“No sé dónde me veo, aunque sí dónde me gustaría: jugando los playoffs y compitiendo por lo máximo”, ha avanzado el nuevo
técnico del Clínica Sur-Aspasia Real Valladolid Baloncesto. “Ahora hay seriedad
y coherencia. Eso es tan importante para crecer como ganar partidos”, ha añadido el futuro inquilino del banquillo de Pisuerga. “Ojalá sea
el entrenador durante muchos años más que las dos temporadas que hemos firmado”,
ha incidido, por su parte, el presidente del club blanquivioleta, Mike Hansen.
El acto se ha celebrado en el colegio Agustinas, donde el técnico ejerce como profesor, al que ha reconocido las facilidades para aventurarse en este nuevo proyecto, “personalizando en Encarna, Alfonso y Rodrigo”.
Roberto González también ha tenido palabras de agradecimiento para “el Real Valladolid, a Mike (Hansen) y a Pepe (Catalina)” por plasmar su “confianza” en su figura y “a Cernuda y a Rubén” por cómo le acogieron en el CB La Flecha, equipo del que procede. “Mi versión 5.3 es mucho mejor que la 4.5. Llevo ocho años dirigiendo y tomando decisiones. Tendré dos meses para organizar y planificar para hacer las cosas que tenemos que hacer”, ha señalado.
El nuevo técnico del Clínica Sur-Aspasia Real Valladolid Baloncesto ha asegurado que llega al club blanquivioleta con ganas de “cumplir un reto muy ilusionante” y ha ofrecido las claves “para que todo vaya bien: cabeza, trabajo y corazón”.
“Que la ciudad disfrute y se vuelva a enganchar. Queremos que la afición se sienta orgullosa del grupo y por ello pondremos todo de nuestra mano. Ahora hay seriedad y coherencia. Eso es tan importante para crecer como ganar partidos. Pretendo aportar mi grano de arena para que eso siga siendo así. Los aficionados son mis paisanos”, ha resumido.
Roberto González ha comentado, además, que era el momento de dar el paso y coger el timón del principal equipo de baloncesto de Valladolid:
“Hay que estar bien de cabeza, de ganas, de ilusión, en casa, en el club y en el colegio”.
En este sentido, ha reiterado “la coherencia del club”, que le ha empujado para decantarse por el proyecto:
“El año pasado teníamos plaza en la ACB y no era el momento porque no se dieron los condicionantes. Nosotros tenemos que ir ‘piano piano’ y hacer las cosas bien”.
El entrenador vallisoletano ha mostrado, por último, su deseo de que el equipo sea “una familia” que sepa ayudarse “si surge algún problema”. Algo básico para llegar lo más lejos posible en el próximo curso:
“No sé dónde me veo, aunque sí dónde me gustaría verme: jugando los playoffs y compitiendo por lo máximo. Me gustaría, pero hay que poder hacer el mejor equipo y para eso estamos en las mejores manos, que son las de Pepe Catalina. Nuestra intención va a ser ganar todos los partidos, aunque la competición te pone en tu sitio. Vamos a intentar que la gente que vaya a vernos diga ‘ese es mi equipo’”.
Para ello deberán adaptarse al torneo, aunque “no me gusta el sistema de competición porque no lo considero justo, pero es con el que tenemos que jugar”, ha asumido.
Roberto González ha estado acompañado por
Mike Hansen y David Espinar.
“Ojalá Roberto sea el entrenador durante muchos años más que las dos temporadas que hemos firmado”, ha enfatizado Hansen.
El presidente del Real Valladolid Baloncesto ha subrayado las facilidades de todas las partes para llevar al nuevo técnico al banquillo de Pisuerga:
“Al colegio Agustinas por acogernos
aquí y tener el detalle de hacer esto posible. Al CB La Flecha, que es un club
modélico y amigo”.
La incorporación de Roberto González supone “una magnífica noticia para el baloncesto vallisoletano”, según Hansen. “Es un paso tremendo para nosotros recibir a una persona como Roberto, no solo como entrenador sino por su calidad humana. Es importante para todos los estamentos del club”.
El profesor Roberto González, en su colegio. Foto: www.realvalladolid.es |
Por último, Hansen ha recordado una anécdota con Roberto González:
“Hace ocho años tuvimos una reunión y después me
dijo una cosa que ha sido la luz de la directiva: hay que volver a recuperar la
credibilidad. Ha sido nuestro emblema. Hemos intentado hacer las cosas bien
dentro de la humildad y es un consejo que le agradezco para siempre”.
Mientras, David Espinar ha valorado el horizonte del proyecto del Real Valladolid Baloncesto:
“El convenio que mantenemos no se altera en función de la categoría en la que milite el equipo de fútbol. Seguimos confiando en el conjunto de baloncesto, en el mando directivo, en el nuevo entrenador y en los jugadores. No cambia nada”.