Cuarta derrota consecutiva (Leyma Coruña, HLA Alicante, Covirán Granada y Palmer Alma Mediterránea Palma). Los blanquivioletas aguantaron en una frenética primera mitad (49-48), pero cedieron claramente en los dos últimos cuartos para el definitivo 98-81 en Son Moix.
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| Los de Hugo López suman una única victoria en el grupo de clasificación. Foto: www.realvalladolid.es |
En un duelo marcado por la eficacia anotadora y el alto ritmo de ambos equipos, el encuentro se desarrolló a una
velocidad endiablada desde que se lanzó el balón al aire. A pesar de unos
problemas técnicos que pararon el partido durante unos minutos, el Clínica
Sur-Aspasia impuso su ley y mandó desde el inicio (7-10). El tridente formado
por Sergio de la Fuente, Antoine Mason y Matej Kavas (diez puntos en el primer
periodo) impulsó al Real Valladolid (19-24). Eso sí, tras
un tiempo muerto de Álex Pérez, los locales casi remontaron. Un triple sobre la
bocina de Pol Figueras clausuró el cuarto inaugural (26-28).
El Palmer Alma Mediterránea Palma optó por
convertir el choque en un correcalles y subir una velocidad más a su juego,
algo que aceptaron gustosamente los blanquivioletas, que conservaron el liderazgo de la contienda. Con el canterano Juan García-Abril en la cancha, los
vallisoletanos dispusieron de una máxima de ocho puntos (37-45), pero nuevamente
surgió la reacción balear en el epílogo del periodo. De la mano de un Sean
McDonnell desatado (20 de valoración al descanso), los de Pau Tomàs y Álex
Pérez le dieron la vuelta al partido en un visto y no visto y lo certificaron tal
y como cerraron los primeros diez minutos, con otro triple de Pol Figueras
sobre la bocina (49-48).
El Clínica Sur-Aspasia, que estaba
desplegando un buen baloncesto y circulando bien la bola, había anotado con
facilidad, encontrando tiros liberados, aunque todavía podía subir una marcha
más en la defensa. Cómodos con el ritmo de los pupilos de
Pau Tomàs y Álex Pérez, los blanquivioletas dominaban debajo de los tableros
(13-20 en los rebotes), con un gran Matej Kavas (13
puntos y 17 de valoración) como referente.
Pero fueron los insulares quienes
regresaron al parqué con más energía. El Palmer Alma Mediterránea Palma se escapó
fugazmente (63-56) a pesar de que el ritmo del partido se había reducido, lo
que provocó que el Real Valladolid se encallase. Ante las dificultades para
anotar, emergió la figura de Nacho Martín, que sumó siete puntos de forma casi
consecutiva para mantener al Clínica Sur-Aspasia en el encuentro (71-65). No
obstante, el cruel guion de los últimos cuartos se repitió con un nuevo
triple sobre la bocina, esta vez de Kristian Kullamae (74-65).
Los vallisoletanos acusaron el golpe moral y sufrieron para reponerse. Con cada vez menos gasolina en el depósito, las canastas de los palmesanos al borde de sus posesiones siguieron castigando al equipo blanquivioleta. Los mallorquines, de hecho, ahondaron en la herida y establecieron una nueva máxima que dinamitó Pol Figueras con un triple que supuso la puntilla (88-72).
El Clínica Sur-Aspasia, que intentó hasta el final recortar las distancias, terminó superado por un Palmer Alma Mediterránea Palma que rindió de menos a más para infringir la cuarta derrota consecutiva a los de
Hugo López (98-81).
Ficha
técnica:
Palmer Alma Mediterránea Palma 98 (26+23+25+24): Pol Figueras (18), Kristian Kullamae (16), Diego Rivas (3), Sean McDonnell (23) y Justin Ruffington (12) –quinteto inicial–. También jugaron: Ronnie Harrell (20), Karamo Jawara (2), Milan Suskavcevic (2), Alejandro Rivas (2) y Sergi Huguet (-).
Clínica Sur-Aspasia Real Valladolid Baloncesto 81 (28+20+17+16): Reed Timmer (10), Antoine Mason (11), Daniel Astilleros (2), Sergio de la Fuente (14) y Joey van Zegeren (2) –quinteto inicial–. También jugaron: Matej Kavas (17), Nacho Martín (16), Melwin Pantzar (2), Greg Gantt (2), Justin Kohajda (1) y Juan García-Abril (4).
Árbitros: Mas Cagide, Franquesa Vázquez y Rodríguez Fernández. Eliminaron a
Matej Kavas, del Clínica Sur-Aspasia Real Valladolid Baloncesto, por cinco
faltas personales.
Incidencias: Decimotercera jornada del grupo de clasificación de la Liga LEB Oro. Polideportivo de Son Moix, ante cerca de 150 espectadores.