lunes, 11 de noviembre de 2013

El talento del Laboral Kutxa doblega a un voluntarioso CB Valladolid

El equipo de Ricard Casas le puso ganas y corazón, pero sin acierto, ante un rival con mayor rotación que no perdonó y se llevó con comodidad, 58-87, un importante triunfo. La diferencia en el rebote y los porcentajes de acierto decidieron para los visitantes.

Jason Rowe, en su debut con el CB Valladolid.
Imágenes: César Minguela (ACB Photo)
Quiero y no puedo del CB Valladolid ante un oponente superior en talento, rotación y experiencia, que sacó todo su repertorio y poderío después de un dubitativo inicio de competición, para llevarse un triunfo de Pisuerga más incómodo de lo que pudiera aparecer por el tanteador final. Los pucelanos se estrellaron en dos aspectos fundamentales: el rebote -30 por 48 en contra- y el tiro de tres -17% (4/24) de los locales por 60% del Laboral (12/20).


Así fue imposible ganar. A pesar de que el Laboral está en pleno proceso de búsqueda de identidad y utilizar múltiples rotaciones, y que el CB Valladolid luchó siempre y se esforzó al máximo con desigual fortuna, para tratar de competir un desequilibrado partido ante un rival con objetivos muy diferentes a los suyos.

El  partido comenzó impreciso. Ambos conjuntos rivalizaban en errores y no encontraban comodidad en su juego. Pero el Baskonia empezó a soltarse desde el triple de la mano de Jelinek y Nocioni. Después, San Emeterio y Mainoldi remataron el bagaje alavés. El Laboral acabó el cuarto con un fantástico 5 de 6. La brega de Haritopoulos y el debut de Jason Rowe impidieron que los visitantes rompieran el choque, aunque aún así se llevaron siete tantos de renta (13-20) en el primer cuarto.

Ya en el segundo periodo, Casas optó por mantener al base estadounidense y el equipo lo notó positivamente. Rowe anotó un triple y ayudó para que el CB Valladolid ajustara el marcador hasta empatar a 20, firmando un 7-0 de parcial. Andjusic se apuntó a la fiesta y un mate de Sinanovic hizo que el público disfrutara (22-23, minuto 15).

Pero fue un espejismo. Laboral Kutxa despertó nuevamente y, desde el triple y gracias a su dominio del rebote, puso tierra de por medio rápidamente (24-34, minuto 18) tras un triple del canterano morado San Emeterio. Heurtel, que tuvo su parcela de protagonismo y fue alabado por su técnico, Sergio Scariolo, en la rueda de prensa posterior al encuentro, hizo que el Baskonia lograra su mayor renta al descanso (24-40) a la que también ayudó la mala racha en el tiro del equipo local que padeció un 2-17 en contra.

En el tercer acto, el CB Valladolid se dio nuevamente de bruces con su realidad. Estaba negado en el tiro a canasta. A pesar de las ganas de jugadores como Haritopoulos o Andjusic, los errores se sucedían y Laboral Kutxa dominaba el rebote, con lo que la escuadra vallisoletana no disponía de segundas opciones.


Gran actuación de Haritopoulos.
En el juego interior, el cuatro griego estaba demasiado solo. Pleiss, primero, y después Diop dominaban la zona con la ayuda de un intenso Nocioni. Muchos quilates y poca respuesta en los locales ante la poca operatividad de Vasilopoulos, Johnson o Sinanovic. Cuando no era desde dentro, el Laboral Kutxa masacraba a los castellanos desde los 6.75 y se mostraba inalcanzable con destellos estelares de jugadores como San Emeterio.

Con esta exhibición de recursos, el conjunto de Scariolo había sentenciado al final del tercer periodo (42-65). Los intentos morados de engancharse al partido eran contestados por canastas fáciles de los visitantes, que el CB Valladolid se mostraba incapaz de defender.

A efectos reales la resistencia pucelana había durado solo 15 minutos y, ya sin capacidad de reacción, el último cuarto sobró. Haritopoulos y, en ocasiones, Andjusic lideraban los poco efectivos arreones ofensivos del equipo local, que lo único que conseguían era presentar una buena tarjeta estadística mientras la diferencia en contra crecía.

Los alaveses jugaban a placer y, aunque el CB Valladolid no quería bajar los brazos, no era capaz ni siquiera de oponer una resistencia real por lo que el Laboral Kutxa incrementó su ventaja rozando la treintena de diferencia en el minuto cuarenta. Justo con el bocinazo final estaba 29 arriba: 58-87. Final de la historia para un CB Valladolid con el que hay que tener paciencia y que se encomienda al trabajo como única medicina para ser competitivo en esta Liga Endesa.



Ficha técnica:

CB Valladolid 58 (13+11+18+16): Vilhjalmsson (4), Suka-Umu (2), Wright (-), Vasilopoulos (4), Haritopoulos (22) -5 inicial-. Johnson (7), Andjusic (12), Rowe (5), Iván Martínez (-), Sinanovic (2) e Izquierdo (-).

Laboral Kutxa 87 (20+20+25+22): Hodge (2), Jelinek (9), San Emeterio (15),  Nocioni (13), Pleiss (6) -5 inicial-. Heurtel (7), Mainoldi (9), Kaukenas (9), Bjelica (8), Van Oostrum (-), Kelati (-) y Diop (9).

Árbitros: García González, Redondo y Rial. Eliminaron por cinco faltas personales a Pleiss (39’), del Laboral Kutxa, y a Vasilopoulos (39’), del CB Valladolid.

Incidencias: Partido correspondiente a la 5ª jornada de la Liga Endesa disputado en el polideportivo Pisuerga ante 3.200 espectadores.

Crónica de www.cbvalladolid.es