sus dos grandes estrellas. Se acabó la química en el vestuario, con
Irving como principal señalado, y se frenó el progreso de los jóvenes (Tatum,
Brown y Rozier). El proyecto ‘céltico’ cambia, sin Irving, sin Roziers, sin
Marcus Morris y, lo que más ha dolido, sin Al Horford. Brad Stevens tendrá que
recuperar la química con las incorporaciones de Kemba Walker, en el mejor
momento de su carrera, y Enes Kanter.
Lillard lideró a los Blazers hasta las Finales de la Conferencia Oeste en los últimos playoffs. |
Diez equipos con
los playoffs, en principio, asegurados: Lakers, Clippers, Warriors, Rockets,
Blazers, Nuggets y Jazz, en el Oeste, y Bucks, Sixers y Celtics, en el Este.
La lista de candidatos a los playoffs es amplia.
La lista de candidatos a los playoffs es amplia.
Los Mavericks de
Doncic (el último rookie) y Porzingis, ya sin Dirk Nowitzki, y los Kings de
Fox, Bagley, Barnes, Hield y Bogdan Bogdanovic ya han terminado la travesía del
desierto. Breve en el caso de Dallas (tres años) y eterna en Sacramento (trece
años, la más larga ausencia en los playoffs en la NBA). Solo la alta
competencia en el Oeste les puede adelantar un curso más las vacaciones a
mediados de abril.
San Antonio es fijo
en los playoffs desde 1998. Una racha de 22 años. Nadie ha conseguido eso en la
historia de la NBA. Por eso, por Popovich y porque tiene plantilla suficiente,
con DeMar DeRozan y LaMarcus Aldridge como líderes, nadie puede descartar a los
Spurs, aunque ya no sean un equipo campeón.
En el Este, la
batalla por los playoffs será intensa.
A Milwaukee,
Philadelphia y Boston, les deberían acompañar Toronto, Miami, Brooklyn,
Indiana, Orlando, Detroit y Atlanta. Sobra uno.
No parece que sea
el caso de los Raptors, los actuales defensores del anillo.
Toronto tiene el
desafío de seguir siendo competitivo sin Kawhi Leonard. Una pérdida imposible
de cubrir por completo, pero los Raptors han destacado en los últimos años por
su amplitud de plantilla y cuentan con una nueva gran estrella: Pascal Siakam,
renovado cuatro años por 130 millones. Del equipo campeón, de los importantes,
solo el dúo procedente de los Spurs (Kawhi y Green) se ha movido de Canadá.
Nurse sigue contando con el capitán Lowry y con Marc Gasol, Serge Ibaka, OG
Anounoby, Fred VanVleet y Norman Powell. A los Raptors les da de sobra para que
se siga hablando del Norte en la NBA.
Atlanta viene
pisándoles los talones. Los Hawks son de los equipos que más prometen en la NBA
(Trae Young, Kevin Huerter, John Collins, De Andre Bembry, Jabari Parker y el
último baile de Vince Carter). La palabra playoffs no se cita en Atlanta pero no
sería ninguna sorpresa ver a la franquicia de Georgia en la postemporada.
Para Knicks,
Cleveland, Washington, Charlotte y Chicago, en el Este, y Memphis, Minnesota,
Phoenix, Pelicans y Oklahoma, en el Oeste, queda el objetivo de cumplir una
temporada digna.
Cada uno con sus
problemas particulares.
Washington, con la
lesión de John Wall. Minnesota, con la decepción de Wiggins. Cleveland, con el
coste del final de la era LeBron. Oklahoma, en plena reconstrucción tras la
salida del último de su mítico ‘big three’, Westbrook. Memphis, también en
plena remodelación tras soltar a Marc Gasol para que fuera campeón en Toronto.
Chicago y Charlotte sin saber muy bien adónde van desde hace años. Phoenix
(veremos con Ricky) sin explotar su talento joven. Oklahoma, a la espera de las
rodillas del demoledor Zion Williamson (número uno del draft), que ya se
perderá las ocho primeras semanas de competición. Y los Knicks, ¡ay, los
Knicks!... Con Fizdale ya en duda en plena pretemporada.
Chicago Bulls y Golden State Warriors: 6.
PALMARÉS:
2019: Toronto Raptors 4-2 Golden State Warriors. 2018: Golden State Warriors 4-0 Cleveland Cavaliers. 2017: Golden State Warriors 4-1 Cleveland Cavaliers. 2016: Cleveland Cavaliers 4-3 Golden State Warriors. 2015: Golden State Warriors 4-2 Cleveland Cavaliers. 2014: San Antonio Spurs 4-1 Miami Heat. 2013: Miami Heat 4-3 San Antonio Spurs. 2012: Miami Heat 4-1 Oklahoma City Thunder. 2011: Dallas Mavericks 4-2 Miami Heat. 2010: Los Angeles Lakers 4-3 Boston Celtics.
2009: Los Angeles Lakers 4-1 Orlando Magic. 2008: Boston Celtics 4-2 Los Angeles Lakers. 2007: San Antonio Spurs 4-0 Cleveland Cavaliers. 2006: Miami Heat 4-2 Dallas Mavericks. 2005: San Antonio Spurs 4-3 Detroit Pistons. 2004: Detroit Pistons 4-1 Los Angeles Lakers. 2003: San Antonio Spurs 4-2 New Jersey Nets. 2002: Los Angeles Lakers 4-0 New Jersey Nets. 2001: Los Angeles Lakers 4-1 Philadelphia 76ers. 2000: Los Angeles Lakers 4-2 Indiana Pacers.
1999: San Antonio Spurs 4-1 New York Knicks. 1998: Chicago Bulls 4-2 Utah Jazz. 1997: Chicago Bulls 4-2 Utah Jazz. 1996: Chicago Bulls 4-2 Seattle Supersonics. 1995: Houston Rockets 4-0 Orlando Magic. 1994: Houston Rockets 4-3 New York Knicks. 1993: Chicago Bulls 4-2 Phoenix Suns. 1992: Chicago Bulls 4-2 Portland Trail Blazers. 1991: Chicago Bulls 4-1 Los Angeles Lakers. 1990: Detroit Pistons 4-1 Portland Trail Blazers.
2019: Toronto Raptors 4-2 Golden State Warriors. 2018: Golden State Warriors 4-0 Cleveland Cavaliers. 2017: Golden State Warriors 4-1 Cleveland Cavaliers. 2016: Cleveland Cavaliers 4-3 Golden State Warriors. 2015: Golden State Warriors 4-2 Cleveland Cavaliers. 2014: San Antonio Spurs 4-1 Miami Heat. 2013: Miami Heat 4-3 San Antonio Spurs. 2012: Miami Heat 4-1 Oklahoma City Thunder. 2011: Dallas Mavericks 4-2 Miami Heat. 2010: Los Angeles Lakers 4-3 Boston Celtics.
2009: Los Angeles Lakers 4-1 Orlando Magic. 2008: Boston Celtics 4-2 Los Angeles Lakers. 2007: San Antonio Spurs 4-0 Cleveland Cavaliers. 2006: Miami Heat 4-2 Dallas Mavericks. 2005: San Antonio Spurs 4-3 Detroit Pistons. 2004: Detroit Pistons 4-1 Los Angeles Lakers. 2003: San Antonio Spurs 4-2 New Jersey Nets. 2002: Los Angeles Lakers 4-0 New Jersey Nets. 2001: Los Angeles Lakers 4-1 Philadelphia 76ers. 2000: Los Angeles Lakers 4-2 Indiana Pacers.
1999: San Antonio Spurs 4-1 New York Knicks. 1998: Chicago Bulls 4-2 Utah Jazz. 1997: Chicago Bulls 4-2 Utah Jazz. 1996: Chicago Bulls 4-2 Seattle Supersonics. 1995: Houston Rockets 4-0 Orlando Magic. 1994: Houston Rockets 4-3 New York Knicks. 1993: Chicago Bulls 4-2 Phoenix Suns. 1992: Chicago Bulls 4-2 Portland Trail Blazers. 1991: Chicago Bulls 4-1 Los Angeles Lakers. 1990: Detroit Pistons 4-1 Portland Trail Blazers.
1989: Detroit Pistons 4-0 Los Angeles Lakers. 1988: Los Angeles Lakers 4-3 Detroit Pistons. 1987: Los Angeles Lakers 4-2 Boston Celtics. 1986: Boston Celtics 4-2 Houston Rockets. 1985: Los Angeles Lakers 4-2 Boston Celtics. 1984: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1983: Philadelphia 76ers 4-0 Los Angeles Lakers. 1982: Los Angeles Lakers 4-2 Philadelphia 76ers. 1981: Boston Celtics 4-2 Houston Rockets. 1980: Los Angeles Lakers 4-2 Philadelphia 76ers.
1979: Seattle SuperSonics 4-1 Washington Bullets. 1978: Washington Bullets 4-3 Seattle SuperSonics. 1977: Portland Trail Blazers 4-2 Philadelphia 76ers. 1976: Boston Celtics 4-2 Phoenix Suns. 1975: Golden State Warriors 4-0 Washington Bullets. 1974: Boston Celtics 4-3 Milwaukee Bucks. 1973: New York Knicks 4-1 Los Angeles Lakers. 1972: Los Angeles Lakers 4-1 New York Knicks. 1971: Milwaukee Bucks 4-0 Baltimore Bullets. 1970: New York Knicks 4-3 Los Angeles Lakers.
1969: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1968: Boston Celtics 4-2 Los Angeles Lakers. 1967: Philadelphia 76ers 4-2 San Francisco Warriors. 1966: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1965: Boston Celtics 4-1 Los Angeles Lakers. 1964: Boston Celtics 4-1 San Francisco Warriors. 1963: Boston Celtics 4-2 Los Angeles Lakers. 1962: Boston Celtics 4-3 Los Angeles Lakers. 1961: Boston Celtics 4-1 Saint Louis Hawks. 1960: Boston Celtics 4-3 Saint Louis Hawks.
1959: Boston Celtics 4-0 Minneapolis Lakers. 1958: Saint Louis Hawks 4-2 Boston Celtics. 1957: Boston Celtics 4-3 Saint Louis Hawks. 1956: Philadelphia Warriors 4-1 Fort Wayne Pistons. 1955: Syracuse Nationals 4-3 Fort Wayne Pistons. 1954: Minneapolis Lakers 4-3 Syracuse Nationals. 1953: Minneapolis Lakers 4-1 New York Knicks. 1952: Minneapolis Lakers 4-3 New York Knicks. 1951: Rochester Royals 4-3 New York Knicks. 1950: Minneapolis Lakers 4-2 Syracuse Nationals. 1949: Minneapolis Lakers 4-2 Washington Capitols. 1948: Baltimore Bullets 4-2 Philadelphia Warrios. 1947: Philadelphia Warriors 4-1 Chicago Stags.
CAMPEONES (con sus actuales denominaciones):
Boston Celtics: 17.
Boston Celtics: 17.
Los Angeles Lakers: 16.
Chicago Bulls y Golden State Warriors: 6.
San Antonio Spurs: 5.
Philadelphia 76ers, Detroit Pistons y Miami Heat: 3.
New York Knicks y Houston Rockets: 2.
Baltimore Bullets, Sacramento Kings, Atlanta Hawks, Milwaukee Bucks, Portland Trail Blazers, Washington Wizards, Seattle SuperSonics, Dallas Mavericks, Cleveland Cavaliers y Toronto Raptors: 1.